La administración del tiempo es un recurso crítico para los ejecutivos que puede ser mal utilizado si no se planifica y prioriza correctamente. Algunos problemas comunes incluyen sobrestimar el tiempo necesario para tareas, tratar de hacer demasiadas cosas en poco tiempo, y no saber decir que no. Los ejecutivos deben registrar sus actividades y compromisos, establecer metas realistas, y asignar su tiempo a tareas basadas en prioridad para administrar su tiempo de manera eficiente.