1. SUFRIR POR LA SOCIEDAD
ESPAÑOLA
HEMOS tomado de la Red este interesante artículo que
dice mucho de lo que nosotros queremos transmitir en este
Blog.
El doctor Payne retrata la sociedad actual.
Nosotros añadimos que retrata uno de los frutos del
materialismo, de creer que todo está permitido, de igualar la
virtud y el vicio o la verdad y el error, y del lema del ya antiguo
1968 “prohibido prohibir”. Es la anarquía fruto del libertinaje.
Payne retrata uno de los frutos de creer que sólo de pan
vive el hombre para que, al final, no tengamos ni a Dios ni pan.
Retrata uno de los frutos de la utopía de creer que los
hombres somos soberanos, de la supresión política por el
Estado de los cuerpos e instituciones sociales, del igualitarismo
entre los diferentes, de la cultura de la subvención pública, del
deseo de muchos de ser funcionarios del Estado, de la falta de
libertades y creatividad, del perjuicio que sufren las PYMES
achuchadas por el gran capital….
* * *
Aunque el doctor Payne retrata la situación actual de los
españoles, añadimos que los nacional-separatistas y eusko-
nazis ignoran cómo han estado sistemáticamenter apoyados por
quienes desean la disolución de las naciones, apoyados por los
peones del Nuevo Orden Mundial que se encuentran en todos
los partidos y en los medios de comunicación, y que sin duda su
pequeña nacioncilla será, de lograr su independencia, sirviente
de dicho Nuevo Orden Mundial.
De la ikurriuña, y del txistu y tamboril, nada quedará. No
en vano, hoy la lengua vasca es conocida como nunca, pero
también es tan poco hablada como nunca.
Sobre todo sepan tales nacional-secesionistas que
ninguna nación puede sustituir a Dios Jaungoikoa, y que el
socialismo (la inevitable masificación del individualismo) no
puede sustituir a la Patria que procede de los padres. Dios es el
único que realmente nos trasciende. Desde luego, nada y nadie
puede sustituir la verdadera religión. Y la Patria es una suma
armónica de familias, vidas y afanes, y no una construcción
2. artificial y fruto de sólo la voluntad. Que no me digan que la
Nación nos “salva”, porque: ¿qué es el hombre?; ¿un animal
desarrollado?. Y que tampoco me digan que se es vasco
principalmente por la lengua.
No pocos actos de los nacional-separatistas son actos
histéricos que no responden al equilibrio interior del hombre,
sino a querer modelar la realidad social e institucional con
fórceps. Un ejemplo es la imposición de la ikurriña el 6 de julio
del presente año en Pamplona, al tirar el cohete de los
Sanfermines (lo retrasaron diecinueve minutos), invadiendo
además casa y tejado ajeno, aunque lo extraño es que sus
agentes se hayan ido “de rositas”.
Tales nacional-separatistas parece que viven para darse
el gustirrinín y además cobrar una paga por cada imposición
que hacen a la sociedad. Porque nadie crea que no reciben su
paga. Agitadores y amigos de presentarse ante las masas,
utilizan los buenos sentimientos e inclinaciones de otros, por
ejemplo, de los padres y hermanos de los presos. Les gusta el
método de la bronca y la provocación, para lo cual tergiversan,
mienten y manipulan. Aprovechan cualquier medio, escrito y
hablado, y hasta la creación de una literatura que mezcla
verdades con mentiras, crece en erudición, número de títulos y
páginas, pero no en ecuanimidad y demostración.
Estos modernos talibanes se refieren a los demás como
pretexto para su propia satisfacción. Son desenterradores con
embustes, más que con un corazón lleno de piedad. Su violencia
verbal y sentimientaloide busca que los males de ayer se repitan
de nuevo y así vuelta a empezar.
No saben que son utilizados por los ideológos marxistas
que quedan, y estos por los poderosos que controlan y paralizan
las naciones, y por los macro-capitalistas que impiden que
Guipúzcoa y Vizcaya sean –por ejemplo- grandes potencias
industriales.
Otra cosa sería si hubiesen hecho caso a sus padres y
abuelos…
Ramón de Argonz y de la Urrutia
7-IX-2013
http://noticias.lainformacion.com/espana/stanley-payne-
el-espanol-medio-se-ha-convertido-en-un-ser-
anestesiado-y-con-pocas-ambiciones-
trascendentales_TMhrGC9Hh8HrcInBwJZNv/
3. Stanley Payne: “El español medio
se ha convertido en un ser
anestesiado y con pocas
ambiciones trascendentales”
Juan Bosco Martín Algarra
sábado, 20/07/13 - 06:00
• Los ciudadanos, aunque se sienten engañados por los
políticos, soportan esta crisis en una relativa calma
social. No ocurrió así en países europeos que
atravesaron circunstancias parecidas en el pasado.
• El hispanista Stanley Payne explica cuáles son los
resortes que movilizan a la sociedad y por qué no se
activan de momento en España, a pesar de la recesión,
el paro y la corrupción política.
•
Stanley Payne, prestigioso hispanista e historiador
estadounidense, es un gran conocedor de la Historia de
España en el siglo XX
Temas
4. En otras épocas, las masas hacían acto de presencia.
España fue tierras de grandes revueltas populares a lo
largo del siglo XIX y durante el primer tercio del siglo
pasado. Otro tanto sucedió con mayor o menor
intensidad en otros países europeos, como ha descrito el
hispanista estadounidense Stanley Payne (Texas, 1934)
en su libro “La Europa revolucionaria”.
“Hemos llegado al límite”. “Esto está a punto de estallar”.
“Hay que tomar la calle”. Son algunas de las expresiones
que acompañan las malas noticias económicas y los
últimos escándalos políticos. Sin embargo, los años se
suceden y da la impresión de que el hastío generalizado
no pasa de las meras palabras.
En un momento en donde la injusticia y los abusos
parecen ser más patentes que nunca, la población
soporta estos contratiempos. ¿Qué nos ha cambiado?
¿Es que no somos los mismos españoles de siempre?
Se lo preguntamos a uno de los mejores conocedores de
la Historia de España en el último siglo.
La gente se pregunta por qué no estalla una
revolución social, como pasó en nuestro país a
principios del siglo XX.
Porque estamos en un época muy diferente de aquélla.
Entre los siglos XIX y XX acontecieron en poco tiempo
grandes cambios políticos, sociales, demográficos y
tecnológicos. Al juntarse todos ellos terminaron
revolucionando los ánimos de las masas.
Ahora también hay grandes avances tecnológicos...
Pero no han sido tan fuertes como para movilizar a una
sociedad en la misma medida que lo hicieron las grandes
rotativas, la radio o el telégrafo. Los grandes cambios
tecnológicos conocidos desde la muerte de Franco más
bien han conseguido atomizar a los españoles. La
implantación del Estado del Bienestar también ha
anestesiado a la sociedad, al igual que ha ocurrido en
otros países desarrollados.
5. Pero... ¿acaso no vemos ahora un gran descontento
social?
Por supuesto que lo hay, y mucho. Pero pasar del
descontento a la rebelión implica atravesar un trecho
largo y complicado. En España, además, el Poder está
en manos de una estructura partitocrática dominada por
cuadros políticos, los cuales dificultan cualquier solución
a las reivindicaciones ciudadanas.
El magnate y ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi
¿Cómo evitar la partitocracia sin caer en una especie
de caudillismo “a la italiana” lleno de “berlusconis” y
“beppes grillos”?
Fortaleciendo la sociedad civil, con ciudadanos bien
informados y gran sentido de responsabilidad. Esto no es
nada fácil. Italia lo intentó con la “revolución de los
jueces” a principio de los 90. Pero luego reconstruyó el
sistema de partidos con los mismos fallos y defectos del
antiguo sistema.
¿Y por qué es tan difícil?
Porque la sociedad española está anestesiada por anti-
valores que desmovilizan a la gente: la telebasura, los
deportes, el hedonismo, el consumismo... Con una
6. ciudadanía absorbida por estas realidades resulta muy
complicado que surja una movilización para mejorar las
estructuras políticas. El horizonte vital de la mayor parte
de la gente consiste en disfrutar de la mejor forma
posible. El español medio se ha convertido en un ser
anestesiado y con pocas ambiciones trascendentales.
EL "BUENISMO", LA IDEOLOGÍA MODERNA QUE
PROMUEVE EL CONFORMISMO
El presidente de Metroscopia nos decía (ver
entrevista) que el español es menos apasionado de
lo que se piensa. ¿Está de acuerdo?
Sí, es cierto. Es algo que también sorprende a muchos
extranjeros que visitan España. Tienen la imagen del
español exaltado de hace cien años y de la Guerra Civil.
Pero aquello se acabó. La cultura se ha transformado. El
español medio actual es un ser sosegado. No pide
demasiado; pide algo, pero no mucho. Es modesto en
sus apetitos. Acepta lo que tiene y trata de disfrutar lo
mejor que pueda.
¿Y las ideologías? En España actuaron como
palancas de los grandes movimientos sociales.
Ahora no hay ideologías nuevas que puedan actuar
como palancas de la sociedad. Si acaso, en España se
ha impuesto el “buenismo”, lo políticamente correcto.
Pero este “buenismo” no busca azuzar grandes
revueltas, sino al revés. El buenismo está en contra de
las revueltas. Pretende dominar la sociedad, pero
promoviendo conformismo, no revueltas.
¿Un cambio del sistema electoral puede servir
cambiar las cosas?
No totalmente, pero sí sería un primer caso. Las listas
abiertas acortarían las distancias entre votante y
diputado, además de aumentar el pluralismo político.
Ahora el diputado está pendiente de lo que opina el líder
que le coloca en las listas, no del ciudadano que le vota.
7. "El PSOE ha optado por la revolución cultural para poder
diferenciarse el PP", afirma el hispanista Stanley Payne
"LOS REVOLUCIONARIOS DE HOY NO QUIEREN
CAMBIAR ESTRUCTURAS POLÍTICAS, SINO LA
IDENTIDAD INDIVIDUAL"
Parece que la diferencia entre izquierda y derecha se
ha difuminado. Es una crítica que hacen
a PP y PSOE.
Es misma crítica se escuchaba también en la época de la
Restauración borbónica, referida al Partido
Conservador y al Partido Liberal. El PP y el PSOE se
diferencian por el papel que cada uno atribuye al Estado
en la economía. El PP quiere que intervenga poco y el
PSOE lo contrario. El problema de estos años de crisis
es que ni uno ni otro tienen margen de maniobra para
cambiar la política económica. Como el PSOE necesita
diferenciarse del PP (y no puede hacerlo por la parte
económica) se ha volcado de lleno sobre la revolución
cultural.
¿A qué revolución cultural se refiere?
A cosas como la ideología de género, el ecologismo, el
lobby gay, la hostilidad contra la Iglesia... es decir: en
todo lo que sea incidir en un estilo de vida alternativo al
tradicional y cosas así...España se ha convertido en un
país de clase postmodernista. Los radicalismos políticos
casi se han extinguido totalmente. Han sido sustituidos
por expresiones de la revolución cultural, pero sin
capacidad de movilizar a las masas.
Esto me recuerda a lo que decía un político socialista
con cierta sorna: “Debemos darle caña a la la Iglesia
porque es lo único que nos queda de rojos”.
Efectivamente, la expresión del nuevo radicalismo
occidental es de tipo cultural. Al contrario de los antiguos
revolucionarios políticos, estos nuevos revolucionarios
culturales no pretenden cambiar las estructuras políticas,
sino la identidad individual.
8. La indignación popular contra la clase política es patente,
pero a diferencia de otras épocas, la mayoría de los
españoles no salen a la calle para manifestar su repulsa
-Foto: lainformacion.com | Viñetas: Ferran Martín
¿Dónde han quedado las grandes masas populares
que provocaban cambios políticos como la
revolución rusa o la llegada de la II República
española?
Han desaparecido totalmente o se han reducido a la
mínima expresión. El movimiento social más importante
de la España del siglo XX fue el anarquismo. Ya casi
murió. Tampoco existe en Europa, a excepción de
Grecia, donde aún queda cierta vida anarquista con
capacidad de radicalizar las revueltas de las calles.
"LOS PAÍSES ÁRABES TIENDEN AL DESPOTISMO
POR LA AUSENCIA DE SOCIEDAD CIVIL"
Las sociedades islámicas parecen estar despertando.
¿Por qué no también las occidentales?
9. Es un problema muy distinto. Lo que está ocurriendo en
los países árabes (no me refiero a los islámicos en
general, sino a los árabes en particular) es una reacción
contra el despotismo, que es el sistema político natural al
que tienden estos países.
¿Por qué?
Porque en ellos apenas existe sociedad civil, ni
educación cívica o política. Cuando eliminan el
despotismo, los países árabes tienden a la
fragmentación. Y entonces se imponen los islamistas,
porque tienen un mensaje que la gente entiende
fácilmente. Pero este mensaje es difícilmente compatible
con el concepto de sociedad civil tal y como lo
entendemos en Occidente.
¿Podrá Europa integrar la inmigración musulmana?
Supone un desafío enorme. Europa nunca aceptará
costumbres islámicas como la sharía. Los musulmanes
tendrán que vivir bajo las mismas leyes de cada país y,
en parte, bajo la misma cultura. El multiculturalismo no
existe. Cada país tiene una cultura cívica única y todos
los ciudadanos deben aceptarla.