1. CENTRACION DEL PENSAMIENTO Y DESCENTRACIÓN
Centración / descentración: Consiste en que si el niño centra su atención en un
rasgo determinado de un objeto o de una situación, automáticamente la descentra
del resto. Y si la persona q esté con el niño le llama la atención sobre otro rasgo
distinto, entonces se centra en ese otros rasgo, pero automáticamente se
descentra del anterior.Para comprobar esto, Piaget hizo varios experimentos. A B
Depende del rasgo en el q el niño centre su atención (altura...), (el niño dice que
hay mas cantidad en el B; ha descentrado la anchura). La otra prueba clásica de
Piaget: la plastilina: le da una bola y delante de él la aplasta como una galleta.
Centración: parte de la razón por la cual los niños en la etapa properacional no
pueden pensar de manera lógica es que concentran la atención en un aspecto o
detalle de la situación a la vez y son incapaces de tomar en consideración otros
detalles, el niño en esta etapa tiene dificultad para considerar dos dimensiones
diferentes a la vez. Es una tendencia del infante a fijarse en una sola
características sin atender a los demás. Piaget adopto el termino centracion para
caracterizar el desarrollo cognoscitivo que se describe en estadio preoperatorio.
Este aspecto se manifiesta de distintos modos, tanto en la incapacidad del niño
para saber cual puede ser el punto de vista de un objeto para una persona ajena a
si mismo como para conocer, durante la comunicación con otros, las capacidades
o necesidades de esta para adaptar su propio discurso o comprender el de
aquellos.
LENGUAJE REDUCIDO Y INCREMENTO DESARROLLO DEL LENGUAJE
Para Piaget el lenguaje se reduce a una forma de inteligencia por lo que no
construye una teoría explicita sobre la adquisición del lenguaje, aunque se puede
extraer de sus obras:
“El lenguaje y el pensamiento en el niño”: establece la primacía
del pensamiento sobre el lenguaje. El lenguaje es el resultado del desarrollo
cognitivo, es un subproducto de la inteligencia. Introduce la noción
de “lenguaje egocéntrico” que es previo al lenguaje socializado y fruto de los
inicios de la descentración cognitiva. El lenguaje egocéntrico es el lenguaje de los
niños que están con otros niños pero, no se están comunicando, hablan para ellos
mismos. El pensamiento en su origen y desarrollo es egocéntrico, de ahí, en
primer lugar, surge un lenguaje egocéntrico y luego un lenguaje socializado, el
lenguaje comunicativo.
2. EGOCENTRISMO Y SOCIOCENTRISMO
El egocentrismo es la incapacidad para tomar el lugar de otro para imaginar el
punto de vista de otra persona. El egocentrismo según piaget son aquellos rasgos
característicos del pensamiento de los niños con edades entre 2 a 6-7 años,
suponiendo importantes diferencias con el pensamiento socializado de adulto.
Piaget aplica el carácter egocéntrico al pensamiento pre – operatorio y lo distingue
tanto de la inteligencia práctica del senso – motor como del pensamiento
conceptual propio de las operaciones concretas.
En esta etapa el niño tiene tendencia a sentir y comprender todo a través de él
mismo, le es difícil distinguir lo que pertenece al mundo exterior y a las otras
personas y lo que pertenece a su visión subjetiva, por lo mismo, tiene dificultad
para ser conciente de su propio pensamiento.
Piaget dejó en claro, a través de experiencias sencillas, la dificultad que tienen los
mismos de diferenciar el propio yo del mundo exterior.
Primeramente observamos un egocentrismo que se manifiesta en el habla de los
pequeños y que consiste en hablar tan sólo de sí mismo, en no interesarse por el
punto de vista del otro, ni situarse en relación con él. Son los frecuentes
monólogos (solitarios o colectivos) de los niños, que muestran, según Piaget, la
existencia de este habla egocéntrica.
El etnocentrismo (o sociocentrismo) se relaciona con el mecanismo psicológico
inconsciente que nos impulsa a considerarnos a nosotros mismos y a nuestros
grupos de pertenencia como diferentes y, en general, como mejores o más
importantes que los otros bajo algún aspecto. Según Piaget, el sociocentrismo es
una forma de pensamiento no operatorio que se mantiene centrado sobre el sujeto
(individual o colectivo). Se transmite y consolida gracias al constreñimiento de la
tradición y de la educación, y se contrapone a las operaciones racionales que
implican el descentramiento y el libre juego de una cooperación de pensamiento
fundada en la acción.
Responde al mismo mecanismo el pensamiento egocéntrico, que constituye una
fase característica en el desarrollo de la inteligencia en el plano individual.
CONSERVACIÓN DE LA CANTIDAD CONTINUA: LÍQUIDOS
La conservación constituye una condición necesaria de toda actividad racional.
Una cantidad continua como una longitud, un volumen, sólo es utilizable en la
3. medida en que constituye un todo permanente independientemente de las
combinaciones posibles efectuadas en la disposición de las partes.
Siempre la conservación será condición necesaria para toda inteligibilidad
matemática.
Las cantidades continuas no son consideradas a primera vista como constantes,
sino que su conservación se va construyendo poco a poco de acuerdo a un
mecanismo intelectual, que le permite considerar la cantidad misma como la
cantidad total.
Para llegar a la conservación el niño deberá ser capaz de ir dejando de lado las
relaciones perceptivas, no coordinadas entre sí de igualdad o diferencia
cualitativa, para llegar a una coordinación lógica que permita clasificación de
igualdades y seriación de que determina la constitución de las diferencias
intensivas.
CONSERVACIÓN DEL VOLUMEN
Los niños en la etapa de las operaciones concretas aprenden que la cantidad de
un líquido sigue siendo la misma aunque se coloque en un recipiente de distinta
forma, pero de la misma capacidad. Los niños menores de ocho años rara vez
toman en cuenta al mismo tiempo dos dimensiones, como la altura y la anchura;
generalmente juzgan con la cantidad de líquido por una sola dimensión, casi
siempre la altura.