1. ministerio del
MINISTERIO DE EDUCACIÓN
ambiente Y CULTURA
Republica del Ecuador
PLAN NACIONAL DE EDUCACIÓN AMBIENTAL
PARA LA EDUCACIÓN BÁSICA Y EL BACHILLERATO
(2006-2016)
Quito, Noviembre 2006
1
2. ELABORACIÓN DE PROPUESTA PRELIMINAR DEL PLAN NACIONAL DE EDUCACIÓN AMBIENTAL PARA LA EDUCACIÓN
BÁSICA Y EL BACHILLERATO.
GRUPO INTERINSTITUCIONAL DE EDUCACIÓN AMBIENTAL:
Ministerio del Ambiente: María Dolores Boada y José Pereira
Ministerio de Educación y Cultura: Víctor Hugo Valencia y Carlos Estrella
Ministerio de Turismo: Elena Acurio
Ministerio de Defensa: Fuerza Aérea Ecuatoriana: Edgar Padilla y Fuerza Terrestre: Milton Ruiz
Ministerio de Salud Pública: Vinicio Yánez
Comité Ecuatoriano para la Defensa de la Naturaleza y el Medio Ambiente, CEDENMA: Rocío Bastidas Granizo
APOYO TÉCNICO.
UNESCO Quito: Gustavo Lopez Ospina, Anastasio Mitjans, Olga García
UNESCO Brasil: Celso Schenkel
VALIDACIÓN DEL PLAN NACIONAL DE EDUCACIÓN AMBIENTAL PARA LA EDUCACIÓN BÁSICAY EL BACHILLERATO ECUATORIANOS *
Corporación OIKOS : Rocío Bastidas Granizo, Marco A. Encalada, Darwin Hernández Jaramillo, Carlos Vacacela Alvarez, José Guillermo
Brito Albuja.
Autores de programas y marcos lógicos de proyectos:
Rocío Bastidas Granizo
Darwin Hernández Jaramillo
Sandra Ruiz
Cristina Morales
Andrea Marín
Carlos Vacacela
Coordinación Técnica: Marco A. Encalada y Rocío Bastidas Granizo
*La validación de la propuesta preliminar del Plan Nacional de Educación Ambiental, se realizó con el aporte de 155 representantes de
docentes, funcionarios de los Ministerios del Ambiente y de Educación, universidades, gobiernos seccionales, organismos no
gubernamentales locales, en tres seminarios talleres, realizados en las ciudades de Guayaquil, Cuenca y Quito, en el mes de febrero del
2006. La nómina de participantes se presenta en el Anexo No. 6
Organización de los Talleres Regionales de Validación del Plan Nacional de Educación Ambiental:
José Pereira. MAE
María Dolores Boada MAE
Juán Herrera ( +) MAE
Victor Hugo Valencia MEC
Kléber Parra MEC
Herminio Troya. MEC
David Moreno. Coordinador del Programa EC 014002 MAE/Holanda
Pablo Albán Programa EC 014002 MAE/Holanda
Daniela Alvarez Programa EC 014002 MAE/Holanda
Ney Groenow. Programa EC 014002 MAE/Holanda
Este documento ha sido producido como parte de un contrato entre la Corporación OIKOS , el Ministerio del Ambiente y El Fondo Ambiental
Nacional, para la Validación del Plan Nacional de Educación Ambiental para la Educación Básica y el Bachillerato y la Elaboración de una
propuesta de desarrollo curricular para incorporar y/o fortalecer la educación ambiental en esos niveles. Es uno de los componentes del
Programa: EC 014002 “Apoyo de Corto Plazo para la Gestión del Ministerio del Ambiente del Ecuador en el Área de Calidad Ambiental”.
Revisión de Texto: María Dolores Boada, Fabiola Falconí.
Diagramación e impresión: Arellano Gráficas, 2922423, Quito - Ecuador
2
3. CONTENIDO
PRESENTACIÓN
SÍNTESIS EJECUTIVA
I. ANTECEDENTES
II. JUSTIFICACIÓN
III. OBJETIVOS
IV. BREVE DIAGNOSTICO DE LA EDUCACIÓN AMBIENTAL EN EL ECUADOR
4.1 Visión de los problemas de calidad ambiental en el Ecuador
4.2 Análisis del estado de la educación ambiental en el sistema escolarizado
del Ecuador
4.3 Experiencias de Educación Ambiental en el Subsistema Escolar
4.4 Conclusiones del diagnóstico y recomendaciones
V. POLÍTICAS Y ESTRATEGIAS
VI. PROGRAMAS Y PROYECTOS
6.1 PROGRAMAS:
6.1.1 Educación y Comunicación sobre las Cuencas Hídricas
6.1.2 Educación y Comunicación para la Calidad Ambiental
6.1.3 Educación para la Producción mas Limpia
6.1.4 Educación Ambiental para el Cambio Climático
6.2 PROYECTOS
6.2.1 Educación para la Protección y Adopción de Vertientes y Pequeños Cursos
de Agua, para Escuelas y Colegios
6.2.2 Monitoreo de Características Físicas, Químicas y Biológicas de Pequeños
Cauces de Ríos
6.2.3 Educación para la Prevención de la Contaminación por uso de Plaguicidas
6.2.4 Aprendiendo a reducir los desechos en la Escuela y en el Colegio
6.2.5 Educación para un Aire mas Puro
6.2.6 Capacitación sobre Adaptación y Mitigación del Cambio Climático. Producción
de materiales Educativos
6.2.7 La Educación Ambiental Integrada como Eje transversal en la Educación Básica
6.2.8 Fortalecimiento Institucional de las Dependencias de Educación Ambiental del
Ministerio de Educación y Direcciones Provinciales de Educación Hispana
y Bilingüe del País
ANEXOS
No. 1 La Educación Ambiental en los Convenios Internacionales suscritos
por el Ecuador
No. 2 Metodología. Matrices y guías utilizadas para la Construcción de Programas
y Proyectos
No. 3 Proceso para la Elaboración y Financiamiento de Proyectos
No. 4 Opciones de financiamiento
No. 5 Agenda de los Talleres de Validación del Plan Nacional de
Educación Ambiental
No.6 Nómina de Participantes en los Talleres de Validación del Plan Nacional de
Educación Ambiental
3
5. PRESENTACION
El Plan Nacional de Educación Ambiental para la Educación Básica y el Bachillerato constituye la “carta
de navegación” que marcará el pensamiento, el sentimiento y la acción de la institucionalización de la
educación ambiental para apoyar al desarrollo sostenible. Tiene su punto de arranque en la escuela básica y
continúa en el bachillerato, pues, es una necesidad impostergable tratar la educación ambiental en la
concepción del currículo, para contribuir a la formación integral de niños, niñas y jóvenes del Ecuador; cambiar
y reorientar sus comportamientos en función de las demandas de nuevas sociedades más solidarias con su
entorno, que demuestren una ética ambiental en su escuela de vida , exige sin duda, asumir este reto en todo el
proceso educativo, como una dimensión sustancial del proyecto curricular institucional, y no como una actividad
o conjunto de actividades aisladas o secundarias.
El Plan, es una respuesta de los Ministerios del Ambiente y Educación, organismos rectores de las políticas
sectoriales nacionales, a la necesidad de traducir en la administración educativa y práctica docente las políticas,
estrategias, programas y proyectos del Plan Nacional de Educación Ambiental, consensuadas entre los
Miembros del Grupo Interinstitucional de Educación Ambiental , presidido por delegados oficiales de los dos
Ministerios e integrada además por delegados de los Ministerios de Salud, Turismo, Defensa y, en
representación de la sociedad civil, CEDENMA y, posteriormente, validadas por docentes de las 22 provincias
continentales del país.
Con el fin de asegurar la incorporación y posterior desarrollo de las políticas, estrategias, programas y proyectos
prioritarios del Plan Nacional de Educación Ambiental para la Educación Básica y el Bachillerato, en las políticas
educativas y ambientales nacionales, en los planes operativos de las Direcciones Nacionales del MEC,
responsables de la educación ambiental, la planificación curricular, la capacitación y actualización docente,
supervisión, seguimiento y evaluación; los Ministerios a nuestro cargo suscribieron en noviembre del año 2005,
un convenio de cooperación técnica.
En educación este es un momento histórico para el país. El planteamiento de las Políticas del Plan Decenal de
Educación 2006-2015 plantea los diseños y directrices del sistema educativo ecuatoriano para el futuro. Estas
políticas cubren el sistema educativo en su integridad e incluye: a) la universalización de la educación infantil de
0 a 5 años, b) la universalización de la educación general básica de primero a décimo año, c) el incremento de la
matrícula en el bachillerato hasta alcanzar al menos el 75% de la población en la edad correspondiente, d) la
erradicación del analfabetismo y fortalecimiento de la educación continua para adultos, e) el mejoramiento de la
infraestructura física y equipamiento de las instituciones educativas, f) el mejoramiento de la calidad y equidad
de la educación e implementación de un sistema nacional de evaluación y rendición social de cuentas, g) la
revalorización de la profesión docente y mejoramiento de la formación inicial, capacitación permanente,
condiciones de trabajo y calidad de vida y, h) el aumento del 0,5% anual en participación del sector educativo en
el PIB hasta el año 2012 o hasta alcanzar el 6% para inversión en el sector. Como un componente fundamental
que cruza las políticas educativas está el Plan Nacional de Educación Ambiental, para la educación básica en
articulación y alcance con el bachillerato ecuatoriano.
Convocamos a los miembros de la comunidad educativa ecuatoriana, de educación inicial, educación básica y
bachillerato, gobiernos seccionales provinciales y municipales, organismos no gubernamentales, otros
organismos públicos y privados vinculados al quehacer educativo, a asumir el compromiso necesario para
alcanzar los propósitos del Plan Nacional de Educación Ambiental. Solo un trabajo conjunto permanente y
coordinado hará posible el desarrollo de la calidad de la educación de nuestros niños, niñas y jóvenes.
La educación en general, y la educación ambiental, en especial, deben ser un compromiso de todos para
cambiar la historia, preservar y proteger el medio ambiente, y posibilitar el desarrollo del país. La indiferencia en
este contexto no tiene cabida. El compromiso sí.
Anita Albán Mora Raúl Vallejo Corral
MINISTRA DE AMBIENTE MINISTRO DE EDUCACIÓN
5
6. Abg. Anita Albán Mora
MINISTRA DEL AMBIENTE
Dr. Raúl Vallejo Corral
MINISTRO DE EDUCACIÓN Y CULTURA
Ing. Roberto Urquizo Calderón
SUBSECRETARIO DE CALIDAD AMBIENTAL
Dra. Gloria Vidal
SUBSECRETARIA DE EDUCACIÓN
Ing. Germán Gallegos Chacón
DIRECTOR DE GESTIÓN AMBIENTAL LOCAL
Dr. Teodoro Barros
DIRECTOR NACIONAL DE EDUCACIÓN
REGULAR Y ESPECIAL
6
7. SÍNTESIS EJECUTIVA
El Plan Nacional de Educación Ambiental para la Educación Básica y el Bachillerato 2006 - 2016 es una
propuesta de políticas, estrategias programas y proyectos, definidos para el período 2006-2016, con el
propósito de impulsar la dimensión ambiental en el proceso educativo y mejorar la formación de los niños y
jóvenes del país
Los antecedentes del Plan reseñan los principales hechos y acontecimientos desde hace aproximadamente
dos décadas, que dan razón de la evolución e importancia que ha tenido y tiene la educación ambiental en
ámbitos gubernamentales y no gubernamentales en el Ecuador.
En la justificación del Plan se ha puesto de manifiesto un conjunto de aspectos que dan razón sobre la
necesidad de trabajar de manera orgánica y sistemática, en la educación ambiental en el sistema educativo
ecuatoriano. La visión de la educación sobre el desarrollo sostenible desde una perspectiva de globalización y
en atención a los objetivos del milenio, remarca la urgencia de sociedades y gobiernos, de transformar los
grandes problemas ambientales en causas educativas formales, no formales e informales; donde la educación
a niños, niñas y jóvenes, resulta ser la principal estrategia para el fomento de cambios de comportamientos de
las resentes y futuras generaciones. En este esfuerzo, el presente Plan responde a una visión compartida de los
Ministerios de Educación, Ambiente, Salud, Defensa, Turismo y la Coordinadora para la Defensa y Protección
del Medio Ambiente, CEDENMA, en su calidad de organismos públicos y no gubernamentales comprometidos
con el desarrollo de la educación nacional y la calidad ambiental del país.
Los objetivos del Plan nacional de educación ambiental abordan importantes desafíos tales como, el impulso de
la educación ambiental para el desarrollo sostenible en el sistema educativo nacional; el fortalecimiento de su
aplicación y desarrollo curricular en los niveles de educación básica y el bachillerato con la participación de
todos, es decir, organizaciones públicas y privadas, nacionales e internacionales; la priorización de programas y
proyectos conjugada con una política educativa y administrativa acorde con las ofertas que existen dentro y
fuera del Ecuador; así como incorporar elementos claves de evaluación para retroalimentar las políticas,
programas y proyectos de este Plan.
El diagnóstico de la educación ambiental en el Ecuador, recoge una descripción y análisis de los principales
problemas de calidad ambiental tales como, la deforestación, la pérdida de la biodiversidad, la erosión y la
contaminación del recurso suelo, el deterioro del ambiente urbano, la contaminación del agua, la vulnerabilidad
ecológica, en especial el caso de Galápagos, la dependencia y el mal uso de los recursos energéticos.
Adicionalmente, se hace un breve análisis del estado de la educación ambiental en el sistema escolarizado del
Ecuador desde las perspectivas de la planificación, del currículo de la educación básica, el bachillerato y la
educación bilingüe, y algunas experiencias significativas de educación ambiental en el subsistema escolar. Las
conclusiones del breve diagnóstico y recomendaciones, muestran por un lado un panorama sombrío de
problemas ambientales y por otro, una valiosa experiencia en educación ambiental, que a pesar de no ser lo
suficientemente sistematizada, trata de devolver la esperanza por cambios en los principales actores que
prometen mejores días en el ambiente del país, pues son niños, niñas y jóvenes ecuatorianos y ecuatorianas.
Otro acápite del Plan contempla las políticas y estrategias para poner en marcha el mismo. Se ha generado 7
políticas y cada una de ellas comprende algunas estrategias. Las políticas de refieren a la necesidad de pensar,
sentir y actuar sobre la educación ambiental como prioridad educativa nacional, impulsar su tratamiento
transversal en la educación básica y el bachillerato; desarrollar la investigación en y para la educación ambiental
a través de organizaciones públicas y privadas competentes; mejorar la formación y capacitación docente en
educación ambiental para el desarrollo sustentable es otra política importante; así como el fortalecimiento
institucional de las dependencias de educación ambiental a nivel nacional; la comunicación, información y
difusión; la producción de materiales y recursos didácticos de educación ambiental y finalmente, la política de
innovación curricular con educación ambiental en todos los niveles educativos.
Para concluir, el documento del Plan presenta los programas y proyectos que resultaron del análisis de los
problemas de calidad ambiental y los factores sociales que anidan en cada uno de ellos, realizado en los talleres
regionales de validación.
7
8. I. ANTECEDENTES
Uno de los intereses primordiales de la educación ambiental, es contribuir a la solución de problemas concretos
que impiden el bienestar individual y colectivo, dilucidando sus causas, efectos y participando en la definición de
estrategias y actividades encaminadas a la calidad de vida, la salud y el medio ambiente.
A partir de 1974, y específicamente después del Seminario de Belgrado, Yugoslavia y de la Conferencia
Intergubernamental de Tbilisi, organizados por la UNESCO y el PNUMA (1975, 1977), los países
latinoamericanos empezaron a incorporar progresivamente en sus sistemas educativos, material referido al
medio ambiente; primero con un enfoque ecologista, estrictamente anticontaminante; luego se enfatizó en la
conservación de especies y recursos naturales en riesgo de extinción; y, posteriormente en apoyo a la
concepción dinámica del ambiente, la educación ambiental se orientó al mejoramiento global de los factores
ambientales condicionantes de la calidad de vida.
Así, en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo, celebrada en Río de Janeiro
en 1992, los países adoptaron la Agenda 21, como una estrategia de consenso para lograr el desarrollo
sustentable. La Agenda, en su capítulo 36, reconoce que la educación es de importancia crítica para promover
el desarrollo sostenible y aumentar la capacidad de las poblaciones para abordar cuestiones ambientales y de
desarrollo.
En el Ecuador, la necesidad e importancia de incorporar la educación ambiental en el Sistema Educativo, se
evidencia desde la década de los años 80, tanto en la revisión de los planes y programas de estudios de la
educación primaria y ciclo básico y en el Reglamento General a la Ley de Educación y Cultura de 1984 y 1985
respectivamente, así como en el surgimiento de programas de forestación para estudiantes de bachillerato,
mediante convenio suscrito por los Ministerios de Educación y Agricultura y Ganadería.
La concepción y desarrollo de una propuesta para la inserción de la dimensión ambiental en el currículo escolar,
a través del Programa denominado Educación para la Naturaleza, EDUNAT, ejecutado a partir de 1983 hasta
1993 por la Fundación Natura, en convenio con el Ministerio de Educación y Cultura MEC, y con el auspicio de la
Agencia para el Desarrollo Internacional de los Estados Unidos, USAID, constituyó uno de los hechos más
trascendentales en el tratamiento de la educación ambiental en el sistema escolarizado del país (niveles
primario, ciclo básico e institutos formadores de maestros). En las etapas II y III de EDUNAT, se logró la
incorporación de contenidos de educación ambiental en los planes y programas de estudio; la capacitación de
docentes y, la producción de guías didácticas y otros materiales educativos.
Por iniciativa del Ministerio de Educación y con al auspicio de la UNESCO, en 1991 se realizó el Seminario Taller
sobre “Estrategias para el Desarrollo de la Educación Ambiental en el Ecuador”, evento en el cual se expusieron
algunas experiencias nacionales de educación ambiental formal y no formal; se propusieron algunas
estrategias y desde ese entonces se formularon lineamientos para un Plan de Acción Nacional de Educación
Ambiental para el Sector de la Educación Formal, en sus diferentes niveles, el mismo que lastimosamente no
prosperó.
En 1992, se creó el Departamento de Educación Ambiental en el MEC, bajo la dependencia de la Dirección
Nacional de Educación Regular y Especial, como la instancia encargada de canalizar las políticas y acciones
que fomenten la educación ambiental formal; paralelamente se organizaron 21 Departamentos homólogos en
las Direcciones Provinciales de Educación del país. Este hecho, constituyó un avance en la institucionalización
de la Educación Ambiental en el subsistema escolar.
En 1994 la Comisión Asesora Ambiental, CAAM, formuló las Políticas Básicas Ambientales del Ecuador, la
Política 9 se refiere a la prioridad que otorgará el Estado Ecuatoriano a la Educación y Capacitación
ambientales, como partes integradas a todas las fases, modalidades y asignaturas de la educación formal e
informal, y la capacitación en general.
La construcción de la Agenda Ecuatoriana de Educación Ambiental, impulsada por el MEC, ECOCIENCIA y la
UNESCO, y respaldada por la Comisión Asesora Ambiental, CAAM, en 1994 permitió generar en el país un
proceso significativo de reflexión en relación con la manera de percibir, conceptualizar y accionar de la
educación ambiental en el subsistema escolar. Así, en 1995 el Ministerio de Educación y Cultura, expidió el
Reglamento de “Educación, Capacitación y Comunicación Ambientales”, instrumento que sitúa al desarrollo
sostenible, como el centro de todas las preocupaciones educativas del país y concibe a la educación ambiental
como una herramienta fundamental para alcanzarlo.
8
9. Luego, en 1996 el MEC puso en vigencia la Reforma Curricular Consensuada para la Educación Básica
Ecuatoriana (preprimaria, primaria y ciclo básico), e incorporó a la educación ambiental como uno de los ejes
transversales que dinamiza el proceso educativo, atraviesa y está presente en las diferentes etapas educativas
y áreas que componen el currículo. Igualmente, el MEC expide en ese año, el Reglamento Orgánico Funcional,
en el que al Departamento de Educación Ambiental, se le da la categoría de “División Nacional de Educación
Ambiental y Vial” con sus áreas de trabajo: Ecología- Biosfera, Recursos Naturales, Ecoturismo, Calidad
Ambiental y de Vida, y Educación Vial.
La Educación Intercultural Bilingüe contempló entre sus fundamentos generales, el de “Medio Ambiente” e
integró al currículum aspectos relacionados con la defensa, protección y mantenimiento del medio ambiente. En
este esquema la persona es el eje central por su capacidad para actuar sobre el medio. El tratamiento del medio
ambiente integró los siguientes aspectos: Comprensión de las relaciones entre el hombre y la naturaleza;
cuidado, conservación y preservación de la naturaleza; uso racional (sostenido) de los recursos naturales.
La creación del Ministerio de Medio Ambiente MAE, en 1996 y la posterior promulgación de la Ley de Gestión
Ambiental en 1999, contribuyeron al proceso de institucionalización de la educación ambiental en el Sistema
Educativo Ecuatoriano, porque uno de los objetivos previstos mediante la aplicación de la Ley, es propiciar un
trabajo conjunto con el MEC, para el establecimiento de directrices de la política ambiental a las que deberán
sujetarse los planes y programas de estudio para todos los niveles.
Consecuentes con los postulados de la Ley de Gestión Ambiental y las políticas propuestas en la Agenda
Ecuatoriana de Educación Ambiental, en el mes de diciembre del año 2000 los Ministerios de Educación y del
Ambiente, suscribieron el Convenio Marco de Cooperación Interinstitucional, con el objeto de aunar esfuerzos
para implementar Programas de Educación, Concientización, Capacitación y Comunicación Ambiental;
analizar y revisar las políticas y programas de educación ambiental vigentes y futuras.
Una de las primeras acciones realizadas en el marco del citado convenio, fue la organización y desarrollo de la
reunión de trabajo e intercambio de experiencias, sobre Procesos de Educación Ambiental, con énfasis en la
educación formal. Participaron 60 delegados de instituciones públicas y no gubernamentales, que desarrollan
proyectos en educación ambiental. Con al apoyo de la Fundación ALTRÓPICO, se contó también con la
participación de expertas del Programa Nacional de Educación Ambiental de la WWF, de Colombia.
Los informes sobre las experiencias desarrolladas permitieron conocer que si bien existen aportes importantes
para la educación ambiental, estos son focalizados, coyunturales y aún no se logra incidir en un mejoramiento
cualitativo de la misma en la educación básica y el bachillerato. Como un mecanismo apropiado para impulsar la
educación ambiental, los participantes recomendaron la conformación de un grupo de trabajo interinstitucional,
liderado por los Ministerios de Educación y del Ambiente, e integrado con representantes de los Ministerios de
Defensa, Salud, Turismo y el Comité Ecuatoriano de Defensa de la Naturaleza y Medio Ambiente, CEDENMA,
como una instancia de apoyo técnico y político para el desarrollo de la educación ambiental en el país.
Sobre la base de los propósitos de los convenios MEC-MAE 2000 y las recomendaciones de la Reunión
Binacional (abril del 2001), se integró el Grupo Interinstitucional, encargado de elaborar una propuesta
preliminar del Plan Nacional de Educación Ambiental para la Educación Básica y el Bachillerato; dicho plan
previó un conjunto de políticas, estrategias y acciones para impulsar la educación ambiental en la educación
básica y el bachillerato, como niveles iniciales del Sistema Educativo Nacional y promover una participación
crítica y comprometida de la comunidad educativa, en la gestión ambiental para el desarrollo sustentable. El
Plan constituía igualmente un instrumento para orientar el desarrollo de la educación ambiental, en coherencia
con las competencias de los organismos gubernamentales y no gubernamentales involucrados y en el marco de
un cuerpo articulado de políticas de Estado para el mediano y largo plazos (4 y 10 años).
A fines del año 2002, se contó con el documento preliminar del Plan Nacional de Educación Ambiental elaborado
por el Grupo Interinstitucional con el apoyo técnico de la UNESCO y la participación de delegados de
universidades, lamentablemente, motivos de orden financiero y la inestabilidad política que afectó a las
instituciones públicas del país, obligaron a que su validación fuera postergada hasta cuando el Ministerio del
Ambiente, logró incorporar la validación del Plan y desarrollo de la propuesta curricular para su aplicación en la
educación básica y el bachillerato, como actividades del Programa de Apoyo de Corto Plazo de la Cooperación
Holandesa al Ministerio del Ambiente, en el Área de la Calidad Ambiental.
En noviembre del 2005 el Ministerio de Ambiente y el Ministerio de Educación y Cultura, suscribieron un nuevo
convenio de cooperación con el objeto de: “Asegurar la incorporación y posterior desarrollo de las políticas,
9
10. estrategias, programas y proyectos prioritarios del Plan Nacional de Educación Ambiental para la Educación
Básica y el Bachillerato, en las políticas educativas y ambientales nacionales, en los planes operativos de las
Direcciones Nacionales del MEC, responsables de la educación ambiental, la planificación curricular, la
capacitación y actualización docente, la supervisión, seguimiento y evaluación”1 . Y por otro lado “Lograr la
aplicación de la propuesta de desarrollo curricular para la incorporación y/o fortalecimiento de la dimensión
ambiental en los niveles de educación básica y bachillerato, que será definida a través de los talleres de
validación del Plan Nacional de Educación Ambiental, por parte del MEC y sus instancias técnicas y operativas
competentes”2
Finalmente en febrero del 2006, los Ministerios del Ambiente y Educación en coordinación con la Corporación
OIKOS, en su calidad de organismo consultor seleccionado (previo concurso), por el Grupo Interinstitucional de
Educación Ambiental, organizaron 3 talleres regionales para validación de la propuesta preliminar del Plan
Nacional de Educación Ambiental, que tuvieron como sedes las ciudades de Quito, Guayaquil y Cuenca. En
estos eventos participaron 155 personas en representación de profesores de educación básica y bachillerato,
funcionarios de los Ministerios de Educación y Ambiente, organizaciones no gubernamentales, gobiernos
seccionales y universidades de las 21 provincias continentales del país. Los valiosos aportes que presentaron
los participantes en los grupos de trabajo y sesiones plenarias, han sido incorporados en la versión definitiva de
este documento.
1* Convenio de Cooperación entre el Ministerio del Ambiente y el Ministerio de Educación y Cultura del 7 de noviembre del 2005. Registro No. 849 Folio 51 del 9 de noviembre del 2005
en el Ministerio del Ambiente.
2*Ibid
10
11. II. JUSTIFICACION
El Plan Nacional de Educación Ambiental para la Educación Básica y el Bachillerato, se sustenta en los
siguientes aspectos:
A) La educación frente al desarrollo sostenible
“Los procesos de globalización económica, internacionalización del Estado, regionalización, crecimiento
urbano y desarrollo de la ultra ciencia y la meta tecnología…. Y de manera paralela, el proceso de
pauperización que la dinámica del sistema produce, obliga a los estados nacionales y a sus sistemas
educativos, a replantear no solo sus agendas sino la existencia misma de su misión y organización,
especialmente la del Estado como la instancia de ordenamiento, control y reproducción de la sociedad en su
conjunto.
Por otra parte, ha entrado en escena el llamado “tercer elemento” de la sociedad: la sociedad civil. En
condiciones de sobre vivencia cada vez más críticas apuesta a su participación activa y consciente, ya no a
través de instancias formales de representación política, ni tampoco de organizaciones tradicionales o
sindicales, sino a través de sus propias asociaciones étnicas, culturales, de género, etáreas, barriales,
deportivas, municipales y seccionales, etc., a fin de plantear directamente sus demandas y presionar por su
incorporación activa en la planificación y gestión desde el Estado y sus instancias locales”3
En este marco se vislumbran nuevos escenarios y sinergias entre lo público y lo privado; entre las instancias de
organización del Estado y la participación ciudadana, donde al parecer, quedaron atrás los “representantes del
pueblo” y se instalan modelos de encuentros, negociación, consensos, cooperación y corresponsabilidad por
una mejor calidad de vida, de educación y por supuesto de calidad ambiental.
Desde otra óptica la importancia dada por los Organismos Internacionales al desarrollo sostenible y los
elementos que en él inciden, queda reflejada en la Década de la Educación para el Desarrollo Sostenible o,
mejor, para un futuro sostenible (2005-2014) a cuyo impulso y desarrollo este plan se adhiere.
Como señala la UNESCO “El Decenio de las Naciones Unidas para la educación con miras al desarrollo
sostenible pretende promover la educación como fundamento de una sociedad más viable para la humanidad e
integrar el desarrollo sostenible en el sistema de enseñanza escolar a todos los niveles. El Decenio intensificará
igualmente la cooperación internacional en favor de la elaboración y de la puesta en común de prácticas,
políticas y programas innovadores de educación para el desarrollo sostenible”.
En esencia se propone impulsar una educación solidaria -superadora de la tendencia a orientar el
comportamiento en función de intereses a corto plazo, o de la simple costumbre- que contribuya a una correcta
percepción del estado del mundo, genere actitudes y comportamientos responsables y prepare para la toma de
decisiones fundamentadas (Aikenhead, 1985) dirigidas al logro de un desarrollo culturalmente plural y
físicamente sostenible (Delors, 1996; Cortina et al., 1998).
Para algunos autores, estos comportamientos responsables exigen superar un “posicionamiento claramente
antropocéntrico que prima lo humano respecto a lo natural”, en aras de un biocentrismo que “integra a lo
humano, como una especie más, en el ecosistema” (García, 1999). No obstante pensamos, que no es
necesario dejar de ser antropocéntrico, y ni siquiera profundamente egoísta -en el sentido de “egoísmo
inteligente” al que se refiere Savater (1994)- para comprender por ejemplo, la necesidad de proteger el medio y
la biodiversidad. ¿Quién puede seguir defendiendo la explotación insostenible del medio o los desequilibrios
“Norte-Sur”, cuando comprende y siente que ello pone seria y realmente en peligro la vida de sus hijos?
La educación para un futuro sostenible habría de apoyarse en lo que puede resultar razonable para la mayoría,
sean sus planteamientos éticos más o menos antropocéntricos o biocéntricos. Dicho con otras palabras: No
conviene buscar otra línea de demarcación que la que separa a quienes tienen o no una correcta percepción de
los problemas y una buena disposición para contribuir a la necesaria toma de decisiones para su solución. Basta
con ello para comprender que, por ejemplo, una educación para el desarrollo sostenible, es incompatible con
una publicidad agresiva que estimula un consumo poco inteligente; es incompatible con explicaciones
simplistas y maniqueas de las dificultades como debidas siempre a “enemigos exteriores”; es incompatible en
particular, con el impulso de la competitividad, entendida como contienda para lograr algo contra otros que
persiguen el mismo fin y cuyo futuro, en el mejor de los casos no es tenido en cuenta, lo cual resulta claramente
I 3*CARLOS PALADINES E. “Educación y Democracia en el contexto de la Globalización e Internacionalización” 1998
11
12. contradictorio con las características de un desarrollo sostenible, que ha de ser necesariamente global y
abarcar la totalidad de nuestro pequeño planeta.
Frente a todo ello se precisa una educación que ayude a contemplar los
problemas ambientales y del desarrollo en su globalidad (Tilbury, 1995; Luque,
1999), teniendo en cuenta las repercusiones a corto, mediano y largo plazo,
tanto para una colectividad dada como para el conjunto de la humanidad y
nuestro planeta; a comprender que no es sostenible un éxito que exija el
fracaso de otros; a transformar, en definitiva, la interdependencia planetaria y
la mundialización en un proyecto plural, democrático y solidario (Delors, 1996).
Un proyecto que oriente la actividad personal y colectiva en una perspectiva
sostenible, que respete y potencie la riqueza que representa tanto la
diversidad biológica como la cultural y favorezca su disfrute.
Merece la pena detenerse en especificar los cambios de actitudes y comportamientos que la educación debería
promover: ¿Qué es lo que cada uno de nosotros puede hacer “para mejorar la calidad del ambiente”?. Las
llamadas a la responsabilidad individual se multiplican, incluyendo pormenorizadas relaciones de posibles
acciones concretas en los más diversos campos, desde la alimentación al transporte, pasando por la limpieza,
la calefacción e iluminación, o la planificación familiar (Button y Friends of the Earth, 1990; Silver y Vallely, 1998;
García Rodeja, 1999; Vilches y Gil, 2003).
En ocasiones surgen dudas acerca de la efectividad que pueden tener los comportamientos individuales, los
pequeños cambios en nuestras costumbres, en nuestros estilos de vida, que la educación puede favorecer: Los
problemas de agotamiento de los recursos energéticos y de degradación del medio se afirma, por ejemplo- son
debidos fundamentalmente, a las grandes industrias; lo que cada uno de nosotros puede hacer al respecto es,
comparativamente, insignificante. Pero resulta fácil mostrar (bastan cálculos muy sencillos) que si bien esos
“pequeños cambios” suponen, en verdad, un ahorro energético per cápita muy pequeño, al multiplicarlo por los
muchos millones de personas que en el mundo pueden realizar dicho ahorro, éste llega a representar
cantidades ingentes de energía, con su consiguiente reducción de la contaminación ambiental (Furió et al.,
2004).
El futuro va a depender en gran medida del modelo de vida que sigamos y aunque éste a menudo nos lo tratan
de imponer, no hay que menospreciar la capacidad que tenemos los consumidores para modificarlo (Comín y
Font, 1999). La propia Agenda 21 indica que la participación de la sociedad civil es un elemento imprescindible
para avanzar hacia la sostenibilidad. Aunque no se debe ocultar, que para ir más allá de proclamas puramente
verbales, hay dificultad de desarrollo de las ideas antes mencionadas, ya que comportan cambios profundos en
la economía mundial y en las formas de vida personales. Por ejemplo, el descenso del consumo provoca
recesión y caída del empleo. ¿Cómo eludir estos efectos indeseados? ¿Qué cambiar del sistema y cómo se
podría hacer, al menos teóricamente, para avanzar hacia una sociedad sostenible?
B) La necesidad de la educación ambiental para afrontar la problemática de calidad ambiental
Hay necesidad de realizar un esfuerzo sistemático por incorporar la educación para la sostenibilidad
como un objetivo clave en la formación de los niños y jóvenes del Ecuador. Un esfuerzo de actuación que debe
tener en cuenta que, cualquier intento de hacer frente a los problemas de nuestra supervivencia como especie,
ha de contemplar el conjunto de problemas y desafíos que conforman la situación de emergencia planetaria.
Ése es precisamente uno de los retos fundamentales que se nos presentan, el carácter sistémico de problemas
y soluciones: la estrecha vinculación de los problemas, que se refuerzan mutuamente y han adquirido un
carácter global, exige un tratamiento igualmente global de las soluciones. Dicho con otras palabras: ninguna
acción aislada puede ser efectiva, se precisa de un entramado de medidas que se apoyen mutuamente. Por
ello, el presente Plan responde a una visión compartida de los Ministerios de Educación, Ambiente, Salud,
Defensa, Turismo y la Coordinadora para la Defensa y Protección del Medio Ambiente, CEDENMA, en su
calidad de organismos públicos y no gubernamentales, comprometidos con el desarrollo de la educación
nacional.
En este contexto y reconociendo la importancia del ambiente en la salud de la población, es plausible esperar
nuevos desafíos para la Educación en función de la Epidemiología Ambiental, en particular en el montaje de
sistemas de vigilancia ambiental, capaces de dar oportuno aviso de cambios bruscos en el proceso salud-
enfermedad de la población.
12
13. Hace falta sin embargo, enfatizar en dos aspectos fundamentales de la investigación ambiental: la rigurosidad
en los métodos de investigación y la adecuada comunicación con los medios de información pública. Esto es
especialmente importante cuando una investigación no demuestra efectos detectables por la exposición a un
agente sospechosamente nocivo, resultado que nunca será tan divulgado como los resultados positivos,
aunque éstos sean falsos positivos. La divulgación de asociaciones espúreas o no confirmadas producirá
efectos en la opinión pública muy difíciles de cambiar, llevando en ocasiones a la adopción de políticas de
dudosa oportunidad e impacto en la situación de salud de nuestra población.
c) La necesidad de conceptualizar la educación ambiental en el Currículo Escolar, como
paradigma educativo.
La educación ambiental para el desarrollo sustentable, a igual que otras pedagogías emergentes, carece en la
práctica educativa de orientaciones epistemológicas y psicológicas propias o que le son más inherentes. La
educación ambiental se ha adherido a los criterios de transversalidad y constructivismo; en el primer caso es
una propuesta metodológica-temática y en el segundo una visión epistemológica trasladada al aula de clase,
que ejerce influencia en los métodos y degrada la pedagogía a didáctica.
Los diferentes tipos de propuestas curriculares de la educación básica y el bachillerato, no coinciden en sus
enfoques epistemológicos y psicopedagógicos. Por ejemplo, el Proyecto de bachillerato propuesto por la
Universidad Andina Simón Bolívar en convenio con el Ministerio Educación, no explicita una epistemología y el
tratamiento para educación ambiental, es temático; el bachillerato propuesto por la Dirección Nacional de
Educación Intercultural Bilingüe, DINEIB, tiene su propia postura en lo epistemológico y se adhiere al
tratamiento transversal para la educación ambiental; y el bachillerato técnico sustentado por el Ministerio de
Educación, se identifica con el constructivismo y transversalidad, pero su tratamiento es modular y temático,
cuando existe.
Comienzan a existir coincidencias, sobre todo en las teorías de aprendizaje y las consecuencias pedagógicas
que se derivan. Piaget, Vygotsky, Ausubel, entre otros son los más citados. Sin embargo, no se ha llegado a una
comprensión cabal de cada uno de ellos ni a una elaboración comprehensiva crítica e integradora de los
diferentes autores.
Coexisten diferentes maneras de entender la epistemología llevada al aula como didáctica denominada
constructivismo. Esta concepción no ha logrado hasta el momento, concretarse en propuestas pedagógicas y
curriculares.
Consecuencia de lo anterior es la dispersión de las prácticas pedagógicas, el reduccionismo lamentable de la
pedagogía a la didáctica, la desvalorización del papel mediador fundamental del profesor, la pérdida de la
importancia de la evaluación, la reducción de la ciencia a una narración idiosincrásica cuando no cultural, sin
contenido de verdad y autoreferencial y relativista,... Es posible que esta crisis comience a tener un cause de
solución, gracias al aporte y enfoque de la educación ambiental para el desarrollo sustentable a través de
formas más sustentables de diseño y desarrollo pedagógico y curricular.
Desde este enfoque, el ambiente se convierte en problema de investigación por las consecuencias del deterioro
de los recursos naturales, y afectación de la vida humana a grandes y pequeñas escalas, centrándose la
atención de la comunidad científica internacional, en la búsqueda de la concienciación de la necesidad
apremiante de utilizar responsablemente el conocimiento de todos los campos de la ciencia, para dar respuesta
a la creciente degradación ambiental, que no solo pone en crisis las condiciones de vida en el planeta, sino hasta
la propia sobrevivencia y perpetuación del ser humano.
Les corresponde, por tanto a las ciencias del ámbito social y en particular a la psicología, estudiar los problemas
derivados del conflicto creciente entre la cultura y la naturaleza, los cuales han cambiado las condiciones de
vida del planeta, originando efectos nocivos que afectan la calidad de la vida en su conjunto. La psicología
ambiental, se ocupa del estudio de la conciencia ambiental de las personas, incluyendo los diferentes procesos
que conforman la misma; en función de su carácter aplicado, la psicología se constituye en un instrumento ideal
para la promoción de la formación de una conciencia ambiental adecuada en los seres humanos, que les
permita convivir con el entorno, preservarlo, y transformarlo en función de sus necesidades, sin comprometer
con ello la posibilidad de las generaciones futuras de satisfacer las suyas, de preservar y desarrollar la riqueza
cultural de la humanidad, de producir bienes y riquezas materiales, incrementar el potencial productivo,
asegurando oportunidades equitativas para todos, sin que ello implique poner en peligro nuestro ambiente.
13
14. La conciencia ambiental es definida por Febles, María (2004), como "el sistema de vivencias, conocimientos y
experiencias que el individuo utiliza activamente en su relación con el medio ambiente", la misma posee varios
indicadores, consistentes en complejos procesos psicológicos, tales como el conocimiento, la sensibilización,
las actitudes, las percepciones y la conducta humana
d) La visión de docentes y otros actores ecuatorianos sobre la necesidad de trabajar en
educación ambiental sobre la problemática de la calidad ambiental
A criterio de los docentes y funcionarios públicos del MEC y del MAE, e involucrados en gobiernos seccionales y
locales y organizaciones no gubernamentales y delegados de universidades4, existen res factores sociales
preponderantes que incidirían en la problemática de la calidad ambiental en el Ecuador:
La comunicación social y la información: el acceso a la información adecuada es limitada, no hay
programas de educación informal para la población, no hay programas de motivación o sensibilización
general
La cultura local, en general: existen malas costumbres personales, familiares y corporativas, corrupción
individual, familiar, corporativa, gubernamental, hay egoísmo, falta de conciencia ambiental, sensibilidad,
y motivación. No hay buenas maneras, no hay una cultura preventiva, nadie respeta a nadie, no importan
los bienes comunes.
La participación comunitaria: es débil, desorganizada, descontinuada, no técnica, no digna ni altiva, es
sumisa, etc.
En tales condiciones, la educación ambiental juega un papel muy importante porque existe la necesidad de
fomentar un proceso de debate, de conocimiento y comprensión de los problemas de calidad ambiental, sus
causas, consecuencias y alternativas de solución desde la perspectiva educativa, así como las subsecuentes
gestiones que influyen en la toma de decisiones por los organismos involucrados y la sociedad en general. Por
ello, la educación puede y debe responder favorablemente a las exigencias para mejorar la calidad ambiental.
En síntesis, de los aspectos señalados se puede concluir que el Plan Nacional responde fundamentalmente a la
necesidad de:
Fusionar dos disciplinas: educación y comunicación, lo que permite reconocer que la educación
ambiental para el desarrollo sustentable sea concebida como un sistema integral en el más amplio
sentido de la palabra. Para el diseño y construcción del mismo, habría necesidad de distinguir lo más
claramente posible, todos sus componentes, las interrelaciones de éstos entre sí y con su ambiente
particular, y la relación del sistema total con otros sistemas que funcionan a su mismo nivel y dimensión.
En este sentido, el Plan aspira a iniciar una gran tarea de desagregación de los diversos componentes, de
lo que idealmente podría denominarse un macro sistema de educación ambiental que cabría instalarse
en el país, para de esa manera intentar responder a un enorme quantum problemático de calidad
ambiental, que amenaza con el fracaso cualquier esfuerzo de educación o comunicación, si no se
procede con organicidad al planificar su tratamiento educativo. En estricto sentido sistémico la
concepción de un trabajo articulado entre los distintos sectores involucrados en la educación del país,
representa un desafío en el trabajo inter-sectorial y trans-sectorial, en los cuales las partes
individualmente no logran alcanzar lo que la suma de ellas, sí podría conseguir , con una adecuada y
coherente planificación, coordinación, ejecución y rendición de cuentas.
Penetrar con la educación ambiental en todo el sistema educativo, a fin de que la problemática de calidad
ambiental, clarifique a la multitud de actores que intervienen en esos problemas y que la educación debe
conocerlos y re-conocerlos para determinar sus sistemas de comunicación a nivel local, regional,
5
nacional.
Analizar constantemente el modo y la forma de trabajar en educación ambiental, para aportar con
soluciones a la problemática de calidad ambiental desde el ámbito de la educación formal. Es
determinante reflexionar sobre los enfoques pedagógicos, la planificación y administración educativa, la
práctica docente, la supervisión y evaluación del proceso educativo , los recursos didácticos que
4*155 personas participaron en tres talleres de Validación del Plan Nacional de Educación Ambiental realizados en las ciudades de Guayaquil, Cuenca y Quito en febrero del 2006.
Eventos convocados por el MEC y MAE
5*MARCO A. ENCALADA. “Experiencias prácticas de educación ambiental y concientización sobre el ambiente en el Ecuador. 1992
14
15. deberían apoyar el conocimiento, interpretación y comprensión de una situación ambiental dada, hay
necesidad de replantear el rol de medios de comunicación colectiva, por la decisiva influencia que
ejercen los mismos en la formación de hábitos y conductas en los niños y jóvenes; los modelos y sistemas
organizacionales de las dependencias públicas, privadas, no gubernamentales que trabajan en
programas, proyectos, actividades de educación ambiental con las escuelas y colegios, esto último es
particularmente relevante dada la necesidad de impulsar la relación escuela- comunidad para el
conocimiento y tratamiento de la problemática ambiental local, en los contextos nacional y global.
Finalmente, cabe resaltar que la planificación de la educación ambiental se convierte en el principal instrumento
de trabajo orgánico del convenio de cooperación MEC MAE en el ámbito educativo formal del Ecuador.
15
16. III. OBJETIVOS DEL PLAN NACIONAL DE EDUCACIÓN AMBIENTAL
Impulsar la educación ambiental para el desarrollo sustentable en el sistema educativo nacional, mediante un
compromiso de articulación de políticas educativas de Estado para los niveles de educación básica, bachillerato
y post bachillerato, tanto en el ámbito de la educación hispana como en la bilingüe.
Fortalecer la dimensión ambiental en la educación básica y bachillerato ecuatorianos, procurando el desarrollo
de un conjunto de estrategias de investigación ambiental, comunicación y aplicación de resultados, con la
participación de los organismos gubernamentales y no gubernamentales involucrados en los programas y
proyectos
Priorizar y ejecutar programas y proyectos de educación ambiental, para el desarrollo sustentable mediante la
promoción y gestión política, educativa y administrativa, encaminadas a la consecución y optimización de
aportes técnicos, financieros y logísticos requeridos.
Retroalimentar las políticas públicas educativas y ambientales, incorporando los avances logrados y ajustes
que se identifiquen en la evaluación sistemática del presente plan.
Generar los mecanismos apropiados para que el país logre una participación efectiva en los Programas y
Proyectos de Educación Ambiental que promueven los Organismos de Cooperación Técnica Internacional.
IV. BREVE DIAGNÓSTICO DE LA EDUCACIÓN AMBIENTAL EN EL ECUADOR
Si bien las iniciativas y los esfuerzos realizados a favor del país por las instituciones estatales y organismos no
gubernamentales comprometidos con el desarrollo de la educación ambiental, han sido diversos y con cierta
secuencia, éstos no han logrado aún incidir significativamente en el currículo de la educación básica y del
bachillerato nacional. Un reporte de hace 14 años “sobre el estado de la educación ambiental en el Ecuador dio
cuenta de las severas limitaciones de su aplicación…”6; desde ese entonces, las cuestiones no han cambiado
sustancialmente y por el contrario, al parecer, con el deterioro de la calidad de la educación en general, la
educación ambiental también se ha deteriorado y por su puesto la problemática de la calidad ambiental se ha
incrementado.
Este breve diagnóstico se preparó con la participación del Grupo Interinstitucional de Trabajo de Educación
Ambiental y fue enriquecido con la información de fuentes secundarias y el análisis de las personas que
participaron en los talleres de validación del presente plan en el mes de febrero de 2006.
A continuación se presenta los elementos sobresalientes que configuran este breve diagnóstico.
4.1 Visión de los Problemas de Calidad Ambiental en el Ecuador
La situación ambiental del Ecuador se ha deteriorado en las últimas décadas, hecho que se evidencia en la
presencia de problemas como la pérdida de la biodiversidad, la deforestación, la creciente contaminación
urbana, el deterioro del recurso suelo y la vulnerabilidad, principalmente. La naturaleza, interrelación,
causalidad y consecuencias de estos problemas son extremadamente complejos; por lo tanto, no pueden ser
resueltos por la acción aislada de las personas o de una sola organización, ni siquiera de un solo sector
(económico, social y político). Sin embargo, no puede ser razón para asumir una actitud derrotista ni caer en la
inacción. Cualquier persona o grupo de personas actuando en conjunto, o como miembros de una organización,
pueden y deben participar desde su propia dimensión y capacidad operativa, con alternativas de acción
constructiva para aportar a la solución de los problemas.
En este sentido, si bien la educación por si sola no puede resolver ningún problema (quizás ni aquellos que se
originan en su propia funcionalidad), puede no obstante, contribuir y hacerlo de una manera muy positiva, a la
solución de muchos (por no decir de todos) los problemas ambientales. Y la primera y principal forma cómo
puede hacerlo, es promoviendo y estimulando el compromiso y la participación de la comunidad, esto es,
7
poniendo las bases para facilitarla, a través de su función formadora de ciudadanos eficaces para la sociedad.
6* Informe presentado por el Ecuador en el Seminario Educación y Medio Ambiente en los países andinos. Estrategias educativas. Cuenca 1992 OEA.
7*ELOISATRELLEZ Y CÉSAR A. QUIROZ. La educación ambiental en la educación primaria. 1994
16
17. En la actualidad a nivel mundial, existe una fuerte demanda de contenidos educativos que responden a
necesidades de la sociedad y una de ellas se refiere a calidad del ambiente; esto conlleva a que el sistema
educativo, debe reconocer el importante papel que juega el ambiente en la vida de las personas y en el
desarrollo y el avance de las sociedades, dado que en las relaciones ser humano-ambiente, está implícito un
componente de actitudes, valores y toma de decisiones.
Luego de esta precisión conceptual, se citan a continuación los principales problemas ambientales del Ecuador.
Como un elemento de apoyo a la visión de los problemas ambientales prioritarios, en el Anexo No. 1, se
presenta una síntesis de los enfoques de la Educación Ambiental en algunos Convenios internacionales
suscritos por el Ecuador, cuyo punto focal es el Ministerio del Ambiente.
DEFORESTACIÓN
Ecuador es reconocido por ser uno de los países con mayor biodiversidad del mundo está entre los 12 países
más diversos del mundo- y por tener el mayor número de especies vegetales por unidad de área -110 a 120
especies de árboles mayores a 10 cm. de Diámetro a la Altura del Pecho, DAP, y desde 180 a 300 en la región
amazónica-. En términos globales Ecuador tiene casi un cuarto de todas las especies de aves del mundo, unas
17.000 especies de plantas superiores catalogadas pudiendo llegar a unas 23.000-, dentro de éstas, alrededor
de 4000 especies de orquídeas, es decir, especies herbáceas.8
El bosque es uno de los recursos naturales más importantes con que cuenta el Ecuador para su desarrollo;
constituye una unidad ecosistémica formada por árboles, arbustos y demás especies vegetales y animales
resultantes de un proceso ecológico espontáneo, que interrelaciona otros recursos como el agua, la
biodiversidad, el suelo, el aire, el paisaje, etc.
Según información de Imágenes satelitarias entre 1994 y 2002 propiedad de Jatun Saccha CDC, se pierden
unas 245.000 hectáreas de bosques nativos cada año. La mayoría de esta deforestación ocurre en los bosques
húmedos tropicales del noroccidente y amazonía del Ecuador, que son los ecosistemas más ricos. Las tasas de
deforestación en el Ecuador están entre las más altas de América Latina. Las estimaciones de la tasa de
deforestación varían considerablemente en el país, dependiendo de la fuente, pero se estima que la tasa anual
de deforestación varía entre 89.000 y 124.000 hectáreas.9
Los procesos más agresivos de deforestación se producen en Esmeraldas y en el área centro norte de la
Amazonía. Gran cantidad de los bosques de la costa han sido talados para uso en actividades agropecuarias.
En la Amazonía, extensas áreas han sido afectadas por los impactos directos e indirectos de la colonización,
con la consiguiente explotación maderera y desplazamiento de las comunidades locales. Según datos del
CLIRSEN, en 1991 había 13'462.654 hectáreas de bosques húmedos, secos y manglares, mientras que para el
2000 el área con cubierta vegetal se registró en 11'679.822 h. Es decir, hasta la fecha han desaparecido más de
792.000 hectáreas.
Los factores sociales que afectan a la deforestación se relacionan con el aprovechamiento no sostenible de la
madera y la expansión de la frontera agrícola. En algunas áreas, principalmente en el norte de la Amazonía, se
generó un agresivo proceso de colonización, asociado a la explotación petrolera y consiguiente apertura de
caminos. Como producto de este proceso al parecer se talaron 800.000 Ha bosque. En otros sitios, como en las
estribaciones de la cordillera occidental, la deforestación aparece como uno de los resultados de la colonización
por parte de sectores campesinos que ocuparon cejas de montaña.
Las consecuencias de la deforestación tienen implicaciones en todos los elementos de los ecosistemas, pues
su impacto en la sostenibilidad del recurso suelo y agua son trascendentales; así como su influjo en las
alteraciones del clima y magnificación de fenómenos naturales, como disminución de lluvias, épocas de sequía
prolongadas y desertificación; reducción de los hábitats de especies animales y vegetales. Además tiene
consecuencias sobre la economía y la sociedad, tales como la migración campesina, empobrecimiento de
procesos productivos, inseguridad alimentaria, etc.
Las alternativas de solución deberían orientarse tanto desde la perspectiva educativa, como de la económica y
social.
8*Según estimaciones hechas por Jatun Sacha/CDC basadas en imágenes satelitarias entre 1994 y 2002.
9*Situación de los bosques en el Ecuador. Ministerio de Relaciones Exteriores. www.mmrree.gov.ec
17
18. PÉRDIDA DE LA BIODIVERSIDAD
En el Ecuador se han producido importantes modificaciones del espacio natural que han eliminado o reducido
de manera dramática, a un importante número de ecosistemas y de formas de vida; lamentablemente, las
presiones sobre los diferentes componentes de la biodiversidad son crecientes. El desarrollo de las
plantaciones en el litoral y de los pastizales en la Sierra y la Costa, la sobreexplotación de los recursos forestales
y pesqueros, y la contaminación y el deterioro ambiental, constituyen procesos que, al no haber contemplado
las alteraciones sobre la biodiversidad, han producido y siguen produciendo daños considerables, y en muchos
casos irreversibles, que tienen serias consecuencias económicas. Algunos de estos procesos se explicarían y
justificarían de alguna manera, por la necesidad de atender el desarrollo de la producción, el requerimiento de
divisas y el crecimiento económico.
Entre los principales factores de pérdida de biodiversidad están:
La alteración, fragmentación y destrucción de hábitats y ecosistemas, la sobreexplotación de la fauna y flora
silvestres y de recursos, la introducción de especies exóticas, la contaminación creciente del agua, suelo y aire.
Los factores socioeconómicos se encuentran entre las causas subyacentes que ocasionan la pérdida de la
diversidad biológica. El Ecuador ha experimentado una profunda crisis económica a lo largo de las dos últimas
décadas, la cual se ha reflejado en la profundización de los niveles de pobreza y en la inestabilidad política. La
crisis pone de manifiesto la necesidad de reorientar las prácticas productivas con uso más eficiente de las
ventajas comparativas que tiene el país, y una minimización del deterioro de la biodiversidad, que supere la
dependencia de unos pocos productos de exportación.
Otro factor importante se refiere a la necesidad de acceso a la tierra y a los recursos que les permita su
subsistencia.
Los efectos de la pérdida acelerada de la biodiversidad, entre otros, se manifiestan en la pauperización de los
ecosistemas, en la desaparición de importante “información genética para el avance de la biotecnología, lo que
significa pérdidas económicas porque desaparecen las variedades nativas que contribuyen al mejoramiento de
las características de variedades comerciales, como resistencias a plagas o heladas”.10
En cuanto a las soluciones de carácter técnico se recomienda impulsar programas de educación, investigación
y difusión de los conocimientos científicos sobre el manejo de la biodiversidad; fomento de las tecnologías
alternativas para uso y manejo de la biodiversidad; recuperación de áreas forestales con especies nativas.
Las alternativas de solución de carácter social, se enmarcan en la necesidad de formulación de planes
nacionales de conservación y su integración en los planes nacionales, regionales y locales de desarrollo, con la
consiguiente búsqueda de mecanismos eficientes para el cumplimiento de las leyes y regulaciones que impidan
el tráfico de especies y considerar a la educación como una herramienta fundamental, estimular los cambios de
comportamiento que demanda la atención de esta problemática.
Finalmente, es importante desarrollar iniciativas sostenidas para el rescate del conocimiento ancestral sobre la
utilidad de los recursos biológicos y los sistemas tradicionales sobre el manejo y aprovechamiento de los
mismos, toda vez que el Tratado de Libre Comercio entre el Ecuador y los Estados Unidos, se encuentra en
proceso de negociación, estos temas resultarán sensibles en el marco de la denominada “cooperación
ambiental” con un país que no se ha adherido a las Convenciones Nacionales de Biodiversidad, ni sobre el
Cambio Climático, ni el Protocolo de Kyoto.
EROSIÓN Y CONTAMINACIÓN DEL RECURSO SUELO
La potencialidad del Ecuador se sustenta de manera fundamental, en la diversidad de sistemas ecológicos y por
tanto, de suelos. Sin embargo, el crecimiento demográfico, la expansión de la frontera agrícola y los procesos de
urbanización, generan una presión creciente sobre el uso del suelo, incrementan la conflictividad entre actores
sociales y provocan el deterioro del recurso al destinarlo a fines inapropiados.
La erosión de los suelos es uno de los problemas ambientales más críticos que enfrenta el país. Alrededor del
51% del territorio nacional, está expuesto a procesos erosivos activos y potenciales, por causas naturales y
11
antrópicas. La región con mayores problemas de erosión es la Sierra.
10* ESTRELLA, Eduardo. Biodiversidad en el Ecuador. Historia y Realidad. Quito 1993
11* CORPORACIÓN OIKOS. Principales problemas ambientales del Ecuador. Quito, 1994
18
19. La contaminación del suelo en el Ecuador debido a la presencia de plaguicidas y fertilizantes, desechos
orgánicos domésticos o tóxicos, derrames de petróleo crudo, aguas de formación y lodos de perforación, o
sustancias químicas procedentes de la minería del oro, y derrames de grasas y aceites lubricantes, en general
configuran un grave problema de calidad ambiental.
Las principales causas de esta problemática se las podría organizar en dos grupos: el primero se refiere a las
causas inmanentes, como la erosión hídrica provocada por precipitaciones lluviosas sobre suelos descubiertos
y compactos, lo que produce el escurrimiento de grandes masas de materiales del suelo y por consiguiente
erosión; la erosión eólica especialmente en la parte alta de la Sierra, como el caso de Palmira12. El segundo
grupo de causas son las de carácter social, como la aplicación de técnicas agropecuarias inapropiadas, la
extracción de minerales, la deforestación y la construcción de obras civiles, sin aplicación de los estudios de
impacto ambiental. Amén, de la mala distribución y utilización del suelo, etc.
Una de las consecuencias de este problema es que en todo el país se están perdiendo y empobreciendo los
suelos agrícolas, por lo cual se agotan los nutrientes, la micro flora y fauna de la capa superficial del suelo.
Aumenta la sedimentación en los embalses, los estuarios y los puertos fluviales y marítimos. A ello se agrega
una importante contaminación de los suelos por desechos sólidos en medios urbanos o cercanos a ellos, por la
falta de sistemas de recolección y buena disposición de basura. Se ha ido incrementando también de forma
paulatina en el país, la contaminación de suelos por actividades petroleras, mineras, industriales,
agroindustriales, mecanización agrícola y otras actividades productivas.
Entre las soluciones de carácter técnico se apuesta al rescate de las tecnologías agrícolas tradicionales como:
rotación de cultivos, cultivos asociados, surcos de contorno, en terrazas, etc. Respeto de la aptitud o vocación
de los suelos. Construcción de rellenos sanitarios. Evitar el uso irracional de agroquímicos y controlar su
importación, etc.
Las soluciones de corte social son tan importantes como las técnicas y se recomienda establecer por ejemplo,
políticas, estrategias y programas a nivel nacional, regional y local, para aumentar la productividad en las tierras
ocupadas, uso de tecnologías adecuadas y limpias, descentralizar a los organismos del sector agrario,
reorientando su gestión a la prestación de servicios productivos. Iniciación de una zonificación agro ecológica.
Mejorar los mecanismos de coordinación entre los organismos encargados del manejo y administración del
suelo. La investigación científica sobre los productos altamente tóxicos, entre ellos los contaminantes orgánicos
13
persistentes.
DETERIORO DEL MEDIO AMBIENTE URBANO
Como en casi todos los países de América, en el Ecuador existe un proceso creciente de urbanización. En las
dos ciudades más grandes Quito y Guayaquil, la población supera el 1´000.00 y los 2´200.000 habitantes, y
existen más de quince ciudades con una población superior a los 100.000 habitantes. Además de los problemas
de planificación urbana que no previeron espacio para la ubicación de las zonas industriales y áreas verdes,
existen graves problemas de organización del transporte, mal manejo de aguas residuales, excesiva
producción de residuos sólidos peligrosos, hospitalarios, etc.
El acelerado crecimiento del parque automotor, constituye la principal fuente de contaminación urbana del aire,
que se agrava en las ciudades de altura por los problemas de combustión de los motores de gasolina y diesel, y
por la falta de vientos de manera regular. A esto se suma un parque automotor relativamente antiguo, cuyas
unidades han concluido su vida útil. Un estudio sobre problemas ambientales urbanos en el Ecuador, revela que
“durante el último cuarto de siglo, la producción industrial, el número de vehículos y el consumo de
combustibles, se han incrementado dramáticamente en el Ecuador. Como resultado de ello, han surgido serios
problemas de contaminación del aire en las principales ciudades del país… En Quito, especialmente donde
existe severas congestiones de tráfico y donde se dan cambios frecuentes de la temperatura”.14
Los procesos industriales ubicados en los alrededores de ciudades como curtiembres, sementeras y
15
agroindustrias, refinación petrolera, textil, farmacéutica, química, maderera, de curtiembres, minería ,
galvanoplastia, siderúrgica, metalmecánica, generan contaminación del aire. Adicionalmente, los incendios
forestales, la quema del rastrojo, la disposición inadecuada de materiales de construcción, la construcción y
12* CARRERA DE LATORRE, Luis et al. La gestión ambiental en el Ecuador. Quito 1993
13* “Los contaminantes orgánicos persistentes son productos con enorme impacto en la vida. Según el Acuerdo de Estocolmo son productos tóxicos para los animales, al tener
carbono en su estructura química, les hace solubles en grasas y permite que se bioacumulen y se biomagnifiquen a lo largo de las cadenas alimenticias; pasan décadas para
degradarse; y pueden desplazarse a grandes distancias. Por estas propiedades intrínsecas se vuelve imposible controlarlos una vez que se han liberado al ambiente. Aquí están
plaguicidas como el ALDRIN, DIELDRIN, DDT, ENDRIN, CLORDANO, MIREX, HEPTACLORO, HECACLOROBENCENO y TOXAFENO” Tomado de la publicación TLC Y
PLAGUICIDAS. Impactos en los mercados y la agricultura ecuatorianas. Sistema de investigación sobre la Problemática Agraria en el Ecuador. 2006
14* CORPORACIÓN OIKOS. Diagnóstico sobre problemas urbanos en el Ecuador. Quito. 1996
15* CORPORACIÓN OIKOS. Manual de Auditoría Ambiental para las actividades de beneficio de minerales auríferos. Quito 2000
19
20. adecuación de carreteras, provoca la suspensión de partículas de polvo en el aire. Por otro lado, el uso excesivo
de plaguicidas y fertilizantes aplicados con bombas manuales o por fumigación aérea (glifosato de sodio en la
zona norte del Ecuador), ocasiona la contaminación del aire debido a que son aplicados con dispersantes, que
mantienen las partículas de las sustancias tóxicas suspendidas en el aire.
En relación con las aguas servidas, solo la ciudad de Cuenca ha logrado un manejo integral de este problema.
Los temas de infraestructura básica sanitaria siguen siendo críticos, particularmente en las ciudades de la
Costa.
Los factores que determinan este amplio espectro de problemas de contaminación ambiental urbana, se
centran en una débil aplicación de la Ley de la Prevención y Control de la Contaminación Ambiental y sus
respectivos reglamentos. Se aprecia también falta de tecnologías no contaminantes para la explotación de
minerales, como el oro. Falta de educación y capacitación sobre los efectos de la contaminación del aire en la
salud, la economía, los ecosistemas y la biodiversidad.
Entre las soluciones se podrían priorizar las siguientes: Implementación de tecnologías para la reducción de
contaminantes gaseosos de la industria, como limpieza del gas de salida con la adecuación de filtros,
sustitución del combustible, cambio y optimización de la operación de los equipos, mantenimiento vehicular,
correcta disposición de residuos en los rellenos sanitarios, creación de parques industriales, monitoreo
permanente de la calidad del aire y difusión de sus resultados, etc.
CONTAMINACIÓN DEL AGUA
La calidad del agua en el Ecuador ha venido deteriorándose paulatinamente, especialmente en los últimos 20
años. Se destacan dos tipos de afecciones: la primera, resultante de la presencia de sedimentos en la mayoría
de cursos de agua, debido a la explotación de materiales de construcción que se realiza a cielo abierto o en los
lechos de los ríos. La segunda de carácter más puntual y de composición e intensidad variable, que se hace
evidente en ciertos tramos de los cursos de agua y en las cercanías de los principales recolectores de aguas
servidas de centros poblados e industriales, áreas de explotación y procesamiento de hidrocarburos y
productos mineros, así como de grandes zonas agrícolas, camales oficiales y clandestinos, plaguicidas, etc.
Cabe indicar que los enunciados hasta aquí no son los únicos problemas de contaminación del agua. “En años
recientes se han producido nuevos fenómenos como el grave problema de contaminación del agua por las
fumigaciones con el glifosato de sodio en el marco de las actividades del Plan Colombia... el efecto invernadero,
el descongelamiento y modificación de los glaciares de la cordillera de los Andes… estos problemas son de
carácter global, por lo que las soluciones trascienden el ámbito nacional”.16
Entre los factores que más contribuyen a la contaminación del agua, se pueden mencionar: mal manejo de
desechos domésticos, la mayor parte de los ríos del país presentan índices de calidad bacteriológica
preocupantes por la presencia de microorganismos patógenos; contaminación por residuos industriales, este
tipo de contaminación se produce por vertidos químicos de las empresas y es particularmente grave en las
ciudades más industrializadas; contaminación por pesticidas, otro factor importante de contaminación es el uso
de agroquímicos para incrementar el rendimiento de los cultivos o para controlar determinadas plagas.
Las soluciones de carácter técnico se orientan hacia la necesidad de inversiones para el tratamiento de los
efluentes líquidos y gaseosos y desechos sólidos generados por la industria. “Evitar el uso de plaguicidas
tóxicos para la pesca; en comunidades rurales se pueden implementar presas, ollas de arcilla enterradas con
agua, norias, canales de infiltración, terrazas de absorción, etc.”17
En cuanto a las soluciones sociales, se considera que el Estado a través de sus organismos encargados del
recurso agua, está llamado a cumplir “sus roles en la prevención y control de la contaminación; así como en el
uso, manejo y administración de los recursos naturales, para lo cual se debe impulsar un inventario nacional
sobre la calidad del agua, implementar, promover y calificar una red de laboratorios de control, difundir
masivamente la información, implementar instrumentos económicos de gestión (castigos: el que contamina
paga y descontamina) e incentivos, administrar el sistema de permisos y /o certificados ambientales…
definición de las competencias institucionales y el impulso de sinergias entre las instituciones nacionales ,
18
regionales, provinciales y locales”.
FORO DE RECURSOS HÍDRICOS. Un compromiso para combatir la contaminación del agua. 2005
ENCALADA, Marco. El deterioro ambiental rural en el Ecuador. 1990
FORO DE RECURSOS HÍDRICOS. Un compromiso para combatir la contaminación del agua. 2005
20
21. VULNERABILIDAD ECOLÓGICA
Ecuador es un país de alto riesgo asociado a los desastres naturales, pues tiene zona de alta actividad
volcánica y sísmica, y extensas áreas de su territorio propensas a inundaciones y deslaves; todo ello agravados
por los efectos antropogénicos. En relación con los temas de cambio climático se han identificado evidencias de
19
sus impactos con modificaciones en la temperatura y precipitación y en el retroceso de glaciares : Por ejemplo:
“la zona urbana marina presenta una tendencia creciente en las temperaturas medias y extremas. “El cambio”
varía entre 0,5ºC y 1ºC en el caso de la temperatura media. Se aprecia un decremento en la precipitación. La
zona rural de altura, bien representada por la estación del Cotopaxi, reporta resultados persistentes de
20
tendencias positivas en la temperatura. El valor de cambio en la temperatura media es de 1,5º C” .
Los graves efectos del Fenómeno del Niño han constituido un factor crítico para la economía del país y para la
población involucrada y cada vez los impactos son mayores, convirtiéndose en una alerta respecto de lo que
pueden significar los impactos del cambio climático global.
Adicionalmente, el territorio ecuatoriano presenta alto riesgo volcánico. En las últimas décadas, en el país hubo
tres terremotos en diferentes zonas, lo cual manifiesta su alto riesgo sísmico. Además, en diversos
asentamientos humanos existen riesgos de deslaves e inundaciones que se agravan por fenómenos
antropogénicos.
Más allá de los diagnósticos y planes existentes, en particular con el fenómeno de El Niño, se ha podido
observar que existen severas deficiencias; algunas de ellas de carácter estructural (como las referidas a la
ubicación de ciertos asentamientos poblacionales y la construcción de infraestructura), dificultan la posibilidad
de mitigar los impactos; y otras, relacionadas con la falta de atención oportuna y débil participación ciudadana
para enfrentar estos procesos.
En la vía de las soluciones de carácter social, la Comunicación Nacional sobre el Cambio Climático del 2001,
señala la necesidad de incorporar en los currículos educativos esta problemática y trabajar en programas de
comunicación para la adaptación al cambio climático.
UN EJEMPLO DE VULNERABILIDAD ECOLÓGICA EN GALÁPAGOS
“Dos de estos hechos puestos a la luz pública, son la alta vulnerabilidad ecológica de todo el ecosistema, y la
incomunicación social y política entre las islas y el continente. Frente a estos hechos, la acción de la prensa en
respuesta al accidente del Jessica, no pudo haber sido más aliada para los intereses de la conservación, por el
enorme impacto que la presión de la prensa causó para que se desvelaran hechos que, por el tipo de actores
implicados en sus causalidades, en otras circunstancias no se hubieran aclarado.
En cuando al primer hecho, con su diversidad de instrumentos y pluralidad de enfoques informativos y
periodístico-educativos, la prensa logró que se reconozca que la vulnerabilidad de las especies de flora y fauna
y los ecosistemas naturales de las Islas, por razones antropogénicas, es considerablemente grande, incluso
mayor a lo estimado por los propios científicos, que han pasado por más de 60 años en esas islas; debido a que
la corrupción es la madre instigadora de presiones sobre los bienes naturales y la incomunicación una manera
de encubrirla.
En cuanto al segundo hecho, la astucia de los medios ha permitido entender que hay muchos interesados en
que tanto en las islas como en el territorio, no circule información que facilite entender cómo se administran los
intereses creados, cómo se altera o violan normas, hasta terminar en algo similar a lo que terminó el Jessica, y
cómo se conspira para hacer ingobernable las islas.
Los periódicos y revistas y las docenas de periodistas que han abordado la temática, han podido desnudar,
como pocas veces, las mil y una facetas de los cientos de factores que fragilizan ambientalmente a las islas,
porque esta vez pudieron llegar gracias a aliados locales serios, tales como ONG, funcionarios públicos y otros
grupos de voluntarios, a muchos informantes calificados y honorables, quienes facilitaron el acceso a
información que debe ser de dominio público. Asimismo, en pocas ocasiones, como en ésta, la problemática
ambiental de las Galápagos ha podido ser abordada por la prensa de manera bastante integral, y con una visión
heterogénea, dando paso así a que la opinión pública tenga un gran abanico de oportunidades para la
interpretación de la realidad. 21
19* Comparando las fotografías de 1976 y 1983 del Cotopaxi se tiene un porcentaje de reducción del área con un valor promedio del 31% para cada una de las lenguas glaciares y un
porcentaje de pérdida de longitud como promedio del 18% para cada una de las lenguas glaciares. Información tomada del documento “Determinación del volumen del casquete de
hielo del volcán Cotopaxi. INAMHI-IRD-IG-EPN-INGEOMINAS 2004
20* COMUNICACIÓN NACIONAL. República del Ecuador. Cambio Climático. Comité Nacional sobre el clima. Ministerio del Ambiente. Quito 2001
21* ENCALADA, Marco. Diagnóstico de la comunicación en América Latina. Revista Chasqui. Junio 2001
21
22. DEPENDENCIA Y MAL USO DE LOS RECURSOS ENERGÉTICOS
El Ecuador cuenta con enormes reservas de recursos energéticos provenientes de fuentes renovables y no
renovables. “En cuanto a las fuentes renovables de energía, se aprecia disminución de las cantidades
disponibles de fuentes de energía vegetal y subutilización de energía solar, geotérmica, eólica, hidroeléctrica y
22
de procesos biológicos, como el gas metano” . En relación con las fuentes energéticas no renovables como los
hidrocarburos, no son aprovechados de manera eficiente y en consecuencia, el país mantiene un considerable
déficit energético. La mayor parte de la energía que se utiliza proviene de los recursos hidrocarfuríferos. Se trata
por ende, de energía cara y además, sus procesos de extracción, transformación y consumo, provocan
mayores impactos ambientales.
El agotamiento de las fuentes no renovables de energía como el petróleo, provocará que el Estado deje de
percibir importantes ingresos en su presupuesto. Si los hidrocarburos desaparecieran generarían una crisis
económica, energética y social sin precedentes en el país. De allí la necesidad de mejorar la administración y
manejo de las centrales hidroeléctricas, invertir en programas de manejo de cuencas hidrográficas y
fundamentalmente en educación para el ahorro de energía.
Finalmente, cabe recalcar la importancia de identificar y aprovechar fuentes de financiamiento para la
implementación de tecnologías a base de energías alternativas.
4.2 Análisis del estado de la Educación Ambiental en el Sistema Escolarizado del Ecuador
El surgimiento y desarrollo de la educación ambiental en el Ecuador
a) Desde la perspectiva de la planificación
A partir de 1979 surgió la educación ambiental en el Ecuador con el Programa Educación para la Naturaleza,
23
Edunat, ejecutado por la Fundación Natura con el auspicio de USAID . Hasta ese entonces no se habían
clarificado, los fines, objetivos, planes, programas y acciones que esta educación debía perseguir.
A inicios de la década de los años ochenta se puso un marcha un Programa de Forestación y Reforestación, el
mismo que se ejecuta hasta ahora bajo iniciativa del Ministerio de Educación y del Ministerio de Agricultura. Este
programa ha enfocado su acción en la siembra de árboles, bajo la modalidad de participación estudiantil y se
aplica en todo el país. En esencia este programa, si bien tiene algunos ribetes de carácter educativo ambiental,
24
su énfasis se centra en la práctica de una gestión educativa asistemática y con escasa repercusión curricular.
En los años noventa con la declaratoria de la Década del Ecodesarrollo, surgen importantes iniciativas
gubernamentales como la Agenda Ecuatoriana de Educación y Comunicación Ambiental, la cual propuso
desde 1994 un conjunto de políticas y estrategias para operativizar la educación y comunicación ambiental
dentro del sistema educativo ecuatoriano, apoyar la capacitación en educación ambiental de los recursos
humanos del MEC, promover el diseño y producción de materiales educativos… impulsar actividades de
investigación de los problemas ambientales desde el punto de vista de la comunidad educativa. Y esta agenda
estableció la necesidad de elaborar un Plan Nacional de la Educación Ambiental. A pesar de la existencia de las
políticas, estrategias y el mandato de elaborar el plan, los esfuerzos desplegados por el Estado y la sociedad
civil, han resultado pequeños y lastimosamente la prioridad de la Educación Ambiental, ha quedado a nivel de
normas o reglamentos que no se aplican ni se evalúan.
b) Desde la perspectiva curricular de la educación básica, el bachillerato, la educación bilingüe
Educación Básica
En el año 1984, el Proyecto EDUNAT realizó el diagnóstico del contenido ambiental del currículum y se constató
que, las mayores limitaciones que se confrontaban desde la perspectiva de la educación ambiental eran:
“excesivo cientificismo en el tratamiento de temas asociados con los recursos y elementos naturales; falta de
análisis sobre la asociación entre los comportamientos de la naturaleza y los comportamientos sociales; falta de
información y análisis de los problemas ambientales, sus causas y sus efectos; falta de espacios para la
interpretación de la riqueza ecológica del país, en todo lo que respecta a biodiversidad, climas, suelos, agua,
ecosistemas, diversidad étnica y cultural; falta de oportunidades para que la comunidad educativa sea activa en
22* CORPORACIÓN OIKOS. Principales problemas ambientales del Ecuador. Quito, 1994
23* Encalada Marco, Informe del Proyecto EDUNAT I-II-III. 1992 Quito- Ecuador
24* Un ejemplo es el proyecto “Arbol Solitario”, su objetivo es forestar con especies nativas la zona “Casitagua”, provincia de Pichincha, en una extensión de 358 Has, con la
participación de 583 alumnos de quintos cursos de colegios de Quito, quienes han optado por la modalidad de forestación y reforestación en el Programa de Participación Estudiantil,
22
23. Doce años más tarde, en 1996, el MEC puso en vigencia la Reforma Curricular Consensuada para la Educación
Básica, la cual incorpora a la educación ambiental en el currículo como un eje transversal y textualmente afirma
que “dinamiza el proceso educativo, lo atraviesa y está presente en las diferentes etapas educativas y áreas que
componen el currículo. No se trata de temas marginales o contenidos que deberían trabajarse de manera
aislada, son temas fundamentales que impregnan la actividad educativa, acercan la escuela a la vida y
favorecen el desarrollo integral de la persona”.25
A pesar de que el MEC, no dispone aún (año 2006) de una evaluación de carácter nacional que de cuenta de
los avances logrados con la aplicación de la Reforma Curricular para la Educación Básica, y por tanto del
desarrollo de los ejes transversales, se citan a continuación algunos estudios particulares que pueden aportar
en este sentido:
Un estudio realizado por PROBONA y la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, UICN, en
1997, muestra la sistematización de importantes experiencias desarrolladas sobre la educación ambiental
formal y no formal. Para el primer caso, la experiencia obtenida por el Programa de Mejoramiento de la Calidad
de la Educación Básica, PROMECEB, permitió conocer que en la programación curricular propuesta en los
textos “Abramos Surcos”, la mayoría de los objetivos son de tipo cognoscitivo, relativos a la conceptualización y
el uso de elementos de la naturaleza, son escasos todavía los objetivos cognoscitivos y actitudinales,
encaminados a descubrir las interrelaciones y a la formación de valores ambientales en niños y niñas.
Los casos analizados incorporaron actividades conducentes a fortalecer algunas destrezas y valores relativos
al medio ambiente, a través de modalidades activas de transmisión de información, que utilizan el entorno como
recurso didáctico (uso de material concreto, huerto escolar, investigación del entorno, excursiones), si bien los
objetivos de estas actividades no están restringidos al ámbito cognoscitivo, no se había logrado hasta entonces
(1997), integrarlas sistemáticamente al currículo escolar de modo que lo modifiquen.
A finales de la década de los noventa, el MEC con el apoyo de la Corporación OIKOS desarrolló un estudio
exploratorio sobre los contenidos de la reforma de la educación básica y alrededor de 22 temas de interés social
que pugnaban por incluirse como ejes transversales en el currìculo de la educación básica. Los resultados de la
exploración revelaron que los temas en su gran mayoría, eran los mismos y que manifestaban algunos rasgos
particulares, no tanto desde la perspectiva conceptual, sino actitudinal y procedimental. En tal sentido se
unieron al estudio referido, UNESCO, UNICEF, CONAMU e INNFA para contribuir a la conceptualización de la
26
transversalidad en el currículo.
Un estudio realizado durante el año 2000, en 7 Redes Educativas del sector rural de la provincia de
Tungurahua, sobre las prácticas pedagógicas y la educación ambiental, revela que el trabajo se realiza
básicamente al interior de las aulas, la mayoría de docentes asocian educación ambiental con el cuidado de la
naturaleza y los temas se desarrollan preferentemente en ciencias naturales, tecnologías productivas,
tecnologías apropiadas o actividades opcionales, lo cual limita su tratamiento y modifica su orientación
pedagógica. La evaluación enfatiza la verificación de aprendizajes de contenidos. Más del 50% de docentes
refieren experiencia en proyectos ambientales. La mayoría se orientan a huertos escolares, composteras,
lombricultura y viveros. En muchos casos estos proyectos han sido abandonados, señalándose como causas
fundamentales la falta de acompañamiento y asistencia técnico pedagógica.
Bachillerato
27
En cuanto al marco normativo del bachillerato general , se propone por una parte, organizar el bachillerato
dentro de parámetros comunes para todo el país, pero al mismo tiempo respeta la diversidad existente y
fomenta la innovación educativa y la participación de actores en su proceso.
Se reconocen en el Ecuador los siguientes tipos de bachillerato: Bachillerato en Ciencias, Bachillerato Técnico y
Bachillerato en Artes.
Las líneas curriculares o asignaturas que se identifican para los tres tipos de bachillerato, corresponden a los
ámbitos de aprendizaje: instrumental; científico, técnico/profesional, técnico/artístico, desarrollo personal
social.
25* CONSEJO NACIONAL DE EDUCACIÓN. Reforma Curricular Consensuada para la Educación Básica. 1996
26* Corporación OIKOS Estudio Exploratorio sobre la Temática Socio ambiental en los Contenidos de la Educación Básica Ecuatoriana. Quito, 1996
27* Mediante Decreto Ejecutivo 1786 suscrito por el Presidente de la República, en agosto del 2001
23
24. En el ámbito del desarrollo personal-social, se contempla como línea curricular común “Educación para la
Democracia”, la misma que considera la existencia de tres bloques de contenidos obligatorios para todos los
alumnos que cursen el bachillerato: Educación Ambiental, Realidad Nacional y Educación Cívica.
Los contenidos microcurriculares descritos para educación ambiental son: conceptos sobre desarrollo
sostenible, problemas ambientales, habilidad proyectiva de sustentabilidad, respeto y valoración por el medio
ambiente.
Al respecto, no hay una evaluación disponible hasta la fecha (marzo 2006). En todo caso, la única propuesta
concreta existente para el currículo, no tiene el tratamiento de transversal, sino de temas o contenidos
específicos dentro de la cosmovisión de una educación para la democracia, en la cual la educación ambiental, o
más bien dicho, algunos “temas” de ésta, se encuentran vinculados a los derechos de los ciudadanos más que a
un trabajo interdisciplinario y de desarrollo sustentable.
Modelo de Educación Intercultural Bilingüe para la Educación Básica
Este modelo fue oficializado en julio de 1994, tiene como referencia el resultado de las experiencias que se han
desarrollado en el país en educación indígena en las últimas décadas, y junto con ello, las acciones legales
desarrolladas para la ejecución de esta propuesta general de educación de la población indígena.
Entre los fundamentos generales de la Educación Intercultural Bilingüe se considera al Medio Ambiente,
señalando que se requiere integrar aspectos relacionados con la defensa, protección y mantenimiento del
mismo. En este esquema, la persona representa el eje central por su capacidad para actuar sobre el medio. El
tratamiento del medio ambiente integra los siguientes aspectos:
Comprensión de las relaciones entre el hombre y la naturaleza
Cuidado, conservación y preservación de la naturaleza (control de la contaminación del agua, tierra y
aire; control de la erosión, forestación, reforestación)
Uso racional (sostenido) de los recursos naturales.
El currículo propuesto para la educación básica (9 años de estudios), contempla como una área de estudio, las
ciencias aplicadas y artes, los contenidos están organizados sobre ejes que incluyen la persona, sus
necesidades individuales y sociales, el medio ambiente y los distintos aspectos del conocimiento, procurando
proporcionar una visión integrada de las ciencias en relación con la persona y con la naturaleza. El programa de
ciencias aplicadas y artes se aplica a partir del segundo nivel, es decir del segundo año de primaria
La Dirección Nacional de Educación Intercultural Bilingüe, en mayo de 1995 oficializó los programas de estudio
para los colegios interculturales bilingües, en las especialidades de física y matemáticas, química y biología, y
ciencias sociales para el décimo, un-décimo, duo-décimo niveles para las Áreas Humanísticas.
Si bien en varias asignaturas están implícitos contenidos relacionados con la educación ambiental, ésta se
desarrolla con énfasis en la asignatura de biología para la especialización de ciencias químico biológicas, lo que
revela que el sistema curricular hispano y bilingüe, a pesar de manejar el discurso, no incorpora en la práctica la
educación ambiental para un desarrollo sostenible.
4.3 Experiencias de Educación Ambiental en el Subsistema Escolar
Se describe algunas experiencias de educación ambiental en el susbsistema escolar, realizadas a partir del año
1996, año en el que se expide la Reforma Curricular para la Educación Básica, por los Ministerios de Ambiente,
Educación, Salud, Turismo, Defensa y Organismos No Gubernamentales representados en el CEDENMA.
Proyecto “Desarrollo de la Educación Ambiental Escolarizada”
Realizado durante los años 2000 y 2001 en la provincia de Sucumbíos, se ejecutó mediante convenio suscrito
por el Proyecto PETRAMAZ adscrito al Ministerio del Ambiente y el MEC. El Proyecto consistió en la producción
y validación de guías didácticas y cuadernos de trabajo de educación ambiental para los siete primeros años de
educación básica. Complementariamente se efectuó talleres para los profesores sobre el uso de las guías y
cuadernos; así como la dotación de materiales para las bibliotecas de los planteles.
24