Los cometas están compuestos de roca y hielo. Cuando se acercan al Sol, el hielo se evapora formando una cabellera de gas y polvo que rodea al pequeño núcleo sólido. Algunos meteoritos provienen de la Luna o de cometas, cuyas órbitas también están relacionadas con lluvias de meteoros. Los cometas siguen órbitas elípticas alrededor del Sol y sus períodos varían desde 3 años hasta miles de años.