3. Este trabajo se hace con el fin de conocer sobre el renacimiento,
la reforma, el absolutismo, el liberalismo, la ilustración, el
nacionalismo y el socialismo y por ultimo el imperialismo, saber
en que consiste y cuales son las bases de dichos términos.
Introducción
En esta cartilla veremos que son y como se relacionan los
términos con la política cual es su función y cuales son sus
4. características que como funciona cada uno de ellos y en que
consistieron cada uno de ellos.
Renacimiento
Renacimiento, periodo de la historia europea caracterizado por un
renovado interés por el pasado grecorromano clásico y especialmente por
su arte. El renacimiento comenzó en Italia en el siglo XIV y se difundió
por el resto de Europa durante los siglos XV y XVI. En este periodo, la
fragmentaria sociedad feudal de la edad media, caracterizada por una
economía básicamente agrícola y una vida cultural e intelectual dominada
5. por la Iglesia, se transformó en una sociedad dominada progresivamente
por instituciones políticas centralizadas, con una economía urbana y
mercantil, en la que se desarrolló el mecenazgo de la educación, de las
artes y de la música
El término ‘renacimiento’ lo utilizó por vez primera en 1855 el historiador
francés Jules Michelet para referirse al “descubrimiento del mundo y del
hombre” en el siglo XVI. El historiador suizo Jakob Burckhardt amplió este
concepto en su obra La civilización del renacimiento italiano (1860), en la
que delimitó el renacimiento al situarlo en el periodo comprendido entre
el respectivo desarrollo artístico de los pintores Giotto y Miguel Ángel, y
definió a esta época como el nacimiento de la humanidad y de la
conciencia modernas tras un largo periodo de decadencia
Durante el Renacimiento, las ciudades europeas crecieron en poco tiempo,
debido entre otras causas al desarrollo del comercio y las actividades
industriales. Este hecho provocó el surgimiento de los burgos, ciudades
dedicadas al comercio, como Génova y Venecia.
A medida que las ciudades crecieron, aumentó la población y también el
número de artesanos y comerciantes o burgueses.
Este nombre que sirvió para designar a los habitantes de las ciudades,
también sirvió para nombrar a la nueva clase que surgió en este periodo:
la burguesía.
La burguesía estaba formada por los comerciantes que poseían talleres en
los que trabajaban artesanos humildes. Esta clase impuso nuevas formas
de vida y cambios en las costumbres, que a la larga terminarían con el
sistema feudal.
En esta época, no había mucho dinero en circulación y las monedas
variaban de un pueblo a otro. Los comerciantes se organizaron
en gremios para resolver esos problemas.
Los gremios de mercaderes unificaron la moneda, construyeron bodegas
para almacenar las mercancías y crearon bancos para guardar las
6. ganancias, además de que controlaban las rutas comerciales y la
distribución de los productos.
CONFLICTOS POR LAS RUTAS COMERCIALES
Las rutas comerciales tradicionales guardaban muchos peligros,
especialmente las que comunicaban a Europa con Oriente. Al principio,
los bizantinos controlaban esas rutas, pero con la caída de Constantinopla
en poder de los turcos, y el cierre de las vías comerciales directas, el
tráfico de productos se complicó y la mercadería se encareció aún más.
Debido a ello, los europeos comenzaron a buscar nuevos caminos para
evitar negociaciones y enfrentamientos con los turcos.
Esto llevó a los descubrimientos que se materializaron en dos rutas: la
portuguesa, que daba vuelta a África para llegar a la India; y la española,
que pretendió llegar al Oriente por el Occidente, permitió encontrar el
continente americano.
Marco Polo viajó a Oriente para establecer un comercio directo entre
Europa y China. Atravesó Asia y llegó hasta el Extremo Oriente. Después
de 24 años de su partida regresó a Italia, donde dio a conocer el relato de
sus aventuras y viajes.
Por su parte Cristóbal Colón emprendió el viaje que habría de cambiar la
concepción sobre el mundo y el hombre.
EL ARTE RENACENTISTA
El Renacimiento en las artes surgió en Italia y luego se difundió por
Europa. Inspirados en las obras grecolatinas, los artistas del siglo XV al
XVI rompieron con la tradición medieval, creando nuevas formas de
expresión en las distintas ramas del arte (pintura, escultura, arquitectura
y literatura). Atendiendo la nueva visión del mundo (más científica y
menos religiosa), los artistas colocaron en el centro de su obra al hombre
y a la naturaleza.
7. Para los pintores renacentistas, el hombre fue el principal objetivo del
arte; al cuerpo humano desnudo se le consideró el ideal de belleza.
Muchos de los temas de la pintura son profanos; abundan las
representaciones de personajes mitológicos.
El ideal de belleza femenina se refleja en la descripción de Melibea,
protagonista de La Celestina de Fernando de Rojas.
La arquitectura renacentista buscaba la proporción, la armonía, el
equilibrio de todos sus elementos y evitaba el exceso de decoración.
Uno de los elementos clave fue el uso de cúpulas en las iglesias; la puerta
principal de los edificios ocupaba el centro de la fachada; algunas
construcciones tenían frisos y columnas que imitaban el estilo grecolatino.
8.
9. Reforma
es un cambio de situación en un orden, régimen u objeto sin afectar a
rasgos fundamentales que puedan ser transformados en otros distintos.
Dentro de una referencia establecida se emplea para dar idea de
restauración, corrección, enmienda, puesta en orden, innovación o mejora
de alguna cosa, según el Diccionario de la Real Academia
Española (Barcelona, 1951). en todo caso, es una alteración que no
perturba o sustituye el orden social y político establecido, tiene, por tanto,
tendencia a corregir situaciones parciales defectuosas.
Sea cual fuere la aceptación dominante, aplica la reforma este sentido de
cambio no sustancial, conseguible dentro de un sistema social dado y con
los medios que el orden institucional establecido tiene para conseguir los
cambios sociales, económicos o políticos, y de ahí con frecuencia en las
constituciones existe un apartado dedicado a las reformas de la misma,
aunque sus cambios en realidad histórica suelen producirse por medios y
métodos convulsivos.
Entre revolución y reforma parece existir una cuestión de grado. quizá sea
mejor afirmar que se trate de dos fenómenos distintos, aunque casi
siempre conexos, puesto que en muchas ocasiones la falta de aquellos
resortes reformadores pueden producir auténticas revoluciones.
Reforma en la política es un conjunto de medidas ordenadas a modificar a
fondo una institución respetando sus líneas fundamentales y sin que se
produzca una ruptura de continuidad. El alcance de las modificaciones
buscadas por la reforma puede ser muy variado; pero en todo caso
implica una transformación a fondo de la institución. Con lo que se
distingue de la evolución normal que implica una transformación
continua pero sin una intervención a fondo que marque una inflexión en
la línea evolutiva.
10. Absolutismo
El absolutismo es una forma de gobierno en la cual el poder reside en
una única persona, a la cual deben obedecer todas las demás. Abarcó los
siglos XVI, XVII, y XVIII, cuando la influencia política de
la nobleza declinó, aunque manteniendo el régimen feudal que mantenía
su preponderancia en la sociedad de la época. La teoría del derecho divino
del poder real o del absolutismo teológico nació en Francia en el último
cuarto del siglo XVI y en el ambiente de las guerras de religión. Los
cuatro caracteres esenciales de la autoridad real es la de ser sagrada,
paternal, absoluta, racional, tienden a regirse los principales estados
europeos en la Edad Moderna y en el que la máxima autoridad le ejerce
en forma arbitraria el Rey. Sus principales características son:
El poder esta concentrado en el Rey, quien lo recibió y transmite por vía
hereditaria, sus colabores inmediatos y sus familiares forman partes de la
corte. Dentro de esta, o entre quienes el considere mas capacitados en el
reino, escoge sus ministros, a los que nombra y remueve a su antojo,
estos le ayudan a controlar el comportamiento de los ciudadanos, el
desarrollo económico del país, administrar el tesoro publico, a dirigir los
ejércitos, a mantener las relaciones internacionales entre otros.
No hay un ordenamiento de leyes escritas, se impone la ley
consuetudinaria y los dictados arbitrarios del monarca. El es el único
legislador, el es la ley.
Existen organismos colegiados que solo son llamados, siempre al antojo
del rey, para consulta, no para tomar dediciones libremente. Tales como
las cortes españolas, los estados generales franceses y el parlamento
ingles, que representa a las comunidades municipales (en España), a la
nobleza, el clero y el estado llano (en Francia) y a los nobles y al pueblo
(en Inglaterra).
Hay tribunales centrales y provinciales (como los parlamentos de Francia,
muy diferentes al parlamento ingles), pero sus dictados siempre están
sometidos a la ultima palabra del Rey.
Existen comunidades municipales (los ayuntamientos españoles, las
comunas francesas), pero estas están siempre supeditadas al poder real.
Los ciudadanos, sometidos a una profunda división de clases, carecen de
derechos. En consecuencia, no se les consideran iguales ante la ley y el rey
11. puede dictar medidas de perjuicio suyo sin derecho a defensa ni a pedir
explicación (encarcelamiento, nuevos impuestos, prohibición de
manifestar públicamente sus ideas, llamadas a las armas entre otros).
CRISIS DEL ABSOLUTISMO
En Francia, el absolutismo lucía claramente sus excesos. El poder se
hallaba en manos de Luis XVI. En 1778, se descompone el absolutismo y
nacen las ideas liberales que proceden de la Revolución Francesa. Luis XVI
se vio obligado a convocar a la cámara de representantes de la nación,
conocida como los Estados Generales. Este órgano se convirtió en
Asamblea Constituyente. El 14 de julio de 1789 el pueblo parisino asaltó
La Bastilla y retuvo a la familia real en el palacio de las Tullerías. Luis juró
obediencia a la nueva Constitución francesa en julio de 1790, pero siguió
conspirando en contra del gobierno revolucionario.
El 3 de septiembre la Asamblea Constituyente aprobó la Constitución. Por
primera vez en la historia de la humanidad se definían por escrito los
derechos y obligaciones de gobernantes y gobernados, y se organizaba el
poder del Estado. En Francia se conservó la monarquía que pasó de
absolutista a parlamentaria. El rey obtuvo el derecho del veto, o sea, la
posibilidad de oponerse a las leyes adoptadas por la Asamblea. El cuerpo
legislativo era unicameral. Aparece una división de poderes (ejecutivo,
legislativo y judicial).
El 21 de septiembre de 1792, al iniciar sus sesiones, la Convención
Nacional declaró la abolición de la monarquía y la proclamación de la
República. Así Francia se convirtió en el primer Estado Nacional
republicano de las potencias europeas.
Aunque esta primera República francesa no duró mucho, su repercusión
en la sociedad francesa y en general en la europea fue continua. Aunque
estos nuevos sistemas se basaban en la soberanía popular, es decir, en el
poder del pueblo; en realidad estuvieron controladas por la burguesía rica,
que excluyó de la participación política al resto de la población.
La monarquía parlamentaria, tal fue la que se implementó en Francia, fue
más beneficiosa que la anterior. Esta nueva monarquía produjo que
12. trocaran los nobles por la burguesía rica, siendo esta la clase social más
influyente en el gobierno. Pero dejando de lado que las clases más bajas
no tuvieran demasiada participación, el Estado ya no podía cometer los
excesos de antaño y se puso fin a los privilegios de la aristocracia y el
clero.
Lo cierto es que la revolución marcó el final definitivo del absolutismo y
dio a luz a un nuevo régimen donde la ciudadanía, y en algunas ocasiones
las masas populares, se convirtieron en la fuerza política dominante en el
país.
14. Liberalismo es una ideología que se establece de acuerdo con el supuesto
del derecho natural en el cual los hombres nacen libres e iguales y deben
permanecer a lo largo de su vida de esta manera.
El Liberalismo Político supone un sistema donde el Estado resguarde el
bien público y la vida e intereses de los ciudadanos, respetando a las
minorías y manteniendo las libertades civiles y esto lo proporcionaría un
gobierno representativo y asentido, basado en el principio del freno de los
poderes y la adecuación a la Constitución y a las Leyes apoyadas en la
voluntad general del pueblo como soberano.
Liberalismo Político: Elementos Básicos.
Ideas Fundamentales.
Los poderes de los ciudadanos y su representación.
Constructivismo Político.
Liberalismo Político: Tres ideas fundamentales.
La idea de un consenso traslapado. Prioridad de lo justo e ideas del bien.
La idea de la razón pública.
El Marco Institucional.
La estructura básica como objeto.
Las libertades básicas y su propiedad.
Aboga principalmente por:
* El desarrollo de las libertades individuales y, a partir de ésta, el progreso
de la sociedad.
* El establecimiento de un Estado de Derecho, en el que todas las
personas, incluyendo aquellas que formen parte del gobierno, están
sometidas al mismo marco mínimo de leyes.
15. Sus características principales son:
* El individualismo, que considera a la persona individual como
primordial, por encima de todo aspecto social o colectivo.
* La libertad como un derecho inviolable que se refiere a diversos
aspectos: libertad de pensamiento, de expresión, de asociación, de prensa,
etc., cuyo único límite consiste en la libertad de los demás, y que debe
constituir una garantía frente a la intromisión del gobierno en la vida de
los individuos.
* La igualdad entre las personas, entendida únicamente en lo que se
refiere a diversos campos jurídico y político. Es decir, para el liberalismo,
todos los ciudadanos son iguales ante la ley y para el Estado.
* El respeto a la propiedad privada como fuente de desarrollo individual,
y como derecho inalterable que debe ser salvaguardado por la ley y
protegido por el Estado.
16.
17. Ilustración
La Ilustración fue una época histórica y un movimiento cultural e
intelectual europeo –especialmente en Francia e Inglaterra–que se
desarrolló desde fines del siglo XVII hasta el inicio de la Revolución
francesa, aunque en algunos países se prolongó durante los primeros años
del siglo XIX. Fue denominado así por su declarada finalidad de disipar las
tinieblas de la humanidad mediante las luces de la razón. El siglo XVIII es
conocido, por este motivo, como el Siglo de las Luces.
Los pensadores de la Ilustración sostenían que la razón humana podía
combatir la ignorancia, la superstición y la tiranía, y construir un mundo
mejor. La Ilustración tuvo una gran influencia en aspectos económicos,
políticos y sociales de la época. La expresión estética de este movimiento
intelectual se denominará Neoclasicismo.
La Ilustración (Lumières, en francés; Enlightenment, en inglés;Illuminismo,
en italiano; Aufklärung, en alemán),2 en frase de uno de sus más
importantes representantes, D'Alembert, «lo discutió, analizó y agitó todo,
desde las ciencias profanas a los fundamentos de la revelación, desde la
metafísica a las materias del gusto, desde la música hasta la moral, desde
las disputas escolásticas de los teólogos hasta los objetos del comercio,
desde los derechos de los príncipes a los de los pueblos, desde la ley
natural hasta las leyes arbitrarias de las naciones, en una palabra, desde
las cuestiones que más nos atañen a las que nos interesan más
débilmente». Esto mismo nos indica que, más que el contenido mismo de
sus doctrinas, lo original del movimiento fue la forma de pensamiento y
valoración.
Según el teórico marxista Lucien Goldman, la Ilustración puede ser
definida como «una etapa histórica de la evolución global del pensamiento
burgués». Como tal, insertaría su filiación doctrinal en el Renacimiento y,
especialmente, en las corrientes y empiristas del s. XVII (de Descartes,
a Locke, pasando
por Bacon, Bayle, Galileo, Grotius, Hobbes,Leibniz, Newton, Spinoza, o
los libertinos), y basa su posibilidad sociológica de desarrollo en las
revoluciones políticas neerlandesa e inglesa, en el empuje de la burguesía
y en las transformaciones económicas en gestación, apoyadas en una
coyuntura en alza, que desembocarán en la revolución francesa.
18. Retrato de cuerpo entero de Jovellanos, pintado por Francisco de Goya y
Lucientes en 1798, considerado uno de los más emblemáticos personajes
de la Ilustración española. Este intelectual español accedió al cargo de
ministro y emprendió reformas que no llegaron a consolidarse. En el
fondo se aprecia una estatua de Minerva, diosa de la sabiduría, que parece
estar "bendiciéndole".
Desde Gran Bretaña, donde algunos de los rasgos esenciales del
movimiento se dieron antes que en otro lugar, la Ilustración se asentó
en Francia, donde la anglofilia fue difundida por Voltaire, y produjo aquí
su cuerpo ideológico, el enciclopedismo, y sus más representativas
personalidades (Montesquieu, Diderot, Rousseau, Bufón, etc.); también dio
sus frutos, en ocasiones más o menos autónomamente, pero en la mayoría
de casos dependientes de Gran Bretaña y, sobre todo, de Francia, en otras
zonas europeas (Países Bajos, la península italiana y la ibérica,
el conglomerado germánico, Polonia, Rusia, Suecia, etc.) o en sus colonias
americanas; frutos condicionados por el grado de desarrollo ideológico y
sociopolítico adquirido en el momento de lanzamiento de la nueva
ideología y por el proceso interno seguido a lo largo de su
desenvolvimiento.
La Ilustración en España
Artículo principal: Ilustración en España
En España, la Ilustración coincidió con los reinados de Fernando
VI y Carlos III. Si bien la decadencia profunda en que se encontraba el
país en el punto de partida obstaculizó una posterior eclosión, el auge
dinámico de algunas de sus zonas geográficas (especialmente Cataluña) a
lo largo del período y la actuación coadyuvante (aunque tímida) desde el
poder político facilitaron la aparición de un nutrido y valioso grupo de
ilustrados
(Cabarrús, Cadalso, Campomanes, Capmany,Cavanilles, Feijoo, Hervás y
Panduro, Jovellanos, Mutis, etc.) condicionado, no obstante, por el arraigo
y la preponderancia del pensamiento teológico tradicional. La creación de
las Reales Academias de la Lengua, de la Historia, de la Medicina o del
Real (actual Museo Nacional de Ciencias Naturales), fueron algunos de los
logros de la Ilustración española.
La Ilustración en Hispanoamérica
A Hispanoamérica llegan las ideas de ilustración a través de la metrópoli.
19. En los ámbitos de la política y la economía, las reformas impulsadas por
el despotismo ilustrado a finales del reinado de Fernando y durante el de
su sucesor Carlos III tenían por objeto reafirmar el dominio efectivo del
gobierno de Madrid sobre la sociedad colonial y contener o frenar el
ascenso de las elites criollas.
Las autoridades españolas procedían a una explotación más sistemática y
profunda de las colonias. Procuraban, además, fortalecer y aumentar la
marina de guerra y establecer unidades del ejército regular español en las
diversas regiones de América.
En la Nueva España (México), en el ámbito de los colegios de
la Compañía de Jesús, vemos surgir un importante grupo de científicos y
filósofos ilustrados, encabezados por José Rafael Campoy , que defienden
una clara separación entre la filosofía y las ciencias naturales, una mayor
especialización en el estudio científico y una simplificación en el método
de la enseñanza filosófica, evitando las sutilezas silogísticas, así como la
sumisión incondicional a las autoridades. En este grupo de pensadores
que trabaja principalmente en la Ciudad de
México, Tepotzotlán, Guadalajara y Valladolid (Morelia), destacan el
historiador Francisco Javier Clavijero , que emplea un método histórico
sistemático y sorprendentemente moderno; el filósofo Andrés de Guevara
y Basoazábal (1748-1801), que se basa en Bacon, Descartes y los censistas
para plantear la necesidad de una filosofía moderna, justificar el método
inductivo y experimental, y denunciar el abuso del método deductivo; y
principalmente Juan Benito Díaz de Gamarra y Dávalos , crítico de la
escolástica y defensor de la ciencia y de la modernidad, cuyo eclecticismo
ilustrado está principalmente regido por los valores del buen sentido, la
racionalidad, la tolerancia y la utilidad para el hombre.
En el sur del continente, el pensamiento ilustrado tuvo un primer gran
empuje en la Real Audiencia de Quito mediante la llamada Escuela de la
Concordia, fundada en la ciudad de Quito por el Dr. Eugenio Espejo en
1791, y a la cual pertenecían nobles de la élite criolla y profesionales
mestizos. Los pensamientos y debates surgidos en la Escuela de la
Concordia plantaron las primeras semillas de nacionalismo e
independencia de Sudamérica, ya que de a partir de varios sucesos
ocurridos con sus diferentes miembros, la ilustración se propagaría hacia
el resto de territorios de los virreinatos de Nueva Granada y Perú.
20. Nacionalismo y socialismo
Nacionalismo y socialismo son dos opciones doctrinarias e ideológicas con
marcadas diferencias y coincidencias. En el Perú de estos últimos años las
condiciones han puesto en las agendas de ambos: objetivos, metas y
21. tareas comunes. Esa es la razón del apoyo que le brindan las fuerzas
socialistas al gobierno de Ollanta Humala, y, que no compromete en
absoluto, la independencia política ni la identidad de quienes se han
reafirmado, cuando el viento neoliberal arreciaba, en su “filiación y su
fe”.
El nacionalismo como movimiento y teoría social surgió a finales del siglo
XVIII, aspiraba a crear una comunidad independiente, con un Estado
autónomo. Cualquier análisis serio que se haga del nacionalismo tendrá
que diferenciar entre aquél que se dio en los países avanzados y aquel
que emergió en sociedades dominadas por imperios antiguos o modernos
y que convirtieron a los pueblos en colonias, semi - colonias o neocolonial.
El nacionalismo de los criollos que emprendieron la lucha por la
independencia fue la expresión de una voluntad autonomista, que
aspiraba emancipar el país. Ya sabemos que la fuerza de los imperios
terminó con esos sueños. Las burguesías nativas nunca estuvieron
interesadas en construir una nación. Es más, a su condición de socia
menor de los intereses económicos de los imperios (inglés primero y
norteamericano después), unió su “superioridad” de etnia y de cultura,
con el que ahondó las diferencias y hizo de la “nación” una ficción.
El nacionalismo de los sectores populares del Perú de estos tiempos se
propone, de manera legítima, a la realización de una nación desarrollada y
a terminar con las enormes desigualdades existentes. Para ella han creado
movimientos políticos. El caso más caracterizado en estos últimos tiempos
es el del Partido Nacionalista de Humala y de su bloque electoral Gana
Perú, con el que llegó al gobierno.
El socialismo aparece en el siglo XIX. Se caracteriza porque tiene una
teoría basa en la fusión del socialismo francés, la economía política inglesa
y la filosofía clásica alemana, y un método científico para estudiar e
investigar la realidad. Sobre esa base, en cada país opera de manera
particular, por eso Mariátegui, conforme avanzó en el estudio de la
sociedad de su tiempo fue descubriendo que el Perú era “una nación en
formación” y que había que “peruanizar el Perú”. Un socialista como
Mariátegui no ignoró el problema nacional.
22. Los socialistas son los que con mayor rigor, aplicando el método dialéctico
materialista, han estudiado las sociedades y analizado las particularidades
de las sociedades desarrolladas y atrasadas. El socialismo tiene la ventaja
de contar con herramientas teóricas y prácticas, para estudiar e investigar
el estado de las sociedades como también los medios prácticos para
actuar en ellas. Los primeros y los segundos se fusionan en la base
doctrinaria, en el Programa, en la Estrategia y, por cierto, en la
organización, distinta según sus objetivos y sus metas.
Se entiende mejor entonces el tema de las coincidencias y las diferencias
entre nacionalistas y socialistas. No hay un abismo que los aísla de
manera absoluta pero no son lo mismo. La neurosis de la derecha cuando
confunde deliberadamente a uno y otro, no refleja sino su ignorancia, o
su mala fe, o las dos cosas juntas. Nacionalistas y socialistas peruanos
luchan por el cambio y con ello no hacen más que sintonizar con las
aspiraciones de millones de peruanos, que aspiran a una sociedad
desarrollada y justa.
Son los socialistas los que sostienen que aún cuando el modelo cambie, es
en el sistema capitalista donde se conciben todas las lacras humanas:
desde la violencia cotidiana y “apolítica” hasta la explotación irracional,
que es una forma descarada de violencia. El delito de los socialistas y de
los marxistas no es que lo digan, sino que lo callen. El silencio por
cálculo y “prudencia”, que termina haciendo concesiones, no es muestra
de integridad, de consecuencia y de ética.
Los socialistas y los marxistas trazan su táctica concordante con la
realidad y con el apoyo de la ciencia. No hay otro modo de entender el
programa del nuevo curso, que es un conjunto de reformas para el
periodo y coherentes con el grado de correlación de fuerzas. Ya se ha
señalado que es urgente y viable, una nueva república, una nueva
Constitución, un nuevo gobierno.
Entendemos que la Hoja de Ruta de Gana Perú, ahora gobierno, es
también una propuesta de reformas, una breve estación del largo camino
que debe emprender el pueblo, en marcha hacia su plena realización. Más
aún, la validez y el rol de la Hoja de Ruta como una contribución a los
sectores democráticos del país, requiere de la consecuencia de quienes
son sus creadores, mentores y gobernantes. .
23. El gran ideal es el logro de una sociedad basada en la justicia social, en el
bienestar pleno, en la concreción de una sociedad que se base en el
respeto a la dignidad humana. Pero, llegar a esa etapa requiere un largo
periodo, y en sociedades como la nuestra, donde el capitalismo
monopólico domina a los sectores populares e incluso a sectores del
empresariado nacional, que se arruinan con este modelo, la unidad de los
sectores populares incluye también a sectores sociales de la burguesía
nacional.
Tras veinte años de aplicación del modelo neoliberal, lo que éste puede
exhibir, en el mejor de los casos, es su crecimiento de las cifras
económicas, que tuvieron en el alza de los precios de los minerales un
factor externo favorable; sin embargo, este crecimiento no influyó
significativamente a favor los niveles de vida de los pueblos. Se han
logrado cifras macroeconómicas asombrosas, pero no se ha podido
superar la pobreza y el estado endémico de los pueblos. Por experiencia
propia, el pueblo de a pie va entendiendo algo elemental de los procesos
productivos: no solo hay que mirar el crecimiento, sino también la forma
de distribución.
Según el Informe 2010, del PNUD, que toma como base de análisis el año
1993, el Índice de Desarrollo Humano del país fue de 0,5938 y el Índice
de Densidad del Estado fue de 0, 4838. Sin embargo, como consecuencia
de una visión excluyente del régimen turno y del modelo, hay lugares
como Lima, cuyas cifras están por encima del promedio nacional, 0,7509
de IDH y 0,7745 IDE. En cambio, Cajamarca, está muy por debajo de ese
promedio, 0,4505 de IDH y 0,1740 de IDE, lo mismo ocurre con
Amazonas quien muestra 0,4678 de IDH y 0,1886 de IDE. Esas cifras no
se han revertido.
Cambiar esa tendencia que en mayor o menor medida se ha mantenido a
lo largo de las dos décadas de aplicación del modelo neoliberal, demanda
de un cambio jurídico. La Constitución que hoy tenemos y por la que
sienten veneración fanática los fujimoristas, los inversionistas y lobistas,
que han encontrado el camino “legal” hacia el paraíso de la sobre
ganancias y la riqueza ilícita, tiene que cambiarse. En esa necesidad
reposa una coincidencia más entre nacionalistas y socialistas; éste se nutre
del proyecto político que en el Perú representa José Carlos Mariátegui,
fundador del socialismo y fundador del Partido.
24. Los nacionalistas aspiran también a un cambio, pero lo que vemos hasta
ahora es que las reglas de juego claves en la vida del país, las sigue
imponiendo el poder monopólico. Podría argumentarse que las
concesiones que hace es una cuestión táctica. Podría ser. Pero no es un
buen ejemplo para un pueblo que lo eligió porque optó por el cambio,
por la culminación del saqueo de nuestros recursos nacionales, por la
defensa de nuestra soberanía, por la regeneración moral, por la
descentralización, por una educación pública de calidad, por la
revalorización del magisterio y el respeto a los trabajadores. Estos temas
son, según como los trate el gobierno, los que juntarán o separarán a
nacionalistas y socialistas.
26. El imperialismo es la dominación política de un Estado sobre varios otros
para establecer una hegemonía política, económica, cultural, muchos
ejemplos existen en el transcurso de los siglos: el imperio de Asoka en la
India, que se extendió desde Afganistán hasta Indonesia; Hasta el siglo
XIX, Asoka era simplemente un nombre más en las geneologías inventadas
de los reyes indios del periodo budista, varios eruditos europeos de la
época también tradujeron relatos budistas de la literatura india. Estos
relatos mostraban las doctrinas budistas, así como las historias
y biografías legendarias de la doctrina. En estas fuentes budistas
procedentes de Ceilán, Tíbet y China presentes en relatos como el Divia
avadana, el Ashoka avadana, el Majá vamsha y otros, aparecía la figura de
un gran rey Asoka. A causa de la existencia de varias historias de este tipo
consideradas de poco rigor histórico, ya que se creían procedentes de
la cultura popular, se tomó a la figura de Asoka como legendaria y no se
le dio credibilidad. (Ver anexo 1)
La historia habitualmente lo describía como a un príncipe cruel que
asesinó a sus hermanos para ascender al trono, pero que tras su
sangrienta conquista de Kalinga (en la costa este de la India, actualmente
en el estado de Orissa), Asoka se convirtió en un budista pacifista, y
contribuyó a la difusión del budismo, reinando desde ese momento de
una manera justa y pacífica. H. G. Wells, (1989) La historia del mundo
nos explica:
Tal fue Ashoka, el más grande de los reyes. Él fue de lejos un avanzado a
su época. No dejó ni un príncipe ni una organización de hombres para
continuar su trabajo, y a un siglo de su muerte los grandes días de su
reino se habían convertido en un recuerdo glorioso en una India
descompuesta y decadente.
La interpretación que se hizo en un primer momento es precisamente la
que H. G. Wells muestra en este fragmento: que Asoka había sido un
avanzado a su tiempo y un gran devoto del budismo, y por eso habían
fracasado sus sucesores. Se aceptó la historia que se empieza con Asoka
descrito como un guerrero sanguinario, ya que muchas fuentes budistas
lo describen así. Según el Ashoka avadana, Ashoka construyó una prisión
donde se dedicaba a torturar a los presos. En el mismo texto se nos
cuenta cómo intentó torturar a un monje budista que parecía inmune al
sufrimiento. Asoka, impresionado, se convirtió al budismo, destruyó la
prisión y se propuso construir 84.000 stupas budistas por todo el
imperio.
27. Otras fuentes afirman que fue después de las devastadoras consecuencias
de su guerra en Kalinga, durante el octavo año de su reinado, se sintió
tan culpable que estó lo llevó a convertirse al budismo, influido según las
fuentes por su esposa o concubina Deví. Desde ese momento se dedicó a
propagar la política del dhamma budista por su imperio y envió
misioneros a lugares lejanos, tales como la isla de Ceilán, convertida por
su hija Sanghamita y su hijo (o hermano) Mahinda, citados solamente en
las crónicas cingalesas, e ignorados en las inscripciones indias que no
mencionan más que a tres de sus hijos: Tuara, Kunala y Yalauka. Desde
entonces, defendió una política pacífica emitiendo una serie de edictos
dirigidos al pueblo. Un reinado que conoció una política oficial de a-jimsá
("no violencia"), llegando a construir hospitales para animales y restaurar
las carreteras principales de la India, convirtiéndose también Asoka
probablemente en el gran difusor del vegetarianismo en el país.
Así pues, los estudios de los siglos XIX y primera mitad del XX y otros
posteriores basándose en estas fuentes, describen su conversón al
budismo como una «iluminación». Pasó de ser Chanda Asoka (Ashoka el
Cruel) a ser Dhamma Asoka (Ashoka el Piadoso). El monarca que amplió
la capital, Pataliputra (la actual Patna), hizo construir un palacio al estilo
persa y convocó el Tercer Concilio Budista (233 a. C. o 243 a. C.).
Ashoka, históricamente, fue un ferviente propagandista del budismo, pero
no necesariamente por motivos píos. Hay toda una linea de historiadores,
como la especialista Romila Thapar o Edward D'Cruz que consideran el
dhamma de Ashoka como una religión para ser utilizada como símbolo de
una nueva unidad imperial y una fuerza cohesionadora para unir los
variados y heterogéneos elementos de un imperio. O sea, que Ashoka
utilizó el budismo para la consolidación política y económica de
su gobierno. Y es que los edictos de Ashoka y los textos budistas no
terminan de coincidir con la imagen proyectada.
El budismo permitía a Ashoka una nueva política social bien definida,
acorde al mismo tiempo con los intereses de la sociedad de la época, ya
que la población no se oponía a las nuevas ideas budistas y las nuevas
clases comerciales (interesadas en las nuevas tendencias) le apoyarían,
beneficiando a Ashoka ya que no tuvo el apoyo de los ortodoxos al inicio
de su reinado. Así, el budismo dejó de estar perseguido.Tras el reino
«iluminado» de Asoka, la reforma del imperio Maurya fue aprovechada
por los invasores, y pronto cayó en declive y se fragmentó en multitud de
principados. Hasta la colonización británica (cerca de 2000 años más
28. tarde), nunca una parte tan grande de un subcontinente estuvo unida
bajo un mismo gobierno.
Otro ejemplo importante dentro del imperialismo, fue el imperio
romano sobre el Mediterráneo y Europa central; en el que los clásicos
dieron el nombre de «bárbaros» a todos los extranjeros de las regiones
fronterizas con el Imperio romano, y con los que lucharon, si bien se
limita la consideración a los que, ocupando en Europa las regiones al
Norte del imperio, invadieron éste, apoderándose de su parte occidental.
Estos pueblos formaban cuatro grupos:
1- El de cultura turco-mongola: como los ávaros y hunos.
2- 2- El de cultura eslava: como los vendas, en lo que hoy es Polonia.
3- 3- El de cultura irania: los sármatas, entre el Danubio y el Tisza, y
los alanos, a orillas del mar Negro.
4- 4- El de cultura germánica: como los godos, francos, vándalos,
burgundios y otros.
Durante la decadencia del Imperio romano, fueron muchos los pueblos
bárbaros (extranjeros) que, aprovechando las disidencias internas, se
aproximaron a sus fronteras y se establecieron en ellas, presionando en
forma permanente para entrar. Los bárbaros lograron penetrar
lentamente entre los siglos I y IV, y establecerse en el interior, hasta que,
finalmente, empujados por otros pueblos, lo hicieron en forma violenta.
Los germanos eran indoeuropeos, como los griegos y latinos. En ellos las
aficiones guerreras se muestran en grado sumo, al par que el trabajo se
considera como menos digno.
Había hombres privilegiados, nobles y plebeyos, existiendo también
la esclavitud. La patria potestad tenía un concepto bastante análogo, en lo
absoluto, al de los romanos. Aunque lo general era la monogamia,
la poligamia aparece admitida entre los nobles. Entre los pueblos
germanos invasores encontramos a los godos, divididos en visigodos en
Occidente y los ostrogodos en Oriente. Los francos, los suevos,
los burgundios, los anglos, los sajones y los jutos, los vándalos,
los frisones, los alanos (iranios) y los alamanes constituían el resto de los
pueblos.
Salvo estos casos aislados, la mayoría eran respetuosos de la cultura
romana, y fusionaron las costumbres romanas con las propias.
La aristocracia germana comenzó a utilizar como su idioma el latín, que
luego ¨-modificado- dio lugar a las lenguas romances. La religión,
que hubiera podido ser un elemento conflictivo en la relación de los
29. invasores con los pueblos autóctonos, se transformó en un factor de
unidad, al aceptar la mayoría de los reyes bárbaros la religión católica.
Los visigodos abandonaron el arrianismo, religión cristiana no reconocida
por la Iglesia Católica, para aceptar esta última en el siglo VI, en Hispania,
bajo el reinado de Recaredo. Los francos rechazaron el paganismo a fines
del siglo V, durante el reinado Clodoveo I. Así la Iglesia Católica, lejos de
debilitarse, cobró un inmenso poder. La sociedad Se adoptó la leyescrita,
según la modalidad romana, ya que ellos se regían por el derecho
consuetudinario (costumbres). Los germanos aceptaron el sistema de
la personalidad de la ley, por la cual cada uno debía ser juzgado por sus
propias leyes. Los romanos, carecían de normas, ya que Roma ya no
existía, y por eso, tuvieron que redactarse las que los regirían en lo
sucesivo.
Teodorico, rey de los ostrogodos, redactó la primera colección de leyes, en
el año 500, conocida como el Edicto de Teodorico, para godos y romanos,
siendo una excepción al referido principio de personalidad de las leyes.
Estaba compuesta de 154 artículos basados en resúmenes de fuentes
romanas. Después de los siglos dorados del Imperio romano (periodo
denominado Pax Romana, siglos I al II), comenzó un deterioro en
las instituciones del Imperio, particularmente la del propio Emperador.
Fue así como tras las malas administraciones de la Dinastía de los
Severos, en particular la de Heliogábalo, y tras la muerte del último de
ellos, Alejandro Severo, el Imperio cayó en un estado de ingobernabilidad
al cual se le denomina crisis del siglo III.
Entre el 238 y el 285 pasaron 19 emperadores, los cuales incapaces de
tomar las riendas del gobierno y actuar de manera concorde con el
Senado terminaron por situar a Roma en una verdadera crisis
institucional. Durante este mismo período comenzó la llamada invasión
pacífica, en la cual varias tribus bárbaras se situaron, en un principio, en
los limes del Imperio debido a la falta de disciplina por parte del ejército,
además de la ingobernabilidad producida en el poder central, incapaz de
actuar en contra de esta situación. Por otro lado, las guerras civiles
arruinaron al Imperio, el desorden interno no sólo acabó con
la industria y el comercio, sino que debilitó a tal punto las defensas de las
fronteras imperiales, que privadas de la vigilancia de antaño, se
convirtieron en puertas francas por donde penetraron las tribus bárbaras.
Tras una breve «estabilización» del Imperio, en manos de algunos
emperadores fuertes como Diocleciano, Constantino I el
30. Grande y Teodosio I, el Imperio se dividió definitivamente a la muerte de
este último, dejándole a Flavio Honorio el sector de Occidente, con capital
en Roma, y a Arcadio el sector Oriental, con capital en Constantinopla.
el imperio inca en el centro del continente americano; El imperio Inca, fue
un gran imperio y una cultura avanzada en el continente americano, antes
de su descubrimiento por parte de los europeos. En líneas generales, el
Imperio se extendía desde el norte del Ecuador a la parte central de Chile
y desde los Andes hasta la costa. Los Incas fueron una tribu Peruana, que
se cree, hablaba el Quechua y mitológicamente hablando ellos procedían
del Sur y fueron depositados en la llamada Cuenca de Cuzco, en donde
quedaron primitivamente confinados. Aparentemente los Incas
extendieron su dominio por tribus vecinas alrededor del año 1100 AC. Sin
embargo, el Imperio Inca alcanzó su máximo esplendor en el siglo XV.
A pesar de toda su grandeza el Imperio Incaico escasamente existió más
de un siglo. Con anterioridad al año 1430 los Incas gobernaron solo el
Valle del Cuzco. Ellos habían entablado una guerra con los Chankas por
algún tiempo, pero finalmente los derrotaron en una gran victoria en
1430. Esto marcó el comienzo de una gran expansión militar. El Imperio
Incaico conquistó e incorporó la mayoría de las culturas en el área que se
extendía desde el sur de Colombia hasta el centro de Chile. Los Incas
impusieron su modo de vida sobre las gentes que conquistaron. Para el
tiempo que los españoles llegaron la mayoría del área de los Andes, había
sido totalmente controlado bajo las leyes de los Incas.
Los Incas desarrollaron una economía basada en una
intensiva construcción de hileras de terrazas en las montañas, en las que
consiguieron una maestría en el arte hidráulico y de irrigación de
las aguas. Su civilización se congregó tanto en centros urbanos como
en redes de caminos, lo que hoy en día se pueden denominar carreteras.
Tuvieron unaadministración eficiente, y consiguieron la maestría en artes
como en el refinamiento de metales trabajados, arquitectura eficaz y
sobria, una artesanía singular en las telas y su posterior acabado, una
extraordinaria mano de obra en la alfarería, y en fin, en otras diversas
artes. La conquista Española significó el fin del Imperio Inca en 1532.
Como dato anecdótico y curioso, pero digno de tener en cuenta, el
imperio de los incas, contaba con cierto tipo de organización policial, sus
miembros se llamaban tucuyricu, (el que todo lo ve). Los tucuyricus,
velaban por el orden y el cumplimiento de las leyes del soberano; estaban
31. apoyados por los michues, que actuaban como consejeros, inspectores y
pesquisidores. (Ver anexo 2).
Otro imperio que sirve de ejemplo para el desarrollo del imperialismo fue;
el imperio de Carlomagno en Europa; el cual nace e en los albores del
siglo VIII, el merovingio Regnum Francorum se encontraba en plena
decadencia, dividido en tres partes (Austrasia, Neustria y Borgoña) y
gobernado, de facto, por los mayordomos de palacio. Uno de ellos, Pipino,
de Austrasia, destronó a Childerico III (743-751) y se coronó rey en
Soissons, por aclamación popular. Pipino, hijo de Carlos Martel, buscó la
base jurídica para ello en la figura del Papa Zacarías, obligado por las
circunstancias a buscar un aliado fuerte frente al empuje de los
lombardos en la península italiana. Con él nacía, así, una nueva dinastía
que trataría de fortalecer su poder con el apoyo papal. A cambio, se iba a
erigir en la protectora de la Iglesia romana.
En el plano político y militar, Pipino obtuvo importantes victorias contra
los musulmanes y consiguió sofocar una sublevación en Aquitania, a la
vez que creó los Estados Pontificios. A su muerte, en 768, dividió su reino
entre sus dos hijos, Carlos y Carlomán
¿Quién fue Carlomagno?
La muerte en 771 de este último permitió que Carlos, el futuro
Carlomagno (771-814), reunificara nuevamente el reino, que constaba ya
de Neustria, Austrasia, Aquitania, Borgoña y Provenza, y comenzara una
larga campaña de expansión de sus fronteras. Para ello, emprendió
sucesivas campañas militares: sometió a los lombardos y se nombró en
774 "Rex Francorum et Longobardorum", acabó en 796 con el reino de
los ávaros, cristianizó tras treinta años de luchas a los sajones y frisones,
pero se vio frenado por los musulmanes al otro lado de los Pirineos en su
intento por llegar hasta el Ebro. (Ver anexo 3)
Los sucesores de Carlomagno
A Carlomagno le sucedió su hijo Luis el Piadoso o en latín Ludovico Pio
(814-840) que era ya rey de Aquitania y había conquistado Barcelona en
801, estableciendo el límite de la Marca Hispánica. Sin embargo, como
emperador hizo bien poco por la expansión del Imperio; entusiasta de la
cultura y profundamente religioso, entregó a la Iglesia el tesoro
acumulado por su padre.
El movimiento artístico siguió floreciente gracias a algunos importantes
centros culturales como Metz, Tours o Reims. Sin embargo, a finales de
su reinado se encontró con el levantamiento de sus hijos mayores,
32. Lotario, Pipino y Luis, entre quienes había repartido el Imperio y que se
opusieron a la posterior inclusión de Carlos, el menor. Tras la muerte de
Pipino, por el Tratado de Verdún (843) quedaba dividido finalmente
entre los tres restantes: Lotario I recibió las tierras centrales (Lotaringia),
Luis el Germánico la parte oriental y Carlos el Calvo se quedaba con el
reino de los francos occidentales.
La disgregación del Imperio se vio acentuada en 855, con la muerte de
Lotario, quien repartió el reino de Lotaringia entre sus hijos Carlos I,
Lotario II y Luis II. No obstante, los dos primeros duraron poco, con lo
que Luis II pasaba a ser el nuevo heredero del reino de su padre en 869,
a lo que se oponían sus tíos Luis el Germánico y Carlos el Calvo. Este
último se hizo coronar rápidamente rey de la Lotaringia, pero al final se
vio obligado a aceptar su división entre ambos por el Tratado de Meersen.
Durante estos últimos años, los restos del Imperio Carolingio se
encontraron con un nuevo peligro, las incursiones vikingas que
comenzaron a asolar sus tierras, pero en el campo cultural se alcanzó un
nuevo florecimiento de las artes, impulsadas por el mecenazgo imperial,
fundamentalmente de Carlos el Calvo.