El documento resume los impactos económicos, socioculturales y medioambientales positivos y negativos del turismo rural. Entre los positivos se encuentran la creación de empleo, la revalorización de la arquitectura y los beneficios a las empresas. Los negativos incluyen la creación de empresas desleales y la incomodidad de los vecinos locales. También analiza los efectos en la formación profesional, los intercambios culturales y la rehabilitación de edificios históricos frente a problemas como la picaresca.