2. Centro de Servicio al inversionista: 800-900-1000 • www.aldesa.com • (506) 2207 – 8800
El año que recién terminó fue una llamada de atención para los inversionistas, los mercados
bursátiles internacionales empezaron el 2018 con mucha euforia y terminaron el año con
mucho pesimismo. Los factores que provocaron este pesimismo los podemos agrupar en:
1. Los movimientos al alza en tasa por parte de la FED y su mensaje cada vez más
restrictivo
2. La “guerra comercial” Estados Unidos vs China
3. Los temores sobre una recesión en Estados Unidos
4. La abrupta caída del precio del petróleo
El conjunto de estos cuatro elementos fueron la causa de la fuerte volatilidad que los
mercados experimentaron durante el año y, en particular, hacia el final del periodo, donde
vimos movimientos bruscos en los índices bursátiles alrededor del mundo y, principalmente,
en los Estados Unidos: Dow Jones y S&P.
La volatilidad que había estado de vacaciones volvió para impactar al mercado, y recordarles
a los participantes que la volatilidad es parte integral del mismo, no podemos olvidarnos de
ella. En el siguiente gráfico podemos ver como durante el último trimestre los movimientos
mayores al 2% estuvieron a la orden del día.
Los temores sobre la “inversión de la curva” en los rendimientos de los bonos del tesoro y su
aparente “poder predictivo” sobre una recesión alarmaron al mundo, y los temores sobre menor
crecimiento global levantaron banderas rojas por todas partes. El tema de la “curva invertida”
tiene a los inversionistas preocupados; sin embargo, el predictor real de una recesión es
cuando la curva se invierte en 2 años vs 10 años, es decir, cuando el rendimiento del bono de
10 años es mayor al de 2 años, y no es lo que estamos viendo, a pesar de que la curva si esta
invertida entre 1 y 5 años.
3. Centro de Servicio al inversionista: 800-900-1000 • www.aldesa.com • (506) 2207 – 8800
Y que podemos decir hacia el 2019, a continuación algunas consideraciones:
La economía de los Estados Unidos tuvo un año demasiado bueno, la expansión posterior
a la “Gran Recesión” se extendió por décimo año consecutivo, siendo así la más larga de los
últimos 100 años, la rebaja impositiva del presidente Donald Trump aceleró el crecimiento.
Mientras que otras regiones se desaceleraban, el dólar ganaba terreno y la Reserva Federal
(FED) mantuvo aumentos trimestrales en su tasa de referencia, en diciembre fue la cuarta
subida del año y la novena desde que inicio el nuevo ciclo restrictivo en el 2015.
Sin embargo, esta última subida no estuvo exenta de críticas, algunas más fuertes que otras,
como por ejemplo las de Trump hacia el presidente de la FED, Jerome Powell. Durante la última
reunión, el ente bajó su estimación de crecimiento del 3.1% al 3%, redujo la expectativa
de inflación del 2% al 1.9%, y anunció una pausa en la subida de tasas a solo 2 en este
año.
La especulación sobre una recesión ha estado presente desde que la economía empezó a
crecer en el 2009, pero la economía de los Estados Unidos de cara al 2019 luce sana,
aunque con limitaciones. El impulso de la rebaja impositiva se va desvaneciendo, mientras
que el gasto sigue aumentando, el “shutdown” del Gobierno federal de fin y principio de año
es un reflejo de eso. El consumo, uno de los principales contribuyentes del PIB sigue firme y,
con una inflación que no despega, es probable que el consumidor siga gastando, máxime
ahora, ya que con los precios bajos del petróleo existen menos presiones inflacionarias. Esto
llevaría al FED a ser menos agresivo en su política monetaria y ello debería de beneficiar al
mercado y a la economía.
El tema más relevante es la “guerra comercial”, cada vez se nota más el impacto en la
economía, tanto de Estados Unidos como de China. Los recientes datos de Manufactura (PMI)
de ambos países reflejan el impacto de esta guerra, en la que no solo se ven envueltos estos
dos países sino aquellos proveedores que se utilizan para vender el producto final en esos
mercados. El escenario más positivo es aquel en donde ambas potencias logren un acuerdo y
las tensiones disminuyan, lo cual daría de nuevo un impulso a las economías emergentes.
En Aldesa, nuestro pronóstico es de un crecimiento fuerte, pero menor al del 2018, ubicándose
en un 2.7% para este 2019.
Curva de rendimientos del Tesoro Estados Unidos: 3m - 30 años
2.00%
2.20%
2.40%
2.60%
2.80%
3.00%
3.20%
3m 6m 1a 2a 3a 5a 10a 30a
curva invertida
4. Centro de Servicio al inversionista: 800-900-1000 • www.aldesa.com • (506) 2207 – 8800
Los mercados bursátiles sufrieron los efectos de dicha guerra y subida en tasas, teniendo tanto
el S&P como el índice global de acciones, el peor desempeño desde la crisis del 2008.
¿Recesión a la vuelta de la esquina?
¿Lo anterior nos pone frente a la próxima recesión? No lo vemos tan cerca y los datos más
recientes del nuevo año confirman esta tesis. La cifra de empleos generada en diciembre de
312 mil, la segunda más alta del año, no refleja una economía en problemas. Durante el año se
agregaron 500 mil empleos más que en el 2017 y la tasa de desempleo se mantiene en bajos
históricos del 3.9%.
Si bien es cierto algunos analistas han subido las apuestas hasta el 40% por una recesión, de
acuerdo con una encuesta de la firma Reuters, esto no sería antes de dos años, y existen
atenuantes que antes no estaban presentes.
El más importante es la FED, que se había mantenido expectante ante la caída de los mercados
y los comentarios negativos sobre la economía; pero a principio de año dijo que el rumbo de
las tasas no está predefinido y que serán pacientes con el rumbo de la economía, además de
que están preparados para flexibilizar la política monetaria para mantener la expansión en
curso.
Por otro lado, el consumo se mantiene firme arriba del 3.5%, mientras que el PIB cerrará
su mejor año en los últimos 10, la inflación se mantiene controlada y por debajo de las
expectativas del 2%.
Con base en lo anterior, no vemos riesgos de recesión en el 2019, aunque consideramos que
el crecimiento será un poco menor al observado en el 2018. Definitivamente el ciclo de
crecimiento debe ceder en algún momento, la economía ya acumula 107 meses de crecimiento
continuo y con las subidas en tasas, la guerra comercial y el menor impacto de la rebaja de
impuestos, es probable que hacia el 2020 observemos menores tasas de crecimiento y, aunque
no prevemos que haya recesión, no se podría descartar del todo.
Hablando de los mercados bursátiles, los índices de los Estados Unidos tuvieron su peor año
desde el 2008, la volatilidad despertó, todo esto en medio de un sinfín de especulaciones,
sobre nada concreto, ya que los datos económicos eran sólidos.
Retorno en Mercado Accionario S&P y Global
-50.00%
-40.00%
-30.00%
-20.00%
-10.00%
0.00%
10.00%
20.00%
30.00%
40.00%
2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016 2017 2018
S&P 500 Global
5. Centro de Servicio al inversionista: 800-900-1000 • www.aldesa.com • (506) 2207 – 8800
Para este 2019, esperamos que la volatilidad se mantenga ligeramente arriba del promedio de
los últimos 5 años, pero por debajo de la volatilidad del 2018, especialmente de la del último
trimestre. Prevemos un retorno moderado en los mercados accionarios y, si la FED no
aumenta tasas o lo hace más pausadamente, los mercados de renta fija tendrían un buen
retorno en este año.
Las preocupaciones sobre el crecimiento global seguirán en este 2019, especialmente por las
repercusiones de la guerra comercial; recordemos que, si China se desacelera producto de
este evento, muchas economías emergentes se verán afectadas, no solo por la parte comercial,
sino por el precio de las materias primas, el cual podría caer debido a una menor demanda.
Así las cosas, este 2019 traerá retos y debemos estar vigilantes a los movimientos geopolíticos
para determinar las mejores opciones de inversión en un ambiente de mayor volatilidad
internacional.
DOUGLAS MONTERO
Director de Aldesa Fondos de Inversión
dmontero@aldesa.com
6. Centro de Servicio al inversionista: 800-900-1000 • www.aldesa.com • (506) 2207 – 8800