Proyecto Educativo Programa de Microbiologia UniPamplona 2010

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2010

PROYECTO
EDUCATIVO

Programa de Microbiología

Universidad de Pamplona
Proyecto Educativo del Programa de Microbiología

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“La universidad representa aquel espacio para la búsqueda del
conocimiento, la libertad de pensamiento, la excelencia, la
posibilidad de crítica, de diálogo dentro de un clima científico
de honestidad intelectual. Esta visión de la universidad
contextualizada, enfocada y sintonizada dentro del más amplio
concepto de desarrollo humano, de plano se contrapone a
aquella que solo ve en ella una máquina para producir
profesionales.”
Luis Enrique Orozco
Filósofo

Presentación

E

ste documento surge como producto de la reflexión que los diferentes actores,
que son parte de este proyecto, hacen sobre la proyección del Departamento de
Microbiología de la Universidad de Pamplona y sobre los lineamientos rectores que
deben estructurar esta proyección. Es así, como a través de este ejercicio se pretende
articular la consolidación y desarrollo del programa, en todos sus ámbitos, con los
objetivos institucionales, procurando mantener una coherencia entre nuestros
anhelos y nuestras acciones.
El presente Proyecto Educativo del Programa de Microbiología, tiene como objeto
último el de constituirse en un instrumento que sirva de guía para la planeación
administrativa y académica del programa, perfilando una misión y una visión como
elementos orientadores de su desarrollo. De igual manera se establecen pautas que
pretenden generar procesos de mejoramiento continuo que permitan retroalimentar y
repensar el camino que debe recorrer nuestro programa.
Siendo plenamente conscientes de los aspectos que se constituyen en los más
importantes indicadores de la calidad de un programa, en el presente documento
además se contemplan las principales áreas de acción del programa de Microbiología
y se definen unos sectores estratégicos, que nacen y se articulan con los
compromisos fundamentales de nuestra institución, definidos en el Proyecto
Educativo Institucional de la Universidad de Pamplona.
En este orden de ideas, se propone un marco de acción donde todos los mecanismos
se conjuguen, donde la flexibilidad (bien entendida) sea una herramienta de
desarrollo y de adaptación a los cambios sociales y a las nuevas exigencias del
entorno, y donde los conceptos de persona, desarrollo integral, aprendizaje,
enseñanza y evaluación, contemplados en el Pensamiento Pedagógico Institucional,
dispongan de un caldo de cultivo propicio que conduzca a la formación de una
persona que posea referentes claros de acción dentro de un proyecto personal y
social que le dé un sentido a su accionar dentro de la sociedad.

Proyecto Educativo del Programa de Microbiología – Facultad de Ciencias Básicas – Universidad de Pamplona

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1. Nuestra Universidad

La Universidad de Pamplona fue fundada en 1960 como universidad privada bajo el
liderazgo del Presbítero José Rafael Faría Bermúdez y convertida en Universidad
Pública del orden Departamental, mediante decreto Nº 0553 del 5 de agosto de
1970. El 13 de agosto de 1971, el Ministerio de Educación Nacional facultó a la
Universidad para otorgar títulos en calidad de Universidad, según Decreto Nº1550. De
acuerdo con la Ley 30 de 1992, la Universidad de Pamplona es un ente autónomo
que tiene su régimen especial, personería jurídica, autonomía administrativa,
académica, financiera, patrimonio independiente, y perteneciente al Ministerio de
Educación Nacional.
La sede se encuentra en la ciudad de Pamplona, históricamente caracterizada por
sus aportes a la educación tanto regional como nacional y binacional ColomboVenezolana. Durante los años sesenta y setenta, la Universidad creció bajo un perfil
eminentemente pedagógico, formando licenciados en la mayoría de las áreas que
debían ser atendidas en el sistema educativo: Matemáticas, Física, Química, Biología,
Ciencias Sociales, Pedagogía, Administración Educativa, Idiomas Extranjeros, Español
y Literatura, y Educación Física.
En los años ochenta la Universidad asumió el compromiso de formación profesional
en otros campos del saber, etapa que inició a finales de esa década, ofreciendo el
programa de Tecnología de los Alimentos. Posteriormente, y con el respaldo de
infraestructura de la tecnología, en los años noventa fueron creados en el terreno de
las Ciencias Naturales y Tecnológicas, los programas de Microbiología con énfasis en
alimentos, las ingenierías de Alimentos y Electrónica y la Tecnología en Saneamiento
Ambiental. En el campo de las Ciencias Socioeconómicas, los programas
profesionales de Administración Comercial y de Sistemas y la Tecnología en
Administración de Sistemas. Hoy, la Universidad se prepara institucionalmente para
atender nuevas demandas educativas proyectadas desde la región y desde el
desarrollo de la ciencia, el arte, la técnica y las humanidades.
La Universidad en su discurrir ha ofrecido programas académicos en todos los niveles
escolares: pregrado, postgrado y educación continuada en todas las modalidades
educativas: presencial, semipresencial y a distancia, modalidades que le han
permitido ofrecer nuevos servicios en muchos lugares de Colombia. Esta labor ha sido
apoyada por un equipo de profesionales preparados en las mejores universidades del
país y del exterior.
La Universidad de Pamplona ha sido una Universidad de tradición eminentemente
pedagógica, pero, en la medida en que la región ha ido generando nuevas demandas,
la institución ha asumido otros compromisos, lo que se ha expresado en la creación
de nuevos campos de formación.


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Desde este punto de vista, la Universidad ha venido cumpliendo su histórica misión
de formación e investigación con un marcado énfasis en el servicio social el cual se
intenta consolidar en su proyecto educativo institucional. Es por esto que tal proyecto
recibe expresión en la transformación de sus Estructuras Administrativas,
Académicas, Curriculares e Investigativas, a partir de las cuales define sus estrategias
de trabajo y sus compromisos con la sociedad.


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2. Nuestro programa

2.1. Concepción del programa.
En 1986 la Universidad de Pamplona, consciente de responder a una demanda
educativa creciente a nivel profesional, planteó la creación de nuevos campos de
formación que respondieran a ofertas modernas e innovadoras. Por entonces, el
Departamento de Biología-Química acoge este llamado, y es así como en Enero de
1987 se informa sobre la propuesta de crear el programa de Licenciatura o
Tecnología en Microbiología (Acta Nº 01 Consejo de Facultad, Enero de 1987).
El 24 de Febrero de 1987 se responsabilizó a los siguientes profesores para la
elaboración de la propuesta del programa: Jacid Palomino, Rodolfo Contreras, Jorge
Eloy Montañez, Eduardo Villamizar y Yolanda Albarracín (Acta No 02 Consejo de
Facultad, Febrero de 1987). El 8 de Marzo de 1987 el Consejo Académico aprueba y
recomienda al Consejo Superior la creación del programa de carrera profesional de
Microbiología Industrial, según Acta No 004. El 10 de Marzo de ese mismo año, se
expide el acuerdo 017 del Consejo Superior en el cual se crea el programa de carrera
profesional de Microbiología Industrial adscrito a la Facultad de Ciencias Básicas (de
ese entonces) y se faculta al señor Rector para que tome las disposiciones en el
orden administrativo académico y financiero para la implementación del programa.
La Universidad con fecha 8 de Septiembre de 1987 mediante oficio 001719 remitió
el proyecto al Subdirector Académico del ICFES. Posteriormente mediante oficio
003751 del 5 de Noviembre de 1987, suscrito por el Doctor Mauricio González, se
realizaron las primeras observaciones relacionadas exclusivamente con la factibilidad
económico-financiera del proyecto. La institución mediante el oficio 002447 del 30
de Noviembre de 1987 demostró la factibilidad económico-financiera del programa,
situación que fue aceptada por el Doctor Jaime Archiva Sáenz, Jefe de la División
Económica-Financiera del ICFES, en comunicación personal al señor Rector de la
Universidad de Pamplona Doctor Zain Cuadros y al Jefe de la Oficina de Planeación
profesor Pedro Nel Santafé.
La División de Formación Universitaria del ICFES, mediante oficio 00286 de Febrero 3
de 1988 formuló a la Universidad su punto de vista académico y financiero después
de evaluar el proyecto. Como respuesta al oficio mencionado, la Universidad de
Pamplona rediseñó el proyecto, teniendo en cuenta todas y cada una de las
observaciones formuladas por la División de Formación Universitaria e incluyó en el
proyecto rediseñado como parte integrante de los anexos, la comunicación enviada al
Doctor Archiva Sáenz relacionada con el aspecto económico-financiero, que como se
expuso anteriormente, ya había sido aceptada y sometió nuevamente a consideración
del ICFES por intermedio de la Subdirección Académica, el proyecto mediante
comunicación 001495 del 29 de Julio de 1988.


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La División de Formulación Académica del ICFES mediante oficio 4302 de Octubre 12
de 1988, plantea unas nuevas observaciones que son motivo de preocupación por
parte de la Universidad de Pamplona y que originaron una comunicación telefónica y
la solicitud de absolverlas por escrito. La preocupación de la Universidad con
respecto a las segundas observaciones, radicó en el hecho de que no se formularon
en la primera evaluación; se consideró de otra parte que esos aspectos fueron
tratados en los dos documentos del proyecto de Microbiología. En el caso de los
aspectos socio-económicos, culturales, etc., el ICFES aceptó que ya los conocía por
estar consignados en el nuevo proyecto como base de sustentación, porque como
bien lo expuso la Universidad en el proyecto rediseñado, el programa de Microbiología
es complementario al programa de Alimentos. Realmente lo que pretendía el
programa en sí es que la Universidad de Pamplona tuviera una continuidad en la línea
de alimentos, que estaría constituida por la Tecnología de Alimentos, por el segundo
ciclo de Ingeniería de Alimentos, que fue entregado posteriormente para
consideración del ICFES y por el de Microbiología.
Se planteó entonces la formación de un Microbiólogo que a través de la Biotecnología
y a través del manejo de los microorganismos, produjera nuevas fuentes de alimentos
a partir de nuevas cepas, productos químicos de uso en la industria de alimentos,
que controlara microbiológicamente no solo la calidad de la producción industrial,
sino inclusive, el nivel primario de producción de los mismos. La anterior propuesta
contradice la mala interpretación de Microbiólogos dedicados al control físico-químico
y con funciones de macroproducción de alimentos, competencias propias de
tecnólogos e ingenieros de alimentos.
En ese entonces tanto el ICFES como la Universidad de Pamplona conocían el
fenómeno de que no existía en el país un profesional en el campo específico del
control microbiológico de alimentos, sino que estas funciones las estaban ejerciendo
profesionales de distinta formación que se han orientado hacia ella a base de cursos,
diplomados e inclusive de Postgrado, fenómeno este que precisamente evidenciaba
la carencia y la necesidad de formar un profesional específicamente para la función
vital de producir alimentos con las más altas especificaciones de tipo sanitario, que le
permitieran al país competir en la exportación de los mismos.
En relación con la estrategia de implementación del programa, esta se basó en el
hecho de que si se le otorgaba la licencia de iniciación, simultáneamente la
Universidad suspendería el programa de Licenciatura en Química-Biología, que sería
desmontado gradualmente en la misma forma que progresivamente fuera avanzando
el programa de Microbiología. Este tipo de acción implicaba la liberación de recursos
humanos, físicos y financieros que serían transferidos a la operatividad del nuevo
programa, lo cual permitía afirmar que sin necesidad de mayores inversiones se
podría garantizar el funcionamiento del mismo en los cuatro primeros semestres. Lo
anterior, se fundamentó en la infraestructura, personal docente y experiencia que la


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Universidad tenía en el manejo de áreas como las de Biología, Química, Bioquímica,
Matemáticas, Estadística, Análisis químico, etc.
En cuanto al aspecto relacionado con la infraestructura requerida para el desarrollo
del programa, la Universidad planteó una estrategia similar a la utilizada cuando se
inició con el programa de Tecnología en Alimentos, en la cual se construyeron e
implementaron periódicamente los laboratorios requeridos. Adicionalmente se
argumentó la decisión del señor Presidente de la República de financiar el plan de
desarrollo físico de la Universidad incluyendo estas necesidades en el plan de
desarrollo de 1990-1991.
Con respecto a la asesoría de profesionales en el área específica, se aclaró que la
institución había contratado los servicios profesionales de la experta Pilar Meléndez,
Microbióloga de amplia experiencia en el control microbiológico de alimentos al
servicio del ICTA de la Universidad Nacional, según oficio No 2351 del 9 de
Noviembre de 1988. El 15 de Diciembre de 1988 el ICFES planteó a la Universidad
de Pamplona un cambio en el enfoque del programa hacia el área de Biotecnología,
según oficio No 005208; modificaciones que son efectuadas y enviadas de nuevo al
ICFES el 9 de mayo de 1988 según consta en el oficio No 00882.
Posteriormente el 31 de Julio de 1990 se realizó una evaluación por parte del ICFES
al final de la cual se dio un plazo de un mes para hacer los ajustes pertinentes y dar
comienzo al programa (acta No 7 del Consejo de Facultad). Se realizó una segunda
visita del ICFES donde el funcionario sugiere cambios en las asignaturas, aumento en
las asignaturas prácticas, construcción de laboratorios especializados, compra de
bibliografía suficiente, y el enfoque del programa hacia el área de la Microbiología
Industrial, así como la vinculación de docentes con experiencia en la industria (Acta
No003 Departamento de Biología–Química, 2 de Mayo de 1991)
Como respuesta a las visitas del ICFES se planteó la propuesta y se argumentó la
justificación de la creación del programa sobre los siguientes aspectos:









La región necesita prioritariamente desarrollar el sector agroalimentario.
Según productores y comercializadores, no hay condiciones de mercado y
almacenamiento adecuados.
No hay asistencia técnica a pequeñas y medianos productores.
Tecnología ganadera rudimentaria y con baja sanidad.
Producción de quesos en condiciones lamentables y microbiológicamente
indeseables.
La no existencia de un programa que maneje las Biotecnologías.
Desarrollo de programas orientados al fortalecimiento de la infraestructura
nacional en ciencia y tecnología.
Una encuesta realizada a industrias productoras de alimentos y acueductos reveló
la necesidad de contar con profesionales fundamentados en los aspectos
microbiológicos y de control de calidad. La encuesta reveló que el trabajo lo


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

realizaban Químicos, Bacteriólogos, Biólogos, Ingenieros, Tecnólogos y/o
Zootecnistas.
Replanteamiento de la oferta educativa hacia programas que contribuyen a un
mejoramiento de la calidad de vida de la región y del país. (tomado de propuesta
del programa presentada al ICFES en 1991)

Ahora bien, el perfil del profesional que pretendía formar la Universidad de Pamplona
consideraba un microbiólogo con un enfoque diferente al sugerido por las
autoridades gubernamentales, de ahí el planteamiento de que este programa
procurara la formación de un profesional enfocado hacia los alimentos, perfil que nos
proporcionaría una identidad propia, llegando más tarde a ser reconocidos en
muchas empresas a nivel nacional como una alternativa clara para las problemáticas
de la industria agroalimentaria.
Después de todo este proceso, el 6 de Noviembre de 1991 y según acuerdo No 228
de 1991, el ICFES concede la licencia de funcionamiento por un periodo de 6 años
(hasta el 31 de diciembre de 1997) al naciente programa, con el nombre de
Microbiología con énfasis en Alimentos, énfasis que nos distinguiría frente a otras
universidades del país. De igual manera se expide su ficha técnica, se otorga el
código correspondiente 121245766645451811100 y se inician labores académicas
a partir del primer periodo de 1992.


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2.2. Desarrollo histórico.
Como hemos visto, el ICFES finalmente avaló el proyecto de crear el primer programa
a 10 semestres de la Universidad de Pamplona, con base en una propuesta
enmarcada en el uso y aprovechamiento de los microorganismos, fundamento
generado bajo el precepto de una visión futurista. Este logro, fue el resultado del
trabajo y dedicación de un grupo de profesores vinculados al departamento de
Biología-Química, adscrito a la antigua Facultad de Ciencias Básicas y de las
directivas de la época, quienes estructuraron la idea con gran sentido de pertenencia,
responsabilidad y entendiendo el compromiso y las implicaciones futuras que se
derivarían de esta naciente propuesta.
Debido a que el programa se constituyó en uno de las más importantes que ofrecía la
institución, surgió la necesidad de crear la sección de Microbiología adscrita al
Departamento de Biología-Química. Los inicios como para todos es bien sabido,
fueron difíciles, con múltiples inconvenientes que fueron superados progresivamente
por el personal que laboró en la ejecución de dicha propuesta, reconociendo
actualmente que el esfuerzo debía ser mayor si tenemos en cuenta que una
universidad de provincia, como acostumbraba llamarse, no debía ser ajena a los retos
de la educación superior y debería estar a la par de las propuestas tecnológicas de
una sociedad en desarrollo y en constante cambio.
El Programa de Microbiología, en Octubre 21 de 1993, año y medio después de su
puesta en marcha, realiza la primera propuesta de autoevaluación efectuando un
diagnóstico sobre las necesidades profesionales y el desarrollo en el campo
agroindustrial, necesidades de formación en el área de la Microbiología, el currículo,
el material de apoyo bibliográfico, planta física, área de investigación, personal
docente y presupuesto. Posteriormente en 1996, se realiza un análisis DOFA que
consideraba los siguientes aspectos: profesores, estudiantes, recursos físicos y
financieros, bienestar institucional, currículo, egresados e impacto sobre el medio,
organización, administración y gestión. Durante esos 5 años, el programa creció en
cuanto a su planta de docentes (incorporación profesores tiempo completo),
infraestructura (laboratorios) e insumos. Se contó con la participación de docentes de
origen Cubano y Venezolano para la orientación de algunas asignaturas específicas;
así como el uso de espacios tanto en “La Casona” como en el entonces “CETA”, hoy
actual campus universitario. El 19 de Diciembre de 1996, se graduó la primera
promoción de profesionales formados en la Universidad de Pamplona.
Con el paso del tiempo, el programa fue renovándose con el fin de estar acorde a los
retos que el contexto le exigía, a nivel académico, científico y profesional. En este
sentido, en Mayo de 1998, el Comité Curricular del programa presenta el primer
boletín informativo sobre el proceso de autoevaluación liderado por la Vicerrectoría
Académica. En Abril del año 2000, se actualiza el programa ante el ICFES para darle
continuidad al ofrecimiento del mismo. Ese mismo año se convocó a la comunidad


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académica del programa para llevar a cabo la primera reflexión sobre el plan de
estudios, surgiendo una propuesta que incorporó algunas asignaturas para
fortalecerlo, tales como Citología, Biología Celular, Micología e instaurando el
Proyecto de Investigación entre otros.
En Agosto del año 2001, la administración asume el compromiso institucional de
trabajar en el proceso de mejoramiento continuo y de acreditación de los programas y
nombra al doctor José Santiago Correa Uribe como asesor de este proceso. Se
presenta un plan de trabajo que se inicia con la conformación de los Comités de
Acreditación por programa, siguiendo unas políticas enmarcadas dentro del gran reto
de la acreditación institucional.
Gracias a estos procesos de mejoramiento continuo, de compromiso con la calidad y
desarrollo del programa, en Febrero de 2004 el MEN otorga mediante resolución 540
el Registro Calificado, lo cual nos posicionó como uno de los programas bandera de la
institución. Dados los condicionamientos nacionales y las nuevas perspectivas
gubernamentales, en Agosto del año 2005, por recomendación del CONACES el
nombre del programa se vio sometido a un cambio, consistente en el retiro del
énfasis, desde entonces el programa pasó a denominarse: Microbiología. Esta
modificación se llevó a cabo de manera paralela, con una revisión y reforma del plan
de estudios. Posteriormente por resolución 4608 del 2005 el MEN reitera el
otorgamiento del Registro Calificado por un tiempo de 7 años, a partir de la fecha de
registro en el SNIES (28 Noviembre de 2005).
El compromiso institucional y del personal adscrito al programa han conseguido que
esa propuesta inicial gestada en la década de los ochenta, denominada
Microbiología, además de llegar a ser el programa profesional más antiguo de la
Universidad de Pamplona, se haya consolidado como uno de los mejores programas a
nivel institucional. Debido a la proyección del programa, la dinámica de la institución y
considerando la proyección regional de esta, la administración de la institución
respaldó el hecho de que el programa se sometiera de manera voluntaria al proceso
de autoevaluación con miras a conseguir la acreditación de alta calidad.
En esta ruta, la Universidad de Pamplona recibió a inicios del año 2007 la visita de
dos pares académicos asignados por el CNA (Consejo Nacional de Acreditación),
quienes verificaron las condiciones en las que se oferta el programa y su coherencia
con lo consignado en el documento de autoevaluación. Finalmente, como fruto de
todo este proceso el MEN, mediante resolución número 4055 del 19 de julio de
2007, otorgó al programa de Microbiología, la Acreditación de Alta Calidad por un
periodo de 4 años. Se trató de un reconocimiento obtenido como consecuencia del
trabajo en equipo de Docentes, Estudiantes, Egresados y Administrativos que hacen
parte de nuestro programa, y fruto de la madurez, calidad académica, grado de
formación profesoral, y el gran impacto de nuestros egresados sobre el medio. Este
logro nos convirtió en el segundo programa de Microbiología a nivel nacional
reconocido con dicha distinción y el primero de una universidad pública en alcanzar


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este reconocimiento. La obtención de esta distinción por parte del CNA implica una
gran responsabilidad para el departamento y la institución, un compromiso de todos
con el mejoramiento continuo del programa.
Lamentablemente, los cambios continuos de administración (años 2007, 2008 y
2009) y la situación financiera de la institución, no se han constituido en el mejor
escenario para el desarrollo del programa; sin embargo, a pesar de tales
circunstancias en el año 2009 se renovó el plan de acción del programa, el cual
pretende, acorde a lo definido por el presente documento, generar actividades
concretas al interior del mismo en aras de mejorar en cada uno de los sectores
estratégicos definidos por el programa.


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2.3. Cambios Administrativos.
El programa inició, en 1992, adscrito a la Facultad de Ciencias Básicas,
Departamento de Biología-Química, sección de Microbiología.
En 1997 se creó el Departamento de Microbiología, adscrito a la Facultad de Ciencias
Naturales y Tecnológicas fundamentado en la proyección del programa hacia otras
áreas del conocimiento con miras a la definición de líneas de investigación y el
manejo de venta de servicios y asesorías a instituciones y/o empresas de la región,
que proporcionaron una identificación específica al programa. Adicionalmente se
buscó tener acceso a un mayor presupuesto para llevar a cabo las actividades que
permitieran el desarrollo del programa.
Debido a circunstancias institucionales, para el primer semestre del año 2003, el
Departamento de Microbiología pasó a ser parte de la joven Facultad de Salud.
Finalmente, en el segundo semestre del mismo año, el Departamento de
Microbiología retornó a la recién creada Facultad de Ciencias Básicas.


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3. Presentación del programa
3.1. Información Básica.
NOMBRE DE LA INSTITUCIÓN:
DOMICILIO:
NOMBRE DEL PROGRAMA:
NORMA INTERNA DE CREACIÓN:
ÓRGANO QUE LA EXPIDE :
REGISTRO SNIES:

Universidad de Pamplona.
Pamplona, Norte de Santander.
Microbiología.
Acuerdo 017 de Marzo 10 de 1987.
Consejo Superior Universitario.
121245766645451811100 de Noviembre 6 de
1991.
REGISTRO CALIFICADO:
Resolución MEN número 4608 del 12 de Octubre
de 2005, por un periodo de 7 años.
ACREDITACIÓN DE ALTA CALIDAD: Resolución MEN número 4055 del 19 de Julio de
2007, por un periodo de 4 años.
LUGAR DONDE FUNCIONA:
Pamplona, Norte de Santander.
TÍTULO A EXPEDIR:
Microbiólogo.
DURACIÓN:
Diez (10) semestres.
PERIOCIDAD DE LA ADMISIÓN:
Semestral
JORNADA:
Diurna
ESTRATEGIA METODOLÓGICA:
Presencial
AÑO DE INICIO DE ACTIVIDADES: 1992

Nuestro logo

Nuestra mascota


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3.2. Justificación.
La globalización y la renovación acelerada de los conocimientos científicos, así como
su apropiación y aplicación, repercuten en cambios sociales y económicos a mediano
o largo plazo. El avance del conocimiento que han sufrido las Ciencias Biológicas en
los últimos 50 años ha conducido a su diversificación en distintas disciplinas,
perfectamente diferenciadas y con entidad propia, entre las que se destaca la
Microbiología. El sorprendente desarrollo y los sectores de impacto de la
Microbiología ha llevado a que actualmente sea considerada como una ciencia con
un enorme acervo de conocimiento. El país no ha sido ajeno a este fenómeno, por
ello el Sistema Nacional de información de la Educación Superior SNIES, que
clasifica a los programas de pregrado de acuerdo a núcleos básicos del conocimiento,
ha incluido a la Microbiología en el área del conocimiento de las Ciencias Exactas y
Naturales y se articula con los lineamientos de la Resolución 2769 de 2003, que
determina las características específicas de calidad para los programas de pregrado
en Ciencias Exactas y Naturales.
Los descubrimientos de las últimas décadas han demostrado contundentemente la
enorme importancia de los microorganismos en los diferentes ámbitos de la actividad
humana, así como la transversalidad del conocimiento generado de su estudio con
otras ciencias. Lo anterior basado en el hecho de que los microorganismos son
capaces de colonizar una impresionante y amplia variedad de hábitats, modificando
continuamente nuestro planeta e interaccionando íntimamente con los demás seres
vivos, siendo en algunos casos indispensables para su vida o bien ocasionándoles
enfermedades. Hoy en día sabemos que los microorganismos son los seres más
abundantes de nuestro planeta, pero también los más desconocidos, ya que, se
estima, que sólo se ha identificado alrededor del 1% de la biodiversidad microbiana
existente en este planeta. Por tal razón, la intensa actividad de investigación que está
viviendo la Microbiología y la gran cantidad de información de la que se dispondrá en
un futuro para el estudio de los microorganismos tanto a nivel básico como aplicado,
así como los diferentes escenarios de actuación, convierte en una necesidad actual e
imperiosa el propender por la apropiación y difusión académica y científica del
estudio de los mismos en instituciones de educación superior, tanto a nivel de
pregrado como de postgrado.
Para muchos países, lo anterior hace parte fundamental de las acciones que
contribuyen, dentro de un plan o programa, a su propio desarrollo científico y
tecnológico y, en consecuencia, mejorar la calidad de vida de sus habitantes. En este
sentido y, teniendo en cuenta las particularidades de nuestro país, se han definido en
el plan nacional de desarrollo, siete áreas estratégicas de trabajo en aras de procurar
el desarrollo competitivo del mismo, de las cuales la microbiología se ve directamente
implicada en tres de ellas: Biodiversidad y recursos genéticos, Enfermedades
infecciosas tropicales y la Biotecnología e innovación agroalimentaria y agroindustrial.
El mismo documento hace manifiesta la especial preocupación por el status sanitario
del sector Agroalimentario en Colombia, un área donde los Microbiólogos también


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tienen mucho que aportar. De igual manera, en documentos como el Plan Nacional
de Desarrollo Científico-Tecnológico y de Innovación, Colombia 2007-2019, se
apuesta por fortalecer el sistema nacional de investigación proponiendo estrategias y
metas, en términos de fomento e inversión en proyectos de investigación y formación
de nuevos investigadores, que el país se propone cumplir al finalizar la segunda
década del presente siglo. Esto permite vislumbrar un promisorio futuro (por lo menos
a mediano plazo) para la actividad científica y tecnológica nacional. Si bien en nuestro
país no se disponen de datos al respecto, los estudios realizados en un país como los
Estados Unidos de América ponen de manifiesto que existe una clara demanda de
profesionales de la Microbiología en las áreas de la sanidad animal, humana y de
plantas y en sectores industriales muy diversos, como las industrias agroalimentarias,
farmacéuticas, biotecnológicas, medioambientales y del diagnóstico, entre otras.
Todo esto proporciona un marco referencial y de actuación muy importante a la
Microbiología, además de reforzar su pertinencia para nuestro país.
En este contexto, el programa de Microbiología que ofrece la Universidad de
Pamplona, propone un currículo que apuesta a dos ejes fundamentales de
formación, estos son: la microbiología aplicada al sector productivo agroalimentario y
su seguridad sanitaria, con todo lo que ello implica; y la biotecnología con sus
considerables aplicaciones derivadas de las demandas de la sociedad actual en
áreas tales como la agricultura, la problemática ambiental, energías alternativas y
desarrollo sostenible, salud y alimentación, entre otras tantas donde los
microorganismos tienen aún mucho que aportar. El primer eje responde a una
necesidad palpable del país y constituye la seña de identidad del programa a nivel
nacional. En cuanto al segundo eje, su enfoque se hace basado en el conocimiento
del metabolismo microbiano y el uso de las herramientas y técnicas biomoleculares,
para estudiar la biodiversidad microbiana y generar avances y aportes en la
producción de metabolitos de interés, en la biodegradación de diversos sustratos y en
los procesos ecológicos de interacción entre comunidades microbianas y con otros
seres vivos (especialmente plantas). Todo este tipo de aplicaciones, tanto en el
aseguramiento de la calidad del sector productivo, como en los desarrollos
biotecnológicos, los cuales son generados como consecuencia de la dinámica del
programa y de su grupo de investigación, tienen como fin último el de impactar de
manera positiva en los ámbitos académico, científico, industrial, productivo y de salud
pública, a nivel regional y nacional. En este sentido el currículo del programa se
preocupa por sensibilizar al estudiante y proporcionarle las herramientas necesarias
para formular propuestas de investigación pertinentes y liderarlas impulsando el
desarrollo de la región donde se encuentren. Es por esto que solamente el potencial
de repercusión social que implica esta área del conocimiento justifica el
fortalecimiento y proyección del programa de Microbiología de la Universidad de
Pamplona.
Considerando el entorno local y regional, el departamento de Norte de Santander
posee varias ventajas competitivas, entre las que podemos mencionar, su situación
fronteriza (ventaja para el intercambio comercial de productos agroindustriales) y el


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hecho de constituirse en una zona de dispersión genética (25 especies para
investigación). Adicionalmente, el departamento posee una ubicación geográfica que
le otorga abundancia de recursos naturales, concretamente contiene zonas
agroecológicas propicias para la expansión de nuevas áreas para el cultivo, con una
extensión aproximada de 34.000 hectáreas. El reto para el departamento, es
estructurar y consolidar una base económica estable. Es por ello que en el sector
agroindustrial, se pretende posicionarse como el segundo departamento productor
hortofrutícola en Colombia. Para conseguirlo, el departamento incrementará el área
sembrada de frutales y mejorará la productividad lo que le permitirá mejorar el
rendimiento a 150 toneladas por hectárea.
Las apuestas agroindustriales de Norte de Santander contemplan el cacao y la palma
de aceite. La producción de cacao le permitirá participar en los mercados nacional e
internacional con productos semi-elaborados y finales. Se estima contar en los
próximos quince años con 22.000 hectáreas sembradas, con una producción de
17.000 toneladas. Esta producción se realizará en áreas agroecológicas de las zonas
húmedas y en las subcuencas de los ríos Catatumbo, Sardinata, Zulia y Pamplonita,
en donde se utilizará material genético de alto rendimiento y tolerante a las
enfermedades. En cuanto a la palma de aceite, en 2020 se aspira a consolidar la
ampliación del proyecto de instalación y sostenimiento de 4.000 hectáreas de palma.
Para ello se deben consolidar centros subregionales (Ocaña, Pamplona, Catatumbo)
que posibiliten vincular las diversas zonas del Departamento en la estrategia de
competitividad y constituir un sistema departamental de ciencia y tecnología y de
formación profesional dirigido hacia las prioridades de desarrollo tecnológico de la
región.
En el sector de las frutas y hortalizas, es importante destacar que Norte de Santander
cuenta con todos los climas y por ende con producción todo el año. Los retos en este
sector incluyen, tecnificar procesos e incrementar el área sembrada, aumentando el
rendimiento a 150 toneladas por hectárea para convertir al departamento en el
segundo productor de hortalizas en Colombia. Para lograrlo, entre otras cosas, se
está adelantando un proyecto piloto en frutas y hortalizas en los 40 municipios del
departamento, que incluye impulsar la asistencia y transferencia de tecnología a los
productores como son, uso de semillas mejoradas genéticamente, manejo integrado
de plagas y enfermedades, capacitar y asistir técnicamente en el procesamiento y
conservación de los diferentes productos.
El programa de Microbiología de la Universidad de Pamplona pretende responder a
los desafíos que la situación actual de la región plantea, preocupándose por
integrarse en los planes regionales de desarrollo y por la formación de lideres
integrales que gestionen, articulen y materialicen proyectos agroindustriales para el
desarrollo de Pamplona, Norte de Santander y la región binacional. Dichos proyectos
estarían circunscritos en ámbitos dirigidos concretamente a: asegurar la inocuidad de
los alimentos propios en la región, a lo largo de su cadena productiva; generando y
ejecutando proyectos que aporten soluciones a problemáticas reales en cuanto a


15

control de plagas, enfermedades de los cultivos bandera de la región; desarrollando
estrategias biotecnológicas para plantas procesadoras de bioetanol y otros
metabolitos de interés industrial; aplicando técnicas de manipulación genética para el
mejoramiento de los cultivos pioneros de la región; implementando estrategias que
disminuyan el deterioro ambiental como lo son, bio-remediación de aguas y recurso
hídrico, diseño de sistemas para tratamiento de residuos sólidos, diseño e
implementación de sistemas de compostaje para obtención de abonos para la
recuperación de suelos y procesos de mejora del medio ambiente por sistemas
biotecnológicos, entre otros.


16

3.3. Misión.
Formar profesionales dinámicos, críticos, emprendedores e integrales a través de
una cultura académica basada en el fomento de la creatividad, y el espíritu
científico, quienes con el estudio y aplicación de la microbiología, contribuyan al
desarrollo de la región y la nación.

La formación integral parte de la idea de desarrollar, equilibrada y armónicamente,
diversas dimensiones del sujeto que lo lleven a formarse en lo intelectual, lo humano,
lo social y lo profesional. En este sentido para nuestra institución, el desarrollo
humano integral se entiende como la formación de recursos humanos aptos para
manejar la ciencia, la tecnología y en general los saberes con criterios éticos, morales
y humanistas.
Teniendo en cuenta lo anterior, al interior del programa de Microbiología se deberán
propiciar las condiciones tanto para la formación del hombre como del profesional.
Este hecho de por si presupone la consolidación de una serie de procesos, que
necesariamente deberán estar acompañados por cambios en las practicas
pedagógicas, que han venido confundiendo información con formación.
Esta misión tiene implícito el compromiso institucional y del programa con la
generación de espacios académicos que conduzcan al estudiante al desarrollo de
valores, actitudes y habilidades, que les permitan constituirse como agentes
dinamizadores con un impacto positivo en el entorno donde se desenvuelvan. La
consolidación de esta filosofía debe conducir al programa de Microbiología a la
formación no sólo del profesional que el mercado requiere sino del ser humano que la
sociedad necesita.
Este planteamiento propone que los procesos académicos enfaticen sobre la
formación de los estudiantes, y no sobre una información enciclopedista, ya que un
estudiante bien formado debe contar con las actitudes y herramientas para el
constante auto-aprendizaje a través de las bases que ha cimentado al educarse de
una manera integral.


17

3.4. Visión.
Al finalizar la segunda década del siglo XXI, el programa de Microbiología deberá
seguir siendo líder nacional en la formación de profesionales con elevado nivel
académico y posicionarse como referente en el desarrollo de procesos investigativos
articulados con el sector productivo y con impacto social.

Uno de los indicadores de la calidad de un programa lo constituyen sus egresados, el
camino trazado por ellos y la manera como han impactado su entorno local, regional y
nacional. En este sentido, el programa de Microbiología se considera privilegiado ya
que durante estos 18 años de funcionamiento, sus egresados han alcanzado un
reconocimiento tal en el país, que ha contribuido al posicionamiento del programa a
nivel nacional. Conscientes del compromiso que como institución de educación
superior, la Universidad de Pamplona posee para con el país y la sociedad, los
procesos y mecanismos que han permitido este avance, deben consolidarse y
mejorarse continuamente, dentro de un marco orientado hacia la excelencia
académica. En este sentido, la consolidación de los procesos y espacios académicos,
la renovación y actualización curricular, el fortalecimiento de la planta docente, la
construcción de cultura académica, entre otros aspectos, se constituyen como ejes
dinamizadores del programa.
Lo anterior, con la retroalimentación adecuada, madura y se consolida a través de la
cultura de la investigación. Teniendo en cuenta que la Microbiología permea otros
campos del conocimiento adquiriendo de esta manera una mayor capacidad de
impacto, el programa de Microbiología entiende que la investigación debe orientar la
formación, ya que asegura una relación con el conocimiento caracterizada por el
compromiso intelectual, la autonomía, la solidaridad en el trabajo y la apertura a los
puntos de vista alternativos y a los intereses y necesidades del otro. En consecuencia,
el programa, apoyado en el potencial del recurso humano con el que cuenta, apuesta
por direccionar sus esfuerzos hacia la construcción de una base investigativa sólida
que articule la academia con la investigación y le proporcione a ésta última
pertinencia regional y productiva, además de visibilidad social. Es por esto que surge
la necesidad de una planeación adecuada, progresiva y consciente tanto de la
realidad de nuestro país y del entorno que es susceptible de ser afectado por la
Universidad de Pamplona,
Esta visión implica un fuerte compromiso de cada uno de los miembros del programa
en el desarrollo de estrategias orientadas al fortalecimiento de la estructura
académica e investigativa del mismo.


18

3.5. Propósitos de formación.
Acorde con su misión, el programa de Microbiología tiene como propósito general el
de formar profesionales con un elevado nivel académico, técnico-científico y sociohumanístico, que con sus capacidades y competencias, contribuyan al mejoramiento
del nivel de vida de su región y, en consecuencia, al desarrollo de la nación. En este
proceso es importante el aporte de nuestros egresados como agentes de
transformación social, así como la generación, difusión y transferencia de
conocimientos científicos y tecnológicos en los diferentes campos de aplicación de la
microbiología. El accionar del microbiólogo de nuestra institución debe enmarcarse
en los principios que orientan la formación en el programa y que serán tratados más
adelante.
Nuestros egresados cuentan con las suficientes competencias y actitudes que les
permiten desempeñar de manera satisfactoria las funciones propias de su quehacer,
trabajando de manera respetuosa con el medio ambiente e implementando o
desarrollando nuevas tecnologías que contribuyan a la solución de los problemas del
entorno. Es por ello que la estructura curricular del programa ha tenido en cuenta los
diferentes aspectos de la formación, contemplados en el pensamiento pedagógico de
la institución, con la pretensión de ofrecer un programa profesional universitario
encaminado a formar un Microbiólogo integral.
En consecuencia, el programa de Microbiología considera los siguientes propósitos
específicos de formación:
 Proporcionar a los estudiantes los suficientes conocimientos y formación en
cuanto a las metodologías clásicas y modernas de estudio y manipulación de
microorganismos y sus metabolitos, para ser utilizados en las diferentes áreas de
aplicación de la Microbiología.
 Formar profesionales con la capacidad específica para formular, ejecutar y evaluar
planes de calidad para ser implementados según las necesidades del sector
productivo.
 Generar profesionales capaces de reconocer problemas en su entorno, formular,
desarrollar y conducir proyectos y estrategias que contribuyan al impacto social del
programa, al desarrollo científico y fortalezcan la generación de conocimiento en
nuestro país.
 Incentivar activamente la formulación y desarrollo de proyectos que promuevan la
microempresa y beneficien a la comunidad en el ámbito local, regional y nacional.
 Fomentar el desarrollo productivo y científico de procesos biotecnológicos
generando estrategias de solución articuladas a las necesidades regionales y
nacionales en los diversos sectores de aplicación de la microbiología.


19

 Formar profesionales con responsabilidad social, con consciencia ambiental y con
una ética que les permita el desempeño óptimo de sus funciones, contribuyendo a
la convivencia y solución de problemas de la comunidad y de la industria.
 Inculcar en los egresados el desarrollo de actitudes autocríticas que les permitan
el continuo mejoramiento personal y profesional.


20

3.6. Nuestros profesionales.
El microbiólogo de la Universidad de Pamplona recibe una amplia instrucción teóricopráctica en los diferentes campos que contempla la estructura curricular del
programa, por tanto posee las herramientas y competencias suficientes para
incursionar en cualquiera de las áreas de aplicación de la microbiología, con la
posibilidad de seguir formándose en programas de postgrado (especialización,
maestría, doctorado) según el área de su preferencia. De igual manera, nuestro
profesional cuenta con la capacidad de interactuar de manera interdisciplinar en
grupos de trabajo o proyectos de investigación, vinculándose de manera dinámica en
la formulación o ejecución, tanto en los aspectos técnicos y tecnológicos, así como
en los científicos, de cualquier propuesta de investigación relacionada con su campo
de formación.
3.6.1 Perfil profesional.
El egresado del programa de Microbiología de la Universidad de Pamplona es un
profesional dinámico, critico, emprendedor e integral, capacitado para llevar a cabo
el control y aseguramiento de la calidad a procesos de producción y conservación de
productos alimenticios, aguas potables y residuales, aditivos químicos agrícolas,
productos de industrias farmacéuticas y de cosméticos, participando activamente en
el diseño, ejecución y verificación de planes de calidad, además de proponer,
interpretar y aplicar adecuadamente la normatividad correspondiente.
Adicionalmente nuestro egresado, podrá participar en la estandarización de métodos
para la identificación y diagnóstico de microorganismos de relevancia en diversos
sectores de la industria y en la salud pública. Así mismo, cuenta con la capacidad de
desarrollar y ejecutar metodologías adecuadas para la evaluación y extensión de
la vida útil de alimentos mediante el uso de modelos predictivos y
tecnologías térmicas y no térmicas.
Participará en la formulación y desarrollo de proyectos de innovación biotecnológica y
agroindustrial que involucren la presencia y el aprovechamiento de microorganismos
o sus metabolitos, en procura de obtener nuevos productos alimentarios, aditivos
para alimentos, sustancias con propiedades biológicas e importancia médica,
biocombustibles y/o moléculas de interés para el desarrollo científico de la nación.
Podrá desarrollar estudios de diversidad microbiana,
así como procesos y
alternativas de biorremediación y preservación del ambiente, basados en la
utilización de microorganismos, aprovechamiento de desechos agroindustriales y
demás procesos de índole agrícola y ambiental como estrategia de conservación
biológica, con un elevado sentido de conciencia ecológica y de respeto por el
ambiente.


21

3.6.2 Perfil ocupacional.
Los egresados del programa de Microbiología de la Universidad de Pamplona se
desenvuelven con suficiencia en las siguientes aéreas:
Control de calidad en la industria de alimentos, realizando, dirigiendo y verificando
análisis microbiológicos, fisicoquímicos y sensoriales de productos cárnicos, lácteos,
farináceas, enlatados, frutas, hortalizas, y demás productos agroindustriales, así
como en plantas de tratamiento de aguas potables residuales e industria
farmacéutica y cosmética.
Inspección y aplicación de la normatividad nacional a productos de consumo
humano: Ministerio de Salud, Ministerio de Protección Social, Normas Técnicas
Colombianas, Ministerio de Ambiente Vivienda y Desarrollo Territorial, Ministerio de
Agricultura, etc.
Dirección e implementación de planes y programas que corresponden a un sistema
específico de Garantía de Calidad en Industrias (HACCP, ISO, BPL y BPM).
Evaluación de la incidencia de microorganismos emergentes en alimentos, e
identificación de cepas causantes de intoxicaciones e infecciones alimentarias.
Investigación y ejecución de proyectos que aporten conocimiento y/o alternativas de
solución a problemáticas en los campos de la parasitología, inmunología, virología,
microbiología ambiental, industrial, agrícola, biotecnología, diagnóstico molecular y
epidemiología.
Generación de soluciones integrales para problemas, empresas procesadoras,
transformadoras y comercializadoras de alimentos así como aquellos relacionados
con procesos de biodeterioro, biorremediación de aguas y suelos, control biológico de
plagas, aprovechamiento de desechos agroindustriales y demás procesos de índole
agrícola y ambiental.
Innovación en técnicas de biología molecular, como herramienta de apoyo en la
ejecución de proyectos de desarrollo biotecnológico, generando estrategias de
solución articuladas a las necesidades regionales y nacionales en los diversos
sectores de aplicación.
Actividades de docencia e investigación en el ámbito académico en instituciones de
educación superior.
Emprendimiento para la generación de empresas que surjan como resultado de la
aplicación del conocimiento adquirido y se ponga al servicio de la sociedad.


22

4. Fundamentación del programa

4.1. Fundamentación Teórica.
Las tendencias en la formación de microbiólogos a nivel superior se han venido
desarrollando básicamente hacía aspectos, que la Universidad de Pamplona
incorpora como fundamento y eje orientador de formación, estos aspectos son:
4.1.1 Objeto de estudio.
Todos los aspectos y enfoques desde los que se pueden estudiar los
microorganismos conforman lo que denominamos objeto de estudio de la
Microbiología: características estructurales, fisiológicas, bioquímicas, genéticas,
taxonómicas, ecológicas, etc., que conforman el núcleo general o cuerpo básico de
conocimientos de esta ciencia. Por otro lado, la Microbiología también se ocupa de
las distintas actividades microbianas en relación con los intereses humanos, tanto las
que pueden acarrear consecuencias perjudiciales (y en este caso estudia los nichos
ecológicos de los correspondientes agentes, sus modos de transmisión, los diversos
aspectos de la microbiota patógena en sus interacciones con el hospedador, los
mecanismos de defensa de éste, así como los métodos desarrollados para
combatirlos y controlarlos), como de las que reportan beneficios (ocupándose del
estudio de los procesos microbianos que suponen la obtención de materias primas o
elaboradas, y de su modificación y mejora racional con vistas a su imbricación en los
flujos productivos de las sociedades). Finalmente, la Microbiología ha de ocuparse de
todas las técnicas y metodologías destinadas al estudio experimental, manejo y
control de los microorganismos, es decir, de todos los aspectos relacionados con el
modo de trabajo de una ciencia empírica.
4.1.2 Interdisciplinariedad.
La dinámica del conocimiento moderno, ha abandonado el estilo de trabajo aislado y
atomizado con un manejo cerrado del curriculum. Los equipos interdisciplinarios
conformados por dos o más departamentos, o escuelas, o personas, con un manejo
horizontal son el nuevo estilo. La interdisciplinariedad permite una explicación
humana, científica, técnica e integral de la problemática de los fenómenos de la vida,
por cuanto intervienen las diferentes perspectivas de las disciplinas y se plantean las
posibles alternativas de solución, mientras se abre espacio a la investigación y a la
producción colectiva del conocimiento.


23

4.1.3 Incorporación de las Ciencias Sociales y el Humanismo.
Las Ciencias Sociales deben constituir uno de los ejes articulares del proceso
educativo, incorporándose activamente en cada uno de los niveles del programa,
para apoyar la explicación y comprensión integral de los fenómenos determinantes en
los procesos microbiológicos. Es preciso elevar el grado de participación de la
dinámica social, para el diagnóstico, planeación y ejecución de proyectos y estudios
de carácter microbiológico.
4.1.4 Consolidación de las Ciencias Básicas.
La necesidad de dar soluciones a los problemas apremiantes de la humanidad, hacen
de las Ciencias Básicas el fundamento, en la posibilidad de producir tecnologías
aplicadas e investigación de frontera, a costos accesibles incluso para países en
desarrollo, además las han convertido en paradigma del Siglo XXI, en donde la
Microbiología y sus aplicaciones en la Biotecnología, Genética, Agroindustria, Ciencias
Alimentarias, etc. están a la vanguardia del conocimiento mundial.
4.2. Fundamentación Metodológica.
Con especial énfasis en el aprendizaje basado en la investigación formativa, para la
resolución de situaciones problema, la educación dirigida en pequeños grupos, la
formación extramural y la autoformación. Este enfoque enfatiza el estudio de las
distintas respuestas adecuadas a situaciones particulares, que se dan con respecto a
las expectativas de descubrimiento problematizado, aplicado a un contexto. Se
espera un cambio radical de la comunidad educativa, frente al nuevo paradigma de
conocimiento, que pone en crisis todo aprendizaje copiado y repetitivo y reclama un
encuentro más personal, crítico, propositivo y comprometido con el saber y con el
entorno natural en que se produce.
4.2.1 Interlocución de calidad.
Se busca formar al microbiólogo, con un espíritu más interactivo frente a su entorno
social y natural, con criterios axiológicos pertinentes con la realidad y la búsqueda del
saber. Que comprenda el sentido de su formación integral en un planeta de
convivencias y la importancia de una formación permanente extendida a lo largo de
su vida.


24

4.2.2 Tecnologías.
El microbiólogo debe conocer en forma general y actualizada los sistemas operativos
de los computadores, las bases de almacenamiento de datos, la introducción de la
informática en la formación disciplinar del microbiólogo; permite desarrollos en
gestión, investigación, comunicación, búsqueda de fuentes, elaboración documental,
aplicación de modelos tecnológicos, organización y extensión de imprescindibles
servicios.
4.3. Fundamentación Práctica
El programa de Microbiología de la Universidad de Pamplona desarrolla su currículo
en la articulación indisoluble entre la teoría y la práctica, con el principio constructor
universal de que toda información debe ser para la acción y por consiguiente, para la
transformación de la realidad.
Los escenarios pertinentes para el trabajo práctico, experimental del estudiante de
Microbiología en la Universidad de Pamplona son:




Los laboratorios propios de la Universidad en los diferentes cursos ofrecidos
Los centros e instituciones de investigación de la Universidad, así como los
ofrecidos en convenio con otras instituciones a nivel regional.
Los espacios urbanos, donde se ubican empresas, industrias, instituciones
que ofrecen especificidades para la realización de prácticas de formación.


25

5. Principios del programa que orientan la formación
Los principios que debe poseer el estudiante de Microbiología y la comunidad
académica del Programa de Microbiología, no son un fin en sí mismo, pero si
constituyen un derrotero de pensamiento y acción, que aplicados, ayuden a la
formación integral. Estos principios son:
5.1. Humanismo.
Se desarrollan acciones para inculcar en los estudiantes una cultura de respeto con
los demás, la biodiversidad y el planeta. Para ello se trabaja en la estructuración de
una propuesta educativa en la que tengan cabida las ciencias socio humanísticas, en
general, y la cultura en todas sus manifestaciones.
5.2. Honestidad.
El comportamiento de todos los estudiantes, profesores, administrativos que integran
e interactúan en el programa de Microbiología debe estar regido por la equidad, la
observación de las normas morales, sociales y legales; todo ello fundamentado en un
ambiente de cordialidad y respeto mutuo.
5.3. Ética.
Se estimulará y practicará continuamente y transversalmente a lo largo del currículo,
por parte de la comunidad académica del programa de Microbiología, una actitud
ética, ante los fenómenos de la vida en todas sus manifestaciones, expresada en un
comportamiento responsable y justo en su ejercicio profesional.
5.4. Calidad.
Será preocupación de todos los miembros del programa la búsqueda del
mejoramiento continuo, a través del desarrollo de procesos de investigación, de la
formación integral, del aprendizaje y todas las actividades académicas que
propendan por el desarrollo intelectual del estudiante.
5.5. Respeto y Tolerancia.
Se fortalecerá la actitud hacia la aceptación y reconocimiento de la diversidad
individual y cultural en las manifestaciones del pensar, sentir, hacer, convivir,


26

buscando la tolerancia frente al otro y el estímulo de la interdependencia y la
resolución con calidad de los conflictos propios de la cotidianidad.
5.6. Compromiso.
La solidaridad, la integralidad del ser humano y la entrega de si mismo en el
cumplimiento de la misión de formación debe ser la norma de vida de todos los
integrantes del programa de Microbiología.
5.7. Pertenencia.
Será inherente a las actividades de docencia, investigación y extensión, el fomento de
un profundo sentido de pertenencia, hacer de su labor la mejor opción de vida en
beneficio de la institución y la comunidad.


27

6. Sectores estratégicos del programa
Los sectores estratégicos planteados en este documento buscan establecer una
estructura básica de acción dentro del Departamento de Microbiología, que permita
su propio enriquecimiento, el mejoramiento continuo de los diferentes procesos y el
constante avance hacia nuestros objetivos. Adicionalmente, se busca proporcionar un
marco de acción acorde con el Proyecto Educativo Institucional y el Plan de Desarrollo
de la Universidad de Pamplona.
Los cinco sectores estratégicos que se proponen, señalan las áreas de actuación que
deben ser consideradas por el Departamento de Microbiología, cuyas acciones
procurarán el beneficio en todos los ámbitos de la institución, conservando la
coherencia filosófica que se desprende de la visión y misión de nuestra universidad y
del mismo programa.
6.1. Gestión Académico-Administrativa.
La estructura académico-administrativa del Departamento de Microbiología debe
permitir un fluido funcionamiento del mismo, una adecuada planificación y gestión,
así como procurar un buen trabajo de coordinación y cooperación con otros
departamentos y dependencias, teniendo la autoevaluación como pilar fundamental
de su desarrollo y proyección. Todos estos procesos irán de la mano con las políticas
rectoras de la institución.
La gestión del programa debe contemplar todos los ámbitos de acción (estudiantes,
docentes, impacto social, investigación, etc), para lo cual se constituyen comités de
trabajo que buscan dinamizar el proceso de consolidación del programa y crear un
clima organizacional adecuado al interior del mismo, fortaleciendo el trabajo en
grupo, el sentido de pertenencia y la distribución de funciones implicando a todos los
actores académicos del proceso. De igual manera, la dirección del Departamento
debe tener claro el importante papel que el programa debe desempeñar en la
facultad de Ciencias Básicas, especialmente en cuanto a su liderazgo en las diversas
actividades generadas al interior de la misma.
Estrategias:




Establecer indicadores de gestión que permitan estimar el real avance del
programa.
Promover la coherencia con las políticas institucionales.
Fomentar la creación de programas de educación continuada y de formación
posgraduada.


28







Implementar los mecanismos adecuados para la promoción y divulgación del
programa.
Proyectar el programa hacia el sector agroalimentario de la zona de influencia,
mediante la estructuración de un portafolio de servicios.
Diseñar y ejecutar planes de desarrollo del departamento, articulados con el
plan de desarrollo institucional.
Generar modelos y mecanismos de verificación del plan de acción.
Estructurar un organigrama funcional del Departamento.

6.2. Currículo, Docentes, Estudiantes y Egresados.
La modernización curricular debe ser un mecanismo que permita mantener una
concordancia entre el plan de estudios y las tendencias actuales en las diferentes
áreas del conocimiento en las que se encuentra implicada la microbiología. Este
sistema de actualización curricular debe ser producto de una profunda reflexión que
involucre a los diferentes actores académicos, que busque ofrecer un programa más
idóneo de acuerdo a las necesidades actuales, con mejor contenido y que permita
formar un profesional más capacitado y con las características reflejadas en nuestra
misión.
Teniendo en cuenta que la microbiología es un área que permea muchos otros
campos del saber, se hace necesaria una adecuada estructuración curricular que
articule al tronco del plan académico una serie de asignaturas relevantes para el
desempeño integral del estudiante de acuerdo a sus preferencias o perspectivas
profesionales.
En este sentido el comité curricular del programa debe constituirse en un foro
participativo donde estudiantes y docentes se nutran de las diferentes posiciones
críticas, generando propuestas que aporten y consoliden una sana discusión
académica en beneficio del programa, sin ser ajenos a los lineamientos planteados
por las directrices académicas y el PEI.
Estrategias:





Establecer canales y mecanismos de comunicación adecuados entre los
diferentes estamentos, propiciando una positiva retroalimentación del
programa.
Promover una adecuada capacitación del cuerpo docente, dándole la real
dimensión al ejercicio de la docencia.
Incorporar el principio de flexibilidad, favoreciendo el proceso enseñanzaaprendizaje en los diferentes escenarios universitarios.
Generar espacios de discusión académica entre estudiantes, estudiantesdocentes y entre docentes.


29






Consolidar un banco de electivas de profundización que responda a las
necesidades y expectativas de formación del futuro profesional.
Fomentar la óptima formación en el
Repensar los motivos, procesos y consecuencias de la evaluación docente.
Estructurar y actualizar el banco de datos de egresados, generando redes de
información entre los mismos.

6.3. Cultura Investigativa.
El hombre es un investigador por naturaleza, lamentablemente en ocasiones la
formación tradicional ya sea en el hogar, el colegio o incluso en la misma universidad
puede afectar negativamente ese innato afán de búsqueda. Debido a lo anterior, el
programa de Microbiología, preocupado por la formación de sus estudiantes, ha
definido como uno de sus ejes fundamentales, el fomento de todos los tipos de
manifestación del proceso investigativo, promoviendo e incentivando la interacción
docente-estudiante dentro del mismo. Lo anterior se plantea entendiendo que la
investigación y la docencia deben conformar una unidad de acción para el
investigador, ya que es ésta la mejor manera de aportar al estudiante contenidos que
eleven su nivel académico; esta unidad permite al profesor reflexionar sobre sus
inquietudes intelectuales y científicas en la medida que investiga y traspasa parte de
esas inquietudes y conocimientos a un auditorio receptivo.
La Microbiología se ha constituido en un área disciplinar, generadora de
conocimiento, que es transversal a muchos otros campos, y en consecuencia, con
gran impacto en multitud de sectores de nuestra sociedad (alimentario, industrial,
salud, etc.). Esto conlleva a que muchos de los problemas del entorno y de la región
tengan una aproximación desde la Microbiología, lo cual debe verse reflejado en la
interdisciplinariedad de los equipos que aborden dichos problemas. De la misma
manera, la Microbiología tiene la capacidad de responder a preguntas básicas de
investigación, teniendo en cuenta su carácter disciplinar. El panorama previamente
expuesto se constituye en el marco de referencia para ubicar y definir el accionar del
programa en concordancia con su propia identidad, las necesidades de la región y del
país, y sin dejar de lado la responsabilidad social del mismo. En este sentido, el
programa ha canalizado sus esfuerzos en un único grupo de investigación, que
pretende consolidarse, y a través del cual se han definido cuatro líneas de trabajo, a
saber: Calidad e Inocuidad de Alimentos y de Agua Potable, Ciencia y Tecnología de
los Alimentos, Biotecnología, y Microbiología Ambiental. Estas líneas representan los
campos de acción a los cuales el programa apuesta, teniendo en cuenta las
consideraciones ya mencionadas. Uno de los aspectos más importantes para el
programa es la vinculación de los estudiantes a las líneas de trabajo por medio de
los semilleros de investigación.
El programa considera igualmente importantes tanto la investigación formativa como
la formal. La investigación formativa reviste fundamental importancia, ya que se trata


30

de la primera toma de contacto del estudiante con un problema, acorde con la
temática de la asignatura en la que se lleve a cabo tal actividad, el cual debe abordar
usando su creatividad, criterio y capacidad de organización y trabajo en equipo,
siempre bajo la constante orientación de un docente. Existen asignaturas en las
cuales el mecanismo del proyecto de aula ha sido esencial y complementa
adecuadamente la formación recibida a través de otras metodologías. El programa
debe generar los mecanismos adecuados para que los resultados de los mejores
proyectos de aula sean divulgados.
Con el fin de apoyar al programa en lo referente a las actividades propias de este
ámbito, la dirección y el comité de programa cuentan con el trabajo de coordinación
que el comité de investigaciones del programa lleva a cabo.
Estrategias:










Consolidar el grupo de investigación del programa como parte del eje de
desarrollo investigativo al interior de nuestra facultad.
Consolidar las líneas de investigación propuestas mediante la generación de
proyectos que respondan a estrategias de innovación científica y/o
tecnológica, y a las necesidades del entorno regional y nacional.
Estimular la creación y consolidación de semilleros de investigación, adscritos
a líneas de investigación.
Motivar a los estudiantes a participar activamente en la estructura
investigativa del programa y de la facultad.
Fortalecer los proyectos de aula en ciertas asignaturas clave, como
herramienta para el desarrollo de un sentido inquisidor en el estudiante.
Favorecer los espacios propicios para la socialización tanto de resultados de
proyectos de aula como de semilleros de investigación, así como para el
intercambio de pareceres entre pares.
Propiciar la formación de redes de cooperación con otros grupos de
investigación, a nivel institucional, nacional e internacional.
Vincular a profesionales de diferentes áreas dentro de la estructura
investigativa del programa fomentando la interdisciplinariedad al interior del
mismo.
Gestionar, en coordinación con la vicerrectoría de investigaciones,
convocatorias y convenios que permitan conseguir los recursos necesarios
para el adecuado desarrollo de los proyectos de investigación.

6.4. Proyección Social.
La construcción de procesos de desarrollo inicia con la necesaria interrelación entre
los distintos sectores de la sociedad. Escenarios como la academia ayudan a orientar
los procesos que repercuten en la comunidad y que facilitan la participación de las
personas en distintos escenarios para su formación integral. Es por ello que el


31

programa de Microbiología ha considerado su proyección social como parte
fundamental de sus ejes estratégicos, asumiendo que se trata de una
responsabilidad adicional a la responsabilidad social que implica por sí misma la
labor de formación. El objetivo último del programa es el de generar un impacto
positivo en el entorno local, regional y, porque no, a nivel nacional.
La imagen que proyecta una institución constituye hoy un elemento fundamental para
que ésta resulte visible ante la ciudadanía y para que, a partir de esa visibilidad, sea
mejor conocida y apreciada por aquélla. En este sentido, el programa de
Microbiología debe responder a los retos que se le presentan ante una comunidad en
la que, mediante la aplicación de la ciencia que se estudia, se tiene el potencial de
redundar en una mejoría de la calidad de vida de la misma. Por otra parte, la
búsqueda del acercamiento de la Microbiología al ciudadano del común es otro reto
que se asume como imperativo ya que es la base para conseguir impactar a la
comunidad. Teniendo en cuenta lo anterior el programa debe definir estrategias
adicionales al trabajo social de sus estudiantes, tales como la emisión de su propio
programa radial y la institucionalización de actividades como la “Feria de los
microorganismos” en las que se muestra el programa tanto a la comunidad
estudiantil como a la ciudadanía de la región.
Las actividades propias de éste ámbito de acción, son pertinentes al comité de
interacción social del programa, el cual cumple funciones de coordinación y
articulación de los procesos de proyección social con otros ámbitos.
Estrategias:










Redimensionar el trabajo social en el programa y reglamentar su accionar.
Definir y fomentar los campos de acción e impacto social del estudiante de
microbiología.
Fomentar la interacción de los estudiantes con la comunidad a través de los
proyectos de aula.
Difundir y dar a conocer el programa en la zona de influencia, mediante la
utilización de diversos medios de comunicación, tales como prensa, radio y
televisión.
Concientizar a la población sobre el beneficio potencial de la aplicación de
algunos principios básicos de la microbiología en la prevención de riesgos para
la salud pública.
Mediante la realización de eventos de diversa índole, difundir la microbiología
y aproximar el programa a la población de la zona.
Consolidar un portafolio de servicios que el programa pueda ofrecer tanto a la
comunidad como al sector productivo de la región.
Establecer lineamientos que generen cursos y programas de capacitación, que
beneficien diversos sectores de la población.
Consolidar el papel de agente dinamizador del programa en el entorno sociocultural inmediato, a través de nuestros pasantes y egresados.


32

6.5. Mejoramiento continuo.
La consolidación de un proyecto académico con proyección, y cuyo norte sea la
calidad educativa, requiere del compromiso y participación permanente de todos los
actores del mismo. En este sentido, la implementación y ejecución de un sistema de
mejoramiento continuo, se hace indispensable, así como la participación directa,
decidida y coordinada de toda la institución, entendiendo que la calidad educativa
debe ser ante todo un proceso de construcción social.
En el marco de una dinámica global que nos ubica en pleno proceso de transición
hacia economías basadas en el conocimiento, las universidades pasan a constituirse
en protagonistas y son la base impulsora de la inmersión de una nación en tal
dinámica. La asimilación de los conceptos de mejora continua aplicados en áreas
establecidas y estratégicas, en conjunto con elementos evaluativos y de certificación
nos presenta la oportunidad, como institución, de alcanzar elevados niveles de
satisfacción en la obtención de los objetivos propuestos.
Los procesos de autoevaluación implican una reflexión de la misma universidad y de
los programas acerca de su propio quehacer, las condiciones en las que se ofrece y la
proyección del mismo. Este ejercicio, debe generar un compromiso institucional que,
luego de determinar sus fortalezas y sus oportunidades de mejoramiento, debe
plasmarse en un documento que será el mapa de ruta del programa. Este plan de
mejoramiento nace del diagnóstico del programa y no debe limitarse a una
declaración de buenas intenciones sino que significa un compromiso del programa y
de la institución consigo misma y para con la sociedad. Debido a esto, dicho
documento debe tener mecanismos de seguimiento y de evaluación, que permitan
retroalimentarlo y tomar las respectivas acciones correctivas.
El programa de Microbiología ha contemplado dentro de su organigrama un comité de
autoevaluación, con el objetivo a apoyar a la dirección del departamento y coordinar
las actividades que se deriven de los procesos de mejoramiento continuo, además de
colaborar en el seguimiento del trabajo de otros comités. Adicionalmente, el comité
de autoevaluación se encarga de la consolidación del grupo focal de estudiantes, que
se constituyen en uno de los puentes de comunicación efectiva con la comunidad
estudiantil.
Estrategias:


Consolidar los procesos de autoevaluación y heteroevaluación como principal
herramienta de construcción del programa.


33








Aplicar adecuadamente las directrices y políticas institucionales
autoevaluación.
Proponer y renovar los mecanismos de difusión y retroalimentación de
políticas del programa y de los resultados del proceso de mejoramiento.
Llevar a cabo los procesos de discusión, actualización y socialización
proyecto educativo del programa.
Realizar un seguimiento periódico y una permanente retroalimentación
plan de mejoramiento del programa.
Establecer un cronograma de actividades de autoevaluación.
Consolidar el grupo focal de estudiantes.


de
las
del
del

34

8. Organigrama

CEPARIO

DEPARTAMENTO
DE
MICROBIOLOGÍA

PROGRAMA DE
MICROBIOLOGÍA
CENTRO DE
PREPARACIÓN
DE MEDIOS

Comité de
Autoevaluación y
Acreditación

Comité
de Programa

Comité de
Investigaciones

Comité de Trabajo de
Grado


ASAMBLEA DE
DEPARTAMENTO

Comité de Trabajo
Social


36

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