3. No me salen las palabras,
con las que quiero decirte,
que cuando mi corazón tu abras,
sabrás no puedo mentirte.
4. Y ya con su vena abierta,
como en libro rutinario,
escrito en sangre magenta,
veras la palabra cierta,
que no es otra que; . .
“te amo”
Rogelio González Cortés