Los insectos vivían felizmente en un gran cerezo, cada uno con un trabajo. Llegó una chapulina pidiendo refugio, dejando sus huevos al irse. Los insectos cuidaron los huevos. Cuando los chapulines nacieron, comieron las cerezas prohibidas, por lo que fueron expulsados del árbol.

2. Había una vez un grupo de insectos que vivían felices en un cerezo muy grande y viejo. Cada uno tenía una familia y entre todos formaban una gran familia. Cada uno tenía una pequeña parte del cerezo como casa. Todos tenían un trabajo y aunque cada uno conseguía su propia comida, la compartían con los demás. Los trabajos estaban repartidos y era así: Los gusanos y las lombrices eran los excavadores y constructores. Los ciempiés y caracoles colaboraban en la limpieza del tronco;aunque uno de los caracoles era el profesor. Las hormigas se encargaban de las plantas :eran agricultoras. Los saltamontes y mariposas eran deportistas y modelos. Los grillos y avispas tenían una voz preciosa, y por eso eran cantantes. Las mariquitas eran bailarinas. Las arañas se encargaban de la ropa : eran modistas y tejedoras. Las abejas se encargaban de hacer dulces de miel. Las avispas, abejas y también tabarros hacían guardia en la copa delcerezo y eran la defensa. Los "gusanitos" de luz y luciérnagas se encargan de la iluminación.

3. En su árbol no faltaba de nada. Un día de finales de verano llegó hasta el cerezo un insecto “rarito” que nunca habían visto por allí. Cuando llegó este gusano raro , un caracol ya viejecito pero muy sabio les dijo que iban a morir todos por culpa de aquel bicho raro .Los otros no le hicieron mucho caso porque siempre decía cosas extrañas. Aquel nuevo bicho era una chapulina y les dijo: -¡Hola !, no tengo casa ¿me puedo quedar aquí? -Sí, por supuesto que sí -dijo el alcalde que era un tabarro. -Pero … tendrás que hacer un trabajo como todos ¿qué sabes hacer? -Yo me encargaré de ir a por agua -dijo la chapulina . -Muy bien , nadie se encarga de eso . Y así la chapulina se quedó a vivir allí . Pero ...al siguiente día puso sus huevos. Se fue al río a buscar agua cuando de pronto cayó al agua y aunque sabía nadar llegó un pato y se comió . A los otros habitantes del tronco les dio mucha pena y se quedaron con sus huevos .

4. -Nosotros cuidaremos los huevos -estuvieron todos de acuerdo. Pasó el tiempo y ya era finales de otoño y como todos los años hicieron una gran fiesta de despedida de otoño. Con comida, iluminación, concursos de saltos, bailes, orquestas y hasta una máquina de humo que eran las nubes que estaban bajas. Se lo pasaron muy bien y al día siguiente tenían que prepararlo todo para pasar el invierno dentro del tronco. La araña repartió un jersey para cada uno, para que pasaran el invierno. Las babosas dejaron brillante el árbol. El caracol les dijo a los niños que al día siguiente empezaban las clases. Y les preguntó : -¿Ya tenéis los libro niños? Los niños respondieron que lo tenían todo preparado y que tenían muchas ganas de empezar las clases. Todos los niños se fueron con sus padres. Fueron a la despensa y se llenaron de comida. Cerraron todos los agujeros de la corteza para que no entrara el frío, y se metieron en sus huecos hasta la primavera. El primer día de clase hicieron juegos y también sus cuadernos. Uno de los grillos que era muy famoso y amigo del maestro caracol, fue para cantar en la fiesta de inauguración del colegio.

5. Pasó el tiempo y así llegó la navidad. Los niños hicieron regalos para todos y celebraron el año nuevo comiendo las 12 uvas. Y acabó el colegio. Y llegó la primavera. Era la estación preferida de todos los insectos. Al cerezo le empezaron a salir las flores. Ya iba haciendo calor y comenzaron los juegos ``insectivos´´ en el que participaban todos, hasta los más pequeños. A cada uno se les daba bien un juego. En los juegos ``insectivos´´ había de todo: -Competiciones de saltos-que siempre ganaban los saltamontes, por supuesto. -Carreras de tejidos de arañas- -Polinización de flores- a ver quién polinizaba más flores.

6. Y entonces, cuando nadie lo esperaba, un día de primavera se abrieron los huevos de la chapulina. Los vecinos fueron a verlos y cada uno le llevaron lo que necesitaban. Unas semanas después, las flores se fueron cayendo y empezaron a salir las cerezas. Todos los insectos sabían que no se podían tocar. Era algo que estaba prohibido desde siempre. Pero, los bebés de la chapulina ya eran mayores y se fueron hasta las cerezas por la noche, y se las empezaron a comer. A la mañana siguiente nadie sabía donde estaban y se pusieron a buscarlos, pero no los encontraron. Pensaban que se habían ido porque siempre hacían las cosas mal y estaban castigados. A la mañana siguiente los niños salieron a jugar por las ramas como hacían todos los días y vieron que las cerezas tenían unos agujeros. -¿Qué es eso?- dijo una mariquita. -¿Qué le pasa a esa cereza?-preguntó un grillo pequeño.

7. -¡Qué raro! , vayamos a avisar a los mayores- pensaron los dos a la vez. Cuando se lo dijeron a los mayores sabían que algo malo estaba pasando .Fueron hasta las cerezas , las abrieron y allí estaban los chapulines , irreconocibles y gordos . Todos estaban muy enfadados por lo que habían hecho con las cerezas y les hicieron un juicio : -¿Por que estáis aquí ?-dijo el juez . -Porque hemos comido lo que no debíamos . -¿Y por qué os lo habéis comido?. - Porque teníamos mucha hambre . -Pero vosotros sabíais que no se podían comer y además tenemos más comida. Las cerezas están prohibidas.

8. -Somos chapulines y tenemos que comer, como todos. -Bueno ya decidirán los mayores lo que tengáis que hacer. - Queremos que se vayan de aquí y que no vuelvan nunca -dijeron todos los insectos a la vez. -Así que ya habéis escuchado .No os quieren ver más por aquí . -Fuera no os queremos ver nunca más, ¡bichos malos fuera de aquí! -repitieron . Y desde aquel día decidieron que nunca más pisara en aquel cerezo ningún chapulín . Y esta es la historia de porqué los gusanos que se comen las cerezas no son queridos en ningún cerezo.