Este documento resume la formación y expansión de los primeros reinos cristianos en la Península Ibérica entre los siglos VIII y XI. Explica el origen del Reino de Asturias tras la batalla de Covadonga, la consolidación de los reinos de León, Castilla y los condados pirenaicos de Aragón, Pamplona y Cataluña. También describe la unión de estos territorios bajo los reinos de Pamplona y Aragón, y la expansión de estos reinos a expensas de Al-Ándalus,