2. Pensar en que nuestros clientes siempre
deben estar satisfechos parece no tener
sentido y aunque no creamos mucho en esta
estrategia, es fundamental para poder
posicionar a una empresa y para tener esa
reputación con la que tanto soñamos, ya que
los clientes que se enamoran de una marca
siempre atraerán nuevos clientes.
3. Se trata de hacer un seguimiento que te
permita asesorarle para que mejore su negocio
con tu producto.
Quizás tus productos/servicios sean sencillos y
no necesiten un seguimiento pero si no es así
hacer un buen seguimiento te asegura, no solo
la fidelización, sino mejorar la confianza de
tus compradores. Se trata de cuidar los
detalles.
4. Da igual si se trata de reducir el tiempo de
espera, ajustar el precio, ofrecer
servicios/productos añadidos que el cliente
valore, entregar a domicilio… todo aquello que
contribuya a aportar más valor final para el
cliente siempre es un punto a tu favor. Se
trata de la buena atención al cliente al llegar,
el tiempo de servicio…todos suman la
exclusividad y la perfección, la satisfacción
definida.
5. Quizás por desconocimiento, quizás por
equivocación de tu empresa, quizás por
dudas al utilizarlo, siempre existen
problemas con tus productos y siempre
debes estar alerta para dar una respuesta
rápida y contundente al mismo.
Un cliente que no es capaz de usar tu
producto, que descubre errores en el mismo
o que simplemente no sabe cómo sacarle el
máximo partido es un cliente insatisfecho y
dolido por haberse equivocado con la
compra.
6. El tema de la certificación para
determinar la satisfacción del cliente, no
es un asunto sólo para las empresas
grandes o de gran experiencia, sino
también para empresas pequeñas.
Con base en la retroalimentación que
recibimos de nuestros clientes, es cómo
podemos reorientar nuestras baterías
para lograr mayor éxito en nuestras
ventas. Por ello es importante seguir
ciertos pasos para alcanzar ese objetivo.
7. En primer término, se recomienda que si
tenemos como herramienta la Internet es
básico contar con un Buzón de Sugerencias
para saber por dónde van las necesidades de
nuestros clientes. Conoceremos también cuáles
son sus inconformidades o inquietudes para
mejorar nuestro servicio y calidad.
8. Otro concepto es llevar a cabo Encuestas
Periódicas, algo parecido a un FocusGroup o
panel, que nos permite reunir a varios clientes
para conocer de manera veraz cómo están
percibiendo la calidad de nuestros productos,
así como el servicio que les brindamos.
9. Una más de estas recomendaciones es
realizar un análisis de Clientes Perdidos. En
ese sentido es muy importante acudir a ver
a estos clientes que se nos han ido y
preguntarles las razones y los motivos por
los que dejaron de comprarnos
10. Esta retroalimentación (comunicación y
respuesta) nos da pie para saber en qué
momento no hicimos bien las cosas a la hora
de ofertar nuestros bienes o servicios.
Estos clientes son los que verdaderamente
conocen la debilidad de la empresa y nos
ayudarán a realizar los cambios pertinentes.
11. Por último está la herramienta de los
compradores disfrazados o
MisteryShoper. Estos vienen a ser una
especie de exploradores espías que se
dedican a verificar procedimientos,
servicios y la manera en que el
empleado trata al cliente.
12. Se busca que el trabajador actúe con
base en las normas establecidas, tenga
una buena presentación y cumpla con las
reglas más estrictas para satisfacer las
necesidades del cliente. Todo esto se
traduce en una mejor atención a
nuestra clientela y que obviamente haya
mayores resultados económicos para la
empresa.