3. ¿Qué es?¿Qué es?
La celebración y
profundización
progresiva, durante el
año, en la vida y las
enseñanzas de Jesús y
fiestas de la Virgen y
de los santos.
5. TIEMPO DE
ADVIENTO
Tiempo en que los
cristianos se preparan
para celebrar el
nacimiento de Jesús.
Adviento significa
“venida”.
Empieza cuatro
domingos antes de la
Natividad del Señor.
6. Días señalados
8 de diciembre:
Fiesta de la
Inmaculada
Concepción
de la Virgen
María.
7. TIEMPO DE
NAVIDAD
EPIFANÍA Tiempo en que los
cristianos celebran el
nacimiento de Jesús,
el Mesías.
Comienza el 24 de
diciembre (por la
noche) y acaba con la
fiesta del Bautismo
del Señor.
8. Días señalados
25 de diciembre:
Fiesta del nacimiento de Jesús.
1 de enero:
Fiesta de santa María, Madre
de Dios.
6 de enero:
Epifanía del Señor.
9. TIEMPO ORDINARIO
Se recuerda la vida pública de
Jesús: palabras, gestos,
milagros...
Se divide en dos períodos:
desde el día siguiente al
Bautismo del Señor hasta la
víspera del Miércoles de
Ceniza y desde el lunes
después de Pentecostés hasta el
sábado de la Trigésimo cuarta
semana.
10. TIEMPO DE CUARESMA
Preparación intensiva
para celebrar la Pasión,
Muerte y Resurrección de
Jesús.
Consta de cinco
domingos , seguidos del
domingo de Ramos y va
del Miércoles de Ceniza a
la misa del Jueves Santo,
primera celebración
litúrgica del Triduo
Pascual.
11. Días señalados
Miércoles de Ceniza:
comienza la Cuaresma
con la imposición de la
ceniza en señal de
conversión.
Domingo de
Ramos:inaugura la
Semana Santa
conmemorando la entrada
triunfal de Jesús en
Jerusalén antes de su
Pasión.
16. TIEMPO ORDINARIO
Durante este tiempo todos los
bautizados están llamados a
profundizar el Misterio Pascual
y a vivirlo en el desarrollo de la
vida de todos los días,
precisamente en las
ocupaciones ordinarias.
18. CONCLUSIONES
El año cristiano litúrgico constituye
una unidad estructurada por los
tiempos litúrgicos: Adviento,
Navidad-Epifanía, Cuaresma,
Tiempo Pascual y Tiempo
Ordinario.
Estos “tiempos” no son simples
divisiones del calendario sino que
hay que entenderlos en referencia a
la salvación.
Se invita a las sucesivas
generaciones a integrarse en la
historia de la salvación. En cada
celebración, el ayer, el hoy y el
mañana se encuentran realmente
porque Dios está presente aquí y
ahora, en medio de los suyos, a
quienes ofrece la posibilidad de
participar de su gracia.