2. Prólogo
Este es un libro de gran actualidad. Su capítulo VIII refiere par-
ticularmente la sangrienta inseguridad en que vive el país
por una especie de “autoguerra”, al parecer ya perdida,
según lo ven también desde EE.UU.
Otro capítulo nos muestra al Secretario del Tesoro de EE.UU.
diciéndole al presidente Zedillo que reciba al Subsecreta-
rio que “va a decirle lo que tiene qué hacer.” Y cómo Ze-
dillo lo acata.
Un aspecto tratado aquí originalmente es el de las “diversas
opciones sexuales”. Nuestra democracia, al igual que otras,
recibe consignas dócilmente, en la Asamblea de Represen-
tantes y hasta en la Suprema Corte de Justicia.
El lector se sorprenderá también de los planes de estudio de
la UNESCO y de nuestro atraso en la educación pública.
¿Y qué decir de la ofensiva actual —poco conocida— contra
la Civilización Occidental? Revelaciones de cómo opera en
Europa y en América.
Hay capítulos sobre los problemas de México en el contexto
del mundo. En una serie de males no vamos solos. No son
males privativos de México.
En fin, es un libro que habla valientemente claro sobre la “élite”
gubernamental más cara del mundo. Es un libro tremendo.
Lic. Jesús F. Benítez.
Cada Capítulo Trata un Tema Diferente.
3. 3
CAPÍTULO I
Preocupados por los Problemas Propios
no Vemos el Entorno
En general nos falta información de
lo que en otros países debilita y destruye
la fuerza internacional que busca erigir
un llamado “Nuevo Orden”.
DE LA ESPERANZA El mexicano ha visto llegar
A LA DESILUSIÓN sucesivamente a siete pre-
sidentes de la República y ha tenido la esperanza de que ha
gan algo para detener la caída del país, pero luego los ha
visto irse dejando la situación en peores condiciones. Preo
cupado, indignado por los problemas nacionales, el mexica-
no no puede percibir lo que sucede en otros muchos países.
Además, dispone de muy poca información, como si la prensa
internacional así lo quisiera.
Todo esto es natural. Lo que vivimos en México nos afecta
inmediatamente en lo político, lo económico y lo familiar.
Hagamos un sintético repaso de lo que nos preocupa:
— Las crisis económicas se suceden de un año a otro, a
veces como repercusión de las estadounidenses o por
4. 4
obra de los propios gobiernos. Que las “fracciones par
lamentarias” se reparten 226 millones de pesos entre
siete Partidos políticos, sin ver la pobreza del agro; que
el Senado gasta 4.5 millones de pesos en “mejorar su
imagen”; que los diputados posponen la Ley Antise-
cuestro porque se van de vacaciones; que la Adminis-
tración crea miles de nuevas plazas de altos funciona-
rios; que en un mes 4,000 empresas sufren “extorsio-
nes” a manos de la delincuencia; que un ex diputado
roba rieles de ferrocarril y queda libre con fianza; que
19,000 millones de pesos se destinaron para pagarles
sueldos a los ferrocarrileros cesantes por la venta de
los Ferrocarriles Nacionales de México, y muchos et-
céteras más. ¿Cómo no preocuparse por todo eso que
gravita sobre los contribuyentes, en tanto que el pre-
supuesto gubernamental sube 154,000 millones en un
año (2007), 190,000 millones el año siguiente, y luego
150,000 millones más?
— En el ramo económico sucede todo eso, y mucho más,
pero no es menos grave lo que ocurre en la disolución
social. Que en las escuelas se enseña que la vida surgió
por carambolas del azar, no porque exista Dios; que los
abortos en el D.F. se cuadruplican a 1,150 mensuales
por ser legalizados en la Asamblea de Representantes;
que la Suprema Corte de Justicia investiga si a los 90
días de embarazo hay en el vientre de la madre un niño
o “algo” indefinido; que ya los homosexuales pueden
casarse y adoptar niños, según fallo de diputados, ma-
gistrados y el presidente Calderón; que la impunidad
es una nueva institución que cubre a toda clase de fun-
cionarios, ya sean municipales, estatales o federales; y
otras muchas etcéteras.
5. 5
— ¿Cómo no preocuparse también por la suerte de vein-
te millones de habitantes del campo empobrecidos por
Salinas de Gortari y por Zedillo mediante el TLC? El cré-
dito al Agro era de 33,000 millones de pesos y se bajó
a 8,000 millones; se cancelaron los “precios de garan-
tía”; que Fox les dijo a los miserables campesinos que
se fueran a Estados Unidos (así, sin papeles, jugándose
la vida); que tan sólo en 2010 se importaron comesti-
bles de EE.UU. por valor de 163,000 millones de pesos;
que ya ni fertilizantes suficientes se producen en Mé-
xico, y que en los 15 años de vigencia del TLC se han
ido más de un billón de pesos a favorecer a los agri-
cultores americanos, en vez de quedarse en el campo
mexicano; que todo esto ha sido compromiso de los
gobernantes mexicanos con Washington, a través del
Fondo Monetario Internacional, según denuncia hecha
por el senador José Ángel Conchello (10 Oct. 1996). Y
más etcéteras.
— Que las finanzas del país giran alrededor de Pemex, al
grado de que en un decenio (2000- 2009) recaudó más
de ocho billones de pesos, pero pagó de impuestos un
70%, de tal manera que no le han quedado recursos
para amortizar sus enormes adeudos y buscar nuevos
pozos; que su rendimiento va en descenso, no así el
aumento de sus funcionarios, y etc., etc.
— Que en 1987, con las “privatizaciones” de empresas es-
tatales, manejadas por Jacques Rogozinky, sólo había
en México un rico con dos mil millones de dólares, y en
2008 ya eran 22, con una fortuna acumulada de 100,000
millones de dólares, frente a los cuales hay 50 millones
de pobres y 15 millones de misérrimos; que la venta de
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los Bancos mexicanos al extranjero no sólo no trajo nin-
gún beneficio al país, sino que los dueños extranjeros
discriminan a los empresarios mexicanos en los créditos
y se llevan utilidades que en 2009 ascendieron a 60,000
millones de pesos, que antes se quedaban en México.
Que lo mismo pasa con la riqueza minera, en manos de
“Alamos Gold Inc.”, la “Metálica Resources Inc.” y otras
varias, que se llevan las utilidades al extranjero median-
te “arreglos” para no pagar impuestos, según las modi-
ficaciones aprobadas por Fox a la Ley Minera, y amplia-
das por Calderón. Que tan sólo la producción de oro era
de seis toneladas y en 27 años ha subido a 39 toneladas,
dejando muy por abajo al valor de la plata que los con-
quistadores españoles transladaron a España durante
tres siglos.
En fin, todo lo anterior son apenas algunos chispazos de
las desventuras que sexenio a sexenio (siete en total) abruman
a cien millones de habitantes de México, más otros diez millo-
nes que buscan en Estados Unidos su pan de cada día.
Especificar tales desventuras —como lo merecen— se lle-
varía cientos de páginas. Valga decir que todas las clases so-
ciales, ahora sí desde las más humildes hasta las medianas y
las multimillonarias, viven días amargos con la delincuencia
que extorsiona a comercios, que roba automóviles, que se-
cuestra y “ejecuta” sumariamente en donde quiere y a la hora
que quiere.
¿Y qué decir de la “Guerra” que el presidente Calderón de-
claró al narcotráfico desde 2007? Es una guerra ajena, en la
que él empeñó al Ejército Nacional y a la Marina, en tanto que
en Estados Unidos su Suprema Corte prohibió que sus fuerzas
armadas trataran de detener la entrada de drogas. El costo de
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esta guerra calderonista es un secreto de Estado, sin contar
con la pérdida de turismo extranjero, que significa miles de
millones de pesos.
PERMISIBLE EN LA Todo lo escrito hasta aquí
DEMOCRACIA LIBERAL es posible que ocurra por-
que México (y casi todo el mundo) se rigen por la Democracia
Liberal. No hay otra. El ex-presidente de Uruguay (1972-1976),
Juan María Bordaberry, señala que no es válido hacer de esta
Democracia un dogma. Todos queremos educar a nuestros
hijos, dice, sin coacciones políticas; que nuestra familia viva
a salvo de la delincuencia, al igual que nuestra propiedad y
nuestra vida. Pero esto no es por sí mismo una Democracia; es
únicamente lo que debe existir en cualquier sistema político
que atienda al bien común.
Pero, “la Democracia dominante hoy en el mundo se ha
apropiado de esas virtudes y ha difundido exitosamente
la idea de que ellas sólo existen bajo su sistema. Esto no
es cierto; basta ver las sociedades de hoy para pregun
tarse si están defendiendo la Familia, la moral, la se
guridad, el honor y hasta la vida. Tales virtudes no son
de la Democracia: son de derecho natural porque están
en la naturaleza de los hombres que desean paz, orden
y de vivir sin agresiones.”
Bordaberry hace notar que la Democracia no defiende
realmente los valores porque no puede defenderlos, ya que su
fundamento filosófico “le impide limitar la libertad del hom-
bre para forjar una sociedad ordenada, porque toda
limitación sería una contradicción con sus principios...
Para el liberalismo la libertad no se define positivamen-
te, sino como ausencia de coacción sobre el individuo.”
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Por eso en México vemos con frecuencia que un Secretario
de Gobernación sienta estar en su derecho si se atrinchera con
vallas de fierro y policías para no recibir a unos manifestantes
molestos, a la vez que miles de automovilistas pierden su dere-
cho de transitar libremente por numerosas calles. De la misma
manera, unos “antorchistas” están en su derecho de encuerar-
se en el Monumento a la Madre, pidiendo esto o aquello, sin
que la Autoridad se atreva a desalojarlos, hasta que “demo-
cráticamente” se les dé “una corta” para que se retiren, y así
prospera la “industria” de grupos que ejercen sus “derechos
democráticos”, aun violando los derechos de miles y miles de
ciudadanos que deben dar grandes rodeos para llegar a su
trabajo o a sus hogares.
El expresidente Bordaberry señala que la negación de
Dios, llamada eufemísticamente Laicismo en las escuelas, “es
la única opción válida porque la Democracia no cono-
ce otra opción. Le parecen preocupar los males que
ocurren; la inseguridad, la desocupación, la inflación, la
inmoralidad reinante. Pero este sistema político no le
da más opción al ciudadano que cambiar de Partido
o de candidato, haciendo renacer una esperanza ali-
mentada por la exacerbación artificial de las pasiones
en las competencias electorales... Se alimenta la espe-
ranza de algo mejor que no llega. Pero se ha ocultado
tanto la verdad sobre la Democracia que no le echamos
la culpa a ella sino a los hombres.
“La Democracia lleva una insuperable contradic-
ción: al liberarse de Dios y de los principios natura-
les, entre otros el de la Autoridad, no puede ejercer
coacción alguna. No se ve cómo pueda organizarse
una Sociedad sin imponer limitaciones a esa libertad
absoluta.”
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Bueno, en este punto de “libertad absoluta” hay algo im
preciso, pues la libertad es muy vasta para el desorden, pero
se torna “absoluta” si los valores naturales llegan a hacer peli-
grar a la propia Democracia.
En cuanto a que los valores naturales puedan ser despla
zados dentro de esta Democracia Liberal, no cabe duda. Para
instituir el aborto en México —por ejemplo— bastó una ma-
yoría de votos dentro de 66 diputados bis. Si la víspera estaba
prohibido matar a un niño en el vientre de la madre, al día
siguiente ya fue legal.
De la misma manera, si durante milenios un “matrimonio”
se constituía precisamente entre hombre y mujer, dos vein
tenas de votos bastaron para legalizar “matrimonios” de hom-
bre-hombre o de mujer-mujer, y además para que adoptaran
niños con pleno derecho, aunque así se anula el derecho de
los niños para seguir siendo niños y no homosexuales, y del
mismo modo el derecho de las niñas.
En la Democracia todo lo irregular es permisible. Así lo evi-
denciaron unos cuantos diputados y así lo sancionó la Supre-
ma Corte de Justicia, en tanto que el presidente Calderón dijo
que respetará “escrupulosamente” tales reformas para que los
niños adoptados (por los homosexuales) tengan una familia
“sin ser discriminados, recibiendo cariño y afecto; no dudo que
puedan tener en esos matrimonios.”
Si eso se sometiera a plebiscito se vería que la Sociedad lo
repudia masivamente. Pero la Democracia no lo hace, por
muy Liberal que se diga. Se trata de una consigna interna-
cional.
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En resumen, durante 40 años la economía va
mal; la Disolución Social crece; el agro se empo
brece más; unos influyentes se enriquecen a cos-
ta del “patrimonio nacional”, y la única opción
que la democracia ofrece es que los desconten-
tos cambien de Partido, ahora que hasta PAN y
PRD acostumbran aliarse. En suma, es una De-
mocracia que sirve a intereses internacionales.
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CAPÍTULO II
No es Consuelo de Tontos,
Pero el mal Camino es Para Todos
El mexicano no es culpable íntegro
de su lamentable presente, pues es víc
tima de influencias internacionales a
las que ningún país puede por hoy subs
traerse.
ES CONSIGNA Y En Argentina tuvieron su “co-
NO VAMOS SOLOS rralito”, peor que aquí, y los
cuentahabientes no podían retirar su dinero, salvo cantida-
des pequeñas en fechas fijas. También su tradicional riqueza
agrícola fue implacablemente golpeada y ya no están en
condiciones de exportar víveres masivamente. La presidenta
Cristina Fernández de Kirchner —impuesta en el cargo por el
anterior presidente, su esposo—, ha entrado en pleito con la
prensa. La periodista Sylvina Walger la acusa públicamente
de acumular, en siete años, una fortuna de 14 millones de
dólares.
Si México tuvo su Salinas y su Zedillo, Argentina tuvo a
los presidentes Ménem y De la Rúa, que vendieron todo lo
que les vino en gana, en perjuicio de la soberanía nacional.
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En agosto del 2010 la presidenta Cristina tuvo algo de qué
sentir orgullo, pues en tanto que en México sólo se aprobó el
“matrimonio” homosexual en el D.F., en Argentina entró de un
solo golpe en todo el territorio nacional.
NACIENTE REACCIÓN.- Sin embargo, fuera del ámbito
oficial, en Argentina hay signos de reacción positiva. El arzo-
bispo de La Plata, Héctor Aguer, señala que “hablar de ‘salud
reproductiva’ y ‘derechos sexuales’ son eufemismos que es-
conden las tendencias al aborto y al homosexualismo”. A la
vez, da la voz de alerta contra el Informe Kissinger, que plan-
tea reducir la natalidad de países como Argentina.
Asimismo se han levantado voces contra el grupo Catholic
Family and Human Rights Institute, que pretende fusionar re
ligiones para hacer “una alma global”.
Por su parte, el arzobispo Aguer previene: “Pocas veces
como en la actualidad ha prevalecido entre los argenti-
nos un escepticismo tan hondo, una duda tan acerba de
su destino colectivo... Se perciben los últimos jirones de
nuestra independencia. ¡Alerta! La esperanza en nuestra
rehabilitación como país no debe deslizarse hacia un
vicio que nos ha paralizado otras veces, el de la pereza
de que las cosas se arreglarán solas.”
Y la Facultad de Farmacología y Bioquímica de la Universi-
dad de Buenos Aires dictaminó que la píldora “del día siguien
te” no es un anticonceptivo, sino un abortivo.
Entretanto, el sacerdote Alfredo Sáenz le dice a los católicos:
Según el ‘modernismo’, la verdad es subjetiva y, por
consiguiente, todos sus principios son relativos; enton-
ces ya no hay verdades permanentes; es reducir la teo-
logía a la antropología; sobre el hombre no hay nada...
Lo que promete el marxismo es resolver la pobreza
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mediante la Revolución, y por eso se adopta la praxis
marxista. Jamás se ha visto que eso dé resultados.... Si la
historia no se vincula a la Teología, acaba disolviéndose
en la fugacidad y perenne cambio de la historia por-
que todo termina en polvo, y así la Historia no tiene de
dónde asirse para presentar principios y verdades que
resistan el paso del tiempo.” (Gladius, Núm. 70).
SOBRAN DIPUTADOS.- Por su parte, Carlota Jackisch de-
nuncia en “La Nación”: “Cada argentino debe (deuda externa)
3,100 dólares. Muy lejos del primer mundo que se nos
trató de vender durante mucho tiempo. Nuestros po-
líticos nos cuestan diez veces más que los políticos de
Estados Unidos o Europa. Cada legislador de la provin-
cia de Formosa cuesta 7 veces más que uno de Baviera,
Alemania, donde hay 24 veces más población que pro-
duce 176 veces más que Formosa... La provincia de la
Rioja soporta un gasto de 14 millones al año para
sus 30 legisladores, mientras que los 165 legislado-
res de Kansas, EE.UU., cuestan 12 millones... Propone-
mos reducir a la mitad nuestros legisladores. Estaríamos
mejor con 24 senadores que con los actuales 72. Y así
con 129 diputados en vez de 257. Con el consiguiente
ahorro tendríamos nuevas carreteras y un agro mucho
más productivo.” (Gladius, Núm. 50, pág. 196).
Y agregamos nosotros: igual que en México, proporcional-
mente. Parece ser una consigna internacional.
PUES PARECE QUE ‘Lectures Françaises’, Núm.
SÍ ES UNA CONSIGNA 575 de marzo 2005, refiere
que ‘Canal Satélite’ difundió un debate de tres investigadores
estadounidenses sobre la Teoría del Complot, y dos de ellos