El documento argumenta que la independencia de Cataluña tendría consecuencias graves para la convivencia y las condiciones de vida. El Gobierno debe actuar con firmeza pero proporcionalidad para restablecer el respeto a la Constitución frente a quienes la violan. También debe mantener el diálogo con los representantes catalanes siempre que se haga dentro de la legalidad. El proceso independentista catalán viola varios artículos de la Constitución española y del Estatuto de autonomía de Cataluña.
Mapa Mental Edad media y evolución de la ciudadanía
El CONSTITUCIONAL advierte
1. La independencia no es
romanticismo: es un desgarro
que tiene consecuencias muy
graves para la convivencia y
las condiciones de vida. El
Gobierno debe actuar con
tanta firmeza como
proporcionalidad para
restablecer el respeto a la
Constitución frente a quienes
la violan, manteniendo el
consenso alcanzado con el
PSOE y Ciudadanos. Y sin
cerrar nunca las puertas a una
negociación futura con los
representantes de la
comunidad catalana, siempre
que se haga en la legalidad
2. El problema es que los conductores de
este proceso no se comportan como
políticos responsables. El Gobierno ha
optado por pedir al Tribunal
Constitucional que se notifique a 21
personas que deben abstenerse de
todo acto que pretenda dar
cumplimiento a la declaración
separatista de la Cámara catalana.
Figuran entre ellas Artur Mas, Carme
Forcadell y otros cargos políticos, pero
también representantes de Ciutadans,
PSC y Catalunya Sí que es Pot, de los
que no cabe pensar que endosen
decisiones contrarias a la ley. También
un funcionario, el secretario general del
Parlamento catalán, una señal de que
ni él ni otros funcionarios —por
ejemplo, los Mossos d'Esquadra—
podrán escudarse en haber recibido
órdenes políticas para excusarse por la
comisión de actos ilegales.
3. El diario británico Financial Times publica este jueves un duro editorial sobre elproceso soberanista
catalán en el que tacha de "estupidez" la "carrera hacia la independencia" y avisa de que, aunque Madrid
"no debe reaccionar exageradamente", es principalmente Cataluña quien debe dar primero "un paso atrás"
para no "desencadenar una profunda crisis".
El diario sostiene que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha contribuido a convertir el "reto político"
catalán en un "impasse constitucional" pero añade que el presidente catalán, Artur Mas, ha "actuado
chapuceramente" una y otra vez.
4. La puesta en marcha del proceso
independentista aprobado el lunes
viola, según la Abogacía, media
docena de artículos de la Constitución
y otros dos del Estatuto de
Autonomía. Vulnera al artículo 1 de
la Carta Magna, que atribuye la
soberanía nacional al pueblo español.
Vulnera el 2, que afirma la
indisolubilidad de la Nación española.
Vulnera el 9, que establece que todos
los poderes públicos -por tanto,
también el Govern y el Parlament-
están sometidos a la ley y a la
Constitución, algo que también
recuerda el Estatut en dos preceptos.
Vulnera el 23, que garantiza la
participación política de todos los
ciudadanos -no sólo los de una
autonomía- en pie de igualdad.
Vulnera el 164, que indica que las
resoluciones del TC tienen valor de
cosa juzgada. Y, finalmente, vulnera el
168, que regula el procedimiento por
el que la propia Constitución acepta
ser modificada.