La gestión del conocimiento no solo sirve para captar, organizar y distribuir la información y el conocimiento de una organización, sino que también ayuda a generar nuevo conocimiento e innovar. Gestionar el conocimiento apoya la innovación mediante la utilización de los recursos del conocimiento acumulado para crear, introducir o vender nuevos procesos y productos mejorados. La gestión del conocimiento está más unida a la innovación de lo que las separa.