El restaurante Aponiente, con dos estrellas Michelin, aloja a 16 de sus becarios en un piso de 198m2 en condiciones precarias, con 22 camas distribuidas en literas. El propietario se queja de las molestias causadas y ha rescindido el contrato de alquiler. El chef Ángel León tendrá que encontrar nuevo alojamiento para sus becarios antes del 1 de junio.