2. Acteón
Artemisa estaba
bañándose en un río
del bosque, cuando
Acteón la descubrió y
se quedó mirándola, y
el ruido que hizo al
pisar una rama la
alertó de que la
estaban espiando, así
que lo buscó y al
encontrarlo lo
convirtió en un ciervo
y mandó a los perros
del mismo Acteón a
que lo mataran.
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5. Orión
Artemisa tomó a este
mortal como compañero de
caza, y Apolo se inventó un
plan para separarlos. Así que
engañó a Artemisa para que
disparase con su arco a un
punto en el mar, ella acertó y
no se dio cuenta de que lo
había matado hasta que vio
su cadáver en la orilla. Así
que envió su cuerpo a las
estrellas formando la
constelación de Orión, y
también al perro de éste,
como Sirio.
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9. Calisto
A una de las ninfas de
Artemisa se le presentó
Zeus con aspecto de
Apolo, la sedujo, y le
hizo romper su pacto de
castidad. Artemisa al
enterarse la transformó
en una osa. Años más
tarde Arcas estaba
cazando en el bosque, y
estaba a punto de matar
a su madre cuando
Zeus, desde el cielo le
detuvo y los subió a los
dos al cielo como la Osa
Mayor y la Osa Menor.
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13. Agamenón e Ifigenia
Por matar un ciervo
sagrado Artemisa detuvo
sus barcos camino a la
guerra de Troya, y la única
forma de que Artemisa le
perdonara sería
sacrificando a su hija
Ifigenia. Agamenón lo hizo,
pero en el último momento
Artemisa cambió a Ifigenia
por un ciervo y envió a
Ifigenia a Tauro, donde
sería una sacerdotisa
encargada de sacrificar a
los extranjeros.
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16. Níobe
Níobe alardeaba de que ella
había tenido catorce hijos
(los Nióbides) y Leto solo
dos. Apolo y Artemisa los
mataron. Y ella desolada
subió a un monte y se
convirtió en roca mientras
lloraba. Zeus convirtió a
todos los habitantes de
Tebas en piedra, y los
dioses enterraron a los
Nióbides.