El documento analiza cómo en América Latina los militares pasaron de defender las fronteras a ocuparse de la "subversión interna", lo que llevó a la pérdida de libertades y democracia. También expone cómo el miedo al crimen se ha globalizado y cómo los países responden con más policía y leyes punitivas en lugar de abordar los problemas sociales subyacentes. Finalmente critica que las leyes suelen atrapar a los delincuentes pequeños pero no a los grandes, y que los más pobres son estigmatizados como