Este documento presenta un curso introductorio de Windows dirigido a funcionarios públicos. Explica elementos básicos como el escritorio, el botón de inicio, la barra de inicio y el reloj, así como el correo electrónico y la papelera. También advierte sobre los peligros de manipular partes avanzadas del sistema y alienta a los funcionarios a equilibrar el trabajo con el ocio.

1. Bienvenido al primer curso de Windows especialmente diseñado para funcionarios. Permítase, durante las explicaciones, unos minutos de relax. Como de costumbre...

2. Y recuerde que si el curso le exige desplazamientos a la máquina del café, su Consejería le abonará los gastos de desplazamiento.

3. Este es el escritorio de Windows. Sirve de portal para acceder a todos los recursos del entorno operativo. Una de sus facetas más útiles para el funcionario es que puede poner de fondo la foto del niño, así se acuerda de llamar a la chica para ver si el nene ha desayunado sus galletitas.

4. Por ejemplo

5. Bien. Empezaremos ahora por explicar la función de cada elemento.

6. Éste es el botón de inicio. Preste atención para ver cómo se llega a los juegos de cartas.

7. ¡Clic!

11. En fin, el resto es conocido. En caso de duda, consulte a cualquier compañero.

12. No necesita saber nada más del botón Inicio. Pasemos a otras cuestiones...

13. Esta es la barra de inicio.

14. Éste es el reloj. Esté siempre pendiente de él, pues cuando indique que son la 14:30, es hora de salir zumbando (si es antes, tampoco pasa nada).

15. En cuanto a lo demás, mejor no lo toque...

16. Ahora aprenderemos a acceder al correo electrónico. Es una herramienta muy importante de intercambio de información. Permite flexibilizar la comunicación entre departamentos e intercambiar datos con rapidez óptima.

17. Para enviar correo electrónico, haga doble clic aquí. ¡Clic! ¡Clic!

18. [email_address] Guarrerías. Aquí te mando unos cuantos chistes verdes y algunas fotos guarras. Por cierto, hoy no voy a desayunar con vosotros, porque en el desayuno voy a ver si me acerco a Andorra a comprarle un regalo a mi cuñado, que cumple años mañana.

19. Bien. Eso en cuanto al correo electrónico, gran adelanto de nuestro tiempo, oiga. Pero no todo va a ser utilizar Windows en la oficina, ni mucho menos. Hay que dedicarse tiempo para uno mismo, faltaría más. ¡Clic! ¡Clic! Aquí puede almacenar sus propios documentos, al margen de su trabajo.

20. Chachi, ¿eh?

21. Vale. Por aquí se enreda en las tripas del sistema. No meta las zarpas en ello. Déjeselo al informático de la casa, y con reservas.

22. Aquí se tiran todos los archivos y documentos inservibles. Vacíe la papelera de vez en cuando. El funcionario medio NUNCA lo hace.

23. Ahora nos iniciaremos en los misterios del botón derecho del ratón, que suele sacarnos de muchos problemas. Sin embargo tenga cuidado. Una herramienta tan útil como ésta:

24. En manos de un funcionario puede convertirse en esta otra:

25. Y recuerde: el objetivo de Windows es hacerle más fácil su tarea, tanto en la oficina como en el hogar.

26. Si usted lo dice...

27. De próxima aparición: Word para funcionarios. Cuando el ordenador sabe muchísima más ortografía que usted. Access para funcionarios. Tal vez algún día se entere de los tipos de relaciones entre tablas. Excel para funcionarios. El arte de hacer que 2+2=4 se convierta en SUM(A1:B1) Power Point para funcionarios. Aprenda a hacer estupideces como la que acaba de contemplar, que no sirven para nada, pero hay que ver lo que entretienen.