Outsourcing es el proceso de contratar una empresa externa para realizar tareas específicas de una compañía. Esto puede reducir costos al evitar mantener un departamento interno. Algunas ventajas incluyen menores gastos, acceso a especialización y enfocarse en el negocio principal. Los contratos de outsourcing típicamente duran entre 3 a 10 años y pueden incluir actividades no esenciales o repetitivas.