Presentación informe Impacto del sistema de financiación autonómica en la deu...
De las zonas azules a las zonas rojas
1. SABER MÁS
CATALUÑA ECONÓMICA / 546
De las zonas azules
a las zonas rojas
La extensión de la vida laboral puede rejuvenecer la economía con el talento que aportan
los ma ores sí lo afirman los autores de La re oluci n de las canas
Por ANTONIO HUERTAS e IÑAKI ORTEGA
E
n el país más envejecido del
mundo, Japón, se superó en
2013 la frontera de un 25 por
ciento de la población mayor de
65 años. Pero sin necesidad de irse
tan lejos, en Barcelona la esperan-
za de vida de una mujer alcanza
los 87 años y el 22% de los ciuda-
danos catalanes tiene en estos mo-
mentos más de 65 años; y en Euro-
pa se prevé que en 2050 el primer
grupo de edad serán los mayores
de 65 años, que en el año 1960 solo
representaban un 10 por ciento de
la población.
El de la longevidad es un fe-
nómeno que parece ser global. De
hecho, según las estimaciones de
la Organización Mundial de la Sa-
lud, la esperanza de vida al nacer a
nivel mundial ha venido creciendo
desde 1950 a un ritmo de más de
tres años por cada década. A partir
del año 2000 se ha incrementado
en una media de cinco años. Este
aumento de la esperanza de vida
implica, sin duda, buenas noticias
para el género humano que per-
mitirá que millones de personas
de esa edad sigan trabajando, aho-
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2. SABER MÁS
CATALUÑA ECONÓMICA / 546
rrando, creando y consumiendo.
Se trata de una nueva revolución,
la revolución de las canas, que
hará posible que nazcan nuevas
industrias para servirles y nuevos
emprendedores, muchos de ellos
séniores, que encuentren oportu-
nidades donde nadie pensó que
podía haberlas.
EL AZUL DE OKINAWA
En 2005, el escritor americano
Dan Buettner publicó en la revista
National Geographic un reportaje
titulado “Los secretos de una vida
larga” que popularizó el término
zona azul para referirse a aquellos
lugares del mundo en los cuales
las personas son más longevas. El
nombre de zona azul tiene una
sencilla explicación: cada vez que
el equipo de investigadores encon-
traba algún hallazgo estadístico
que demostraba una elevada lon-
gevidad en determinados territo-
rios, marcaban en el mapamundi
esa zona con un círculo en tinta
azul. Después de señalar con grue-
so trazo azul Okinawa, en Japón,
las siguientes localidades descu-
biertas ya pasaron a ser referencia-
das como las zonas azules. A la ya
citada Okinawa le acompañaron
en ese mapa con trazos en azul Ica-
ria (Grecia), Nicoya (Costa Rica),
Loma Linda (Estados Unidos) y
Cerdeña (Italia).
Los expertos en longevidad
han identificado algunos factores
que están relacionados con la die-
ta y el estilo de vida y que pueden
sintetizarse en dos: mantener un
estilo de vida sano, lo que implica
practicar ejercicio de intensidad
regular, con rutinas para romper
con el estrés diario, incluir prin-
cipalmente productos a base de
plantas en nuestra dieta, comer sin
llenarse y no beber en exceso. Y,
por otro lado, tener vida en comu-
nidad, es decir, integrarse en gru-
pos que promuevan y apoyen las
buenas prácticas anteriores, como
familia, comunidades religiosas o
grupos sociales.
Tras leer las zonas azules, en las
que esas longevidades extremas no
están circunscritas exclusivamen-
te al llamado primer mundo y al
momento actual, podría colegir-
se –equivocadamente– que esta-
mos ante un fenómeno global que
siempre ha existido.
Al contrario, si hoy pintásemos
de un color el mundo, el azul es-
taría en muchas partes del planeta
y en unos años pronosticamos que
todo el planeta se teñiría de añil.
Pero actualmente hay muchas zo-
nas rojas, si nos permiten el juego
de palabras, zonas donde se ha en-
cendido la alarma roja porque no
están haciendo lo suficiente para
prepararse para el nuevo mundo
longevo. Lugares donde no se le-
gisla pensando en la sostenibilidad
del sistema público de pensiones o
no se facilita el ahorro, se ponen
trabas para que los mayores sigan
trabajando, las empresas expulsan
el talento sénior, incluso no se fo-
menta la vida saludable o la sani-
dad no avanza al ritmo de la tec-
nología. Pero dejemos a la elección
del lector el color de la zona donde
vivimos.
No son pocos expertos los que
creen que estos nuevos patrones
tienen efectos en el funcionamien-
to económico y, en última instan-
cia, en la dinámica de crecimiento
de la economía.
APROVECHAR EL TALENTO
Pocas dudas caben de que nuestro
sistema económico envejece y esto
produce que se genere un cada
vez mayor desencanto en muchos
estratos de la sociedad que sien-
ten que se han quedado fuera del
sistema. El reto es rejuvenecer la
economía con una población que
peina canas y no olvidar que el
talento no parece tener fecha de
caducidad. Miguel de Cervantes
escribió la segunda parte de El
Quijote con 68 años; Steve Jobs
convirtió Apple en la empresa de
mayor capitalización del mundo
con 56 años y la bioquímica Mar-
garita Salas fue la primera mujer
española en formar parte de la
Academia de Ciencias Estadou-
nidense a los 69 años. Hay más
ejemplos: Nelson Mandela llegó a
ser presidente de Sudáfrica con 76
años y Goethe publicó su Fausto a
los 80. Además, las tres personas
más ricas del planeta tienen más
de 54 años, que es la edad media
de los asistentes en los últimos
años al Foro Económico Mundial
de Davos. ¿Alguien se atrevería a
jubilar o prejubilar a todos estos
personajes? Carlos Slim, empren-
dedor mexicano septuagenario y
conocido mundialmente, lo tiene
claro: “En una sociedad del cono-
cimiento postindustrial, a los 65
años uno está en su plenitud, en su
mejor momento profesional”.
Hay que tener en cuenta que
la extensión de la vida laboral de-
biera producir una mayor satisfac-
ción personal y, con ella, una ma-
yor transferencia de la experiencia
laboral acumulada, afectando
positivamente a la productividad.
Algunas encuestas ya reflejan que
cada vez son más quienes se plan-
tean seguir trabajando después de
la edad legal de jubilación, al me-
nos con contratos a tiempo parcial
o temporal. En el Reino Unido, el
25 por ciento de los jubilados vuel-
ve a trabajar a los cinco años de re-
tirarse y porcentajes muy similares
se están dando en Estados Unidos
desde 2010.
Por otra parte, la aparición
de un nuevo modelo social, con
personas cada vez más longevas,
propiciará la aparición de nuevas
industrias de todo tipo, desde las
vinculadas al ocio hasta las rela-
cionadas con la salud, que bien
aprovechadas por emprendedores,
pueden generar importantes opor-
tunidades económicas para los te-
rritorios que apuesten por ello.
“Un nuevo grupo
social, a medio camino
entre el retiro y el
trabajo, tiene en su
mano liderar lo que
hemos llamado la
revolución de las canas”
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3. SABER MÁS
CATALUÑA ECONÓMICA / 546
Emprendedores que, por cier-
to, son mucho más mayores de
lo que sugeriría el lugar común,
que lleva a pensar en un joven
millenial de zapatillas y pantalo-
nes rotos. Por el contrario, en la
actualidad el número de personas
mayores que trabajan por cuenta
propia en el mundo ya supera al de
los jóvenes de entre 18 y 29 años,
de acuerdo con los datos que se
desprenden del Informe Especial
GEM (Global Entrepreneurship
Monitor) sobre emprendimiento
sénior. Este documento puntua-
liza que considera como empren-
dedor sénior a toda aquella per-
sona de más de 50 años que ha
estado involucrado en actividades
emprendedoras en los últimos 42
meses. Asimismo, ese informe lla-
ma la atención sobre el hecho de
que son muchos los programas de
apoyo al emprendimiento que es-
tán orientados hacia los segmen-
tos más jóvenes, cuando el apoyo
complementario a los emprende-
dores de más edad podría generar
también importantes beneficios
para la estabilidad económica.
LONGEVIDAD Y TECNOLOGÍA
Si se analizan los países de la
OCDE encontramos que existen
importantes diferencias que se-
ñalan que países como España
y Francia muestran los niveles
más bajos de emprendimiento
sénior, mientras que los más al-
tos se dan en Chile y México. En
cualquier caso, podemos afir-
mar que las personas de 50 años
están encontrando una vía en
autoemplearse para seguir acti-
vos y saltar la trampa de un mer-
cado laboral que todavía hoy les
estigmatiza. La mayor longe-
vidad está abriendo paso a una
nueva etapa vital donde la “des-
preciada” tercera edad formada
por pensionistas se convierte en
la de los nuevos emprendedores.
Además, la tecnología ofre-
ce una ventana de oportunidades
únicas para crecer y prosperar,
pero es necesario dejar de hablar
de problemas y comenzar a ver las
posibilidades que ofrece esta nue-
va etapa de la vida. La irrupción
tecnológica se dará la mano con
sectores como la salud y el turis-
mo, las finanzas y los seguros, el
urbanismo y la vivienda e incluso
el mercado laboral para transfor-
marse y ofrecer nuevos escenarios
adaptados a la extensión de la lon-
gevidad.
Gracias a los avances médicos
disfrutamos de un extra de quin-
ce años de vida. Esto ha propi-
ciado la aparición de una nueva
etapa vital entre los cincuenta y
setenta años que se ha bautizado
como la generación silver o como
nosotros preferimos, la revolu-
ción de las canas.
El nuevo mundo que nos ha
tocado vivir está repleto de bue-
nas noticias. Más años de vida
para disfrutar, menos enferme-
dades y nuevas tecnologías a
nuestra disposición. Además,
sin darnos cuenta, ha surgido un
nuevo grupo social a medio ca-
mino entre el retiro y el trabajo
que tiene en su mano liderar lo
que hemos llamado la revolución
de las canas. Esta revolución pasa
por abandonar los planteamien-
tos catastrofistas alrededor de
la longevidad para poner el foco
en las oportunidades de nuestro
momento histórico.
Antonio Huertas es presidente de MAPFRE.
Iñaki Ortega es director de Deusto Busi-
ness School. Ambos han escrito el libro La
revolución de las canas, editado por el sello
editorial Gestión 2000 (Grupo Planeta) en
noviembre de 2018.
“El número de personas
mayores que trabajan
por cuenta propia en el
mundo ya supera al de
los jóvenes de entre 18 y
29 años”
“El reto es rejuvenecer
la economía con una
población que peina ca-
nas y no olvidar que el
talento no parece tener
fecha de caducidad”
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