El documento habla sobre el poder de la oración y cita varias promesas bíblicas relacionadas con la oración. Resalta que Dios desea que seamos bendecidos y tengamos éxito al orar de acuerdo a su voluntad. También menciona que Jesús enseñó a sus discípulos a orar en lugar de predicar y que la oración es un mandamiento de Dios y una poderosa arma que Dios nos ha dado.