Tarea APE Nro. 1 INFORME GRUPAL CONSULTA Y PRESENTACIÓN FINANZAS.pdf
Proyecciones de crecimiento del FMI
1. Regional Economic Outlook
Western Hemisphere, April 2016 (Spanish)
Perspectivas económicas
Las Américas
Administrando transiciones y riesgos
Estudios económicos y financieros
F O N D O M O N E T A R I O I N T E R N A C I O N A L
16
ABR
2. Estudios económicos y financieros
Perspectivas económicas
Las Américas
Administrando transiciones y riesgos
16
ABR
F O N D O M O N E T A R I O I N T E R N A C I O N A L
4. iii
Índice
Prefacio v
Resumen ejecutivo vii
1. Economía mundial en transición y perspectivas para Estados Unidos y Canadá 1
Transiciones mundiales 1
Estados Unidos: El consumo como motor del crecimiento 5
Canadá: Navegando en un contexto de precios del petróleo más bajos 10
2. América Latina y el Caribe: Administrando transiciones 19
Resultados de crecimiento diversos y perspectivas moderadas 19
América del Sur 32
México, América Central y la República Dominicana 37
El Caribe 40
Anexo 2.1. Aclaración acerca de los datos de Argentina 52
3. Análisis de la vulnerabilidad de las empresas de América Latina 57
Contexto 57
Datos y estrategia empírica 60
Resultados 61
Conclusiones de políticas 64
Anexo 3.1. Estadísticos descriptivos y resultados econométricos 69
4. Traspaso del tipo de cambio en América Latina 73
Tipos de cambio y precios al consumidor: Relaciones históricas 74
La inflación reciente vista a través del prisma de las estimaciones de traspaso 82
Conclusión e implicancias de políticas 84
Anexo 4.1. Detalles técnicos 84
5. Infraestructura en América Latina y el Caribe 87
Cantidad y calidad de la infraestructura: ¿Cuál es la situación en ALC? 87
Evolución de la inversión en infraestructura 91
Financiamiento de la infraestructura 96
Eficiencia de la inversión 98
Gestión de la inversión pública 98
Marcos institucionales y regulatorios para las asociaciones público-privadas 100
Conclusiones 102
Anexo 5.1. Determinantes de la infraestructura: La función de la política fiscal y
la participación privada 112
5. iv
PERSPECTIVAS ECONÓMICAS: LAS AMÉRICAS
Lista de países y abreviaturas de regiones 117
Referencias 119
Publicaciones recientes del Departamento del Hemisferio Occidental 123
Recuadros
1.1 ¿Precios más bajos por más tiempo? La caída de los precios del petróleo y el rol del
petróleo “shale” de América del Norte 15
2.1 Ajuste externo y el papel del tipo de cambio real 44
2.2 Escenarios de riesgos a la baja 47
2.3 Crecimiento potencial y brecha del producto en América Central 48
2.4 Incidencia y efectos de los desastres naturales en el Caribe 50
3.1 Riesgo de solvencia de las empresas y exposición bancaria en América Latina 66
5.1 Dinámica endógena de la infraestructura y el crecimiento 104
5.2 Inversiones portuarias post-Panamax en Las Américas 106
5.3 Brasil: Bonos de infraestructura 107
5.4 Estimación de la eficiencia de la inversión pública 109
5.5 Perú: Gestión de la inversión pública 110
5.6 Colombia: Cambios regulatorios e institucionales al marco de las asociaciones
público-privadas 111
6. v
La edición de abril de 2016 de Perspectivas económicas: Las Américas fue preparada por un equipo dirigido por
Hamid Faruqee y S. Pelin Berkmen, bajo la dirección general y supervisión de Alejandro Werner y Krishna
Srinivasan. El equipo estuvo integrado por Steve Brito, Carlos Caceres, Yan Carrière-Swallow, Marcos
Chamon, Roberto García-Saltos, Carlos Góes, Bertrand Gruss, Kotaro Ishi, Izabela Karpowicz, Genevieve
Lindow, Nicolás E. Magud, Troy Matheson, Natalija Novta, Rania Papageorgiou, Andrea Pescatori, Fabiano
Rodrigues Bastos, Daniel Rodríguez-Delgado, Udi Rosenhand, Issouf Samake, Fabián Valencia, Kristine
Vitola y Svetlana Vtyurina. Los capítulos 3 y 4 fueron preparados bajo la dirección de Marcos Chamon
y Dora M. Iakova, respectivamente. El capítulo 5 estuvo dirigido por Valerie Cerra y Alfredo Cuevas.
Además, Akito Matsumoto, Rodrigo Mariscal, Vanessa Díaz Montelongo y Rachel Fan contribuyeron
al capítulo1; Sebastián Acevedo, Allan Dizioli, Keiko Honjo, Ben Hunt, Iulia Teodoru y Ehab Tawfik
contribuyeron al capítulo 2, y Jorge Antonio Chan-Lau, Christina Daniel, Cheng Hoon Lim, Bennett Sutton
y Melesse Tashu contribuyeron al capítulo 3; Ana Ahijado, Flavia Barbosa, Diego Cerdeiro, Metodij Hadzi-
Vaskov y Fang Yang contribuyeron al capítulo 5. María Salomé Gutiérrez e Irina Sirbu colaboraron en la
producción. Joanne Creary Johnson, del Departamento de Comunicaciones, editó el manuscrito y coordinó
la producción. La edición en español estuvo a cargo de un equipo de la Sección de Español y Portugués
de los Servicios Lingüísticos del FMI, bajo la coordinación de Lourdes Reviriego y Virginia Masoller. Este
informe refleja la evolución de los acontecimientos y proyecciones del personal técnico del FMI hasta
principios de marzo de 2016.
Prefacio
7.
8. vii
Resumen ejecutivo
La economía mundial sigue en transición, lo que se refleja en un ritmo más lento de la actividad a nivel mundial.
Las economías avanzadas continúan recuperándose en forma moderada y desigual. En Estados Unidos, la expansión
económica, impulsada por el consumo, ha permitido el despegue de las tasas de interés, lo que constituye un primer
paso hacia una normalización gradual de la política monetaria. Pero la recuperación en otros países, especialmente en
Japón y la zona del euro, sigue siendo frágil. Con una mayor expansión monetaria en Europa y Japón, las influencias
de los principales bancos centrales sobre las condiciones financieras mundiales están divergiendo. En las economías de
mercados emergentes, el crecimiento sigue desacelerándose en forma generalizada, como resultado de un crecimiento
más lento pero más sostenible en China, mientras continúan las tensiones en varias economías grandes que se encuen-
tran en recesión. En general, las condiciones financieras se han endurecido y la volatilidad del mercado ha aumentado
a raíz de la creciente preocupación acerca de un crecimiento mundial más lento y la falta de margen de maniobra dis-
ponible en materia de políticas económicas. Al mismo tiempo, los precios de las materias primas siguen siendo débiles,
y se prevé que se mantengan más bajos durante más tiempo. Los riesgos que surgen de estas transiciones actualmente
en curso podrían frustrar el crecimiento si no se los administra adecuadamente. La urgencia por formular respuestas
de política económica en sentido amplio para salvaguardar el crecimiento a corto plazo y asegurar la resiliencia se ha
incrementado. Si bien actualmente no se necesita un apoyo adicional a la demanda en Estados Unidos, un plan de
consolidación fiscal creíble a mediano plazo proporcionaría mayor margen de maniobra en el caso de que se debilitase
el crecimiento. En Canadá se prevé que el nuevo programa de medidas de estímulo fiscal brinde un apoyo oportuno al
crecimiento, que sigue siendo lento ya que la economía hace frente a un contexto de precios bajos del petróleo.
En este contexto, la actividad económica en América Latina y el Caribe se ha visto gravemente afectada y se prevé
que en 2016 se contraiga por segundo año consecutivo. Sin embargo, la recesión regional oculta el hecho de que la
mayoría de los países siguen creciendo, de manera moderada pero segura. Las diferencias en cuanto a crecimiento
económico responden a las disímiles influencias provenientes de factores externos e internos. Si bien la recuperación
actualmente en curso en Estados Unidos continúa respaldando la actividad en México, América Central y el Cari-
be, la desaceleración del sector manufacturero en China ha reducido la demanda de exportaciones provenientes de
América del Sur. Al mismo tiempo, las nuevas disminuciones de los precios de las materias primas se han sumado
al shock acumulado en los términos de intercambio para los países exportadores de materias primas. Como conse-
cuencia de la mayor volatilidad en los mercados financieros mundiales y las condiciones financieras más restrictivas
en la región, el nivel de vulnerabilidad de las empresas está aumentando. En un contexto de condiciones externas
más frágiles, el ajuste se ha estado desarrollando en forma relativamente suave en aquellos países que han mejorado
sus marcos de política macroeconómica en los últimos veinte años. Sin embargo, en un puñado de países, los errores
de política y los desequilibrios y rigideces internas han derivado en caídas pronunciadas de la demanda privada.
Las perspectivas de crecimiento a lo largo de los próximos cinco años probablemente seguirán siendo débiles,
en particular para aquellos países que enfrentan precios de materias primas más bajos y un nivel limitado de
inversión. En toda la región, las políticas y reformas económicas deben orientarse a administrar esta transición.
La flexibilidad del tipo de cambio sigue siendo importante para respaldar el ajuste actualmente en curso en las
cuentas externas. En los casos en los que una orientación de política más acomodaticia podría estar justificada, el
margen de maniobra disponible en materia de políticas macroeconómicas es limitado. En particular, el margen de
maniobra de la política fiscal se ve restringido por elevados niveles de deuda y la nueva realidad de un crecimiento
más lento y menores ingresos, incluidos los derivados de materias primas. Al mismo tiempo, existen disyuntivas
en materia de política monetaria. Aunque el traspaso de los tipos de cambio a la inflación se ha ido reduciendo a
lo largo del tiempo, las depreciaciones elevadas y persistentes han ejercido una presión al alza sobre los precios
al consumidor. Dado que la demanda interna permanece débil, es posible mantener una orientación monetaria
9. viii
PERSPECTIVAS ECONÓMICAS: LAS AMÉRICAS
acomodaticia en aquellos países donde los bancos centrales gozan de una credibilidad sólida y las expectativas
inflacionarias están bien ancladas. Sin embargo, la política monetaria debería estar orientada a preservar la credibi-
lidad del banco central en aquellos países donde las expectativas inflacionarias a mediano plazo están aumentando.
En general, las reformas estructurales son esenciales para abordar la caída de la capacidad productiva en la región.
En América del Sur, las políticas deben orientarse a facilitar un ajuste gradual en respuesta a la nueva realidad de
precios de las materias primas más bajos. La consolidación fiscal debe continuar con el fin de contener el aumento
de los niveles de deuda y preservar o ampliar los márgenes de maniobra, pero debería salvaguardarse la inversión
pública con el fin de respaldar el crecimiento. Los países con regímenes de tipo de cambio flexible han experimen-
tado depreciaciones elevadas y persistentes, y los ajustes de la cuenta corriente siguen actualmente en curso. Aunque
el traspaso de los tipos de cambio a los precios se ha reducido, la inflación ha aumentado en promedio, generando
tensiones para la política monetaria. Las perspectivas de la región comenzarán a ser más prometedoras solo cuando
se hayan resuelto los desafíos internos a los que se enfrentan las economías que actualmente sufren una contracción.
En América Central, aunque las perspectivas favorables han impulsado ajustes tanto fiscales como de cuenta corriente,
es necesario redoblar los esfuerzos para institucionalizar la disciplina fiscal e impulsar las reservas fiscales y el creci-
miento potencial. El fortalecimiento de la cooperación regional en materia de supervisión prudencial y lucha contra
el lavado de dinero también ayudará a contener los riesgos. Si bien los bajos precios de las materias primas siguen
siendo favorables para los países que dependen del turismo en la región del Caribe, las perspectivas de crecimiento se
están deteriorando para las economías dependientes de las materias primas. Los principales objetivos para la mayoría
de los países del Caribe continúan siendo abordar las vulnerabilidades fiscales y fortalecer el sector financiero.
Este volumen de Perspectivas económicas: Las Américas incluye tres capítulos analíticos, en los que se examinan los
siguientes temas: la vulnerabilidad de las empresas en América Latina; el traspaso del tipo de cambio a los pre-
cios en la región, y el estado de la infraestructura económica y las tendencias de la inversión pública y privada en
infraestructura en América Latina y el Caribe. Las principales conclusiones son las siguientes:
• Las empresas de América Latina están enfrentando condiciones del mercado financiero más difíciles a nivel
mundial, así como un menor crecimiento potencial y ajustes macroeconómicos complicados a nivel interno.
Los cambios en las condiciones externas —en particular los indicadores de la aversión mundial al riesgo—
constituyen un factor predominante del riesgo de las empresas en la región y presentan un riesgo de cara al
futuro. Las condiciones macroeconómicas, como el ritmo de depreciación de la moneda y el aumento de los
diferenciales de los bonos soberanos, así como los débiles fundamentos de las empresas, también han contri-
buido a un incremento del riesgo corporativo desde 2011, lo que subraya la importancia de contar con marcos
de política sólidos y de realizar un seguimiento muy de cerca de los riesgos sistémicos en el sector empresarial.
• Las considerables depreciaciones de las monedas observadas en muchos países de América Latina durante
estos últimos años han ejercido presión al alza sobre la inflación, pero su impacto ha sido más moderado
que en el pasado. Las mejoras de los regímenes monetarios logradas en las últimas dos décadas han reduci-
do, de forma sustancial y generalizada, el traspaso del tipo de cambio al nivel de precios al consumidor. No
obstante, es conveniente mantener una actitud vigilante en aquellas economías donde los efectos de segunda
ronda siguen siendo considerables. En los países donde las expectativas de inflación a mediano plazo están
bien ancladas, las autoridades pueden adoptar una orientación de política monetaria más acomodaticia.
• La infraestructura inadecuada ha sido comúnmente considerada como uno de los principales obstáculos
para el crecimiento y el desarrollo en América Latina y el Caribe. La red de infraestructura de la región se
ha modernizado a lo largo de la última década, pero sigue siendo deficiente en comparación con la de sus
rivales exportadores. No obstante el afianzamiento de las instituciones fiscales y de los marcos de las asocia-
ciones público-privadas en algunas economías grandes de la región, es necesario mejorar la eficiencia de la
inversión pública en la mayoría de los países de América Latina y el Caribe.
10. Fondo Monetario Internacional | Abril de 2016
Mientras la economía mundial atraviesa transiciones impor-
tantes, el ritmo de actividad a nivel mundial ha dismi-
nuido, en un contexto de mayor volatilidad de los mercados
financieros. Las economías avanzadas continúan registrando
una modesta recuperación, aunque en grado desigual. La
expansión económica de Estados Unidos, impulsada sobre
todo por el consumo y la creación de empleo, ha permitido
el despegue de las tasas de interés hacia una normalización
gradual de la política monetaria. Esta transición indica la
presencia de influencias divergentes de los principales bancos
centrales en las condiciones financieras mundiales y presio-
nes de apreciación cambiaria sobre el dólar de EE.UU. En
las economías de mercados emergentes, el crecimiento sigue
desacelerándose, principalmente como resultado del reequi-
libramiento de la economía china y las continuas tensiones
que afectan a varias economías grandes que se encuentran
en recesión. Las condiciones financieras se han tendido a
endurecer y la incertidumbre ha aumentado a raíz de la
preocupación acerca de un crecimiento más lento y la falta
de espacio suficiente para la aplicación de políticas. Al mismo
tiempo, los precios de las materias primas siguen siendo bajos,
especialmente en los mercados del petróleo donde un exceso
de oferta ha llevado los precios a un nivel apreciablemente
menor desde el año pasado. En consecuencia, es probable
que la economía de Canadá siga experimentando un lento
crecimiento antes de fortalecerse gradualmente haciendo
frente a un contexto de precios bajos del petróleo. Los prin-
cipales riesgos a nivel mundial surgen de estas transiciones
actualmente en curso y podrían descarrilar el crecimiento
si no se los gestiona adecuadamente. Las prioridades de
política económica consisten en abordar las vulnerabilidades
y recomponer la resiliencia ante los riesgos de la transición
al mismo tiempo que se estimula el crecimiento a corto
plazo, y en elevar la productividad y el crecimiento potencial
mediante reformas estructurales de suma importancia.
Transiciones mundiales
En el marco de una economía mundial en
transición, el crecimiento se ha debilitado en medio
de condiciones financieras más restrictivas y precios
más bajos de las materias primas. Concretamente,
el crecimiento mundial fue decepcionante en el
último trimestre de 2015, y a principios de 2016
persistía la debilidad de los indicadores de actividad.
En general, como se analiza en la edición de abril
de 2016 de Perspectivas de la economía mundial (informe
WEO), se proyecta un crecimiento mundial del
3,2 por ciento en 2016 y 3,5 por ciento en 2017,
lo cual refleja un aumento más gradual de la
actividad que el proyectado en el informe WEO
de octubre de 2015. En medio del debilitamiento
del ritmo de actividad, la mayor aversión al
riesgo y el endurecimiento de las condiciones
financieras actúan como vientos adversos. Ante una
recuperación moderada de las economías avanzadas
y una contracción prolongada de las economías
emergentes y en desarrollo, se prevé que a nivel
mundial la demanda y la actividad se mantengan
moderadas en 2016 antes de registrar cierto repunte
en 2017 (gráfico 1.1).
Una serie de transiciones subyacentes
fundamentales siguen configurando este panorama
mundial, con importantes implicancias para la
región de las Américas: 1) una desaceleración
gradual y un reequilibramiento de la actividad
económica de China, pasando de la inversión y
las manufacturas al consumo y los servicios; 2) un
nivel duradero de precios más bajos del petróleo
y otras materias primas, y 3) cambiantes factores
que influencian las condiciones financieras
mundiales, con un despegue de las tasas de
interés cero en Estados Unidos, que desempeña
un papel dominante en la determinación de las
condiciones financieras de la región, mientras
que los bancos centrales de otras importantes
economías avanzadas continúan relajando su
política monetaria. Dichas transiciones plantean
riesgos a la baja para las perspectivas mundiales
y, si los principales desafíos que estas generan no
son abordados con éxito, el crecimiento mundial
podría seguir debilitándose.
Nota: Preparado por Hamid Faruqee y Marcos Chamon, junto
con Kotaro Ishi y Andrea Pescatori. Genevieve Lindow, Rodrigo
Mariscal y Udi Rosenhand prestaron una excelente asistencia en la
investigación.
1. Economía mundial en transición y perspectivas
para Estados Unidos y Canadá
11. 2
PERSPECTIVAS ECONÓMICAS: LAS AMÉRICAS
Fondo Monetario Internacional | Abril de 2016
Tenue crecimiento y
perspectivas moderadas
En las economías avanzadas, el crecimiento
en el cuarto trimestre de 2015 fue, en general,
más débil de lo previsto, como resultado del
debilitamiento de la demanda interna. Si bien una
política monetaria acomodaticia y los precios más
bajos del petróleo deberían sustentar la demanda
interna, una débil demanda externa, la apreciación
cambiaria —especialmente en Estados Unidos—
y condiciones financieras algo más restrictivas
pesarán en el crecimiento. Se prevé que el
crecimiento sea del 1,9 por ciento en 2016 y 2,0 por
ciento en 2017, un incremento levemente más lento
que el pronosticado en octubre. Concretamente:
• El crecimiento se mantiene sólido en Estados
Unidos, respaldado por condiciones financieras
todavía favorables y un fortalecimiento de
los mercados de la vivienda y de trabajo.
Pero teniendo en cuenta el endurecimiento
de las condiciones financieras tras la reciente
volatilidad de los mercados, un dólar más fuerte
que pesa en la actividad manufacturera, y los
precios más bajos del petróleo que limitan la
inversión en energía, se prevé que este año el
crecimiento de Estados Unidos sea ¼ de punto
porcentual más débil en comparación con
nuestras proyecciones anteriores. En cuanto
al resto de América del Norte, se proyecta
que Canadá vuelva a mostrar un nivel de
crecimiento más vigoroso, pero de forma más
gradual de lo previsto dado el descenso de los
precios del petróleo, al fortalecerse el resto de
la economía como resultado de las políticas
monetarias y fiscales expansivas y una moneda
más competitiva.
• En la zona del euro, se prevé un aumento
moderado de la actividad en 2016–17,
ubicándose el crecimiento en un rango del 1,5
al 1,7 por ciento, respaldado por los precios
más bajos del petróleo, políticas fiscales
favorables y nuevas medidas no convencionales
de expansión monetaria por parte del
Banco Central Europeo, que superarían un
debilitamiento de las exportaciones netas.
Se prevé que la actividad se desacelere en
España, aunque en este país el crecimiento
es aún relativamente fuerte, y en Portugal. La
incertidumbre política, como la generada por la
ola de refugiados, y la posible salida de la Unión
Europea contemplada por el Reino Unido, son
riesgos internos de gran importancia.
• En Japón, se prevé un crecimiento levemente
más firme, en torno al 0,5 por ciento en 2016
como resultado del estímulo fiscal, la caída de
los precios del petróleo y una relajación de las
condiciones financieras, como la expansión
Fuentes: FMI, base de datos del informe WEO, y cálculos del personal técnico del FMI.
32
36
40
44
48
52
0
4
8
12
16
20
2000 02 04 06 08 10 12 14 16
3. China: Crecimiento, consumo e inversión
(Porcentaje del PIB)
Crecimiento del PIB real (porcentaje, esc. der.)
Gasto de consumo privado
Formación bruta de capital fijo
40
80
120
160
200
240
2009 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21
2. Precios mundiales de las materias primas
(Índice: 2005 = 100)
Energía
Metales
Materias primas agrícolas
Proyecciones
2014 2015 2016 2017
Mundo 3,4 3,1 3,2 3,5
Economías avanzadas 1,8 1,9 1,9 2,0
Estados Unidos 2,4 2,4 2,4 2,5
Zona del euro 0,9 1,6 1,5 1,7
Japón 0,0 0,5 0,5 –0,1
Economías de mercados
emergentes y en desarrollo 4,6 4,0 4,1 4,6
China 7,3 6,9 6,5 6,2
Rusia 0,7 –3,7 –1,8 0,8
1. Crecimiento del PIB real
(Porcentaje; tasa anual)
Gráfico 1.1. Crecimiento mundial más débil, precios más bajos
de las materias primas y reequilibramiento de China
12. 3
1. Economía mundial en transición y perspectivas para Estados Unidos y Canadá
Fondo Monetario Internacional | Abril de 2016
cuantitativa y cualitativa a una tasa de interés
negativa implementada por el Banco de Japón.
La debilidad del crecimiento en el cuarto
trimestre, un yen más fuerte, una menor
demanda desde las economías de mercados
emergentes y un contexto de mercados
accionarios en descenso indican la existencia de
mayores riesgos a la baja para el crecimiento.
El panorama para el crecimiento de las economías
de mercados emergentes y en desarrollo es variado.
En general, el crecimiento de China evoluciona
en líneas generales tal como se preveía, pero con
una desaceleración más rápida de lo esperado en
el sector manufacturero y una moderación de las
importaciones y exportaciones. Esta evolución
implica efectos derrame hacia otras economías a
través del comercio así como precios más bajos
de las materias primas y un menor grado de
confianza. En términos más generales, la actividad
manufacturera y el comercio siguen siendo débiles
a nivel mundial, reflejando no solo la evolución
de China sino también un menguado nivel de
demanda e inversión en el mundo, particularmente
una reducción de las inversiones orientadas a las
industrias extractivas. Se prevé que continúen las
tensiones en varias grandes economías de mercados
emergentes, especialmente en Brasil y Rusia. En
este contexto, es probable que la recuperación del
crecimiento en los mercados emergentes (y en el
mundo) se demore hasta 2017–18.
Abaratamiento de las materias
primas y condiciones
financieras más restrictivas
En los mercados de materias primas, los precios
de los metales, los combustibles y las materias
primas alimentarias continúan bajos, en un contexto
de demanda mundial moderada. Los precios del
petróleo experimentaron un marcado descenso
en el cuarto trimestre de 2015, reflejando en gran
medida una sobreoferta petrolera, así como un
escaso incremento de la demanda. Concretamente,
los sostenidos aumentos de la producción en los
países que integran la Organización de Países
Exportadores de Petróleo y la resiliencia de la
producción no convencional han contribuido a
empujar los precios del petróleo hacia los mínimos
registrados a principios de 2016. Si bien los precios
han experimentado cierto repunte en el primer
trimestre de 2016, el legado de las inversiones
anteriores realizadas en el sector y la disponibilidad
de la nueva producción pueden mantener estos
precios relativamente bajos durante los próximos
años. Sin embargo, en vista del restringido nivel
de inversión que afecta a la capacidad petrolera
futura y del crecimiento tendencial secular de la
demanda de petróleo, es posible que haya una cierta
recuperación de los precios en el mediano plazo
(véase el recuadro 1.1).
En general, las condiciones financieras se han
endurecido tras la reciente volatilidad de los
mercados y el debilitamiento de sus expectativas
acerca de las perspectivas de crecimiento así como
la preocupación en cuanto a la falta de espacio para
aplicar políticas. La desaceleración de la actividad
económica y el deterioro del nivel de confianza,
en medio de perturbaciones en los mercados de
activos, han elevado los riesgos para la estabilidad
financiera mundial, según se analiza en la edición
de abril de 2016 del Informe sobre la estabilidad
financiera mundial (Global Financial Stability Report,
o informe GFSR). En los mercados de activos, las
ventas masivas y generalizadas en los mercados
accionarios a principios de 2016 bajaron los precios
de las acciones notablemente por debajo de sus
máximos recientes, aunque desde entonces se
han recuperado en cierta medida. No obstante,
los mercados parecen tener ahora una mayor
aversión al riesgo dadas las preocupaciones acerca
del crecimiento económico, como las tensiones
que afectan a las grandes economías de mercados
emergentes sumidas en profundas recesiones y
los riesgos financieros de China a medida que
su economía atraviesa la transición hacia un
crecimiento más equilibrado y sostenible. En los
mercados de bonos, los diferenciales para los
prestatarios de mayor riesgo —emisores soberanos
y empresas— han tendido a ampliarse y las
condiciones financieras externas se han endurecido
para las economías de mercados emergentes. Los
flujos de capitales hacia esas economías han venido
disminuyendo desde los máximos alcanzados
después de la crisis financiera mundial, aunque
hasta ahora aquellos dirigidos hacia América Latina
13. 4
PERSPECTIVAS ECONÓMICAS: LAS AMÉRICAS
Fondo Monetario Internacional | Abril de 2016
han mostrado resiliencia (gráfico 1.2). Si bien se
han registrado grandes variaciones en los precios
de los activos, particularmente en el tipo de cambio,
el volumen de flujos de cartera hacia la región ha
variado relativamente poco, quizá debido a la mayor
debilidad de las monedas locales.
Riesgos de la transición
A menos que las cruciales transiciones señaladas
se realicen con éxito, el repunte previsto del
crecimiento mundial quizá no se concrete. Los
riesgos más importantes son los siguientes:
• Los escollos en la transición necesaria de
China hacia un crecimiento más equilibrado,
vinculados con un aterrizaje brusco de sus
mercados de crédito y de activos, pueden dar
lugar a efectos derrame con repercusiones
internacionales más amplias a través del
comercio, los precios de las materias primas y
la confianza. Véase un análisis de escenarios de
riesgos a la baja conexos en el caso de América
Latina en el capítulo 2.
• Un nuevo descenso de los precios de las
materias primas puede agravar las perspectivas
para los países productores de materias primas
que ya están en una situación frágil. Por el lado
positivo, el reciente retroceso de los precios
del petróleo puede dar un impulso más fuerte
que el actualmente previsto a la demanda de
los países importadores de petróleo, entre
otras cosas al crear entre los consumidores la
percepción de que esos precios permanecerán
bajos durante más tiempo.
• Por último, podrían surgir efectos adversos
en los balances de las empresas y problemas
de financiamiento como consecuencia de una
mayor apreciación del dólar y condiciones
financieras mundiales más restrictivas a medida
que Estados Unidos retira su política monetaria
extraordinariamente acomodaticia, mientras
que en Europa y Japón continúa la relajación
monetaria.
En líneas más generales, un aumento repentino
de la aversión mundial al riesgo, cualquiera sea su
causa, podría determinar nuevas y pronunciadas
depreciaciones de las monedas en las economías
emergentes y posibles tensiones financieras. En
América Latina, por ejemplo, las vulnerabilidades
a nivel de las empresas han aumentado junto con
los niveles de endeudamiento empresarial. En
este contexto, los riesgos sistémicos, incluidos los
descalces de monedas, deberían ser objeto de un
seguimiento más estrecho (véase el capítulo 3).
Asimismo, en un contexto de mayor aversión al
riesgo y volatilidad del mercado, aun los shocks
idiosincrásicos en una economía relativamente
grande de mercado emergente o en desarrollo
podrían generar efectos de contagio más amplios
en los mercados, no solo a través del comercio y
las vinculaciones financieras sino también a través
de una reevaluación de los riesgos (“llamadas de
alerta”).
Prioridades de política
económica a nivel mundial
En una coyuntura más frágil, la amenaza de una
desaceleración de alcance más amplio y las limitadas
opciones de política en muchas economías pueden
exigir la adopción de medidas multilaterales más
audaces1. Al enfrentar la mayoría de las economías
1Véanse más detalles en el capítulo 1 de Perspectivas de la economía
mundial (informe WEO) de abril de 2016.
Flujos de capitales netos
(Miles de millones de dólares de EE.UU.)
Fuente: FMI, base de datos del informe WEO.
Nota: Excluye las reservas oficiales.
–300
–200
–100
0
100
200
300
400
500
600
2005 06 07 08 09 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20
Gráfico 1.2. Debilitamiento de los flujos de capitales
hacia los mercados emergentes
Econ. emergentes de Asia,
excl. China
Otros
Econ. emergentes de Europa
América Latina
Flujos de capitales netos
Proyecciones WEO
14. 5
1. Economía mundial en transición y perspectivas para Estados Unidos y Canadá
Fondo Monetario Internacional | Abril de 2016
crecientes riesgos a la baja, la urgencia por
respuestas de política económica en sentido amplio
para salvaguardar el crecimiento a corto plazo y
asegurar resiliencia se ha incrementado. En las
economías avanzadas, donde las tasas de inflación
permanecen muy por debajo de las metas fijadas
por los bancos centrales, sigue siendo esencial
aplicar una política monetaria acomodaticia.
Cuando las condiciones lo permitan, la política
fiscal a corto plazo debería respaldar en mayor
medida la recuperación, especialmente a través
de la inversión. La consolidación fiscal, cuando
una elevada deuda pública lo justifique, debería
favorecer el crecimiento.
En las economías de mercados emergentes y en
desarrollo, las prioridades de política económica son
más variadas, dada la diversidad de sus respectivas
condiciones. Las autoridades deberían gestionar
las vulnerabilidades y recomponer la resiliencia
frente a posibles shocks, elevando al mismo tiempo
el crecimiento y asegurando una continuada
convergencia del ingreso. En general, la flexibilidad
del tipo de cambio seguirá siendo importante
para amortiguar los shocks externos adversos
y constituye un enfoque que se ha empleado
activamente en América Latina. Varios países, entre
ellos las tres economías más grandes de la región,
han experimentado depreciaciones considerables en
relación con los máximos observados después de
la crisis financiera mundial, registrándose la mayor
parte de ese ajuste durante 2015 (gráfico 1.3). En
algunos casos, una depreciación sustancial de la
moneda está limitando el margen para relajar la
política monetaria, medida que depende del grado
de traspaso del tipo de cambio y la credibilidad de la
política monetaria (véase el capítulo 4).
Para abordar los posibles riesgos que enfrentarán
los mercados emergentes en el futuro,
especialmente los países exportadores de materias
primas, que presentan fuertes fundamentos
económicos pero una elevada vulnerabilidad,
podría ser necesario fortalecer la red de seguridad
financiera mundial adoptando, entre otras
medidas, nuevos mecanismos de financiamiento.
Las autoridades deben avanzar con las reformas
estructurales para aliviar los cuellos de botella de
infraestructura, facilitar un entorno de negocios
dinámico y favorable a la innovación y promover el
capital humano. En América Latina, por ejemplo,
queda aún margen considerable para mejorar las
redes de infraestructura que, con el tiempo, darían
sustento al crecimiento (véase el capítulo 5).
Estados Unidos: El consumo
como motor del crecimiento
En Estados Unidos, el consumo privado ha sido
el principal motor del crecimiento y ha seguido
expandiéndose con solidez. A pesar de una fuerte
desaceleración en el cuarto trimestre, la economía
estadounidense creció a un respetable ritmo del
2,4 por ciento en 2015, impulsada por un gasto
constante de los hogares. Al considerarse que el
mercado de trabajo se encontraba cerca del pleno
empleo, la Reserva Federal elevó levemente las tasas
de interés en diciembre del año pasado, mientras
que las presiones inflacionarias permanecen
contenidas. Los vientos externos favorables al
crecimiento de Estados Unidos produjeron cierta
volatilidad del producto, por ejemplo, a través de
un dólar más fuerte y un petróleo más barato. Los
factores externos plantean los riesgos a la baja más
importantes para las perspectivas de Estados Unidos.
El comportamiento del mercado laboral de Estados
Unidos ha sido un pilar de apoyo para el gasto de
consumo mientras continúa la expansión. Durante
el último año, el aumento de la nómina laboral
alcanzó en promedio un cuarto de millón de
empleos por mes, un ritmo vigoroso en relación
con los niveles históricos. La tasa de desempleo
cayó ¾ de punto porcentual, para terminar el
año en el 5 por ciento, solo unos pocos décimos
de punto porcentual por encima de su nivel de
equilibrio a largo plazo. La vigorosa creación de
empleo se tradujo en un mayor ingreso personal
disponible, afianzando aún más el aumento del
gasto de los hogares (gráfico 1.4).
El mercado de la vivienda continúa recuperándose.
Su fortaleza está respaldada por las cohortes de
población más joven —que han venido fortaleciendo
su situación en el mercado laboral y estimulando la
formación de hogares— y por una menor cantidad
de viviendas sujetas a ejecución hipotecaria (que
15. 6
PERSPECTIVAS ECONÓMICAS: LAS AMÉRICAS
Fondo Monetario Internacional | Abril de 2016
está volviendo a sus niveles previos a la crisis).
Como consecuencia, los precios de las viviendas
aumentaron a un ritmo sólido en los últimos dos
trimestres del año, junto con un fuerte aumento del
número de nuevas construcciones y permisos de
obra, que todavía se están recuperando desde sus
mínimos posteriores a la crisis (gráfico 1.4).
A pesar del sólido incremento de la nómina laboral,
ha habido escasos indicios de presiones de precios
hasta hace poco tiempo. La inflación ha sido
contenida por los precios de importación más bajos,
un dólar más fuerte y la reciente caída de los precios
de la energía, aunque algunos de esos efectos se están
disipando. La inflación subyacente medida por el
gasto de consumo personal (GCP), un indicador que
la Reserva Federal sigue de cerca, es aún inferior al 2
por ciento establecido conforme al mandato de dicha
entidad. Más recientemente, la inflación subyacente
ha aumentado ligeramente pero los salarios no se
han acelerado. Esto se debe en parte a un excedente
de mano de obra que impide que los salarios
aumenten de manera significativa. De hecho, las
tasas de participación en la fuerza laboral están aún
por debajo de lo que cabría inferir de las tendencias
demográficas, lo cual indica que un número
considerable de trabajadores que dejaron el mercado
laboral todavía no se han reintegrado a él.
–30
–25
–20
–15
–10
–5
–25
–20
–15
–10
–5
0
5
10
15
–30 –20 –10 0 10 20
Tipo de cambio efectivo real
0
5
10
15
20
–40 –30 –20 –10 0 10 20
Términosdeintercambio2015
Máximo en 2010–14¹
Gráfico 1.3. Tipos de cambio efectivos reales
1. Tipos de cambio efectivos reales y términos de intercambio, 2015
(Variación porcentual anual)
2. Tipos de cambio efectivos reales: Variación en 2015 y ajuste
con respecto al máximo en 2010–14
(Variación porcentual)
Fuentes: FMI, base de datos del Sistema de Notificaciones; FMI, base de datos del
informe WEO, y cálculos del personal técnico del FMI.
¹ Se refiere a la variación entre el punto máximo de los tipos de cambio efectivos
reales en 2010–14 y 2015.
Uruguay
PerúMéxico
Colombia
Chile
Brasil Argentina
Uruguay
Perú
México
Colombia
Chile
Brasil
Argentina
América Latina
Otros países
América Latina
Otros países
Fuentes: Oficina de Análisis Económico de Estados Unidos, Oficina del Censo de
Estados Unidos y Administración de Información Energética de Estados Unidos.
Nota: WTI = West Texas Intermediate.
2
3
4
5
7
6
30
50
70
90
Oct. 2014 Ene. 15 Abr. 15 Jul. 15 Oct. 15 Ene.
16
3. Estados Unidos: Tasa de ahorro, ingreso y consumo
(Porcentaje)
Tasa de ahorro personal (tasa anual desestacionalizada)
Ingreso disponible real (desestacionalizado, interanual)
Precio del petróleo WTI (escala derecha)
2,0
3,0
4,0
5,0
0,5
0,7
0,9
1,1
1,3
2010:T1 11:T1 12:T1 13:T1 14:T1 15:T1
2. Estados Unidos: Repunte de la actividad en el sector de la vivienda
(Tasa anual desestacionalizada)
Nuevas construcciones (millones, escala derecha)
Inversión residencial (porcentaje del PIB)
Media desde 1985
15:
T4
–4
–2
0
2
4
6
8
10
2013:T1 13:T3 14:T1 14:T3 15:T1 15:
T4
1. Estados Unidos: Contribución al crecimiento del PIB
(Variación porcentual con respecto al trimestre anterior,
tasa anual desestacionalizada)
Gasto de consumo personal Consumo e inversión pública
Inversión residencial Inversión no residencial
Variación de los inventarios
privados
Exportaciones netas
Crecimiento del PIB real
Gráfico 1.4. Consumo como motor del crecimiento
de Estados Unidos
16. 7
1. Economía mundial en transición y perspectivas para Estados Unidos y Canadá
Fondo Monetario Internacional | Abril de 2016
Ha habido efectos menos favorables o menos
previsibles de los shocks externos en el crecimiento
de Estados Unidos ejercidos a través de los
mercados mundiales de materias primas y de
divisas. En los mercados petroleros en particular, un
petróleo marcadamente más barato no logró elevar
más el consumo estadounidense, contrariamente
a lo esperado, ya que los ingresos extraordinarios
impulsaron más bien el ahorro; mientras tanto, la
inversión estadounidense en el sector energético
registró una fuerte caída. Concretamente:
• A diferencia de los anteriores episodios
de descensos importantes del precio del
petróleo, no hubo un subsiguiente impulso al
consumo en Estados Unidos. En promedio,
los hogares incrementaron su tasa de ahorro
del 4,8 por ciento en 2013 y 2014 a alrededor
del 5,1 por ciento en el último trimestre de
2015 (gráfico 1.4). Si bien no se dispone aún
de datos desagregados acerca de quiénes
ahorraron los beneficios extraordinarios del
petróleo (alrededor del 1 por ciento del PIB), es
probable que los hogares de menores ingresos
que más se beneficiaron de la reducción de los
precios de la energía hayan sido también los
más interesados en elevar su nivel de ahorro
para amortizar deudas después de la crisis.
• El efecto de la caída de los precios del petróleo
en los productores de energía, en cambio, fue
inmediato. Dada la naturaleza de la producción
de petróleo no convencional, la inversión
energética responde con alta sensibilidad a
los movimientos del precio del petróleo. De
hecho, la caída de los precios del petróleo en
los mercados de contado y de futuros hizo caer
drásticamente esas inversiones durante todo
2015. Como resultado, el impacto a corto plazo
de un petróleo más barato ha sido, en conjunto,
negativo para el crecimiento de Estados Unidos.
En los mercados de divisas, ha surgido un dólar
estadounidense más fuerte, que se apreció más
en los últimos dos trimestres del año, llegando así
la apreciación total del tipo de cambio efectivo
real al 15 por ciento en 2015. Esto refleja en
parte el relativo fortalecimiento de la economía
en comparación con la mayoría de sus socios
comerciales. Al mismo tiempo, sin embargo, los
efectos negativos de un dólar fuerte han sido
bastante visibles. La demanda externa de productos
estadounidenses ha decrecido, y los consumidores
del país han reemplazado cada vez más los
productos nacionales por importaciones. Como
resultado, en 2015 las exportaciones netas restaron
alrededor de ½ punto porcentual al crecimiento.
En virtud de la revisión a la baja de las perspectivas
de crecimiento de los socios comerciales, se espera
que en 2016 el comercio ejerza un efecto similar.
La reducción de las exportaciones de bienes ha
debilitado sustancialmente al sector manufacturero,
cuya situación se prevé siga siendo débil en tanto el
dólar se mantenga fuerte.
Perspectivas sólidas, pero
con riesgos externos
En vista de los fundamentos económicos y de
políticas subyacentes, las perspectivas para el
crecimiento de Estados Unidos siguen siendo
sólidas. Se prevé que el PIB real crezca al 2,4
por ciento en 2016 y al 2,5 por ciento en 2017,
manteniendo el consumo su papel de motor del
crecimiento. Los factores que impulsan el vigoroso
gasto de los hogares son un fortalecimiento
sostenido del mercado laboral, una recuperación
del mercado de la vivienda, precios más bajos
del petróleo y un repunte del aumento de los
salarios, que eleva el ingreso real disponible actual
y esperado. Las exportaciones netas serán un
lastre sustancial para el crecimiento del PIB como
resultado de la fortaleza del dólar y la debilidad de
la actividad en el exterior.
La inversión debería pasar a ser un determinante
más fuerte del crecimiento. El peso negativo de
la inversión energética en el crecimiento persistirá
hasta 2016, pero será moderado, dado que la
industria ya se ha contraído drásticamente y
retornado a los niveles de inversión anteriores a
la explotación de los recursos no convencionales.
Fuera de la minería, el petróleo y las manufacturas,
se prevé que la inversión crezca a un ritmo
vigoroso, sustentada por una sólida demanda
de consumo, un stock de capital que envejece
y sustanciales reservas de efectivo en manos
de las empresas. Todo ello se encuadra en un
17. PERSPECTIVAS ECONÓMICAS: LAS AMÉRICAS
8 Fondo Monetario Internacional | Abril de 2016
marco de perspectivas benignas para el mercado
de la vivienda dado el repunte previsto en la
formación de hogares y las condiciones financieras
relativamente favorables, con tasas hipotecarias
cercanas a sus niveles mínimos.
La orientación de las políticas macroeconómicas
debería seguir siendo propicia al crecimiento. Una
interrupción de la consolidación fiscal y una política
monetaria todavía muy acomodaticia durante el año
en curso contribuirían a sostener el crecimiento.
De hecho, en vista de los limitados indicios de
presiones inflacionarias, el personal técnico del FMI
prevé que la orientación de la política monetaria
siga siendo acomodaticia durante 2016 (véase la
siguiente sección). Además, los diversos acuerdos
fiscales establecidos a fines de 2015 implican que la
orientación de la política fiscal prevista para 2016
se mantendrá neutral en líneas generales, tras unos
pocos años de consolidación.
Los riesgos para las perspectivas se inclinan a la
baja, principalmente debido a factores externos.
Desde el lado positivo, sin embargo, el consumo
privado podría crecer a un ritmo más fuerte que el
pronosticado, gracias a sólidas mejoras en el empleo
y el ingreso y a la disminución de los precios del
petróleo. La inversión privada podría también
recuperarse a un ritmo mayor. Los riesgos a la baja,
sin embargo, se vinculan en mayor parte con los
siguientes factores:
• Una mayor apreciación del dólar, posiblemente
en coincidencia con perturbaciones en los
mercados emergentes o como resultado de
una reevaluación por parte del mercado de
las divergencias cíclicas entre la economía
de Estados Unidos y sus principales socios
comerciales, podría dar lugar a una contracción
más pronunciada de las manufacturas y las
exportaciones y, posiblemente, tensiones
comerciales.
• Un fuerte debilitamiento de la economía de
China afectaría a los flujos comerciales de
Estados Unidos, aun cuando las exportaciones
a aquel país constituyen solo alrededor del
7 por ciento de las exportaciones totales. Si
este debilitamiento conlleva una considerable
depreciación del renminbi, probablemente
iría acompañado de un aumento de las
importaciones estadounidenses desde China.
• Un endurecimiento de las condiciones
financieras internas, debido a la volatilidad del
mercado accionario y un deterioro del crédito
empresarial en el mercado de bonos de alto
rendimiento, afectaría a la inversión. El tamaño
del sector, sin embargo, es relativamente
pequeño y los riesgos se concentran en el
ámbito de la energía. En general, la exposición
de los bancos a las empresas energéticas
(menos del 5 por ciento de los activos
bancarios) parece estar suficientemente
contenida y las pérdidas podrían ser absorbidas.
La política monetaria después
del despegue de las tasas
El despegue de las tasas de interés que dispuso la
Reserva Federal en diciembre se llevó a cabo sin
inconvenientes, y los rendimientos a largo plazo se
encuentran en niveles similares a los registrados en
el momento en que se publicó el informe WEO
de octubre de 2015. Ante el aumento de la tasa
(de política) de los fondos federales —que refleja
la visión de la Reserva Federal de una economía
estadounidense más fuerte— los mercados
reaccionaron con calma, tanto a nivel interno como
internacional, ya que la medida había sido bien
comunicada y ya estaba mayormente prevista. Las
condiciones financieras en el mercado de bonos
de empresas se endurecieron a fines de 2015 y
comienzos de 2016, debido en parte a las continuas
presiones sobre el sector energético, mientras que
la volatilidad del mercado financiero aumentó
principalmente a raíz de factores externos. En general,
las condiciones financieras internas se endurecieron
de forma marginal y se mantienen relativamente
favorables, especialmente para los hogares.
En cuanto a la normalización de la política monetaria
hacia el futuro, se prevé que los subsiguientes
aumentos de las tasas sean muy graduales. Por lo
tanto, la orientación de la política monetaria seguiría
siendo altamente acomodaticia en 2016. De hecho,
la decisión de la Reserva Federal de mantener la
tasa sin cambios en marzo es bienvenida dados
18. 1. Economía mundial en transición y perspectivas para Estados Unidos y Canadá
9Fondo Monetario Internacional | Abril de 2016
el mayor grado de incertidumbre económica y
unas perspectivas de crecimiento más modestas
en comparación a diciembre. Dicha decisión
corrobora que la Reserva Federal se está basando en
la evolución de los datos económicos y ha validado
expectativas más moderadas del mercado que prevén
un solo aumento de la tasa en 2016. En términos
de riesgos, estas expectativas pueden resultar, sin
embargo, demasiado moderadas si la inflación
aumenta más rápidamente de lo previsto y supera su
objetivo fijado.
Las nuevas medidas de contracción monetaria
deberían ser graduales, bien comunicadas y basadas
en claros indicios de un repunte de la actividad
económica, presiones más firmes de los salarios o
los precios y una evaluación de que la inflación habrá
de aumentar de forma constante hacia el objetivo
del 2 por ciento fijado por la Reserva Federal para el
mediano plazo. Habiendo capacidad excedente en
el sector manufacturero mundial, un dólar fuerte y
precios más bajos de la energía, todo ello sumado a
cierta capacidad no utilizada en el mercado laboral,
quizá se requieran indicios más contundentes de que
la inflación subyacente del GCP habrá de volver al
nivel meta dentro del horizonte de políticas antes
de que se pueda proseguir con la normalización
monetaria (gráfico 1.5).
Política fiscal y prioridades
estructurales
Con respecto a la política fiscal, el gobierno federal
registró un déficit del 2½ por ciento del PIB en
2015, el más bajo desde 2007. Se prevé que el
déficit se amplíe hasta alcanzar más del 3 por ciento
hacia el final de la presente década como resultado
de las presiones sobre el gasto vinculadas al
envejecimiento poblacional y las prestaciones y en
vista de los diversos acuerdos establecidos en 2015
respecto del gasto y los impuestos2. Al nivel del
2El Congreso superó varios obstáculos en el último trimestre de
2015 para sancionar leyes que fueron promulgadas por el Presidente:
1) la Ley de Presupuesto Bipartidista de 2015 dispone un recorte
presupuestario total (“secuestro”) igual a ½ por ciento del PIB en 2016
y 2017, dividido en partes iguales entre el gasto de defensa y gastos no
destinados a defensa; 2) la Ley “Ómnibus” de Asignaciones de 2015
completó las asignaciones correspondientes a la Ley de Presupuesto
Bipartidista de 2015 y asimismo estableció el gasto hasta 2025 (por un
gobierno general, se prevé una variación del saldo
primario estructural cercana a cero tanto en 2016
como en 2017, que refleja una orientación fiscal
ampliamente neutral (gráfico 1.6).
Si bien en el corto plazo la orientación neutral de
la política fiscal resulta apropiada, en el largo plazo
las finanzas públicas no son sostenibles dada la
trayectoria actual de las políticas. Sobre la base de
los recientes acuerdos bipartidistas, un nuevo plan
creíble de consolidación a mediano plazo también
contribuiría a generar más espacio de política
fiscal a corto plazo. Se requieren políticas que
impulsen el producto potencial a más largo plazo
mediante inversiones en infraestructura, elevando
los resultados educativos, mejorando la estructura
tributaria y desarrollando y ampliando una fuerza
laboral calificada (a través de medidas tales como
una reforma inmigratoria, la capacitación laboral
y la asistencia de cuidado infantil para las familias
trabajadoras). Las recomendaciones específicas en
materia de políticas incluyen las siguientes:
• Impuestos: Simplificar el sistema del impuesto
sobre la renta, ampliar la base tributaria y
aumentar el crédito por ingreso del trabajo,
modificar el tratamiento impositivo para
las empresas multinacionales, introducir un
impuesto sobre el carbono y un impuesto sobre
el valor agregado a nivel federal y elevar el
impuesto federal sobre el gas.
• Seguridad social: Elevar la edad jubilatoria,
aumentar la progresividad de los beneficios e
indexar las prestaciones y contribuciones a la
inflación del IPC.
• Atención de la salud: Establecer un sistema de
costos compartidos con los beneficiarios,
contener el uso excesivo de tratamientos
costosos y eliminar las desgravaciones fiscales
para los planes de salud generosos patrocinados
por el empleador.
• Introducir una reforma inmigratoria basada en las
habilidades a fin de ampliar la fuerza laboral
calificada.
valor acumulado de USD 1,1 billones o 6½ por ciento del PIB); y, por
último, 3) la ley impositiva de 2016 (a saber, la ley de protección de
los estadounidenses frente a aumentos de impuestos, o ley PATH por
sus siglas en inglés) dispone un alivio tributario acumulado de USD
622.000 millones o 3½ por ciento del PIB para 2016–25.
19. 10
PERSPECTIVAS ECONÓMICAS: LAS AMÉRICAS
Fondo Monetario Internacional | Abril de 2016
Para salvaguardar la estabilidad financiera, es
esencial completar las reformas regulatorias que
comenzaron con la Ley Dodd-Frank y monitorear
los riesgos que se desplazan hacia ámbitos menos
regulados del sector financiero3. Los bancos están
adecuadamente capitalizados y la rentabilidad se
mantuvo alta en 2015. Sin embargo, el gran tamaño
del sector no bancario —cuyos activos totales
ascendían a alrededor del 230 por ciento del PIB
en 2014— es una fuente de riesgo sistémico, en
conjunción con una mayor asunción de riesgo
durante el anterior período de bajas tasas de
interés. En particular, las compañías de seguro
de vida han asumido más riesgo de crédito en
sus balances. Como las vulnerabilidades de los
mercados de bonos de alto rendimiento y de
préstamos apalancados son elevadas, los shocks
podrían expandirse a través del sector financiero,
operando los rescates masivos en el sector de
gestión de activos como potenciales canales de
propagación. Los riesgos sistémicos aparecen como
3Se han formulado recomendaciones detalladas en el informe de
2015 sobre el Programa de Evaluación del Sector Financiero corres-
pondiente a Estados Unidos.
relativamente bajos, sin embargo, dado el tamaño
comparativamente pequeño del mercado de valores
que no alcanzan el grado de inversión (gráfico 1.7).
Canadá: Navegando en
un contexto de precios
del petróleo más bajos
El descenso de los precios del petróleo ha asestado
un duro golpe a la economía canadiense. Un fuerte
recorte del gasto de capital en el sector energético
afectó considerablemente a la inversión empresarial4
y generó una recesión técnica en el primer semestre
de 2015 (una tasa anualizada de –0,6 por ciento),
a pesar del sólido nivel de consumo privado. El
crecimiento del producto rebotó luego al 1,6 por
ciento en el segundo semestre, al aumentar las
exportaciones (gráfico 1.8). Como resultado, el
crecimiento del producto general en 2015 fue
del 1,2 por ciento, lo que representa una fuerte
4El gasto de capital en el sector energético representó un quinto
del total de gastos de capital en 2015.
Estados Unidos: Tasa de política monetaria e inflación
(Porcentaje)
0
1
2
3
4
5
6
7
2006 07 08 09 10 11 12 13 14 15 16 17 18
Gráfico 1.5. Nivel moderado de la inflación y contracción
monetaria gradual
Fuentes: Oficina de Análisis Económico de Estados Unidos, Junta de la
Reserva Federal y estimaciones del personal técnico del FMI.
Nota: GCP = Gasto en consumo personal.
Tasa meta de los fondos federales
Inflación subyacente del GCP
(fin del período, interanual)
Estados Unidos: Impulso fiscal
(Porcentaje del PIB)
–2
–1
0
1
2
2007 08 09 10 11 12 13 14 15 16 17
Gráfico 1.6. Hacia una orientación fiscal neutral
Fuentes: FMI, base de datos del informe WEO, y estimaciones del personal
técnico del FMI.
Nota: El impulso fiscal es la cifra negativa de la variación del balance
primario estructural. Las barras claras denotan proyecciones.
20. 11
1. Economía mundial en transición y perspectivas para Estados Unidos y Canadá
Fondo Monetario Internacional | Abril de 2016
desaceleración respecto de 2014 y la expansión más
lenta registrada desde la recesión de 2008–09.
La marcada caída de los precios del petróleo
el año pasado ha puesto en marcha cierto
reequilibramiento hacia los sectores de la economía
no vinculados con los recursos naturales, facilitado
por un dólar canadiense más débil —que se
depreció 15 por ciento en términos efectivos reales
durante los últimos dos años— así como la sólida
recuperación de Estados Unidos y la orientación
acomodaticia de la política monetaria. Por el lado de
la oferta, el sector de los servicios (que representa
alrededor del 70 por ciento del producto total)
fue el impulsor clave del crecimiento del PIB
(gráfico 1.8). En el sector energético, las empresas
petroleras mantenían sus niveles de producción en
tanto los precios del petróleo fueran más altos que
sus costos operativos marginales, lo cual ocurrió
hasta finales de 2015. Sin embargo, el declive de los
precios del petróleo afectó gravemente a muchas
industrias conexas, como las actividades secundarias
de apoyo y la construcción de obras de ingeniería.
A pesar de este reequilibramiento, la respuesta de
las exportaciones no relacionadas con las materias
primas a un tipo de cambio más débil y a las
políticas acomodaticias ha sido más escasa que en
episodios anteriores (gráfico 1.8)5. Probablemente
el lento ritmo de recuperación refleja, en
parte, una menor capacidad en los sectores no
vinculados a los recursos naturales que llevará
tiempo recomponer, dada la anterior erosión que
sufrió la competitividad externa de las industrias
que no exportan recursos naturales durante el
auge del petróleo (véase FMI, 2013).
A nivel provincial, la actividad económica mostró
divergencias según el grado de dependencia de los
recursos naturales. Columbia Británica, Ontario
y Quebec (que representan casi el 70 por ciento
del PIB nacional) muestran signos de mejora
de la actividad económica. Estas provincias son
importadoras netas de petróleo y se benefician de
los precios más bajos de ese insumo. En cambio, las
economías de las grandes provincias ricas en recursos
naturales, Alberta y Saskatchewan (que aportan el 25
por ciento del PIB nacional), se están debilitando,
con tasas de desempleo que se aproximan a los
niveles de la recesión de 2008–09. Alberta también
prevé registrar un gran déficit fiscal este año.
La inflación general y la inflación subyacente
se encuentran dentro del rango meta del Banco
de Canadá (1–3 por ciento). En los precios al
consumidor intervienen dos factores opuestos:
el traspaso desde un dólar canadiense más
débil suma presiones inflacionarias, mientras
que el descenso de los precios de la energía y la
capacidad ociosa de la economía ejercen presiones
a la baja sobre la inflación.
Efectos derrame macrofinancieros
Los efectos de la reducción de los precios del
petróleo se derraman hacia la economía real a través
de un complejo conjunto de canales de transmisión
macrofinanciera. En el sector empresarial, por
ejemplo, la solvencia de las compañías petroleras se
ha deteriorado, estimándose que un número mayor
de empresas han pasado a tener una calificación
inferior al grado de inversión (gráfico 1.9). Hasta
5Entre 1991 y 1993, el tipo de cambio se depreció 14 por
ciento en términos efectivos reales y las exportaciones de bienes no
energéticos registraron un fuerte aumento de 30 por ciento. Aunque
el tamaño de la depreciación cambiaria entre 2013 y 2015 es com-
parable, las exportaciones han aumentado solo 11 por ciento durante
este período.
Estados Unidos: Activos, 2015:T4
(Porcentaje de los activos financieros internos totales)
Fuentes: Junta de la Reserva Federal y cálculos del personal técnico del FMI.
Nota: EHS = Entidades hipotecarias semipúblicas.
Gráfico 1.7. Activos financieros fuera de los bancos
de Estados Unidos
Otros
Reserva
Federal
EHS
Seguros
Bancos nacionales
21. 12
PERSPECTIVAS ECONÓMICAS: LAS AMÉRICAS
Fondo Monetario Internacional | Abril de 2016
ahora, las dificultades de las empresas petroleras no
se han derramado hacia la generalidad del sector
empresarial, pero surgen indicios de que un número
más alto de empresas enfrentan una liquidez más
restringida y mayores costos de endeudamiento,
según se indica en diversas encuestas sobre créditos
comerciales.
Las tendencias en el mercado de la vivienda se
han “trifurcado”. En las zonas metropolitanas
de Toronto y de Vancouver, los precios de las
viviendas crecen con rapidez, a una tasa de
alrededor del 10 y el 20 por ciento interanual,
respectivamente. En cambio, los precios caen
en Calgary (Alberta) y Regina (Saskatchewan),
en consonancia con el debilitamiento de los
fundamentos económicos de esas provincias ricas
en recursos naturales. En el resto del país, el precio
de las viviendas aumenta a un ritmo moderado
(gráfico 1.10).
La exposición directa del sistema bancario al
sector petrolero es limitada, pero las exposiciones
indirectas (a través de los hogares y las empresas
que realizan actividades secundarias) son más
sustanciales6. Por otra parte, el endeudamiento de
los hogares ha crecido a más del 165 por ciento
del ingreso disponible —correspondiendo una
creciente proporción de la deuda a los hogares
más jóvenes— y representa una vulnerabilidad
financiera clave para la economía canadiense. Tras
shocks de ingreso negativos, por ejemplo, una
carga de deuda elevada encierra el potencial de
generar efectos no lineales que podrían superar la
capacidad de los hogares de atender el servicio de
su deuda y generar más casos de incumplimiento
del pago de los préstamos hipotecarios. Conforme
a este escenario, la calidad de los activos y el
capital de los bancos sufrirían un impacto, aunque
las grandes entidades bancarias son rentables, al
contar con fuentes de ingresos suficientemente
diversificadas, y las garantías públicas que cubren
las hipotecas aseguradas mitigarían las pérdidas
bancarias. Por ende, las pérdidas serían manejables
y, a este respecto, los mercados consideran que los
riesgos de derrame hacia los grandes bancos estarán
probablemente bien contenidos.
6Los seis bancos más grandes destinan al sector petrolero solo
alrededor del 2 por ciento de su cartera total de préstamos. Sin
embargo, otorgan alrededor del 13 por ciento del total de préstamos
a regiones productoras de petróleo, y, colectivamente, los préstamos
hipotecarios y de consumo representan un sustancial 55 por ciento
de los préstamos totales (véase Banco de Canadá, Financial System
Review, diciembre de 2015).
98
100
102
104
106
108
110
112
114
Ene. 13 Jul. 2013 Ene. 14 Jul. 14 Ene. 15 Jul. 15 Dic.
15
–4
–2
0
2
4
6
8
2013:T1 13:T3 14:T1 14:T3 15:T1 15:
T4
90
100
110
120
130
140
T=0 T=1 T=2 T=3 T=4 T=5 T=6 T=7 T=8 T=9
Gráfico 1.8. Canadá: Navegando en un contexto de precios
más bajos del petróleo
1. Canadá: Contribuciones al crecimiento del PIB
(Variación porcentual con respecto al trimestre anterior,
tasa anual desestacionalizada)
2. Canadá: Producción por industria
(Promedio móvil de tres meses; índice: enero 2013 = 100)
3. Canadá: Exportaciones de bienes no relacionados con materias primas³
(Índice: 1991:T4 = 100 ó 2013:T2 = 100; desestacionalizado)
Fuente: Oficina Nacional de Estadísticas de Canadá.
¹ Incluye discrepancias estadísticas.
² Incluye la extracción, actividades de apoyo y construcción de obras de ingeniería.
³ Las exportaciones de bienes no relacionados con las materias primas
comprenden los productos químicos, maquinaria, electrónica, automóviles,
aviones y bienes de consumo. Actual: 2013:T3 a 2015:T4; principios de los años
noventa: 1991:T4 a 1994:T1.
Actual
Principios de los años noventa
Consumo público e inventarios¹ Exportaciones netas
Inversión residencial Inversión empresarial
Consumo privado
Crecimiento del PIB real
Sector de bienes no petroleros ni gas (partic., 21%)
Petróleo, gas y otras actividades conexas (partic., 10%)2
Sector de servicios (partic., 69%)
22. 13
1. Economía mundial en transición y perspectivas para Estados Unidos y Canadá
Fondo Monetario Internacional | Abril de 2016
Perspectivas moderadas y riesgos
que se inclinan a la baja
Hacia el futuro, se proyecta que el crecimiento
del producto se recupere moderadamente al
1,5 por ciento en 2016 y 1,9 por ciento en 2017.
Una reducción de la inversión en el sector
energético continuará imponiendo un lastre a la
economía. Los precios del petróleo en torno a
USD 35–USD 50 por barril proyectados para el
futuro próximo son significativamente inferiores
a los costos de equilibrio a largo plazo para
las actividades de extracción de petróleo no
convencional en Canadá, y se prevén más recortes
sustanciales del gasto de capital en 2016.
La otra cara de la moneda es que probablemente
el producto se verá impulsado por varios factores
compensatorios. Primero, se prevé que mejoren las
exportaciones e inversiones no relacionadas con los
recursos naturales, en consonancia con la vigorosa
expansión de la economía de Estados Unidos y
el tipo de cambio más competitivo de Canadá.
Segundo, el consumo privado se mantendrá
sólido dadas la firme expansión del empleo en las
provincias que no cuentan con recursos naturales
y la política monetaria acomodaticia. Por último,
el gobierno acaba de anunciar nuevos gastos en
infraestructura en el presupuesto federal de 2016.
En general, la balanza de riesgos se inclina no
obstante hacia la baja:
• Por ser un exportador neto de petróleo, Canadá
seguirá enfrentando los vientos adversos que
representan los precios persistentemente
bajos de esa materia prima. Si los precios
permanecen en sus bajos niveles actuales
durante un período prolongado, o vuelven a
caer, las empresas petroleras recortarían no solo
el gasto de capital sino también la producción.
• Por ser una economía abierta, Canadá es
susceptible a los efectos de un crecimiento más
débil de sus principales socios comerciales,
especialmente de Estados Unidos (a donde
van dirigidas alrededor de tres cuartas partes
de las exportaciones canadienses) y, en menor
medida, de las economías emergentes de Asia
(que absorben alrededor del 8 por ciento de
las exportaciones de Canadá). Una expansión
más fuerte de Estados Unidos, sin embargo,
presentaría un riesgo al alza para Canadá.
Canadá: Calificaciones crediticias implícitas de las empresas de petróleo
y gas según la frecuencia esperada de incumplimiento (EDF)
(Proporción del número de empresas)
0
5
10
15
20
AAA
AA+
AA
AA–
A+
A
A–
BBB+
BBB
BBB–
BB+
BB
BB–
B+
B
B–
CCC+
CCC
CCC–
CC
C
D
Gráfico 1.9. Calificaciones más bajas para las empresas
de energía
Fuente: Moody’s Credit Edge.
¹ Alrededor del 60 por ciento de los activos de mercado a finales de febrero de
2016 (frente al 32 por ciento a finales de 2013).
A finales de diciembre de 2013
A finales de febrero de 2016
Inversión especulativa1
Canadá: Índice de precios de la vivienda, zonas metropolitanas
(Variación porcentual interanual)
Fuente: Asociación Canadiense de Bienes Raíces.
Nota: Los índices están ponderados por la población.
–5
0
5
10
15
Ene. 2012 Ene. 13 Ene. 14 Ene. 15 Feb.
16
Gráfico 1.10. Tendencias divergentes en los mercados
inmobiliarios
Vancouver y Toronto
Ottawa y Montreal
Calgary y Regina
23. 14
PERSPECTIVAS ECONÓMICAS: LAS AMÉRICAS
Fondo Monetario Internacional | Abril de 2016
• Una fuerte corrección del mercado de la
vivienda (de manera importante, en Vancouver
y Toronto, donde los precios de las viviendas
siguen estando sobrevalorados) podría dar
lugar a un efecto riqueza negativo, reduciendo
la demanda interna y deteriorando la calidad de
los activos bancarios. No obstante, el impacto
adverso en el sistema bancario quedaría
mitigado por el alto nivel de capitalización
de los bancos y las garantías públicas que
respaldan las hipotecas aseguradas.
En lo que respecta a los efectos derrame regionales,
una contracción económica de Canadá podría
afectar a una serie de economías caribeñas. Los
bancos canadienses tienen una presencia dominante
en el sistema bancario del Caribe, representando
entre el 70 por ciento y el 80 por ciento de los
activos bancarios totales, por ejemplo, en Barbados
y Las Bahamas. También podría verse afectado
el turismo en esa región, ya que los turistas
procedentes de Canadá conforman la segunda
afluencia más grande de viajeros, después de la que
llega desde Estados Unidos.
Prioridades de política
económica en Canadá
El Banco de Canadá ha mantenido su tasa de
política en el 0,5 por ciento desde julio de 2015
y ha dado señales, acertadamente, de que seguirá
aplicando una política monetaria acomodaticia
dada la capacidad ociosa existente en la economía.
Asimismo, recientemente el Banco de Canadá ha
actualizado su marco de herramientas de política
no convencionales (como tasas de interés de
política negativas y compras de activos a gran
escala). Con su tasa de política cercana a cero,
el espacio de política monetaria convencional
podría agotarse rápidamente si se deterioraran las
perspectivas de crecimiento. Si bien el Banco de
Canadá está preparado para desplegar herramientas
no convencionales, la política fiscal también puede
desempeñar un papel de apoyo a este respecto,
dado el espacio de política disponible y el bajo nivel
de deuda existente a nivel federal.
En este contexto, el gobierno federal anunció un
conjunto de medidas de estímulo al crecimiento igual
al 1¼ por ciento del PIB durante los próximos dos
años. Las medidas incluyen un aumento del gasto en
infraestructura, inversión en viviendas, transferencias
a familias con hijos y recortes de impuestos para
la clase media. El gobierno está comprometido
a ampliar los proyectos de infraestructura por
un monto de C$60.000 millones durante los
próximos 10 años. Esto permitirá dar un estímulo
a la economía en el corto plazo y contribuirá al
crecimiento potencial del país a más largo plazo.
Para prevenir riesgos en el sector de la vivienda,
las autoridades están adoptando medidas
macroprudenciales adicionales. En diciembre de
2015 las autoridades anunciaron modificaciones de
las normas sobre financiamiento hipotecario: un
aumento de los requisitos de pago inicial para las
hipotecas aseguradas (vigente a partir de febrero
de 2016) y un aumento de las comisiones de
titulización (que entrará en vigor en julio de 2016).
También propusieron requisitos de capital más
elevados para las hipotecas residenciales.
24. 15
1. Economía mundial en transición y perspectivas para Estados Unidos y Canadá
Fondo Monetario Internacional | Abril de 2016
Desde la publicación del informe WEO de octubre de 2015, en los mercados de petróleo se han registrado
nuevas presiones a la baja sobre los precios del petróleo crudo, que han experimentado una caída del 35 por
ciento con respecto a los niveles previstos en las proyecciones anteriores del personal técnico del FMI. A pesar
de una cierta recuperación en los precios del petróleo en el primer trimestre de 2016, estos precios se mantienen
a niveles relativamente bajos. El barril de petróleo crudo West Texas Intermediate, por ejemplo, se negocia en
alrededor de los USD 40 después de un breve período en que se redujo a USD 27 en febrero de 2016: su nivel
más bajo desde 2003. Los factores que explican esta caída de los precios incluyen un exceso de oferta, ganancias
de eficiencia en la producción y una demanda más débil, lo que lleva a plantearse si los precios del petróleo se
mantendrán “bajos por más tiempo”.
La irrupción de la producción del petróleo “shale” —impulsada por Estados Unidos— ha supuesto un
incremento de unos 4 millones de barriles diarios en el mercado de crudo desde 2009, lo cual ha contribuido a
una sobreoferta. La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) básicamente absorbió este shock
de la oferta1, manteniendo o elevando los niveles de la producción convencional. Los significativos aumentos
previstos de las exportaciones iraníes de petróleo probablemente ejercerán presiones adicionales a la baja sobre
los precios del petróleo. Las revisiones a la baja del crecimiento mundial, especialmente en las economías de
mercados emergentes, también han reducido la demanda de petróleo. Los inventarios han alcanzado niveles muy
elevados. Por otra parte, la turbulencia en los mercados financieros y un dólar fuerte también han contribuido al
retroceso de los precios del petróleo.
De cara al futuro, la caída secular del consumo de petróleo en las economías avanzadas, las perspectivas de
crecimiento menos favorables en los mercados emergentes y la resiliencia de los productores de petróleo
“shale” al descenso de los precios apuntan, en conjunto, a un escenario en que esos precios se mantendrán
“bajos durante más tiempo”. En primer lugar, la producción de petróleo “shale” es una tecnología relativamente
nueva y ha experimentado ganancias de eficiencia extraordinarias en respuesta a la caída de los precios del
petróleo. Parte de su resiliencia se debe también a una demanda débil de servicios en el sector petrolero, lo que
ha reducido los costos para los productores de petróleo “shale”. Por otra parte, la producción de petróleo no
convencional ha comenzado a mostrar algunos indicios de debilitamiento a corto plazo. La caída del precio del
petróleo ha provocado drásticos recortes de la inversión en este sector y la producción de petróleo “shale” se
mantiene un 10 por ciento por debajo de su nivel máximo.
La industria del petróleo “shale” en Estados Unidos ha adquirido un papel protagónico en los últimos años, lo
que probablemente también afectará a la trayectoria futura de los precios del petróleo. Por un lado, la producción
de petróleo “shale” puede incrementarse rápidamente siempre que los precios del petróleo se mantengan por
encima del costo marginal de producción. Estos últimos se han reducido en promedio de alrededor de USD 60
a USD 40 el barril debido a las ganancias de eficiencia operativa. Estas ganancias son el resultado de los avances
tecnológicos, la deflación de los costos de los insumos y la concentración de recursos en los pozos más productivos.
El gráfico 1.1.1 muestra que el nivel actual de la producción puede mantenerse si los precios del petróleo se sitúan
ligeramente por encima de USD 40 suponiendo una deflación de los costos de producción del 10 por ciento.
El petróleo “shale” también hará que los ciclos de precios del petróleo sean más cortos y limitados dado que
conlleva gastos no recurrentes inferiores a los del petróleo convencional, y el desfase entre la primera inversión
y la producción es mucho más corto. Esta característica del petróleo “shale” limitará la subida de los precios del
petróleo a mediano plazo. Por otro lado, existen factores de vulnerabilidad financiera en el sector del petróleo
Nota: Este recuadro fue preparado por Akito Matsumoto, con la colaboración de Vanessa Díaz Montelongo y Rachel Fan en la investigación.
1Más recientemente, en una reunión celebrada en Doha el 16 de febrero de 2016, los ministros del petróleo de Arabia Saudita, Qatar, Rusia
y Venezuela acordaron congelar la producción, y posteriormente Irán e Iraq se mostraron a favor de esta iniciativa pero sin ningún compromiso
de frenar o reducir los aumentos programados de su producción.
Recuadro 1.1. ¿Precios más bajos por más tiempo? La caída de los precios del petróleo y
el rol del petróleo “shale” de América del Norte
25. 16
PERSPECTIVAS ECONÓMICAS: LAS AMÉRICAS
Fondo Monetario Internacional | Abril de 2016
“shale”. Una ola de quiebras y despidos podría limitar la flexibilidad de la producción de petróleo “shale” dado que
podría ser más difícil movilizar rápidamente la mano de obra cualificada requerida. Además, el descuento de costos
del sector de servicios del petróleo probablemente disminuirá cuando los precios vuelvan a subir; así pues, los
precios de equilibrio podrían situarse por encima de los niveles actuales aun con los avances tecnológicos.
En general, el contexto actual de bajos precios debería dar lugar en su momento a una reversión parcial de
los precios a mediano plazo. Los futuros del petróleo apuntan a un aumento moderado de los precios, como
muestra el gráfico 1.1.2. Según el escenario base proyectado por el FMI, el precio alcanzará un promedio de
USD 34,60 en 2016, una caída del 32 por ciento con respecto a 2015, para luego subir a USD 40,99 en 2017 y
USD 44,52 en 2020. Sin embargo, la incertidumbre en torno al escenario base se ha intensificado, como muestra
la volatilidad inusual de los precios en las últimas semanas. Las tensiones geopolíticas en Oriente Medio podrían
causar perturbaciones en el mercado del petróleo. Pero los elevados niveles de los inventarios de petróleo y la
rápida respuesta de los productores de petróleo “shale” de Estados Unidos al utilizar los pozos perforados pero
incompletos deberían limitar las escaladas de precios en el futuro cercano. Un período prolongado en que el
petróleo se mantenga a bajo precio, no obstante, también podría dar lugar a una notable recuperación de los
precios al reducirse la inversión en actividades extractivas, lo que afectaría al suministro futuro de petróleo. Esta
reducción de la inversión ya está en marcha, especialmente fuera de la OPEP.
A más largo plazo, el aumento de la demanda de petróleo de los mercados emergentes debería neutralizar con
creces la caída de la demanda de las economías avanzadas. Se proyecta que China e India se conviertan en los
dos principales países consumidores de petróleo a nivel mundial. El aumento de los ingresos y la expansión de la
Fuente: Investigaciones y análisis de Rystad Energy.
0
5
10
15
20
25
30
10 20 30 40 50 60 70 80 90
Precios del petróleo Brent (USD por barril)
Sin deflación de costos –10% –20%
–30% –40%
Númerodeperforacionesinicialesdepozos
depetróleo“shale”anuales(miles)
Número de pozos necesario
para aumentar la producción anual
en 1 millón de barriles diarios
Número de pozos
necesario para
mantener la
producción en el
mismo nivel
Gráfico 1.1.1. Producción de petróleo “shale”
con diferentes escenarios de costos
0
15
30
45
60
75
90
Ene.
2015
Nov.
15
Sep.
16
Jul.
17
May
18
Mar.
19
Ene.
20
Dic.
20
Datos más recientes (18 de marzo de 2016)
Informe WEO de abril de 2016
Informe WEO de octubre de 2015
Informe WEO de abril de 2015
Fuentes: Bloomberg, L.P., y FMI, base de datos del
informe WEO.
Nota: Los precios de futuros en el informe WEO correspon-
den a supuestos del escenario base para cada edición de
este informe y se derivan de los precios de futuros. Los
precios de la edición de abril de 2016 del informe WEO se
basan en los precios al cierre del 26 de febrero de 2016.
Gráfico 1.1.2. Curva de futuros del petróleo
Brent
(Dólares de EE.UU. por barril; fechas de vencimiento
en el eje horizontal)
Recuadro 1.1 (continuación)
26. 17
1. Economía mundial en transición y perspectivas para Estados Unidos y Canadá
Fondo Monetario Internacional | Abril de 2016
clase media en estas economías incrementarán su demanda de servicios de transporte (Chamon, Mauro y Okawa,
2008). No obstante, hay incertidumbre con respecto al grado en que el aumento de la demanda de servicios de
transporte se traducirá en consumo efectivo de combustible dada la rápida evolución de la tecnología automotriz
y las políticas de transporte público. Si bien China está tratando de alejarse de los combustibles fósiles debido a la
calidad del aire y a otras cuestiones medioambientales, los bajos precios del petróleo podrían retrasar la transición
hacia fuentes de energía más eficientes y más limpias (véase la sección especial sobre las materias primas en
el capítulo 1 de la edición de abril de 2016 del informe WEO). Las ventas de vehículos eléctricos (como los
híbridos) en Estados Unidos han disminuido en 2015 al reducirse los precios de los combustibles. En resumen,
la demanda futura de petróleo de los mercados emergentes dependerá no solo del crecimiento de sus ingresos,
sino también de sus políticas energéticas.
Recuadro 1.1 (continuación)
27.
28. Fondo Monetario Internacional | Abril de 2016
Mientras la recuperación mundial continúa luchando por
afianzarse, en América Latina y el Caribe se prevé que en
2016 el crecimiento sea negativo por segundo año consecu-
tivo. La recesión regional oculta el hecho de que la mayoría
de los países siguen creciendo, de manera moderada pero
segura, y que la contracción responde a los acontecimientos
que se están produciendo en unos pocos países de la región.
Aunque el entorno externo ha tenido un impacto diferen-
ciado en la región —con América del Sur que se ha visto
notablemente afectada por la caída de los precios de las
materias primas, y México, América Central y el Caribe
que se han beneficiado de la recuperación de Estados Uni-
dos y, en la mayoría de los casos, de los precios más bajos del
petróleo—, las disparidades en el desempeño del crecimiento
también obedecen a factores internos. Los países con sólidos
fundamentos internos continúan ajustándose relativa-
mente sin problemas, pero en otros países las rigideces y los
desequilibrios internos han amplificado los efectos de los
shocks externos. Para poder administrar esta transición a
precios de las materias primas persistentemente más bajos,
las políticas deben tener como meta preservar los márgenes
de maniobra e impulsar el crecimiento a largo plazo.
Resultados de crecimiento diversos
y perspectivas moderadas
La demanda mundial sigue siendo moderada, lo que
refleja transiciones clave en la economía mundial,
relacionadas con la desaceleración gradual y el
reequilibramiento de la economía china, los precios
más bajos de las materias primas y el deterioro de las
condiciones financieras mundiales. En este contexto,
la actividad económica en América Latina y el Caribe
se ha visto gravemente afectada y se prevé que se
reduzca un 0,5 por ciento en 2016, lo cual supone
dos años consecutivos de crecimiento negativo, por
primera vez desde la crisis de la deuda de 1982–83
(gráfico 2.1). Sin embargo, la cifra general por sí
sola oculta el hecho de que numerosos países están
administrando la transición de manera ordenada
y siguen creciendo de manera lenta pero segura,
mientras que una cantidad reducida de economías
—que representan aproximadamente la mitad
de la economía de la región— se enfrentan a una
2. Crecimiento del PIB real²
(Porcentaje)
Proyecciones
2014 2015 2016 2017
1. Crecimiento proyectado, 2016¹
Gráfico 2.1. Perspectivas de crecimiento
Comparación de tasas de crecimiento
Crecimiento negativo 2016
Crecimiento positivo 2016;
por debajo del promedio
histórico
Crecimiento positivo 2016;
por encima del promedio
histórico
Fuentes: FMI, base de datos del informe WEO, y cálculos del personal técnico del FMI.
1
El promedio histórico se refiere al crecimiento promedio de 2000–13.
2
Promedio ponderado por el PIB en función de la paridad del poder adquisitivo.Véase
la información sobre los grupos de países en la página 117.
ALC
América del Sur 0,7 –1,4 –2,0 0,8
CAPRD 4,9 4,9 4,6 4,4
El Caribe
Economías dependientes del turismo 1,1 1,2 2,2 2,3
Países exportadores de materias primas 0,0 –0,9 –0,6 2,1
Partidas informativas
AL-6 1,4 –0,3 –0,3 1,6
Brasil 0,1 –3,8 –3,8 0,0
México 2,3 2,5 2,4 2,6
1,3 –0,1 –0,5 1,5
Nota: Preparado por S. Pelin Berkmen y Yan Carrière-Swallow,
con Leo Bonato y Roberto Garcia-Saltos, y la colaboración de Sebas-
tián Acevedo, Natalija Novta y Iulia Teodoru. El modelo de simula-
ción del recuadro 2.2 fue preparado por Allan Dizioli, Keiko Honjo
y Ben Hunt. Genevieve Lindow brindó una excelente asistencia en
la labor de investigación, y Ehab Tawfik proveyó una colaboración
excelente en el recuadro 2.1.
2. América Latina y el Caribe: Administrando transiciones
29. 20
PERSPECTIVAS ECONÓMICAS: LAS AMÉRICAS
Fondo Monetario Internacional | Abril de 2016
contracción del producto, principalmente debido a
factores internos. En términos generales, es probable
que el crecimiento a mediano plazo siga siendo
moderado, ya que los exportadores de materias
primas deben reubicar el capital y la mano de obra
fuera de los sectores intensivos en recursos, y otras
economías deben reponer sus stocks de capital. La
notable heterogeneidad en cuanto a los resultados
de crecimiento en la región responde a las disímiles
influencias provenientes de condiciones externas y
fundamentos internos.
Deterioro de las condiciones externas
Las condiciones externas han empeorado desde
octubre de 2015, en función de tres factores:
• Débil demanda externa. La recuperación mundial
ha resultado más lenta de lo esperado, lo cual
ha frenado la demanda de exportaciones de
la región y ha dificultado el ajuste externo
a pesar de las cuantiosas depreciaciones
(recuadro 2.1). Por un lado, la recuperación en
curso en Estados Unidos, aunque es más lenta
de lo que se había proyectado anteriormente
(capítulo 1), continúa respaldando la actividad
en México, América Central y el Caribe. Por
otro lado, la desaceleración de China, basada
en el sector manufacturero, ha provocado una
caída más pronunciada de las importaciones
en comparación con la desaceleración más
modesta de su PIB, reduciendo la demanda de
exportaciones de la región, particularmente la
de materias primas (gráfico 2.2).
• Nuevas disminuciones de los precios de las materias
primas se han sumado a la marcada caída
que comenzó en los mercados mundiales de
metales durante 2011, y en los mercados del
petróleo durante 2014. El shock acumulado
en los términos de intercambio de las materias
primas ha sido grave para algunos (Colombia,
Ecuador y Venezuela), más reducido para
otros (Argentina1 y México) y positivo para los
importadores netos de petróleo en América
Central y el Caribe. Las pérdidas de ingresos
varían según la importancia relativa de las
1Véase el anexo 2.1.
0
20
60
40
80
100
Gráfico 2.2. Destinos de exportaciones, 2015
(Porcentaje de las exportaciones del país)
Estados Unidos
China
Fuente: FMI, base de datos de Direction of Trade Statistics.
Nota: En las leyendas de datos se utilizan los códigos de países de la Organización
Internacional de Normalización (ISO), véase la página 118.
MEX VEN ECU CHL GTM PER COL BRA URY PAN ARG PRY
Fuente: Gruss (2014).
Nota: El gráfico muestra la diferencia entre el valor promedio del índice de los
términos de intercambio de las materias primas (CTOT, por sus siglas en inglés) en
2015 y con respecto al valor máximo alcanzado en 2010–15. Los índices CTOT se
construyen utilizando precios internacionales de 45 materias primas y valores
rezagados de las exportaciones netas de cada materia prima para cada país
(véase Gruss, 2014). Cuando los valores de las exportaciones netas se expresan
como porcentaje del PIB nominal, una disminución del 1 por ciento en el índice
puede interpretarse aproximadamnente como un pérdida de ingresos del 1 por
ciento del PIB. En las leyendas de datos se utilizan los códigos de países de la
Organización Internacional de Normalización (ISO), véase la página 118.
0
–5
–10
–20
–30
–40
–50
–10
–15
–20
0
MEX CHL PER ARG BRA ECU COL VEN
CTOT (porcentaje)
Pérdida de ingresos (porcentaje del PIB, escala derecha)
Gráfico 2.3. Deterioro de los términos de intercambio
de las materias primas y pérdida de ingresos
30. 21
2. América Latina y el Caribe: Administrando transiciones
Fondo Monetario Internacional | Abril de 2016
materias primas en cada economía, siendo muy
grandes en el caso de Venezuela (alrededor del
17 por ciento del PIB), considerable para Chile,
Colombia y Ecuador (entre un 4 por ciento y
un 7 por ciento del PIB) y más reducida para
Argentina y Brasil (gráfico 2.3). Es probable
que estos shocks a los términos de intercambio
sean muy persistentes, dado que se prevé que
los precios de las materias primas se mantengan
bajos durante algún tiempo (capítulo 1).
• Condiciones financieras volátiles. Políticas monetarias
acomodaticias y sólidos sistemas financieros
han respaldado las condiciones financieras
en toda la región, y el impacto del aumento
de la tasa de interés de la Reserva Federal ha
sido limitado hasta el momento. Sin embargo,
las condiciones financieras regionales se
deterioraron notablemente a principios de
2016, como consecuencia de la volatilidad
de los mercados financieros mundiales y las
perspectivas de crecimiento más débiles. En
los últimos meses, los costos de financiamiento
público y privado han seguido fluctuando,
incluidas las fluctuaciones de los diferenciales
de los bonos soberanos y corporativos, así
como de los precios de las acciones, debido
al impacto de factores tanto mundiales como
internos (gráfico 2.4). Alrededor de una tercera
parte del aumento de los diferenciales de los
bonos corporativos en 2015 puede explicarse
por el incremento de la volatilidad mundial;
y otra tercera parte, por el incremento del
riesgo soberano y las fuertes depreciaciones,
particularmente en el caso de las empresas
altamente apalancadas (gráfico 2.5 y capítulo
3). Las entradas de capital a la región han sido
Fuentes: Bloomberg, L.P., y cálculos del personal técnico del FMI.
1
Se refiere al índice de J.P. Morgan de rendimientos de bonos de mercados emergentes global; bonos soberanos denominados en dólares de EE.UU.
2
Se refiere al Índice Corporate Emerging Markets Bond Index Broad Diversified de J.P. Morgan; bonos corporativos denominados en dólares de EE.UU.
0
500
1.000
1.500
2.000
2.500
0
500
1.000
1.500
2.000
2.500
3.000
3.500
4.000
4.500
2011 12 13 14 15
0
250
500
750
1.000
1.250
1.500
2011 12 13 14 15
40
60
80
100
120
140
2011 12 13 14 15
0
100
200
300
400
500
600
2011 12 13 14 15 Mar.
16
Mar.
16
Mar.
16
Mar.
16
Brasil Chile Colombia
México Perú Uruguay
Argentina Bolivia
Ecuador Paraguay
Venezuela (escala derecha)
América Latina Argentina Brasil
Chile Colombia México
Perú
Brasil Chile Colombia
México Perú
4. Índices de acciones
(Índice: enero de 2011 = 100)
3. Diferenciales de los bonos corporativos²
(Puntos básicos; diferencial con respecto
a bonos soberanos)
2. Diferenciales de crédito soberano (continuación)¹
(Puntos básicos; diferencial con respecto
a títulos del Tesoro de Estados Unidos)
1. Diferenciales de crédito soberano¹
(Puntos básicos; diferencial con respecto
a títulos del Tesoro de Estados Unidos)
La volatilidad de los mercados financieros ha aumentado
Gráfico 2.4. Condiciones de los mercados financieros
31. 22
PERSPECTIVAS ECONÓMICAS: LAS AMÉRICAS
Fondo Monetario Internacional | Abril de 2016
más resilientes que las de otras economías
emergentes (capítulo 2 de la edición de abril
de 2016 de Perspectivas de la economía mundial
(informe WEO, por sus siglas en inglés)), pero
su volatilidad ha aumentado, y las disminuciones
observadas en 2015 se están revirtiendo desde
finales de febrero (gráfico 2.6).
Amplias diferencias en
cuanto al ajuste externo
Ante las cambiantes condiciones externas, muchos
países han continuado experimentando ajustes
del tipo de cambio (gráfico 2.7). En los episodios
actuales se destacan algunas características
distintivas: 1) en algunos casos, las recientes
depreciaciones con respecto al dólar de EE.UU.
se encuentran entre las más fuertes en décadas, y
exceden ampliamente a las registradas después de
la crisis financiera mundial en cuanto a tamaño y
persistencia; 2) en términos efectivos reales, estas
depreciaciones han sido más pronunciadas para
algunos países (como Brasil y Colombia), dado que
se encuentran entre los episodios más importantes
y sostenidos desde principios de la década de 1980
(recuadro 2.1, gráfico 2.1.1), y 3) en muchos casos,
las depreciaciones pueden atribuirse principalmente
al deterioro de los términos de intercambio y la
demanda externa (recuadro 2.1).
Los déficits de cuenta corriente siguen siendo
cuantiosos en numerosas economías, incluso para
la región en su conjunto. Aunque Chile sobresale
como ejemplo de un ajuste externo relativamente
veloz después de sucesivos shocks, las posiciones
externas en algunos países se han deteriorado
desde 2013 y probablemente requieran ajustes
más profundos a mediano plazo para preservar los
márgenes de maniobra externos (gráfico 2.8).
Aunque la contribución de las exportaciones
netas al crecimiento es cada vez más positiva,
esto mayormente refleja la compresión de las
importaciones, con un nivel de exportaciones que se
mantiene relativamente moderado para la mayoría
de los países, en parte debido a la escasa demanda de
los socios comerciales (gráfico 2.9). Históricamente,
las exportaciones de la región tienden a responder
fuertemente a los cambios de la demanda externa,
reduciéndose, en algunos casos, en una proporción de
uno a uno al cabo de un año (recuadro 2.1). Aunque
se proyecta que las débiles perspectivas mundiales
Fuente: Caceres y Rodrigues Bastos (2016).
Nota: El incremento total de 113 puntos básicos entre el tercer trimestre de 2014
y el tercer trimestre de 2015 corresponde al aumento promedio de las empresas
de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México, Panamá y Perú. CDS = swaps de
riesgo de incumplimiento del deudor; CTOT = términos de intercambio de las
materias primas.
Gráfico 2.5. Contribución a las variaciones de los diferenciales
implícitos de los CDS corporativos entre el tercer trimestre
de 2014 y el tercer trimestre de 2015
(Puntos básicos)
Condiciones
globales
(excl. CTOT)
(40)
Condiciones
macroeconómicas
internas
(36)
Otros factores
(15)
CTOT
(4)
Factores
específicos de
las empresas
(17)
Fuentes: FMI, base de datos de Balance of Payments Statistics Yearbook,
y cálculos del personal técnico del FMI.
Nota: Total de Brasil, Chile, Colombia, México, Perú y Uruguay.
Inversión directa
Inversión de cartera
Otra inversión
–10
0
10
20
30
40
50
2003 05 07 09 11 13 15:
T3
Gráfico 2.6. Flujos brutos de capital: Pasivos
(Miles de millones de dólares de EE.UU.; promedio móvil
de cuatro trimestres)
32. 23
2. América Latina y el Caribe: Administrando transiciones
Fondo Monetario Internacional | Abril de 2016
continúen empujando a la baja la demanda externa
de exportaciones de América del Sur, se prevé que
la depreciación de las monedas proporcione cierto
estímulo adicional este año. En general, los precios
persistentemente bajos de las materias primas, la
perspectiva de un frágil crecimiento mundial, los
cuantiosos déficits de cuenta corriente y los primeros
indicios de una disminución de las entradas de capital
probablemente sigan generando presiones a la baja
sobre los tipos de cambio.
Los fundamentos internos han afectado
a las perspectivas económicas
Aunque las condiciones externas influyen en las
perspectivas regionales, el crecimiento ha variado
mucho de un país a otro dependiendo de factores
internos. En algunos países, la desaceleración del
crecimiento puede explicarse, en gran medida, por el
shock de los términos de intercambio. En estos casos,
un ajuste relativamente moderado refleja mejoras
en los marcos de políticas implementados durante
los últimos 20 años, que afianzaron la estabilidad de
los precios internos y, al mismo tiempo, permitieron
una mayor flexibilidad del tipo de cambio y una
política fiscal sostenible con espacio para responder
a shocks externos. La credibilidad de estos marcos
monetarios y fiscales permitió que Chile, Colombia,
México y Perú implementaran políticas contracíclicas
respaldadas por estrategias de consolidación a
mediano plazo, lo cual suavizó el impacto de los
shocks externos en el crecimiento (gráfico 2.10).
Sin embargo, en algunos casos, los factores internos
han sido la principal causa de la caída pronunciada
Fuentes: FMI, base de datos de Information Notice System; FMI, base de datos del informe WEO, y cálculos del personal técnico del FMI.
Nota: América Central = Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Panamá. TCER = tipo de cambio efectivo real. Véanse los códigos de países de
la Organización Internacional de Normalización (ISO) utilizados en las leyendas de datos en la página 118, y la información sobre grupos de países, en la página 117.
1
Promedios ponderados por el PIB en función de la paridad del poder adquisitivo.
–2
–4
–6
–8
–10
0
2
4
6
8
PAN SLV DOM GTM CHL CRI URY PER BRA MEX ECU ARG COL
Balance petrolero Exportación no petrolera
Importación no
petrolera
Servicios netos
Ingreso neto
Cuenta corriente
4. Los ajustes de la cuenta corriente están en curso pero
no han llegado a su fin.
(Contribuciones, 2013–15; variación acumulada; puntos
porcentuales)
75
85
95
105
115
125
70
100
130
160
190
220
250
280
310
Ene. 2013 Jul. 13 Ene. 14 Jul. 14 Ene. 15 Jul. 15 Ene. 16
AL-6 más Argentina
América Central
Bolivia, Ecuador y Venezuela (escala derecha)
3. … y provocando un ajuste del tipo de cambio real en
aquellos países con tipos de cambio flexibles¹.
(Índice TCER: 2013 = 100; aumento = apreciación)
–15
–30
–45
–60
–75
0
15
30
45
GRD
VCT
BRB
BHS
JAM
URY
LCA
CRI
GUY
ATG
GTM
TTO
HTI
PAN
BLZ
DMA
DOM
SLV
KNA
NIC
HND
SUR
PRY
MEX
ARG
CHL
PER
BOL
BRA
COL
ECU
VEN
2. … generando impactos heterogéneos en los términos
de intercambio regionales…
(Variación porcentual acumulada; de 2011 a 2016)
0
20
40
60
80
100
120
140
2011 12 13 14 15 16 17
Petróleo Cobre
Mineral de hierro Soja
1. Los precios de las materias primas han disminuido y se prevé que
permanezcan bajos…
(Índice: 2011:T1 = 100; basado en los precios
en dólares de EE.UU.)
Gráfico 2.7. Ajuste externo