La tecnología en la escuela, con los recursos tecnológicos que adopta, refleja
los parámetros culturales de la sociedad que los desarrolla. De todos modos, la
información actualizada y el conocimiento ya no son privativos de dicha
institución pues, hoy en día, los alumnos tienen acceso a enciclopedias
multimediales, redes telemáticas, mensajes televisivos, etc. Ante esto, el
docente debe navegar contra la corriente y, así, fomentar la creatividad, educar
para la diversidad, generar experiencias compartidas y contextualizadas,
bregar por la elaboración de mensajes abiertos en los que participen todos los
sujetos, permitir la libre expresión de los alumnos, trabajar para conseguir una
sociedad igualitaria, democrática y libre . La tecnología debe y puede colaborar
activamente en los procesos de cambio en el sistema educativo.