2. La aviación civil produce impactos sobre el ambiente
debido a las emisiones de los motores
aeronáuticos, con contaminación acústica,
partículas, gases, contribuyendo al cambio
climático y el oscurecimiento global. A pesar de
las reducciones en las emisiones de automóviles
y a más eficientes en consumo de combustible y
menos contaminantes motores de turbofán y
turboprop, el rápido crecimiento del tráfico aéreo
en recientes años contribuyendo al incremento en
la total contaminación atribuible a la aviación. En
la UE, las emisiones de gas de invernadero de la
aviación se incrementó en un 87% entre 1990 y
2006.4
El avión
3. Contamina El Aire, Tierra y Agua. Principalmente
Aire. Porque sus motores queman el
combustible convirtiéndolo en un fino humo de
Dióxido de Carbono, que contaminan la Capa de
Ozono, Desgastándola. También causa daños
Auditivos, creando Contaminación Auditiva.
4. El barco
la navegación marítima comercial emite casi la
mitad de emisiones contaminantes que la que
despiden a la atmósfera los automóviles, de
acuerdo con un nuevo estudio. Los
contaminantes de los barcos afectan tanto al
clima del planeta como a la salud de las
personas que viven en zonas costeras.
La navegación comercial emite tanto
partículas contaminantes como dióxido de
carbono. Este CO2 de los barcos representa
alrededor de un 3 por ciento de todas las
emisiones causadas por este gas. Pero la
contaminación por partículas y el CO2 tienen
efectos opuestos sobre el clima.
5. La contaminación de los barcos mucho
mas perjudicial que la de los aviones
Nuevos estudios sugieren que el impacto de los barcos ha sido gravemente
subestimado y que la industria naviera está emitiendo gases de efecto invernadero a
un ritmo que duplica a los emitidos por la aviación. Comparando, la aviación produce
unas 650 millones de toneladas. Las cifras antiguas estaban basadas en las
estimaciones de 2001, pero el transporte marítimo ha crecido un 4,5% de media
anualmente. Con los sectores por carretera fuertemente regulados, la industria
naviera podría proveer la manera más efectiva económicamente de reducir los gases
de efecto invernadero. Desde los años 70, la mayor parte de los barcos comerciales
han usado combustible pesado, un subproducto del proceso de refino del petróleo
para un combustible con más graduación. Una persona dentro de la industria lo
describe como “las sobras que provienen del otro extremo que está a medio camino
de convertirse en asfalto”. Tiene unos efectos secundarios potencialmente letales
como la emanación de dióxido sulfúrico, dióxido de carbono, oxido nitroso y ácido
sulfúrico. Estudios recientes en los EEUU y en Holanda muestran que los
contaminantes de los barcos contribuyen con la mitad de la neblina sulfúrica de Los
Ángeles. En Rótterdam, las autopistas marítimas en el Mar del Norte pasan a unas
25 millas de la costa, produciendo contaminación que puede alcanzar hasta 1000
millas.
6. Contaminación del agua
Petróleo y sus derivados como el
alquitrán, aceites, combustibles.
Contaminada, el agua se convierte en un vehículo de
agentes infecciosos como hongos, virus, bacterias,
protozoarios y helmintos, además de sustancias
tóxicas como pesticidas, metales pesados y otros
compuestos químicos, orgánicos, que son
perjudiciales para la salud.
El agua también se utiliza para irrigar cultivos y para
dar a beber a los animales, los cuales a su vez se van
a convertir en alimento para los humanos y otros
seres vivos, haciendo una cadena alimentaria, de tal
manera que si las fuentes utilizadas están
contaminadas, también se contaminarán nuestros
cultivos, los animales, los humanos, y los peces que
forman parte del medio acuático.
7. EL TREN
El tren es uno de los transportes menos contaminantes, según asegura la
sabiduría popular. Pues bien, ese aserto tiene ya certificado técnico y no
sólo existe convencimiento en la calle, sino que en los laboratorios también
se ha comprobado lo real que es esa afirmación. La construcción de una
línea de tren de alta velocidad (TGV) y su explotación durante 30 años
permitirá evitar el 60% de las emisiones de dióxido de carbono que se
producirían si los viajes se hicieran por carretera o por avión
8. Aire
Las locomotoras Diésel tienen motores de explosión parecidos a los de los
camiones, aunque mucho más grandes y potentes. Su combustible, el
gasóleo, es razonablemente económico y no tan contaminante como la
gasolina. Este tipo de locomotoras se utiliza actualmente en trenes de
viajeros y mercancías.
Las locomotoras eléctricas tienen motores que funcionan con electricidad.
La corriente eléctrica les llega por cables tendidos a lo largo de la vía.
Prácticamente no contaminan la atmósfera, y son muy rápidas.
Trenes a leña: Pues, su nombre dice todo, quema de leña o carbón y
liberación de CO2. Pero, esto puede cambiar si la empresa del tren, tiene
un área exclusiva de reforestación de la cual proviene su leña, y si por
cada árbol que se tala para sacar leña, a su vez se planta otro,
prácticamente no causa tanto daño a la atmósfera.