Este documento presenta la doctrina de la deidad de Cristo a través de varios puntos: (1) La Biblia presenta a Jesucristo como el Hijo de Dios y el Hijo del Hombre; (2) La Biblia le confiere a Cristo el nombre de Dios; (3) Cristo posee los atributos y privilegios de la deidad como el conocimiento y poder totales. El documento también discute varias herejías históricas que se oponían a la deidad de Cristo, como el arrianismo y el docetismo. Concluye que la
2. Continuando con nuestro estudio de Jesús Dios,
seguimos repasamos esta doctrina tan
importante que cada creyente debe de
entender firmemente.
Cada creyente debe de ser capaz de defender la
fe, y explicar con claridad la deidad de
Jesucristo.
3. La semana pasada hablamos de la pregunta
más importante que debe hacerse un
incrédulo (Mateo 22:42), y también un
creyente (Mateo 16:15).
4. Para las conjeturas erróneas y suposiciones de
los hombres incrédulos, Dios
resumidamente declara que: “en Él habita
corporalmente toda la plenitud de la
Deidad.” (Colosenses 2:9).
5. LA DEIDAD DE CRISTO
La doctrina de la deidad de Cristo
a) La Biblia presenta a Jesucristo como el Hijo de Dios
b) La biblia presenta a Cristo como el Hijo del Hombre
c) La Biblia confiere a Cristo el nombre de Dios
d) Cristo posee los atributos de deidad
e) Cristo posee privilegios que sólo pertenecen a Dios
6. a) JESUCRISTO COMO EL HIJO DE DIOS
La enseñanza incuestionable en el Nuevo Testamento es
que la expresión "Hijo de Dios" con referencia a Jesús
es un título de Su deidad. Jesús reconoció ese título y
lo aceptó como algo propio, perteneciente a Su
persona.
• Tenemos el testimonio de Dios el Padre (Salmo 2:7
Mateo 3:16-17, Mateo 17:5, Hebreos 1:5)
• Jesús reconoció su paternidad que el era hijo del Padre
(Mateo 16:17, Lucas 2:49, Mateo 11:27, Juan 5:17-18,
Juan 10:30,33)
• Fue declarado por quienes lo conocieron (Mateo 16:16,
Juan 20:31, Lucas 3:38, Romanos 1:1-4)
• Anunciado por ángel (Lucas 1:35)
7. a) JESUCRISTO COMO EL HIJO DE DIOS
Evis Carballosa dice, "Un escritor católico ha captado bien
el concepto nuevo testamentario de «Hijo de Dios» con
referencia a Cristo:
Los evangelistas, escribiendo en el período posterior a la
resurrección tenían en mente el concepto de Hijo divino
en el sentido estricto.
Que el título «Hijo de Dios» está abierto al significado de
Hijo divino en el sentido trascendental se hace patente
de la manera en que Jesús llama a Dios no «nuestro
Padre» sino «mi Padre».
El concepto de la singularidad del Hijo es calificado a
través de la idea de la relación de obediencia al Padre."
8. b) JESUCRISTO COMO EL HIJO DEL
HOMBRE
La expresión "el Hijo del Hombre" aparece unas 55 veces
en los evangelios y una vez en Hechos 7:56. Con la
excepción de Juan 12:34 y Hechos 7:56, sólo Jesús
usa dicha frase, siempre con referencia a Sí mismo y
en la tercera persona.
Otros expertos dicen que la frase "El Hombre con
mayúscula", es un título equivalente a la figura
apocalíptica de Daniel 7:13-14.
Debemos resaltar que la mayoría de las citas en las que
Jesús usa la expresión "Hijo del Hombre" hay un
énfasis marcado tocante a Su autoridad en relación
con algo que lo identifica como un persona
9. b) JESUCRISTO COMO EL HIJO DEL
HOMBRE
Una forma de clasificar el uso de la expresión sería en
• Referencia a su ministerio terrenal (Marcos 2:8, Lucas
7:34; 9:59; 19:10)
• Referencia tocante a los sufrimientos, muerte y
resurrección del Hijo del Hombre (Mateo 8:20; Marcos
8:31; 9:31; 10:45; 14:21, 41)
• Referencia relacionadas a la venida futura, la
exaltación y los juicios del Hijo del Hombre (Marcos
8:38; 13:26; 14:62; Lucas 12:8-12, 35-40; 17:22-30;
18:8; Mateo 10:23; 19:28)
10. c) LA BIBLIA CONFIERE A CRISTO EL
NOMBRE DE DIOS
En el relato de la anunciación del nacimiento de Cristo,
Mateo cita al profeta Isaías "He aquí, una virgen
concebirá y dará a luz un hijo, Y llamarás su nombre
Emanuel, que traducido es: Dios con nosotros" (Mateo
1:23).
La frase "Dios con nosotros" Pablo nos la explica mejor en
Filipenses 2:5-11
12. d) CRISTO POSEE LOS ATRIBUTOS DE
DEIDAD
•Jesús se atribuyó todo conocimiento (Colosenses 2:3):
hechos (Juan 4:29), pensamientos (Juan 20:24-28; Mateo
9:4), hechos sobrenaturales (Juan 11)
•Jesús se atribuyó toda presencia (Mateo 18:20; 28:20)
•Cristo es inmutable, o sea, no cambia (Hebreos 1:7,8; 10-
12; Hebreos 13:8)
•Cristo es santo e impecable (Hebreos 7:26-27; 2 Corintios
5:21; 1 Pedro 1:18-20, 2:22)
•Cristo es eterno (Miqueas 5:2; Mateo 2:4-6; Juan 8:21-59)
13. d) CRISTO POSEE LOS ATRIBUTOS DE
DEIDAD
•Jesús se atribuyó todo poder (Mateo 28:18, Apoc. 1:7-8)
1.Poder sobre las fuerzas de la naturaleza (Mateo 14:26–
29; 15:34–36; 21:19).
2.Poder sobre las fuerzas del mal (Mateo 8:32; 12:28).
3.Poder sobre las fuerzas del cielo (Mateo 13:41).
4.Poder para sanar a los enfermos (Mateo 4:23; 8:3, 7).
5.Poder para resucitar a los muertos (Mateo 9:25; 20:19;
26:61).
14. d) CRISTO POSEE LOS ATRIBUTOS DE
DEIDAD
•Jesús se atribuyó todo poder (Mateo 28:18, Apoc. 1:7-8)
6.Poder para juzgar a la humanidad (Mateo 7:21; 12:31–
32; 13:30; 23:2–8).
7.Poder para perdonar pecados (Mateo 9:2).
8.Poder para condenar y dictar sentencia sobre los
pecadores no arrepentidos (Mateo 23:13–16, 27)
9.Poder para dar galardones cuando venga otra vez a la
tierra (Mateo 5:11–12; 10:42; 13:43; 19:29; 25:34–36).
15. d) CRISTO POSEE LOS ATRIBUTOS DE
DEIDAD
•Jesús se atribuyó todo poder (Mateo 28:18, Apoc. 1:7-8)
10.Poder para dar poder (Mateo 10:1, 8; 28:20).
11.Poder para proveer completo y perfecto acceso al
Padre (Mateo 11:27).
12.Poseedor de todo poder (Mateo 28:18).
16. e) CRISTO POSEE LOS PRIVILEGIOS QUE
SOLO PERTENECEN A DIOS
• Cristo tiene autoridad para perdonar pecados (Marcos
2:5-7)
• Cristo es adorado como Dios (Mateo 2:11; Mateo
14:33; Juan 9:38; Mateo 28:9; Lucas 24:52)
• Cristo es creador y sustentador de todas las cosas
(Colosenses 1:17; Hebreos 1:3)
18. Oposición a la deidad de Cristo
Muchas herejías surgieron en la historia de la iglesia con
relación a la persona de Jesús, por eso se llamaron
herejías cristológicas que también tenían relación con
otras herejías trinitarias.
• Los arrianos. El arrianismo es el conjunto de doctrinas
cristianas expuestas por Arrio, presbítero (anciano) de
Alejandría, que mantenían que Jesús era hijo de Dios,
pero no Dios mismo, y por tanto, opuestas a la doctrina
trinitaria.
• Los sedonitas. Negaban la divinidad del Espíritu santo.
19. Oposición a la deidad de Cristo
• Los monofisistas. El monofisismo se centraba en la
idea de que la naturaleza humana de Jesús fue
absorbida por su naturaleza divina. Por tanto, Cristo no
sería verdaderamente capaz de relacionarse e
identificarse plenamente con nosotros; no sería
verdadera y plenamente divino ni humano, e incapaz
de ser el perfecto mediador entre Dios y el hombre, o
de expiar realmente por nuestros pecados.
• Los ebionitas. Los ebionitas mantenían una cristología
"baja", es decir, afirmaban que Jesús era el Mesías
("Cristo"), pero rechazaban su preexistencia, que
tuviera naturaleza divina y también negaban su
nacimiento virginal.
20. Oposición a la deidad de Cristo
• Los gnósticos. Esencialmente es un sincretismo que
incluye una mezcla de filosofías paganas, orientales,
egipcias, judías y algunas ideas cristianas,
particularmente las relacionadas con el concepto de la
salvación. En cuanto a Cristo, los gnósticos decían que
era una emanación o eón salido de Dios. Por medio de
ese eón (el más perfecto de todos) se efectúa el
regreso del mundo material sensible al mundo ideal
que está más allá de los sentidos. Ellos creían que el
Señor vino sólo a disipar la ignorancia..
21. Oposición a la deidad de Cristo
• Los docetas. El docetismo es una variante del
gnosticismo. El nombre procede del vocablo griego
dokeo que significa «dar la apariencia de algo». Los
docetas afirmaban que el nacimiento, el cuerpo, los
sufrimientos y la muerte de Cristo fueron solamente
una apariencia ilusoria. Cristo sólo asumió forma visible
como una visión transitoria para revelarse a Sí mismo a
los sentidos naturales del hombre.
• Los modalistas y monarquistas. El modalismo cree en
que Dios estrictamente monoteísta, o sea, un sólo Rey
(monarca) y que no era una pluralidad de personas.
22. Oposición a la deidad de Cristo
• Los apolinaristas. Según Apolinar, Cristo no tenía un
espíritu humano, aunque Su cuerpo y Su alma eran
humanos. Era su creencia que si Cristo fuese hombre
perfecto, no habría manera de garantizar Su
impecabilidad y se produciría un problema serio al
tratar de armonizar las dos voluntades.
• Nestorianismo. Nestorio enseñaba la existencia de dos
personas separadas en Cristo encarnado: una divina
(el Hijo de Dios); otra humana (el hijo de María), unidas
con una voluntad común. La persona de Cristo, según
los nestorianos, era similar a la de un cristiano en quien
el Espíritu Santo (otra persona) habita.
23.
24. Oposición a la deidad de Cristo
En la edad moderna con el auge del humanismo y del
racionalismo ha surgido un rechazo del
sobrenaturalismo. Ese rechazo ha resultado en una
negación de la revelación de Dios tanto en su forma
escrita, la Biblia, como en su forma humana, la
Persona divina de Cristo.
Para muchos la Biblia es un libro como otro cualquiera,
escrito por hombres con buenos sentimientos. Cristo,
dicen, es un mero hombre con profundos ideales y
gran sentido de la justicia, pero equivocado en cuanto
a Su misión.
25. Oposición a la deidad de Cristo
Uno de los esfuerzos modernos más engañosos, sin
embargo, encaminados a negar la deidad de Cristo se
encuentran en la traducción del Nuevo Testamento,
conocida como la versión El Nuevo Mundo.
Los traductores de dicha versión, haciendo alarde de un
conocimiento del idioma griego, han ofrecido al público
lector una lectura tendenciosa y errónea del texto
original.
26. Conclusión
La evidencia bíblica no deja lugar a duda tocante a la
naturaleza de la Persona de Jesucristo.
Los títulos usados referentes a Su Persona, los atributos
que demostró tener, las prerrogativas de las que hizo
uso durante Su ministerio terrenal dejan de manifiesto
que Cristo fue más que un simple hombre.
Si se acepta el testimonio de los evangelios, debe
aceptarse también que Jesús, por las cosas que hizo y
por las que dijo, demostró que era Dios manifestado en
la carne.