2. El Protocolo se puede definir
como el conjunto de normas y
disposiciones legales vigentes
que, junto a los usos,
costumbres y tradiciones de los
pueblos, rige la celebración de
los actos oficiales y, en otros
muchos casos, la celebración de
actos de carácter privado que
toman como referencia todas
estas disposiciones, usos,
tradiciones y costumbres.
3. El protocolo, como término
concentrador de otros afines, se
puede definir como el conjunto
de técnicas (basadas en normas,
leyes, usos y costumbres)
necesarias para la correcta
organización y desarrollo de
actos, bien sean públicos o
privados, y la buena consecución
final de los mismos.
4. Se trata de estar a gusto en un lugar donde se pasa, por lo general, buena
parte del día y donde día tras día tenemos que convivir con las personas
que trabajan junto a nosotros. No sólo se trata de dar los buenos días sino
de tener un comportamiento abierto y ser receptivo a las opiniones de los
demás.
10 Consejos a seguir en un Protocolo de Trabajo
1.-Ser educado
El concepto de ser educado o de educación no abarca únicamente lo
que se conoce como dar los buenos días y las buenas noches, este
concepto es mucho más amplio, se trata de aplicar este concepto a
muchos pequeños detalles tanto dentro como fuera de la oficina.
5. 2.- Avisar de los asuntos importantes con antelación
Cuando se trate de problemas relacionados con la empresa, trabajo
que sea necesario adelantar o incluso si hemos de ausentarnos del
trabajo por causas personales, siempre que sea posible, lo correcto
es avisar con antelación para que si existe algún problema se pueda
resolver correctamente y no suponga una alteración en el trabajo de
los compañeros si no es necesario. Ahora bien, cuando es un
acontecimiento improvisto que no podíamos prever, puesto que
nada se puede hacer, lo hemos de decir, ser sinceros e intentar que
se nos preste apoyo.
6. 3.- Avisar ante un posible problema
Ante todo están los compañeros de la oficina,
que son con los que hemos de convivir día a
día. Si por alguna razón cae en nuestras
manos alguna información valiosa que afecte
a toda la plantilla "va a haber cambios", "no
vamos a tener vacaciones", "va a haber
reducción de plantilla". Lo más honesto es
comunicárselo a nuestros compañeros antes
de que se haga a nivel institucional u oficial,
ya que supondrá un punto a nuestro favor.
Para nosotros no supone ningún agravio y
para ellos puede suponer cómo intentar
enfrentarse con más antelación a esa nueva
situación.
7. 4.- Evitar enfados
En ocasiones el trabajo nos
desbordará, el día estará repleto
de llamadas telefónicas, clientes
esperando o asuntos que
resolver, pero de ello nadie tiene
la culpa y estar enfadados solo
conseguirá crear una mala
atmósfera y tensión en el
ambiente, con los consiguientes
momentos de euforia e incluso
riñas.
8. 5.- Respetar las normas establecidas
Esta es una regla de oro sobre todo
para aquellas personas que se
incorporan de nuevo a una oficina o
lugar de trabajo. Si allí se mantienen
una serie de normas como almorzar a
una determinada hora, invitar a los
compañeros en la cafetería del edificio,
o hacerles algún favor en cuestiones de
trabajo lo mejor es amoldarse a ellas.
Si incumplimos alguna de esas normas
se nos puede tratar hostilmente y
además causar una impresión de
superioridad que no será bien acogida.
9. 6.- Relacionarse con todos los compañeros
En ocasiones la tarea será difícil dependiendo de nuestro cargo, de
las horas que pasemos en esa oficina y de la cantidad de empleados
que haya en ella. Lógicamente nunca puede ser igual una empresa
con tres personas que una de 52, pero siempre podemos interesarnos
por los demás e intentar conocer poco a poco al mayor número de
personas. Ser abiertos, aunque suene redundante, nos abre
posibilidades. Si nos aislamos en nuestro propio mundo y en
nuestros asuntos solo conseguiremos dar una imagen de retraídos y
a la hora de ayudar a alguien siempre se le prestará a otras personas
más abiertas, en las que se tenga confianza y se haya conocido su
manera de ser y sus intenciones.
10. 7.- Estar abierto al trabajo en equipo
Prácticamente todos los trabajos se realizan en equipo hoy en día.
Los servicios que normalmente ofrecen las empresas necesitan que
en diferentes fases de la producción una u otra persona se dedique a
realizar una u otra tarea, aunque no sea así el trabajo en equipo o
en coordinación supone un gran avance ya que las actividades
realizadas entre más de una persona siempre se enriquecen mejor,
tienen menos fallos, porque lo que uno no ve lo puede ver otro, y se
puede adelantar trabajo, ya que en ocasiones por falta de
organización se va más lento o incluso hay que repetir cosas que ya
se habían hecho por no haberlo consultado con los demás miembros
de la oficina.
11. 8.- Cuando se incorpora un nuevo miembro
a la plantilla presentarlo a todos los
compañeros
Es una de las directrices básicas y del
protocolo en la oficina. Esto ayudará a que
la persona que viene nueva se sienta más
integrada en el grupo y a que si se ha de
dirigir a alguien lo llame por su nombre, lo
que siempre crea una mayor afinidad
entre las personas. Sería incorrecto que
llevando varios años trabajando en una
oficina no conociéramos todavía a todos
sus miembros, todo porque el primer día
no se nos presentó correctamente.
12. 9.- Hacer críticas positivas
Las críticas solo son buenas en este
sentido. Todas las críticas que se hagan
fuera de este tono supondrán por lo
general echar tierra encima de la persona
a la que se le hacen. Y esto supone una
desmoralización para la persona que no
conviene para su trabajo, ya que si piensa
que lo realiza mal no estará motivada.
Toda crítica aunque sea constructiva debe
llevar pareja una solución. Si hacemos una
crítica es porque no estamos de acuerdo
con eso y queremos que se cambie por lo
que hemos de decir cómo creemos que
debería cambiarse.
13. 10.- Saber recibir críticas
Siempre que se trate de hacer
críticas constructivas hemos de
estar abiertos a la recepción,
ya que de ese modo se
enriquece nuestro trabajo y
nos ayuda a adaptarnos mejor
al perfil del lugar para el que
estamos trabajando. Por ello
hemos de ser una persona
receptiva y abierta a nuevas
posibilidades.