Las tecnologías de la información (TI) son fundamentales para todas las actividades y procesos de una empresa. Las TI permiten mejorar la gestión de clientes, proveedores y la cadena de suministro, aumentar la productividad y reducir costes en la producción, y facilitar la comercialización, venta y posventa. Su implementación y uso adecuado otorgan una gran ventaja competitiva a la empresa.