DIDÁCTICA DE LA EDUCACIÓN SUPERIOR- DR LENIN CARI MOGROVEJO
Cuando lleguen las flores
1. CUANDO LLEGUEN LAS FLORES
Aún la recuerdo así como aquella primera noche, es más también recuerdo como
terminó lo nuestro con aquellas palabras.
Llegó el día de la boda y mi familia asistió como cualquier otra ocasión; mi deseo
no era ir, esas fiestas me aburrían, sentí a que solo era pérdida de tiempo, prefería
quedarme en casa, ver películas y dormir hasta tarde. Pero fue ese día que
empecé a creer en el destino porque fue él quien me llevo hasta ella esa noche.
No tengo ni la menor idea de cómo fue que me enamoré de ella, ni mucho menos
como llegamos a tener algo.
Llegue a la fiesta pensando que sería un día común como cualquier otro, pero
resultó que no, estuvimos en la ceremonia religiosa y después en el banquete, por
cierto muy delicioso; la tarde llego y con ella la noche, como toda noche en
Londres el clima era demasiado frío. Pero no sé cómo no pensé antes que esa
noche sería especial, había algo que no había notado, mi cuerpo tenía una bonita
sensación que de algo pasaría en mi vida que terminaría marcándola, era ella, no
lo supe hasta hoy.
Pasaba el tiempo y la gente empezaba a marcharse, poco a poco fuimos
quedando algunos amigos y yo, después de todo fui el que se quedó hasta que
todo terminó. Me encontraba tomando y platicando con mis amigos cuando la vi,
era tan linda como nadie lo es, no sé cómo no pude darme cuenta de su presencia
si era única, estaba sentada tomando y riendo con sus amigos, viviendo su vida
feliz.
En toda la noche estuve al pendiente de ella pero en cambio ella nunca noto mi
presencia, eso fue un poco doloroso porque aunque nadie lo crea parecía como si
la conociese desde siempre, desee que la noche fuese eterna pero no siempre es
lo que uno quiere. La noche termino, ella se fue, creí que jamás volvería a saber
de ella, ¡ese 23 de diciembre sería inolvidable!
Un mes después iba llegando a una reunión en la casa de Carlos uno de los
amigos de mi hermano, y de nuevo el destino poniéndole chispa a mi vida, jamás
me imagine encontrarme a Karen en esa reunión, cuando la vi fue como un
vuelco en el corazón, creo que nunca podré expresar lo que sentí. En ese
momento me sentí el hombre más feliz del planeta, sin exagerar. Tenía que
aprovechar aquella oportunidad que el destino había puesto en mi camino y fue
así como le dije a Carlos que ella que hacía ahí, me dijo que era su prima que
venía a Londres cada año, no pude comprender eso ya que yo la había visto un
mes antes, eso ella me lo explico después, Carlos me presento con ella y no me
despegue de ella hasta que me conto toda su vida, no sé si me vi muy estúpido al
2. decirle que esa noche de la boda me había robado el corazón pero creo que es lo
más sincero que nunca he dicho, aún recuerdo como rió de las palabras que
salieron de mi boca. Nadie puede explicar como el tiempo pasa tan rápido cuando
estás con un persona que te interesa demasiado, a mi me sucedió cada noche
que pasé con ella. Le pedí su teléfono y prometí que la visitaría en las próximas
vacaciones y así fue.
Pasaban los días y cada noche le hablaba, quedaba dormido hasta hablar con ella
y las vacaciones las anhelaba más que nunca, cuando estas llegaron cumplí mi
promesa, le pedí la dirección de la universidad de Karen y volé a Canadá.
Llegué en la mañana, me hospede en el hotel San Carlos, en la tarde cuando
llegaba la hora en la que Karen salía de clases fui a su escuela, estaba en la
puerta principal esperándola con un ramo de rosas rojas, estaba tan feliz que no
tenía la menor idea de lo que pasaría después. Cuando vi que los jóvenes
empezaban a salir mi emoción aumento. Karen iba saliendo y no esperé más fui
en seguida a saludarla, pero cuál fue mi sorpresa, un chico salió de no sé dónde y
la saludo con un beso en la boca y ella sonrió de felicidad, de nuevo mi corazón
volcó me arrepentí de no haberle avisado que iría pero me arrepentí aún más de
no haberle preguntado si tenía alguna relación amorosa. A pesar de eso admiré mi
reacción ya que no tiré el ramo de rosas pero no voy a negar que en seguida la
tristeza invadió mi rostro, lo único que hice fue ir al hotel, esperar que pasaran un
par de horas y llamar a Karen: solo le dije que me encontraba en Canadá y que
quería hablar con ella; no pude ver su cara de sorprendida pero si escuchar su
voz, me dijo que qué hacía ahí que por qué no le había avisado de mi visita, le
respondí que solo quería darle una sorpresa, creo que lo único bueno fue que me
confesó que sí se la di, me pidió la dirección del hotel en donde me hospedaba y
quedó que pasaría por mí, creí que tardaría pero a los 15 minutos ella ya se
encontraba en mi puerta.
Salimos a cenar y después a tomar, lo único que pensaba era que cómo podía ser
tan única, en ese entonces ni siquiera recordaba lo que había pasado en su
escuela y mucho menos le conté lo sucedido, no quería desperdiciar ni un
segundo del tiempo en explicaciones estúpidas o más bien no quería escuchar de
su boca que amaba a aquel chico. El tiempo de nuevo paso rápido, y en las
siguientes noches paseábamos y nos divertíamos, fueron los días más bellos de
mi vida o al menos hasta ahora, creo que no es necesario explicar todo lo que
paso en esos días ya que cualquier chico enamorado sabe, llegó la noche en que
tenía que regresar a Londres ella me acompañó al aeropuerto y lo único que
pensaba era "tengo que decirle lo que siento por ella", llegamos al aeropuerto y
cuando nos encontrábamos sentados en la sala de espera me llene de valor y
cuando me volteé a verla para platicar con ella, me robó un beso, ese beso fue lo
3. más hermoso que tuve en todo el año, ella había hecho su parte y yo tenía que
hacer la mía. Le confesé todo lo que sentía por ella y luego la besé, maldije aquel
momento cuando anunciaron mi vuelo, me despedí de ella y prometió que ella me
visitaría esta vez, subí al avión, en el viaje me quedé dormido y cuando desperté
por un momento pensé que todo lo había soñado pero no fue así y sentí un gran
alivio de enterarme de eso.
Lo primero que hice cuando descendí del avión fue hablarle, hablé con ella hasta
llegar a casa. Subí a mi cuarto y me recosté en la cama, pensé todo un futuro con
ella y cuando hice esto estaba consciente de que ella tenía una relación con un
joven, tenía miedo de que lo "nuestro" no funcionará por la diferencia de años ya
que yo era más grande que ella por 5 años, bueno en realidad que sus padres no
aceptarán nuestra relación ya que yo quería algo serio con ella.
El tiempo por primera vez pasaba más lento que nunca, pero en fin llego el día en
que me llamo y me dijo que pasará por ella al aeropuerto, esta vez se quedo en mi
casa, la reacción de mis padres cuando se la presente. Después de la cena
cuando se subió a dormir mis padres platicaron conmigo, me dijeron que andar
con una chica mucho más joven implicaba muchas responsabilidades y sobre todo
respeto en sus decisiones. Después subí a dormir.
En la mañana la llevé a comer a mi restaurant favorito, en la noche salimos con
mis amigos a beber, cuando ya me encontraba en un estado de ebriedad me dio
tristeza estar con ella y que no me contará de su relación con aquel chico.
El fin de semana terminó, ella se fue.
En la noche de aquel mismo día recibí su llamada y con ellas las palabras que
quería escuchar: "Tengo novio y lo amo", no era algo que no sabía que pasaría, le
dije que si estaba segura de lo que decía y lo afirmó.
Volé a Canadá y no sé porque lo hice si estaba consciente que sería en vano.
Fui directo a su escuela y cuando salió le pedí una explicación, ¿por qué no me lo
dijo desde un principio?, ¿por qué me dio alas?. Lo único que dijo fue: "Lo amo",
se dio la vuelta y no tenía caso ir tras de ella. En ese mismo instante me fui al
aeropuerto y tome el primer vuelo, la deje en paz y no por ella sino por mí, ella ya
era feliz y yo también quería serlo, así que me enfoque en olvidar aquella historia
cuando llegasen las flores tan corta pero significante; y aquí estoy sentado en la
banqueta de un parque recordando de nuevo esta historia.