1. REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
UNIVERSIDAD BICENTENARIA DE ARAGUA
NÚCLEO APURE
FACILITADOR: PARTICIPANTE:
EDUARDO MORONTA REGGI ALJONA
25.775.100
SECCIÓN: A1
21 DE OCTUBRE 2016.
2. PSICOLOGÍA EXPERIMENTAL.
Wilhelm Maximilian Wundt (16 de agosto de 1832 - 31 de agosto de 1920) fue un fisiólogo, psicólogo
y filósofo célebre por haber desarrollado el primer laboratorio de psicología experimental (en Leipzig) en
1879, para a través del método experimental, estudiar la experiencia inmediata y observable. Los contenidos
de la conciencia y los procesos sensoriales básicos los abordaba con el método de la introspección, que era
la percepción interna de los elementos de la conciencia propia. Las variables psíquicas eran cuantificadas y
controladas. Wundt ha formulado asimismo una psicología social-histórica o Völkerpsychologie (del
desarrollo de la humanidad), que estudiaba las formas de comportamiento colectivo, buscando desarrollar la
historia psicológica de la humanidad abordando la mente de los pueblos, buscando cómo la diversidad se
transforma en comunidad. Enfatizó el mostrar los espíritus y mentes de diferentes pueblos y comunidades,
cómo estas pensaban, se hacían y se instalaban en el mundo, así como los productos culturales (el lenguaje,
las costumbres, los mitos, la religión, etc.). Dichas psicologías creadas por Wundt contribuyeron a
profundizar los múltiples dualismos que tuvo que superar y continúa enfrentando la psicología.
3. La psicología experimental es una disciplina científica que considera que los fenómenos psicológicos
pueden ser estudiados por medio del método experimental. Se refiere al trabajo realizado por los que
aplican métodos experimentales para el estudio del comportamiento y de los procesos que los sustentan. Los
psicólogos experimentales emplean participantes humanos y sujetos animales para el estudio de un gran
número de temas, incluyendo, entre otros: sensación y
percepción, memoria, conocimiento, aprendizaje, motivación, emoción, procesos de desarrollo, psicología
social junto con el soporte neural de todos ellos.
MÉTODO DE LA PSICOLOGÍA EXPERIMENTAL
El método experimental implica la observación, manipulación, registro de las variables (dependiente,
independiente, intervinientes, etc.) que afectan un objeto de estudio. En el caso específico de la psicología,
es posible describir y explicar dichas variables en su relación con el comportamiento humano y, por
consiguiente, también predecir sus modificaciones.
Los psicólogos experimentales están interesados, en conocer el comportamiento de un individuo
manipulando dentro del laboratorio los factores que puedan afectar o influir en la vida. Usan instrumentos de
precisión y exigen un alto grado de control y medición. Por ello, realizan experimentos en humanos; pero,
sobre todo, en animales. El uso de animales es más frecuente ya que permite, no sólo explicar la conducta
del hombre por medio de la inferencia, sino porque permite que el investigador pueda disponer de ellos en
cualquier momento y bajo cualquier circunstancia. Además, hay ciertos experimentos que no pueden hacerse
en humanos por razones éticas que lo prohíben. Sin embargo, cabe destacar que, en algunos países, la
investigación con animales tiende a disminuir, debido a las protestas y críticas de los ecologistas y
protectores de animales.
4. En la siguiente la imagen aquí plasmada se puede apreciar a el doctor Wilhelm Wundt en un momento en
el cual le propuso a sus estudiantes un “esqueleto” de lo que vendría siendo su Psicología Experimental
y su Psicología de los Pueblos. Tras largas horas de espera, salieron los estudiantes muy satisfechos
con las propuestas de Wundt. “Este proyecto trata de tender un puente entre dos áreas de fenómenos
diferentes, con la esperanza de resolver el gran problema del dualismo psicofísico que cruza toda la
Edad Moderna. Esta psicología se convierte en el eje científico de nuestras investigaciones, y define un
área de conocimiento dotada de la singularidad epistémica de poder ser contemplada a un tiempo bajo
la perspectiva subjetiva y objetiva” expresó Wundt.
5. PSICOLOGÍA CONDUCTUAL ‘’CONDUCTISMO’’
En 1913 Watson publica el que, a menudo, ha sido considerado su trabajo más importante, el artículo: “La
psicología desde el punto de vista conductista” y que dará punto de partida al conductismo. En él Watson
describe las líneas generales de la que será su nueva filosofía.
El conductismo pone el énfasis sobre la conducta observable (tanto humana como animal), que considera
que ha de ser el objeto de estudio de la Psicología, y las relaciones entre estímulo y respuesta, más que en el
estado mental interno de la gente (aunque Watson nunca negó la existencia de cualquier del mundo privado o
íntimo). En su opinión, el análisis de la conducta y las relaciones era el único método objetivo para conseguir
la penetración en las acciones humanas y extrapolar el método propio de las Ciencias Naturales (el método
científico) a la Psicología. No obstante, Watson desarrolló el conductismo, que hoy en día constituye una de
las principales corrientes psicológicas, y que se emplea en muchas terapias con un alto grado de efectividad.
El conductismo, según John Broadus Watson, uno de los primeros en definir el objeto de estudio de la
psicología, es el estudio experimental objetivo y natural de la conducta. Para B. F. Skinner el conductismo es
una filosofía de la ciencia de la conducta, definió varios aspectos esenciales de su objeto de estudio y a
diferencia de Watson se centró en describir las leyes generales que rigen la conducta voluntaria. El objeto de
estudio de la psicología y la forma en cómo se concibe la conducta es entendida de diversos modos, según el
enfoque desde el que se vea.
Se pueden identificar más de 10 formas de conductismo desde el propuesto por Watson hasta nuestros días;
pasando por el conductismo de Tolman, Hull y Skinner, el interconductismo y la psicología interconductual de
Kantor, el conductismo teleológico de Rachlin, empírico de Bijou, teórico de Staddon y biológico de
Timberlake, el contextualismo funcional de Hayes, etc.
J. R. Kantor define el conductismo como «una renuncia a las doctrinas del alma, la mente y la conciencia,
para ocuparse del «estudio de los organismos en interacción con sus ambientes». En términos más amplios,
lo considera como equivalente al término ciencia (Kantor 1968, cit. por Campos, 1973, p. 91), dado que se
ocupa de la naturaleza a partir del "principio del comportamiento". Así, la química estudia el comportamiento
de los elementos y la sustancia, la física estudia el comportamiento de la materia y sus propiedades,
la astronomía estudia el comportamiento de los astros y galaxias, y la psicóloga estudia las interacciones
entre los organismos y su entorno.
6. Watson pasó a la historia de la Psicología por los experimentos realizados junto a Rosalie Rayner para
demostrar sus teorías acerca del condicionamiento de la reacción de miedo en un niño de once meses de
edad y que ha pasado a la historia con la denominación de Pequeño Albert.
En él Watson pretendía demostrar cómo los principios del condicionamiento clásico, que por esos años
acababan de ser planteados por Iván Pávlov, podían aplicarse en la reacción de miedo de un niño ante una
rata blanca.
El pequeño Albert fue escogido como sujeto de experimentación por su gran estabilidad emocional en el
hospital donde estaba internado. Mediante el experimento, Watson pretendía demostrar cómo podía
condicionar la reacción de miedo de Albert hacia una rata blanca, que inicialmente no provocaba en el niño
ninguna reacción aversiva, cómo podría generalizar esta conducta a otros estímulos similares y, por último,
cómo eliminar esta conducta.
Según describen Watson y Rayner (1920), los objetivos que perseguían con su experimento eran dar
respuesta a las siguientes preguntas:
¿Puede condicionarse a un niño para que tema a un animal que aparece simultáneamente con un ruido
fuerte?
¿Se transferirá tal miedo a otros animales u objetos inanimados?
¿Cuánto persistirá tal miedo?
El procedimiento seguido fue el siguiente: Se seleccionó a un niño sano de nueve meses, Albert, para el
experimento. Se le examinó para determinar si existía en él un miedo previo a los objetos que se le iban a
presentar (animales con pelo), examen que fue negativo. Sí se identificó un miedo a los sonidos fuertes
(como golpear una lámina metálica con un martillo fuertemente).
El experimento dio comienzo cuando Albert tenía 11 meses y tres días. Consistía en presentar al niño una
rata blanca al tiempo que un ruido fuerte (que se lograba golpeando una barra metálica detrás de la cabeza
del niño). Después de varios ensayos, el niño sollozó ante la presencia de la rata y posteriormente
generalizó su respuesta a otros estímulos: un perro, lana, un abrigo de piel, etc.
El experimento no pudo llegar a término, no alcanzándose la fase de descondicionamiento, debido a que
Albert fue sacado de la unidad hospitalaria en que se encontraba antes de su conclusión.
7. PSICOLOGÍA PSICOANALÍTICA
El Psicoanálisis es una práctica terapéutica fundada por el neurólogo vienés Sigmund Freud alrededor de
1896. A partir del psicoanálisis se han desarrollado posteriormente diversas escuelas de psicología profunda
o de orientación dinámica y analítica. Asimismo, la teoría ha influido sobre muchos otros psicólogos y
escuelas psicológicas y terapéuticas. El Psicoanálisis surgió a partir de una teoría propia elaborada por
Sigmund Freud acerca de la histeria. La primera obra de Freud sobre el Psicoanálisis la desarrolló junto
con Joseph Breuer, con quien había empezado a trabajar con un método al que llamaron catarsis. Dicho
método consistía en hacer retroceder a la paciente mediante hipnosis al momento en que había sufrido la
experiencia traumática que originaba su enfermedad. Encontraron que cuando las pacientes podían recordar
aquellos traumas, sus síntomas remitían en gran medida. Poco a poco, Freud se fue dando cuenta de que la
hipnosis no era necesaria en el tratamiento. En efecto, las pacientes podían rememorar los hechos de su
pasado sin necesidad de ser hipnotizadas. Además, muchas pacientes no eran susceptibles a la hipnosis, y
en cualquier caso, la colaboración de un paciente consciente siempre es mayor que la de uno que se
encuentra en algún tipo de trance. A partir de entonces, Freud empezó a utilizar el método de las presiones.
Dejaba hablar a su paciente y cuando ésta se quedaba callada, presionaba su frente con la mano y le hacía
decir la primera idea que le viniese a la mente.
En su obra más conocida, La interpretación de los sueños (Die Traumdeutung, 1900), Freud explica el
argumento para postular el nuevo modelo del inconsciente y desarrolla un método para conseguir acceder al
mismo, tomando elementos de sus experiencias previas. Como parte de su teoría, postula también la
existencia de un preconsciente, que describe como la capa entre el consciente y el inconsciente (el término
subconsciente es utilizado popularmente, pero no forma parte de la terminología psicoanalítica). La
represión, por su parte, tiene gran importancia en el conocimiento de lo inconsciente. De acuerdo con Freud,
las personas experimentan a menudo pensamientos y sentimientos tan dolorosos que no pueden
soportarlos. Freud se refiere a esta idea a lo largo de toda su obra, principalmente en sus Trabajos sobre
metapsicología. Según sostuvo, estos pensamientos y sentimientos (al igual que los recuerdos asociados)
no pueden ser expulsados de la mente, pero sí del consciente para formar parte del inconsciente,
manteniendo lo reprimido su efectividad psíquica y retornando en forma de alguna de sus producciones.
Aunque a lo largo de su carrera Freud intentó encontrar patrones de represión entre sus pacientes que
derivasen en un modelo general para la mente, observó que sus distintos pacientes reprimían hechos
diferentes. Además, advirtió que el proceso de la represión es en sí mismo un acto no consciente (es decir,
no ocurriría a través de la intención de los pensamientos o sentimientos conscientes).
8. Freud buscó una explicación a la forma de operar de la mente. Propuso una estructura de la misma
dividida en tres partes: el ello, el yo y el superyó (véase ello, yo y superyó):
El ello representa las pulsiones o impulsos primigenios. Según Freud, constituye el motor del
pensamiento y el comportamiento humano. Contiene nuestros deseos de gratificación más
primitivos.
El superyó, la parte que contrarresta al ello, representa los pensamientos morales y éticos.
El yo permanece entre ambos. Actúa mediando entre nuestras necesidades primitivas y nuestras
creencias éticas y morales. No es sinónimo de la consciencia (existen partes del yo que son
inconscientes). Un yo saludable proporciona la habilidad para adaptarse a la realidad e
interactuar con el mundo exterior de una manera que represente el mejor compromiso entre los
deseos y mociones pulsionales del ello y las demandas restrictivas o punitivas provenientes del
superyó.
Freud estaba especialmente interesado en la dinámica de estas tres partes de la mente.
Argumentó que esa relación está influenciada por factores o energías innatos, que
llamó pulsiones.
El psicoanálisis se convirtió en un acercamiento metapsicológico al ser humano. Freud abandonó
enseguida su idea de desarrollar simplemente una teoría de las neurosis, y abordó la empresa, mucho
más ambiciosa, de desarrollar la teoría de la personalidad reseñada. Para conseguir este objetivo, Freud
se basó fundamentalmente en los resultados de su autoanálisis y en los del análisis de sus pacientes. A
éstos les pedía, cada vez con menos restricciones, que hablaran sencillamente sobre lo primero que se
les ocurriese. Completaba el análisis con la interpretación de los sueños, que debía hacerse en el
contexto del psicoanálisis. Freud solía utilizar los sueños de sus pacientes, para que éstos asociaran
libremente a partir de cada uno de sus elementos. Por ejemplo, si un sueño transcurría en la cocina de
la casa de los padres de una paciente, Freud le pedía a ésta que dijese todo lo que le sugería la casa,
sus padres y la cocina. Las consecuencias que obtenían se extraían, tanto del contenido del sueño
como de las asociaciones que producía.
9. Freud consideraba el Psicoanálisis como un procedimiento útil para cualquier persona, e imprescindible
para los psicoanalistas. Para ejercerlo era necesario estar psicoanalizado, impidiendo así que se
proyectasen los propios conflictos en el análisis de los pacientes. Durante el psicoanálisis se producía una
transferencia hacia el analista de algunos de los componentes de la vida psíquica del paciente. En la
transferencia positiva, el analista asumía la autoridad del súper yo y tenía la oportunidad de remediar los
errores cometidos durante la formación del súper yo por la interiorización de las ideas paternas. En este
proceso, el psicoanalista podía convertirse en un objeto de deseo para sus pacientes. El mayor problema
durante el análisis era la resistencia del yo a abordar los cambios producidos, lo que podía dar lugar a
una transferencia negativa. Según Freud, el Psicoanálisis podía ser útil en la curación de las Neurosis, pero
no en las Psicosis. Esto se debía a que consideraba que los psicóticos habían perdido toda relación con el
principio de realidad. Por tanto no podían incorporar a su personalidad los beneficios ocurridos durante el
análisis.