1. Qué han dicho de
Francisco de Asís
distintos escritores
y pensadores
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2. San Francisco fue un gran
líder por la paz y una
persona muy compasiva.
Sus inspiraciones y
oraciones son tesoros para
el mundo, y creo que su
espíritu sigue actuando
hoy en favor nuestro.
Megumi Hirota, budista japonesa
3. El pobrecito de Asís, con total
olvido de las razones egoístas
y carnales nos enseña el amor
inocente, igual por la oruga
que por la estrella. Ama las
cosas no por lo que son para
nuestros fines, sino por
aquella razón de conciencia
que a todas las hace ser
distintas y buenas.
Ramón del Valle Inclán, dramaturgo
4. San Francisco fue una especie de profeta
en un tiempo de guerra y de ansia de
poder. Fue portador de un mensaje, en una
época en que la Iglesia necesitaba ser
sanada. San Francisco supo emprender un
camino que parecía imposible.
Benhammar Fehd, musulmán argelino
5. Si todo el mundo
amara la naturaleza
como san Francisco
de Asís, no existirían
problemas ecológicos.
Theodore Roszak, científico
6. Si no es seguro que san Francisco hiciese
versos, fue a lo menos soberano poeta en
todos los actos de su vida y en aquel simpático
y penetrante amor suyo a la naturaleza.
Menéndez Pelayo, pensador español
7. El hermano Francisco puso entre nosotros
la mínima caligrafía de los bichos, la
honradez atareada de las dulcísimas
bestias. Él trajo la actualidad azul del
mundo, el color evangelio de las cosas y el
latido minutísimo de los pequeños seres.
Francisco Umbral, escritor
8. El sepulcro de san Francisco es uno de los
núcleos donde se han condensado la materia
cósmica de las ideas y se ha ido formando
este cometa de origen divino y de órbita
incalculable que se llama el humano espíritu.
Emilio Castelar,
republicano liberal español
9. San Francisco es el poeta de
las criaturas y del hombre
desvalido. Su amor a los
seres, incluso a los más
mínimos, vistos todos en un
plano de igualdad, se produce
no como un acto panteísta,
sino como resultado de ver en
cada criatura una prueba, un
reflejo del poder divino.
Luis Rosales, poeta
10. Entre las muchas cosas
turulatas que el
bienaventurado Francisco
de Asís decía era que
estaba enamorado de la
belleza de la pobreza. Lo
decía en serio y no era un
chiste de mal gusto.
Álvaro Pombo, escritor
11. Francisco de Asís, loquillo
del Cielo, cantando,
saltando, jugando, como
van los chicos sueltos de
la escuela, así fuiste tú a
Dios, haciendo novillos de
iglesia y doctrina.
Jacinto Benavente, dramaturgo
12. No soy un católico que haya
padecido una crisis. No creo
en Dios, en la vida futura, en
el infierno, en el cielo, ni en
nada, pero para mí San
Francisco merece un respeto.
José Saramago, escritor
13. Francisco de Asís eternamente de moda.
La frase evangélica: Siempre habrá
pobres entre vosotros, explicada no por
la miseria material, no por el egoísmo
que acapara, sino por la constante
imitación de San Francisco.
Leopoldo Alas Clarín,
escritor
14. Mi película es acerca de un
hombre que comprende el
sufrimiento de Cristo y es
capaz de despojarse de
sus bienes para cumplir al
pie de la letra el mensaje
evangélico. Francesco
expresa mi necesidad de
creer en la solidaridad
frente a la barbarie que
nos amenaza a todos.
Liliana Cavani, directora de cine
15. Volaban de los troncos
a las flores.
Cantaban y reían
en mis manos.
Yo iba a decir con San
Francisco: ¡Hermanos!...
¿Pero tienen hermanos
pecadores los pájaros?
José María Pemán, escritor
16. San Francisco de Asís o
Buda sobre un costal a la
luz de la luna, representan
un grado de civilización
mucho más alto que el de
unos cuantos caballeretes
en casas aireadas y
soleadas, bien vestidos,
bien calzados, alumbrados
de luz eléctrica, etc.
Miguel de Unamuno, pensador
17. Estos franciscanos son gente
sencilla, modesta, amante de
las cosas del campo. Hablamos
de las cosechas, de las frutas,
de las flores, de los sembrados,
de los pájaros, que tan amigos
eran de San Francisco.
José Martínez Ruíz, "Azorín",
escritor
18. Mi enfermedad me llevará
pronto a la muerte, y me
siento abandonado en un
océano de sangre y de
interminables víctimas.
Eso ha sido necesario
para salvar a nuestra
Rusia, pero es demasiado
tarde para cambiar ahora:
nos harían falta diez
Franciscos de Asís.
Vladimir Ilich Lenin, político comunista