1. Áreas que comprende el estudio de la Bioética
Dr. José Luis Alvarado Jácome
Arquidiócesis de Xalapa
En el artículo anterior se había establecido que la Bioética va a mediar el
enfrentamiento que existe entre las nuevas tecnologías en el plano de la salud y su
implicación con la dignidad de la persona humana, al beneficiarla o atentar contra ella.
De una manera sencilla se puede decir que este estudio abarca cuatro grandes áreas:
a) Los dilemas éticos de todas las profesiones sanitarias, principalmente en la práctica
médica. Por un lado se tiene todo el conocimiento científico que indica la etiología de algún
padecimiento para tomar una postura en el diagnóstico y en el tratamiento, por otra parte,
existe un principio que dice “Lo que es técnicamente posible, no es por esa sola razón,
moralmente admisible1”. Salvaguardando siempre el respeto a la vida y a la dignidad
humana, cuando se encuentre con algún problema que involucre las dos virtudes anteriores,
no se puede actuar siguiendo una lógica materialista de la persona solamente como un
conjunto de células y tejidos. Tampoco buscando la mayor ventaja del costo-beneficio.
Mucho menos para “resolver el trabajo rápidamente”. La reflexión bioética orientará ese
actuar sanitario buscando el mejor bien posible para la persona.
b) Los problemas éticos que se van a plantear dentro de la investigación sanitaria. El avance
en los conocimientos y la tecnología que la ciencia reclama son un punto fundamental que
es necesario para responder a los desafíos de las enfermedades. El método científico exige
unos pasos a seguir: observación, hipótesis, experimentación, teoría y ley. En la búsqueda
de nuevos descubrimientos que lleven a mejorar los tratamientos actuales, se puede pasar
por el ensayo-error hasta obtener una innovación segura y eficaz. El gran valor de la
persona humana impide que pueda ser utilizada como un “conejillo de indias”. Por ello, la
Bioética apoya con protocolos de investigación para que la ciencia continúe con su camino
sin trasgredir a la naturaleza y dignidad humana.
c) Los problemas sociales derivados de las políticas sanitarias públicas, a nivel nacional e
internacional, como pudieran ser en la medicina laboral, los programas de atención a
enfermedades e incluso en el control demográfico. Bien conocemos que detrás de los
proyectos que ofrecen el bien para la población se pueden esconder intereses de otra índole
(política, económica, étnica, etc.) que terminan en un daño superior. Para ello la Bioética
insiste en el plano humanista de las leyes que se pueden generar en los sistemas
gubernamentales y privados.
d) Los problemas que se relacionan con el ecosistema y que influye directa o
indirectamente en la vida y la salud del género humano. Aquí también la Bioética participa
analizando todos los elementos externos que pueden, en un momento dado, influir de
manera positiva (por ejemplo, la conservación y cuidado de los mantos acuíferos, el apoyo
1
CONGREGACIÓN PARA LA DOCTRINA DE LA FE, Donum vitae, 22 de febrero 1987, no. 4

2. de cultivos orgánicos, el reciclaje de elementos peligrosos, etc.) y negativa (la investigación
y uso de alimentos transgénicos, la contaminación del ambiente por las industrias, la
mutación de agentes patógenos por causas artificiales, etc.).
Es tan amplio y tan importante el papel que en la actualidad juega la Bioética que
merece ponerle atención. De ahí, que se va ampliando el número de profesionistas y demás
personas que uniendo el conocimiento científico y humanista, proponen lo que favorezca a
los demás en el plano sanitario. Que no se crea que es algo lejano al común de la gente,
todos estamos implicados, todos somos afectados, para bien o para mal.