Un joven de 20 años le pide a su mamá que le enseñe a atarse los zapatos, ya que nunca antes había aprendido. Su mamá intenta enseñarle pacientemente el nudo correcto, pero el hijo no parece entender fácilmente y comete errores. Finalmente, el hijo cree haberlo logrado, pero su mamá se da cuenta de que se ha puesto los tenis al revés.