1. Características del bebé de 7 a 12 meses
Dieciocho meses es lo que tarda un bebé en aprender a caminar, manipular objetos, correr y saltar. Aquí te
presentamos la evolución desde los 7 hasta los 12 meses.
Siete meses
• Se sostiene sentado, pero apoya sus manos delante para no caerse.
Y además:
• Si le dan algo de comer que no le gusta, cerrará la boca.
• Puede agarrar un objeto en cada mano.
• Explora todos los objetos.
• Dice: ga, ta, da, y lo repite.
• El niño es cada vez más despierto y activo. Al colocarlo en el piso, comienza a desplazarse reptando. Si
encuentra un objeto que le interesa, lo acerca hacia él utilizando la palma de la mano. Luego lo agarra,
envolviéndolo con sus dedos. Si se despierta y no oye ruidos, se queda tranquilo. Pero si escucha a alguien,
gritará para llamar la atención.
¿Qué pueden hacer los papás y otros familiares?
• Colocar delante de él juguetes tipo tentetiesos.
• Colgar de la cuna tableros con actividades.
• Sentarlo en su silla para comer.
• Ofrecerle objetos de diferentes texturas.
• Hablarle, cantarle y recitarle rimas.
Desarrollo del lenguaje del bebé de 7 y 8 meses
Hasta los 6 ó 7 meses el niño se encuentra como “polarizado”, vigilante y pendiente del adulto.
Pero, el mismo niño que inició el contacto con el adulto mediante señales de llamada (gestos),
cambia notablemente a partir de los 7 u 8 meses debido al desarrollo de sus habilidades motoras y
posturales.
Hasta los 6 ó 7 meses el niño se encuentra
como “polarizado”, vigilante y pendiente del adulto. Pero, el mismo niño que inició el
contacto con el adulto mediante señales de llamada (gestos), cambia notablemente a partir
de los 7 u 8 meses debido al desarrollo de sus habilidades motoras y posturales,
2. “abandonando” un poco al adulto, iniciando su autoafirmación, basado en los logros que
obtiene con su nueva capacidad exploratoria, tanto en su propio cuerpo como en los
elementos próximos a su entorno.
En estos meses, según Bateson (1975), los intercambios vocales que se dan entre la madre y el
niño tienen un carácter de “protoconversación”. Esto es de gran importancia, dado que permite
afirmar y mantener el contacto social entre dichos interlocutores y que, aunque no son intercambios
con contenidos significativos, la estructura del tiempo de los intercambios vocales y su función,
basada en los principios de sucesión y reciprocidad, parecen ser ya los de una “verdadera
conversación”.
Bruner (1979) señala que entre los 7 y 10 meses el niño va pasando progresivamente de la
“modalidad de demanda” a la modalidad de intercambio y reciprocidad en las interacciones madre-
niño. El dar y el recibir objetos pronunciando el nombre de cada uno, mientras se miran a la cara
madre e hijo y miran conjuntamente el objeto, logra multiplicar y enriquecer la aptitud lingüística y
comunicativa del niño, constituyendo esta “conversación” un buen ejercicio de entrenamiento para
el habla, así como para su socialización naciente.
En esta edad el niño realiza múltiples vocalizaciones espontáneas, tanto vocálicas como
consonánticas y hasta sílabas y diptongos. Estas vocalizaciones próximas a la palabra, son las que
conducirán pronto al niño a emitir sus primeras palabras. Aquí las vocalizaciones alternantes entre
la madre y niño, permitirán el acceso temprano al lenguaje
Seguramente a esta altura notes que tu bebé está empezando a dar señales de querer ser más independiente.
Pronto podrá sentarse bien sin tu ayuda, y hasta comience a gatear, o desplazarse por sus propios medios de
otra forma. Este emocionante crecimiento, seguramente traiga aparejado un sinfín de golpes, moretones y
caídas. Si bien podemos minimizarlos, es un hecho que existirán golpes sobre todo en las rodillas o codos, así
que no hay que preocuparse cuando esto suceda, a no ser que se trate de una contusión fuerte.
Además, los bebes se tornan más curiosos y aventureros. Comienzan a utilizar los dedos en lugar de la mano
completa para investigar los objetos, intentan alcanzar aquellos objetos que están fuera de su alcance y les
gusta encontrar aquellos que están parcialmente escondidos.
En cuanto al desarrollo de sus emociones, el bebé es cada vez más expresivo, pudiendo darles besos a las
personas que conoce, o repetir alguna gracia si lo aplauden al hacerla.
Llegados los 7 meses de vida de los bebes, se puede comenzar a agregar nuevos alimentos, teniendo en
consideración de cortarlos en trozos muy chicos para evitar que se atragante. Entre otros, podemos ver cómo
incorpora las verduras de hoja verde, polenta, arroz (hecho papilla), sémola, y carnes.
3. Niños
Edad Peso (g) Longitud (cm)
7 meses 6.830 8.450 10.380 63,80 68,01 72,10
7 meses 6.400 8.000 9.800 63,00 67,00 71,00
Niñas
A los 7 meses de vida, el bebé estrena un período importante para su desarrollo verbal. Puede
entender el significado de algunas palabras como el "no" o de algunos gestos como reírse y
aplaudirle cuando él hace algo bueno y correcto. Si vive en un ambiente en que haya mucha
comunicación entre los padres y con él, el aprendizaje del bebé será un éxito. En caso contrario, su
potencial verbal se verá desperdiciado. Los bebés pasan a imitar la forma de hablar de sus papas.
Y en algún momento dirá "mamá" o "papá".
4. Desarrollo Psicomotor
A partir de este mes lo normal es que a nuestro pequeño le empiecen a salir ya sus primeros
dientes de leche. Esto causará molestias en el bebé, llorará, no comerá bien y puede incluso que le
suba la fiebre. Entre los seis y los doce mesesmeses salen los dientes incisivos superiores. Por
otro lado, su movilidad es cada vez mayor y al niño le gusta ponerse de pie, eso sí, con ayuda, ya
que todavía no se siente muy seguro.
Cada vez coge las cosas con mayor decisión. Se concentra mucho en averiguar las propiedades
de sus juguetes, le gustan los sonidos y ruiditos. Juega y canta palabras para ver si él puede
repetirlas a su modo, ya verás cómo el bebé te copiará y se reirá y moverá todo su cuerpo.
El bebé se lleva todo a la boca
El bebé se sienta de una manera mas equilibrada y muestra determinación cuando quiere algún
juguete que está fuera de su alcance. Intentará de todas formas alcanzarlo. Observan dibujos e
ilustraciones en libros o revistas. Le interesará romper papeles más finos. Pero cuidado pues
intentará llevar todo a la boca.
Asimismo, le irán apareciendo los dientes de leche. En razón de eso, el bebé puede presentar
encías inflamadas, y consecuentemente babeará más y se quedará mas irritado y nervioso. En
cuanto a su alimentación, ya se empieza a introducir la carne blanca y la roja. Lo mejor es empezar
introduciéndole en la carne blanca, como el pollo y el pavo, y luego más tarde, cuando el niño ya
de acostumbre al sabor, ir poco a poco metiéndole la carne roja.