La ciudad de Esparta fue fundada por los dorios, un pueblo indoeuropeo proveniente del norte de la península balcánica. La llegada de los dorios coincidió con el fin de la civilización micénica en Grecia. Los dorios, que portaban armas de hierro más avanzadas, derrotaron fácilmente a los habitantes locales que usaban armas de bronce. Esparta se formó a partir de la unión de 4 aldeas previas luego de la destrucción doria del Peloponeso.