EL AGUA Y LA SALUD
La hidratación diaria es fundamental para el correcto funcionamiento de nuestro
organismo. Para un adulto sano una deshidratación del 2,8% del peso corporal por
exposición al calor o tras un ejercicio fuerte, conlleva una disminución de la
concentración, del rendimiento físico, de la memoria a corto plazo, un aumento del
cansancio, cefaleas, así como reducción del tiempo de respuesta.
La deshidratación aumenta también el esfuerzo cardiovascular, cuando se
superan cifras de deshidratación del 10% del peso corporal total, es imprescindible
recibir asistencia médica adecuada para permitir la recuperación.
En ese sentido, las aguas minerales naturales, puras y ricas en minerales y
oligoelementos, son muy recomendables para una correcta hidratación. Todas son
puras en origen tanto de elementos químicos como de microbios. Pero su
composición mineral varía en función del tipo de roca por donde se filtra y del
tiempo, profundidad y temperatura durante su recorrido por el subsuelo.
Para los niños: El agua mineral natural es la bebida no nutritiva que debe
acompañar al niño tanto en las comidas como fuera de ellas como una estrategia
de hábito de vida saludable que previene el sobrepeso y la obesidad, señala uno
de los estudios realizados en este organismo.
Para la mujer: El agua mineral natural juega un papel fundamental en el
embarazo, favoreciendo su adecuado desarrollo, o durante la lactancia,
preservando la cantidad y calidad de la leche materna. El consumo apropiado de
agua durante la menopausia, además de reducir los efectos del envejecimiento en
piel y huesos, mantiene el peso corporal. Beber agua mineral, por ejemplo, aguas
ricas en selenio, ayuda a incrementar los niveles de antioxidantes, disminuyendo
los efectos dañinos sobre la piel. Este hábito es más importante en la menopausia
ya que la bajada de hormonas origina sequedad cutánea. Nutrientes como el flúor,
el calcio, el fósforo y el magnesio actúan sobre los huesos y ayudan en la
prevención de la osteoporosis.
Para los adultos en general: El agua mineral controla la hipertensión arterial en
el consumo de aguas minerales bajas en sodio. Las aguas ricas en calcio,
magnesio y sulfatos son recomendables para la prevención cardiovascular al
actuar sobre el metabolismo de las lipoproteínas, reduciendo el riesgo de
coagulación sanguínea y enfermedad cardíaca mortal. Las aguas bicarbonatadas
son las más adecuadas en casos de diabetes, por producir una menor respuesta
glucémica.
Para los mayores: Importancia en esta etapa contar un aporte nutricional y, sobre
todo, con un nivel constante de hidratación. En la tercera edad se produce una
disminución de la percepción de la sed y sin embargo necesitan un aporte
extraordinario de agua. En este sentido, conviene insistir en la necesidad de que
beban, aunque no tengan sed y que realicen la ingesta de agua de forma gradual
a lo largo del día.
BEBIDAS REHIDRATANTES
Las bebidas isotónicas son capaces de rehidratar al ser humano y aumentar su
rendimiento. Es aconsejable tomar bebidas isotónicas practicando deporte.
Las bebidas isotónicas —también llamadas bebidas deportivas o bebidas
rehidratantes— son aquellas bebidas que en su composición contienen distintos
azúcares y sales minerales capaces de ayudar a reponer rápidamente el agua y
las diferentes sustancias que se pierden con la sudoración producida al practicar
deporte.
Composición de las bebidas isotónicas
Las bebidas isotónicas tienen una composición básica formado por agua; hidratos
de carbono complejos como pueden ser los polímeros de glucosa o las
maltodextrinas; simple como la fructosa, la glucosa, la sacarosa o la dextrosa; y
sales minerales diversas como el cloro, el potasio, el sodio o el fósforo. A su vez,
estas bebidas rehidratantes también pueden incorporar a si composición ácido
cítrico, calcio, aromatizantes, edulcorantes, vitaminas y otros componentes.
Cuándo tomar bebidas isotónicas
Las bebidas isotónicas no son imprescindibles para la práctica de actividades
deportivas de menos de una hora de duración y con una intensidad baja o
ligeramente moderada, excepto en los caso en los que el ambiente sea
sumamente caluroso y la sudoración sea importante. Esto es debido a que la
pérdida de nutrientes en nuestro organismo es nimia si la actividad es pausada.
Por el contrario, si la actividad física que practicamos es intensa, se alarga en el
tiempo y nos lleva a sudar, será muy recomendable y prácticamente la ingesta de
bebidas isotónicas. Practicando deporte de una manera intensa la temperatura de
nuestro cuerpo se eleva considerablemente, y con ello, sudamos. Esta sudoración
provoca la pérdida a través de nuestros poros de agua y sales, necesarias para
poder mantener el ritmo y la capacidad, así pues la recuperación de estas
sustancias mediante el consumo de bebidas isotónicas es indispensable.
Cuán importante es hidratarte
Para la práctica de cualquier deporte es de suma importancia encontrarse con una
hidratación correcta. Esperarse a tener sed no es para nada aconsejable ya que
sin darnos cuenta y sin tener la necesidad de beber, nuestro cuerpo puede llegar a
perder hasta un 2% del agua que contiene y por consiguiente también nuestro
cuerpo estará perdiendo capacidades físicas y de rendimiento.
Consejos para una correcta hidratación con bebidas isotónicas
En los momentos previos a la práctica de cualquier actividad física o
deportiva intensa, será necesario hidratarnos correctamente aunque
pensemos que no lo necesitamos. Beber dos vasos de agua antes de,
nos será notablemente beneficioso
Tras concluir la práctica deportiva o en el transcurso de la misma,
beber bebidas isotónicas incluso aunque no tengamos sed, nos
ayudará a mantener el ritmo y reponer todos los nutrientes y líquidos
que nuestro cuerpo está perdiendo o ya ha perdido. Es recomendable
que la bebida esté fresca pero no fría.
DESHIDRATACION
Ocurre cuando se pierde más líquido que se ingiere, y el cuerpo no tiene suficiente
agua y otros líquidos para llevar a cabo sus funciones normales. Perdemos agua
todos los días en forma de vapor de agua en el aire que exhalamos y como el
agua en el sudor, la orina y las heces. Junto con el agua, también se pierden
pequeñas cantidades de sales. Cuando se pierde demasiada agua, el cuerpo
puede quedar fuera de equilibrio o deshidratado. La deshidratación severa puede
llevar a la muerte.
Síntomas: La deshidratación puede causar sed extrema, falta de sudoración,
latidos cardíacos rápidos, respiración rápida, fiebre, delirio o inconsciencia.
Causas: La deshidratación ocurre cuando no hay agua suficiente para reemplazar
la que se pierde durante el día. Su sistema, literalmente, se seca. A veces, la
deshidratación se produce por razones simples: no beber lo suficiente, porque
usted está enfermo o está ocupado, o porque no tienen acceso a agua potable
segura cuando estás de viaje, excursión o camping.
Prevención: Para prevenir la deshidratación, beber mucho líquido y comer
alimentos con alto contenido en agua como frutas y verduras. Dejar que la sed sea
su guía es una pauta diaria adecuada para la mayoría de las personas sanas. Los
líquidos pueden obtenerse no sólo de agua, sino también de otras bebidas y
alimentos. Pero, si usted está haciendo ejercicio, no espere a tener sed para
mantenerse al día con sus fluidos.
EQUILIBRIO HIDRICO
El mantenimiento de un adecuado equilibrio hídrico (la diferencia neta entre el
aporte y la pérdida de agua) es esencial para la salud.
Es particularmente importante ya que el cuerpo no tiene la capacidad de
almacenar agua: debemos reponer toda el agua que perdemos a diario, pues los
humanos no podemos sobrevivir sin agua más que algunos días.
Perdemos agua diariamente:
1. A través del tracto respiratorio (respiración).
2. A través del tracto gastrointestinal (heces).
3. A través de la piel (transpiración y sudor).
4. A través de los riñones (excreción de orina).
El estilo de vida y las condiciones medioambientales tienen un impacto
significativo en la pérdida de agua a nivel personal, en promedio un adulto sano
pierde alrededor de 2.6 L al día.
La actividad física y un ambiente caluroso pueden llevar a una pérdida de agua
adicional, y contribuir a pérdidas de hasta varios litros.
El aporte de agua se obtiene a través de varias fuentes como las bebidas
consumidas, la dieta y el agua metabólica producida en distintas reacciones
principalmente en la utilización de nutrientes. La producción de agua metabólica
representa aproximadamente 300mL al día, el agua proveniente de los alimentos
varía dependiendo de la dieta y el resto se debe cubrir con una hidratación
adecuada.
ACTIVIDADES:
1. ¿Cuántos litros de agua se recomienda consumir por dia para tener una
buena hidratación? ¿cuánto consumen ustedes?
2. ¿Qué bebidas rehidratantes conocen? ¿todas las bebidas hidratan?
3. ¿Con cuanta cantidad de agua cuenta el cuerpo humano?
4. ¿Cuáles son los síntomas de la deshidratación? ¿Conoces otros además
de los mencionados?
5. ¿Cómo recuperarse de la deshidratación?
6. Ponerse de acuerdo y armar grupos de a 4, y traer materiales para armar
una bebida casera rehidratante en clase.
Materiales: 1 litro de agua; 500 mg de sal fina; 500 mg de bicarbonato de
sodio; 60 gr de azúcar; jugo de 2 limones (también puede ser naranjas o
pomelos).