32. Confrontación de la racionalidad de planificación con la racionalidad de intereses políticos Existen distintas soluciones posibles cuya imposición depende sobre todo de las relaciones de poder. Se cuestiona la existencia de fórmulas de solución prefabricadas. Con respecto a problemas específicos sólo suele haber una solución óptima, el “one-best-way” que se puede encontrar con métodos objetivamente racionales. La estrategia de la organización sólo tiene lugar en el curso de procesos de negociación de intereses políticos, dado que existen básicamente conflictos provocados por los distintos intereses de las partes interesadas Existe básicamente un consenso entre los miembros de la organización respecto a sus objetivos y el bien global. Existe un grupo heterogéneo de responsables de decisión en la red de stakeholders Las organizaciones se consideran como unidades de acción monolíticas Racionalidad con intereses políticos Racionalidad de planificación objetiva
33. Con frecuencia, la información “blanda” no corresponde a las necesidades de los instrumentos de análisis. Además, los miembros de la organización desarrollan estrategias y tácticas que sirven a la configuración y selección de información (preparación de datos) en su propio interés. Los responsables con poder de decisión dependen de la fiabilidad de la información y de hechos “sólidos” (cifras) para poder ponderar las alternativas de forma objetiva. Ocasionalmente, inversión de la lógica de decisión: búsqueda de problemáticas con las cuales se pueden vincular soluciones futuras (realizaciones de intereses) Lógica de decisión racional “normal”, búsqueda de soluciones a determinadas problemáticas El principio de objetividad de las decisiones organizativas se cuestiona debido a los motivos subjetivos de los afectados. Los resultados de los procesos de decisión no están determinados únicamente por argumentos objetivamente racionales, sino también por procesos de intereses políticos, relaciones sociales y factores de poder sin relación inmediata con los problemas objetivos. Mediante la razón se puede reconocer qué solución es la que maximiza el beneficio. Las decisiones dependen de la existencia de criterios de evaluación analíticos objetivos.
34. La racionalidad con intereses políticos sólo tiene éxito si los actores disponen de poder. Como causas del fracaso de una estrategia se consideran también factores ajenos al asunto en cuestión. Por ejemplo, la posibilidad de imposición política de la estrategia. En particular, las decisiones se examinan no solamente con respecto a su contenido objetivo, sino también en cuanto a su contenido simbólico como demostración de poder de la coalición dominante. El fracaso de estrategias desarrolladas en base a criterios de decisión racionales se suele atribuir a un fallo de los instrumentos en la fase de realización La toma de decisiones y su realización se funden en un proceso continuo. Las fases de la toma de decisiones y su realización organizativa se pueden separar