Los estudiantes del tercer grado de la secundaria Mahatma Gandhi propusieron implementar un laboratorio de tecnología en un salón abandonado de la escuela. Ellos imaginaron cómo transformar el salón sucio y vacío en un laboratorio funcional, aunque se enfrentaron a desafíos como conseguir fondos y ayuda. Finalmente, lograron superar los obstáculos y pusieron manos a la obra para convertir su visión en realidad.