upch generacion xx ensayo "Un maestro modelo" cynthia rueda ocaña
1. UNIVERSIDAD POPULAR DE LA CHONTALPA
CARRETERA HUIMANGUILLO-CARDENAS
MAESTRÍA EN EDUCACIÓN
CON ORIENTACIÓN EN DOCENCIA
XX GENERACIÓN
ASIGNATURA: FUNDAMENTOS FILOSÓFICOS DE LA EDUCACIÓN
CATEDRÁTICO: DR. EULER FERRER CÓRDOVA.
TEMA: UN MAESTRO MODELO BAJO LA CONCEPCIÓN DE
QUINTILIANO.
ALUMNA: CYNTHIA RUEDA OCAÑA.
FECHA: SEPTIEMBREDE 2018.
2. UN MAESTRO MODELO
“La educación debe ser una obra armónica del desarrollo humano”, celebres
palabras de Quintiliano en su conocida obra Institutio oratoria, la cual ha servido
de mucho historiadores, profesionales de la educación, filósofos, literatos,
abogados, etc; por su importante aportación de la roma contemporánea la cual
sigue vigente actualmente en cuanto a la pedagogía que nos propone como su
fundador.
Sus métodos se basan esencialmente en el trabajo y en la práctica. Una de
las características que el propone es la adaptabilidad, en su planteamiento no
existen métodos lineales, estrictos e inflexibles, está en contra de los preceptos
rígidos, esto lo analizo con una frase por él mencionada: “es propio de un orador
hacer suyo, si puede, lo que es óptimo en cada uno de los modelos”.
Uno de los principios que él tenía como máxima era la virtud; enseñó que
cada persona elige el camino donde se conduce pero siempre apuntando a las
enseñanzas más dignas; esto es una gran verdad, hoy en día yo considero que el
individuo es capaz de elegir como ha de conducirse en la vida, durante su trayecto
de vida tomará diversas decisiones que dirigidas por la virtud siempre resultaran
en algo positivo, por ello esta cualidad para mi es importante en el docente de hoy
en día.
Otra aspecto que caracterizó su enseñanza fue la utilización de recursos
para facilitar el aprendizaje: la metáfora para que la lectura sea amena, la vivencia
del aprendizaje, utilización de ejemplos históricos, o hechos naturales, y
prepondera la relación entre el profesor y alumno en un ambiente armónico y
afectivo.
Con este análisis puedo asegurar que la educación actual retoma muchos
de estos aspectos, por ejemplo dotar al estudiante de recursos diversos para que
facilite su acceso, ya sea materiales concretos, ayudas gráficas, aulas equipadas,
utilización de multimedia, etc, lo cual se hace indispensable ahora, otro aspecto la
transversalidad que se pretende en los nuevos modelos educativos, el hecho de
3. relacionar un contenido disciplinar con otras asignaturas y atraerlo a una
experiencia cotidiana, funcional y significativa, y por último la relación que se logra
establecer entre el alumno y el profesor, ya que actualmente se le da mucha
importancia a las habilidades emocionales y sociales del estudiante; si un
estudiante siente proximidad con su profesor, si siente que es importante es una
clase, que se le valora, que se reconocen sus logros, se pueden obtener mejores
resultados de aprendizaje.
En una ocasión Quintiliano mencionó que “la moral se había corrompido en
las escuelas”, esta preocupación, también debe ser la preocupación actual de la
educación en México y el resto del mundo, ya que la figura del profesor se ha
desvirtuado tanto, y ha pedido su lugar dentro de la sociedad como agente de
cambio y ejemplo, también porque algunos maestros no poseen al igual
competencias y cualidades para estar frente a las aulas. “Hay una primera culpa
en los maestros, que de buen grado retienen a los alumnos, a quienes tienen
como secuestrados, en parte por la codicia de sacarles unos menguados
honorarios durante el mayor tiempo posible”, Esto nos habla de que el profesor ha
perdido su misión y vocación o que nunca la tuvo, nos habla de un maestro sin
virtud.
Quintiliano no dejó de lado a los padres en esta cuestión, ya que también
les finca una responsabilidad, ya que muchas veces son ellos quienes ejercen
malos ejemplos en los hijos, lo llama “deleite sin sentido de padres ignorantes”,
actualmente podemos ver esto en nuestra sociedad, padres que no se involucran
ni comprometen en el proceso de enseñanza aprendizaje, que no conocen las
dificultades y potencialidades de sus hijos, quienes llegan a ser una influencia
negativa incluso por el estilo de vida que practican, le han dejado toda la tarea a la
escuela de formar ciudadanos, se nos hace referencia a que es en el hogar en
donde se instauran hábitos malos y costumbres poco provechosas y no en las
aulas.
4. Realmente no puedo dejar de citarlo ya que el leer su obra me ha llevado
profundizar en las cualidades de un buen maestro, ¡ojalá no corrompiéramos
nosotros, en nuestra propia persona, las costumbres de nuestros hijos! Desde muy
temprano desarreglamos la infancia con nuestra golosinas”.
Como respuesta a los problemas de la educación de su época, el gran
orador nos mostró el modo correcto de dirigir una escuela, y es que, si no tenemos
con claridad cuál es la buena escuela no podremos alcanzar metas dignas de un
buen ciudadano.
La siguiente cualidad a mencionar, es que el maestro debe ser un hombre de
bien, para que pueda formar a otro individuo; este pensamiento define para mi la
esencia de la verdadera vocación del maestro, todo intento fuera de esto resultará
en el fracaso de sus estudiantes.
Algunos consideran sus pensamientos como un ideal inalcanzable, pero
mas bien pienso que le son así aquel que no conoce el placer que da ver a tus
estudiantes convertirse en personas productivas, felices, logrando sus metas
personales, con un equilibrio emocional, tomando decisiones buenas basadas en
el humanismo, los valores y la verdad.
Yo considero que el hecho de que un maestro realice su labor con un amplio
sentido de la responsabilidad, que sea dedicado y que se preocupe
constantemente por reflexionar en sus prácticas pedagógicas los hace un maestro
de excelencia, pero eso reside en un conocimiento de su visión y misión de vida,
saber que lo que el haga impactará en muchas generaciones. A veces decimos,
ya no hay maestros dedicados, honestos, honrados, pero yo pienso que sí los hay,
y yo misma me considero en la búsqueda de mejorar cada día, porque se la
responsabilidad que tengo de impactar de manera positiva en mis alumnos, saber
que aquel chico que no logra sus aprendizajes porque solo se limita ver sus
barreras educativas y cambiar esa percepción con un simple vínculo afectivo, un
mínimo apoyo facilitador, tener confianza en tu alumno, es algo gratificante, es
algo que llena mi ser y me hace sentir que respondo al llamado de vida.
5. Estoy en contra de los castigos como Quintiliano, estoy a favor del desarrollo
de habilidades sociales que promuevan la comunicación asertiva, las relaciones
interpersonales, y que a través de las situaciones no tan positivas se pueda
promover en los estudiantes la resolución de problemas basados en los valores
universales, mismos que se ha ido perdiendo.
Por otro lado se menciona que las enseñanzas deben repetirse
frecuentemente, dándoles variedad, porque se entendía ya desde esa época que
no todos los alumnos aprenden de la misma manera y al mismo tiempo, cuando el
docente reconoce esto, hace de su labor un ejercicio enriquecedor de mejora toma
en cuenta las dificultades de sus alumnos, sus logros, sus potencialidades, sus
estilos de aprendizaje, la motivación por aprender, y a su vez todo esto permitirá
ofrecerles a los alumnos lo más adecuado.
Quintiliano defiende que cada persona desempeña una función determinada
en el mundo, que es transmitida de generación en generación, otra idea es que los
docentes deben conocer cuáles son las capacidades de cada discípulo (o
alumno), e instruirles dentro de esos valores. Resuelve que deben acogerse a
aquello que sólo pueden desempeñar, que por naturaleza está fijado para ellos;
pero acepta la excepción de que si hay alguien que lucha más por lo que quiere,
que se le ayude a conseguir aquello que desea; por lo que dicho discípulo debe
ser instruido tanto en aquello que desea, como en lo indicado por su ingenio, y
hacer que sea notablemente sobresaliente en uno de los dos contextos o incluso
en ambos, según las posibilidades de cada uno, esto es algo super interesante en
las prácticas inclusivas que todo buen docente debe tener presente, y más con los
alumnos que presentan necesidades educativas especiales, quienes presentan
dificultad de consolidar ciertos aprendizajes debido a factores múltiples, pero su
deseo de pertenencia, de sentirse como el resto de sus compañeros los lleva a
luchar por alcanzar aprendizajes que en su mayoría la sociedad creería que no
conseguiría. El buen maestro debe ser un maestro inclusivo, integrador, y
potenciador de experiencias significativos.
6. En mi opinión creo que es muy importante que los docentes tengan
conciencia de los límites y posibilidades de sus alumnos, pero pienso que
cualquier persona puede formarse en aquello que desee, sin necesidad de que su
naturaleza lo dicte o no, ya que actualmente, sólo se forman aquellos que lo
desean.
Si una persona lleva a cabo una acción, que no le sale por iniciativa propia,
sino que la realiza por la influencia de su ambiente, pues esta no va a tener la
misma motivación, que si estuviera haciendo algo, que en realidad le gustara
realmente. Un ejemplo de ello, es lo que hoy en día se ve que está ocurriendo con
la educación. Cada vez hay menos personas que quieran estudiar, y la gran
mayoría de ellos acuden a las instituciones escolares por la influencia, que sobre
ellos ejercen sus padres y familiares, y en algunos casos, hasta los amigos
(aunque en menor medida). Pero estos al acudir a clases y no hacer nada por la
falta de motivación que sienten hacia ello, se convierten en los “problemáticos”.
Para concluir tomare la concepción del orador expuesto aquí, esa idea del
maestro modelo con altos ideales morales, éticos, espirituales, una educación más
humana, más libre, mas moral, más profunda, significativa, de ese modo mejorar
la sociedad tan desgastada y deteriorada e que vivimos.
En hora buena, si alguien me pregunta ¿Qué es ser un maestro modelo?
quiero responder, un maestro modelo es aquel lleno de virtud, con alto sentido de
humanismo, responsabilidad, honesto, esforzado, amoroso, es ser un maestro
como el que intento ser cada día, no es aquel que tiene maestría, es aquel en
quien sus estudiantes se cautiva a mejorar y ser un buen ejemplo.
BIBLIOGRAFÍA
http://quintilianolapedagogia.blogspot.com/
Marco Fabio Quintiliano: la educación del ciudadano romano – Dialnet
https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/3028555.pdf
Guillermo Soriano Sancha. P. 107-124.