1. Bombas Atómicas En La Segunda
Guerra Mundial
Nombre: Nicolás Mora
Asignatura: Historia
Prof: Juan Carlos Gonzales
2. Índice
Paginas
Introducción 3
Bombas atómicas 3
Contexto 3
Proyecto Manhattan 4
Los objetivos 4
Hiroshima 5
Nagasaki 6
Porque usar la bomba atómica? 7
Los sitios afectados en la actualidad 8
Conclucion 9
3. Introducción
A través de este informe se pretende dar información detallada sobre uno de los tantos
hechos que atentaron contra la humanidad y que han sido y son repudiados por todas las
personas como son: el exterminio judío, y las bombas atómicas en Hiroshima y Nagasaki
Nos evocaremos principalmente a este último. Las bombas atómicas, fruto de investigaciones
científicas llevadas a la más grande destrucción presenciada en la historia, dejando millones
de damnificados, muertes y mutaciones que atravesaron grandes generaciones.
Se abordara sobre su creación, uso, tratados posteriores, motivos y sobre todo las
repercusiones que quedo en la memoria colectiva de muchas personas alrededor del globo.
Sin más preámbulos le hago la invitación a que continúe en este impactante episodio de la
historia mundial.
Bombas atómicas
Los bombardeos atómicos sobre Hiroshima y Nagasaki fueron ataques nucleares ordenados
por Harry Truman, Presidente de los Estados Unidos, contra el Imperio de Japón. Los ataques
se efectuaron el 6 y el 9 de agosto de 1945, y pusieron el punto final a la Segunda Guerra
Mundial. Después de seis meses de intenso bombardeo de otras 67 ciudades, el arma
nuclear “Little Boy” fue soltada sobre Hiroshima el lunes1 6 de agosto de 1945, seguida por la
detonación de la bomba “Fat Man” el jueves 9 de agosto sobre Nagasaki. Hasta la fecha estos
bombardeos constituyen los únicos ataques nucleares de la historia.
Contexto
Después de la Primera Guerra Mundial no parecía probable un enfrentamiento entre Japón,
los Estados Unidos y las naciones coloniales europeas, como potencias aliadas en el pasado
contra el colonialismo expansionista alemán en el Pacífico. Sin embargo, en 1922 los japoneses
se sintieron ofendidos por el Tratado Naval de Washington, que limitaba el número de navíos
que podían poseer, y que aseguraba la primacía naval de las flotas estadounidense y británica.
Además, Japón se sentía agraviado por el hecho de que las potencias europeas ocuparan
territorios dentro de lo que consideraba su esfera de influencia, por lo que en 1937 se tomó la
decisión de invadir China, conflicto que duraría 8 años. El Príncipe Konoye fue
nombrado Primer Ministro en 1940 e integró en su gabinete a Hideki Tōjō y Yōsuke Matsuoka,
defensores acérrimos de la expansión de Japón por la fuerza. Para finales de ese mismo año,
Japón firmó el Pacto Tripartito con Alemania e Italia, lo que alineaba a Japón con las
«Potencias del Eje».
4. Proyecto Manhattan
El 2 de agosto de 1939, Albert Einstein dirigió una carta a Franklin Delano Roosevelt,
reclamando su atención sobre las investigaciones realizadas por los científicos Enrico
Fermi y Leó Szilárd, mediante las cuales el uranio podría convertirse en una nueva e
importante fuente de energía. En dicha carta además, explicó la posibilidad de fabricar bombas
sumamente potentes:
Recientes trabajos realizados por Enrico Fermi y Leo Szilard, cuya versión manuscrita ha
llegado a mi conocimiento, me hacen suponer que el elemento uranio puede convertirse en
una nueva e importante fuente de energía en un futuro inmediato[...] se ha abierto la
posibilidad de realizar una reacción nuclear en cadena en una amplia masa de uranio mediante
lo cual se generaría una gran cantidad de energía[...]
Este nuevo fenómeno podría conducir a la fabricación de bombas y, aunque con menos
certeza, es probable que con este procedimiento se pueda construir bombas de nuevo tipo y
extremadamente potentes.
Carta de Einstein enviada a Roosevelt.
Los Estados Unidos, con la ayuda del Reino Unido y Canadá en sus respectivos proyectos
secretos «Tube Alloys» y «Chalk River Laboratories», diseñaron y fabricaron las primeras
bombas atómicas bajo lo que fue llamado «Proyecto Manhattan». La investigación científica
fue dirigida por el físico estadounidense Robert Oppenheimer. La bomba atómica fue probada
el 16 de julio de 1945, cerca de Alamogordo, Nuevo México, en lo que se conoció como
«Prueba Trinity». La bomba utilizada en la prueba, llamada «gadget», causó una explosión
cercana a la que ocasionarían 20.000 toneladas de TNT, mucho mayor de la esperada.
Los objetivos
Los días 10 y 11 de mayo el Comité para la elección de los objetivos en el Laboratorio Nacional
Los Álamos, con Robert Oppenheimer como miembro principal,
recomendó Kioto, Hiroshima, Yokohama, así como el arsenal en Kokura como los objetivos
posibles. La selección de dichas ubicaciones se basó en los criterios siguientes:
Eran mayores de 3 millas de diámetro y con blancos importantes en grandes áreas
urbanas.
La explosión causaría daño efectivo.
Era improbable que fueran atacadas en agosto de 1945. «Cualquier objetivo militar
pequeño y estrictamente militar debía estar ubicado en un área mucho mayor que fuera
susceptible al daño por la explosión para evitar riesgos innecesarios de que el arma se
perdiera debido a una mala colocación de la bomba».
Y sus principales prioridades:
Obtener el mayor efecto psicológico en contra de Japón.
Hacer suficientemente espectacular el uso inicial del arma de tal forma que fuera
reconocida internacionalmente en términos publicitarios cuando fuera arrojada.
Hiroshima tenía la ventaja de tener un mayor tamaño y con las montañas cercanas
enfocando la explosión la mayor parte de la ciudad sería destruida.
5. Hiroshima
Hiroshima: 8:15 a.m. del 6 de agosto de 1945
El 6 de agosto de 1945, la ciudad japonesa de Hiroshima, situada en Honshu, la isla
principal del Japón, sufrió la devastación, hasta entonces desconocida, de un ataque
nuclear. Ese día, cerca de las siete de la mañana, los japoneses detectaron la
presencia de aeronaves estadunidenses dirigiéndose al sur del archipiélago; una hora
más tarde, los radares de Hiroshima revelaron la cercanía de tres aviones enemigos.
Las autoridades militares se tranquilizaron: tan pocos aviones no podrían llevar a
cabo un ataque aéreo masivo. Como medida precautoria, las alarmas y radios de
Hiroshima emitieron una señal de alerta para que la población se dirigiera a los
refugios antiaéreos.
A las 8:15, el bombardero B-29, “Enola Gay”, al mando del piloto Paul W. Tibblets,
lanzó sobre Hiroshima a little boy, nombre en clave de la bomba de uranio. Un ruido
ensordecedor marcó el instante de la explosión,
seguido de un resplandor que iluminó el cielo. En
minutos, una columna de humo color gris-
morado con un corazón de fuego (a una
temperatura aproximada de 4000º C) se convirtió
en un gigantesco “hongo atómico” de poco más
de un kilómetro de altura. Uno de los tripulantes
de “Enola Gay” describió la visión que tuvo de ese
momento, acerca del lugar que acaban de
bombardear: “parecía como si la lava cubriera toda la ciudad”.
Tokio, localizado a 700 kilómetros de distancia, perdió todo contacto con Hiroshima: hubo un silencio absoluto. El a
japonés envió una misión de reconocimiento para informar sobre lo acontecido. Después de tres horas de vuelo, lo
podían creer lo que veían: de Hiroshima sólo quedaba una enorme cicatriz en la tierra, rodeada de fuego y humo.
Después de la explosión sobre Hiroshima, los norteamericanos esperaban la
rendición inmediata de Japón. Pero esto no sucedió. Los japoneses no sabían que
se trataba de una bomba atómica. Fue un científico japonés que el 8 de agosto lo
averiguo.
“El gobiernos japonés dio por hecho que los Estados Unidos sólo tenían una bomba atómica y, por tanto,
pensaron que debían resistir y mantenerse armados, pero esta respuesta fue prevista por los
estadounidenses y, como muestra de que tenían más bombas y de mayor fuerza destructiva, lanzaron la
segunda bomba.”
6. Nagasaki
Nagasaki: 11:02 del 9 de agosto de 1945
Después de la explosión sobre Hiroshima, los norteamericanos esperaban la rendición
inmediata de Japón. Pero esto no sucedió. El alto mando japonés dio por hecho que los
Estados Unidos sólo tenían una bomba atómica y, ya que el daño estaba hecho, se
mantuvieron en armas. Sin embargo, esta actitud de los japoneses fue prevista por los
estadunidenses y, para demostrar que tenían más bombas y de mayor fuerza
destructiva, arrojaron una segunda bomba.
El 9 de agosto, a las 11:02 de la mañana, el espectáculo de la aniquilación nuclear se
repitió en Nagasaki, situada en una de las islas menores de Japón llamada Kyushu. El
bombardero B-29, “Bock’s Car”, lanzó sobre esa ciudad industrial a fat boy, una bomba
de plutonio, con la capacidad de liberar el doble de energía que la bomba de uranio.
Cinco días después, los japoneses se rindieron incondicionalmente ante las fuerzas aliadas. Con ello, la Segunda
Guerra Mundial, que empezó en 1939, se dio por terminada.
El 15 de agosto, el emperador daba a conocer por radio la rendición de Japón.
El 2 de septiembre, día de la victoria sobre Japón, se firmaba la rendición a bordo del acorazado Missouri, en la
bahía de Tokio.
Las bombas nucleares devastaron las ciudades de Hiroshima y Nagasaki. Sin embargo, los efectos sobre cada
ciudad no fueron iguales, en parte debido a su situación geográfica. Hiroshima estaba situada sobre un valle, lo
que hicieron que las olas de fuego y radiación se expandieron más rápidamente y a mayor distancia que en
Nagasaki, cuya orografía montañosa contuvo un poco más los efectos de la expansión de la bomba.
Se calcula que en total murieron cerca de 250 mil personas.
7. Porque usar la bomba atómica?
Harry Truman fue el presidente norteamericano que tomó la decisión de lanzar la bomba
atómica sobre Japón. Tanto Truman como el aparato militar y gubernamental alegaron que
el uso de la bomba atómica ayudó a salvar miles de vidas, mismas que se hubieran perdido
si la guerra hubiera continuado durante más tiempo. Otro argumento fue que los alemanes
estaban desarrollando una bomba atómica que hubiera sido usada contra los aliados, si
éstos no se hubieran adelantado a usarla en contra de Japón. También dijeron que las
bombas atacaron exclusivamente blancos militares, dado que Nagasaki era una ciudad
industrial donde había una acerera y una fábrica de torpedos.
Asimismo, la memoria de Pearl Harbor sirvió de justificación. El 7 de diciembre de 1941 los
japoneses habían tomado por sorpresa a los estadunidenses, atacando el puerto de Pearl
Harbor. Ese día se hundieron 19 barcos y murieron cerca de 2 mil 400 soldados y marineros.
El 6 y 9 de agosto de 1945, los norteamericanos sorprendieron a los japoneses, destruyendo
las ciudades de Hiroshima y Nagasaki con dos bombas nucleares. Sin embargo, el saldo de
muerte entre los japoneses fue de 240 mil personas, 100 veces el daño causado en Pearl
Harbor.
Los móviles, por supuesto, fueron políticos. Se buscaba la rendición total del Japón antes de
que la Unión Soviética entrara de lleno a la guerra en Asia, y el país socialista fortaleciera su
posición sobre esta zona. El 8 de Agosto de 1945 un millón y medio de rusos ataca
Manchuria desde Siberia y lográ una victoria absoluta, en esta batalla "solo" se perdió la
vida de 12.000 soldados rusos y 24.000 heridos.
Estados Unidos sabía que si usaba la bomba atómica no sólo incidiría determinantemente
sobre la guerra, con el resultado a su favor; sino que la posesión de un arma con la capacidad
de exterminio de una bomba nuclear lo colocaba a la cabeza de las naciones del mundo. El uso
de la bomba fue una demostración de poder tan efectiva, que sus efectos disuasivos se han
prolongan hasta nuestros días.
La bomba era necesaria o estaba justificada porque:
Los japoneses habían demostrado una resistencia semi-fanática, como los
ataques kamikazes de Okinawa, los suicidios masivos de Saipán o la lucha hasta
prácticamente el último hombre en las islas del Pacífico. El bombardeo de Tokio había
matado a más de 100.000 personas sin efectos políticos, por lo que la bomba era
necesaria para la rendición del país.
Con sólo dos bombas construidas y listas para usarse, era demasiado arriesgado
«gastar» una al lanzarla sobre un área despoblada.
Una invasión a Japón hubiera costado una gran cantidad de vidas en ambos bandos de
tal forma que se rebasaría el número de muertes de ambos bombardeos.
Ambas ciudades habrían sufrido bombardeos incendiarios de cualquier forma.
El uso inmediato de la bomba convenció al mundo de su horror y se disuadió su
utilización cuando se construyeron más bombas.
El uso de la bomba sorprendió tanto a la Unión Soviética y la guerra terminó tan rápido
que éstos no pudieron solicitar la invasión conjunta de Japón.
8. La bomba no era necesaria o no estaba justificada porque:
Japón ya estaba listo para rendirse antes de los bombardeos.
El rechazo estadounidense a los términos de la rendición al no garantizar la
continuidad de la figura del Emperador prolongó la guerra innecesariamente.
Una explosión de demostración sobre la Bahía de Tokio habría servido para convencer
a los líderes de los efectos de la bomba sin muertes innecesarias.
Incluso si el bombardeo a Hiroshima fuese justificado, los Estados Unidos no le dieron
tiempo suficiente a los japoneses a considerar los alcances de la bomba antes del
bombardeo a Nagasaki.
La bomba fue lanzada para parcialmente justificar los 2 mil millones de dólares
utilizados para su fabricación.
Las ciudades tenían casi nulo valor militar. Los ciudadanos tenían una relación de cinco
o seis a uno sobre los militares.
Se sacrificaron cientos de miles de vidas de japoneses simplemente por la lucha de
poder político entre la URSS y los Estados Unidos.
El bombardeo incendiario causaría mucho más daño sin la necesidad de convertir a los
Estados Unidos en el primer país en utilizar armas nucleares.
Los sitios bombardeados en la
actualidad
Vista exterior del Museo Memorial de la Paz de Hiroshima.
Tras el ataque atómico, Hiroshima fue reconstruida como una ciudad en memoria de la
paz. El gobierno japonés continuó pidiendo la abolición de las armas atómicas y a
mayor escala por la paz mundial. En mayo de 1949 el parlamento japonés declaró a
Hiroshima como «Ciudad de paz» y a Nagasaki como «Ciudad de la cultura
internacional».
Tanto en Hiroshima como en Nagasaki se han erigido una gran cantidad de
monumentos, esculturas, ceremoniales y parques para recordar y conmemorar los
eventos de agosto de 1945.