1. Brecha digital y educación
permanente
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Las oportunidades que crea la sociedad del
conocimiento tienen la paradoja de abrir una
brecha digital.
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Porque no todos son competentes para usar
las oportunidades.
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No son oportunidades realmente democráticas
sin competencias.
2. Las competencias y el trabajo
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Las competencias le permiten al trabajador
personalizar su desempeño laboral.
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Sin ellas, es como cualquier otro y, por tanto,
sustituible.
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Y le permite innovar, creando nuevas
oportunidades que se añaden a las que ya
existían.
3. Por qué adquirir competencias
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Tener competencias permite defender el puesto
de trabajo sin recurrir a un “los nuestros” frente
a “los otros”.
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También significa tomar mejores decisiones en
función de contexto, antecedentes y objetivos.
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Y también poder aplicarlas a contextos distintos
del laboral.
4. Los profesores no estamos
preparados para liderar el proceso
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La mayoría de los docentes estamos al otro
lado de la brecha digital
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A pesar de que nuestro trabajo es el de
transferir información
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No estamos acostumbrados a usar la
información, sólo a adquirirla y transferirla.
5. Superar la brecha tiene recompensa
personal
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La mayor capacidad de comunicación es parte
de la cara amable de superar la brecha.
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Aumenta, también, la visibilidad de quien logra
hacerse “residente digital”.
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Y le ofrecen nuevas formas de ocio.
6. Saltar la brecha, sin competencias, no
es solución
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La abundancia de información, sin saber qué
hacer con ella, lleva a desinformación
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Los objetivos pueden lograrse, ahora, de
múltiples modos, por lo que puede aumentar al
ineficiencia
7. Qué saber hacer
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Aprender a aprender
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Buscar, seleccionar, reelaborar, transferir la
información
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Crear productos relevantes, útiles, ajustados a
los objetivos
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Actuar con conciencia crítica, conociendo las
consecuencias e implicaciones
8. Evolución de las herramientas
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Son muchas las herramientas en el mundo
digital
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No hay que manejarlas todas
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Sólo las que tengan sentido, las que hagan
algo que pueda explicarse