2. DATOS BASICOS
Altura a la cruz: el estándar no la indica
Peso: menos de 3,178 kg.
Capa: gris acero y leonada, pelo largo,
brillante y abundante
Promedio de vida: unos diez años
Carácter: travieso, afectuoso y apegado
al dueño
Relación con los niños: muy buena
Relación con otros perros: buena
Aptitudes: perro de compañía
Necesidades del espacio: restringidas,
pero debe hacer ejercicio
Alimentación del Yorkshire Terrier: de
70 a 90 g. diarios de alimento completo
seco
Arreglo: sesión semanal, cepillado y
peinados diarios, un baño mensual como
mínimo
Coste mantenimiento: medio
3. ORIGEN
El Yorkshire Terrier se creó en
Inglaterra a mediados del siglo
XIX en función de las
necesidades de los cazadores.
Los repetidos cruces entre
diversas razas dieron como
resultado un perro más pequeño
y alerta, rápido en la madriguera
y con la caza, y a la vez fácil de
esconder en caso de ejercer la
caza furtiva. Muy pronto,
el Yorkshire Terrier gustó a los
burgueses de la región y la raza
empezó a presentarse en las
exposiciones caninas.
4. El Yorkie es divertido, juguetón, afectuoso, curioso y muy listo. Le
encanta que le mimen y se lleva genial con los niños a cambio de que
éstos no le tiren del pelo u orejas. Por su condición de Terrier, le encanta
salir al exterior y dar largos paseos
COMPORTAMIENTO
5. ASPECTO
El Yorkshire Terrier es un perro
compacto y pequeño que pesa
menos de 3,5 kg. Tiene la
cabeza pequeña y las orejas en
forma de “v” llevadas erguidas.
La cola se suele amputar a una
longitud mediana. El pelo es de
longitud moderada, recto,
brillante, fino y sedoso. En la
cabeza el color es leonado
dorado intenso y en el resto del
cuerpo, azul acero oscuro.
6. CUIDADOS ESPECÍFICOS
El Yorkie es muy pícaro y hace
falta que el dueño sea firme en
sus decisiones, sino ya no habrá
manera de cambiar las malas
costumbres del perrito
Si se tiene un Yorkshire
Terrier de pelo largo y se quiere
tener el manto bien cuidado
hace falta un abundante
cepillado y peinado diario.
7. SALUD
El Yorkie sufre los mismos
problemas que otras razas
tan pequeñas, como
luxación de rótula
dislocación de tibia,
problemas de columna
vertebral e hidrocefalia
congénita. También es
propenso a padecer
problemas digestivos y
diarreas.