El documento discute la relación entre la mente y el cuerpo según la filosofía de Spinoza. Sostiene que la mente y el cuerpo son dos atributos de una sola sustancia, conectados en paralelo e inseparablemente unidos, de modo que ni uno causa al otro. La mente emerge del cerebro y es la imagen o representación del cuerpo, aunque siempre imperfecta. Las emociones y pasiones surgen de ideas inadecuadas o externas, mientras que las acciones provienen de ideas adecuadas o internas.
13. El pansiquismo de Spinoza “El objeto de la idea que constituye la mente humana es el cuerpo, o sea, cierto modo de la extensión que existe en acto, y no otra cosa”. E, 2/13. “De donde se sigue que el hombre consta de mente y cuerpo y que éste existe tal como lo sentimos.” E, 2/13c No puede existir mente sin cuerpo, sin embargo, ¿puede haber un cuerpo sin mente? Nuestra mente está hecha de las imágenes de nuestro cuerpo; todos los cuerpos implicarían ser representados o concebidos de algún modo por algún tipo de mente; al menos, en la mente infinita de Dios.
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16. La mente es la imagen imperfecta del cuerpo y del mundo “[…] siempre que la mente humana percibe las cosas según el orden común de la naturaleza, no tiene un conocimiento adecuado ni de sí misma, ni de su cuerpo, ni de los cuerpos exteriores, sino tan sólo confuso y limitado.” E, 2/29c. “[…] siempre que es determinada externamente, por el choque fortuito de las cosas, a contemplar esto o aquello, y no siempre que es determinada internamente. […] Pues siempre que es dispuesta internamente […], contempla las cosas clara y distintamente […].” E, 2/29e.
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18. El flujo neural de la conciencia Al interrumpirse el flujo neural simplemente se desbarata la imagen corporal, es decir, el estado de (auto)conciencia. Los procesos mentales simples, de supervivencia, o complejos, de interacción social o pensamiento, requieren imágenes o simbolizaciones generadas por el flujo neural. La percepción interna o externa se realiza siempre por medio de estas representaciones de la cartografía corporal. Así, toda sensación, emoción o sentimiento se realiza en una unidad afecto/objeto.
19. Mente subjetiva / realidad objetiva Podemos tener la certeza, a diferencia de Descartes, de que los objetos del mundo externo son reales, en la mayoría de los casos; no obstante, los construimos o constituimos a partir de nuestros patrones mentales sensoriales y emotivos. Ninguna percepción o emoción es un reflejo especular. Pero podemos afirmar una realidad común porque compartimos los mismos patrones neurales, y sin embargo, no existen dos percepciones idénticas del mismo objeto. Cada sujeto constituye una experiencia única e irrepetible de la realidad… como ésta de van Gogh:
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23. Interacción mente y mundo La mente parece haber surgido de una necesidad evolutiva de integración, control y unidad. El estado consciente permite al organismo sobrevivir en distintos ambientes, enfrentar nuevos problemas y recrear o transformar el mundo. La mente humana está diseñada para un ser vivo que no se adapta al ambiente, sino que adapta éste a sus fines e ideas preconcebidas o soñadas. Ello le confiere la capacidad de proyección de la existencia junto con la habilidad de atención y (pre)ocupación (cura o Sorge).
24. El paralelismo cuerpo/mente Tesis del paralelismo extensión/pensamiento y cuerpo/mente Atributos de una sola sustancia, conectados en paralelo, inseparablemente unidos. Ni el cuerpo (cerebro) causa la mente, ni la mente se inventa lo corpóreo (lo reconstituye o construye a partir de la sensibilidad). La explicación mecanicista de la mente como idea del cuerpo adelanta las hipótesis contemporáneas del mapeo neural del cuerpo.
25. Definición del cuerpo Cuerpo es un fragmento de naturaleza, desde el punto de vista del atributo de la extensión, delimitado físicamente y separado de otros cuerpos. El cuerpo humano es un compuesto de muchos cuerpos integrados en una unidad representacional (mental) incompleta, siempre imprecisa o desfasada. (E, 2/postulados).
26. Consecuencias del paralelismo spinozista Mente y cuerpo son dos caras de la misma moneda, inseparablemente interconectados (como un juego de doble espejo), la primera replica y actúa sobre el segundo, el cuerpo suministra la materia de todas las representaciones mentales. A pesar de su interconexión, existe una asimetría o desfase insuperable entre las representaciones mentales y lo que pasa realmente en el cuerpo. Uno genera y otro es generado. La idea spinozista de la mente naturaliza, por primera y definitiva vez, el alma y abre la puerta a los misterios más recónditos de la condición humana. Nada en el mundo es opaco a la razón: todo puede ser explicado y conocido por sus propias causas. No queda, pues, misterio entregado a la superstición o a la ignorancia organizada, es decir, a las religiones. Spinoza confía en que es plenamente posible que la mente se conozca a sí misma.
27. Definición general de los afectos “El afecto que se llama pasión del ánimo es una idea confusa con la que la mente afirma una fuerza de existir de su cuerpo, o de alguna de sus partes, mayor o menor que antes, y ante la cual, la mente misma se determina a pensar esto más bien que aquello.” (E, 3, def. gral.)
28. Acciones y pasiones “Llamo causa adecuada a aquella cuyo efecto puede ser percibido clara y distintamente por ella misma. Llamo, en cambio, inadecuada o parcial a aquella cuyo efecto no puede ser entendido por ella sola.” E, 3/def.1. “Las acciones de la mente surgen sólo de ideas adecuadas; las pasiones, sólo dependen de las inadecuadas.” E, 3/3.
29. Acciones y pasiones AFECTOSACTIVOS AFECTOS PASIVOS (Se generan internamente) (Provienen de causas externas) Son necesariamente buenos Son buenos y/o malos Menguanla potencia Incrementan la potencia Incrementan la potencia de actuar yde pensar Deseo Alegría Alegría Tristeza Deseo
30. Zizek: el cine como máquina que nos eseña a desear <objectwidth="425" height="344"><paramname="movie" value="http://www.youtube.com/v/N-n9f-mGLT4&hl=es_MX&fs=1&"></param><param name="allowFullScreen" value="true"></param><paramname="allowscriptaccess" value="always"></param><embedsrc="http://www.youtube.com/v/N-n9f-mGLT4&hl=es_MX&fs=1&" type="application/x-shockwave-flash" allowscriptaccess="always" allowfullscreen="true" width="425" height="344"></embed></object>
31. Tres pasiones primarias DESEO: (conatus) es la esencia misma del hombre, en cuanto se concibe determinada por cualquier afección suya a hacer algo. Si sólo se refiere a la mente se llama voluntad; cuando se refiere a la mente y al cuerpo, apetito. El deseo es el apetito con conciencia de sí mismo. ALEGRÍA: pasión por la que la mente pasa hacia una mayor perfección. Placer: sensación de mayor perfección de una parte del cuerpo. Regocijo: sensación de mayor perfección generalizada. TRISTEZA: pasión por la que la mente pasa hacia una menor perfección. Dolor: sensación de menor perfección de una parte del cuerpo. Melancolía: sensación de menor perfección generalizada.
32. El conatusy la mente “La mente se esfuerza (conatus) cuanto puede en imaginar aquellas cosas que aumentan o favorecen la potencia de acutar del cuerpo”. E, 3/12. “Cuando la mente imagina cosas que disminuyen o reprimen la potencia de actuar del cuerpo, se esfuerza cuanto puede en recordar cosas que excluyen la existencia de aquellas”. E, 3/13. “Por el sólo hecho de imaginar que una cosa tiene algo semejante a un objeto que suele afectar a la mente de alegría o tristeza […] la amaremos u odiaremos.” 3/16.
33. Amor y odio “[…]el amor no es otra cosa que la alegría acompañada de la idea de una causa externa; y el odio no es otra cosa que la tristeza acompañada de la idea de una causa externa. […] quien ama, necesariamente se esfuerza por tener presente y conservar lo que ama y, por el contrario, quien odia, se esfuerza por alejar y destruir la cosa que odia.” E, 3/13e. “Por el sólo hecho de imaginar que una cosa tiene algo semejante a un objeto que suele afectar a la mente de alegría o tristeza […] la amaremos u odiaremos.” 3/16.
38. Emociones Son universales en su expresión y reconocimiento. Se presentan en todos los individuos de la misma especie, aunque no todos poseen la misma habilidad para reconocerlas. La expresión de las emociones se produce sin necesidad de aprendizaje, lo que se constata en las investigaciones realizadas con niños y ciegos de nacimiento.
39. Emociones Los requisitos que deben cumplir toda emoción básica son los siguientes (Izard, 1991): -Tener un sustrato neural específico y distintivo. -Tener una expresión o configuración facial específica y distintiva. -Poseer sentimientos específicos y distintivos. -Derivan de procesos biológicos evolutivos. -Tienen propiedades motivacionales y organizativas de funciones adaptativas.
40. Marcadores expresivos Alegría: -Elevación de las mejillas. -Comisura labial retraída y elevada. -Arrugas en la piel debajo del párpado inferior. Repugnancia: -Elevación del labio superior. Generalmente asimétrica. -Arrugas en nariz y áreas cercanas al labio superior. -Arrugas en la frente. -Elevación de las mejillas arrugando los párpados inferiores. Ira: -Cejas bajas, contraídas y en disposición oblicua. -Párpado inferior tenso. -Labios tensos, o abiertos en ademán de gritar. -Mirada prominente. Miedo: -Elevación y contracción de las cejas. -Párpados superior e inferior elevados. -Labios en tensión. En ocasiones la boca está abierta. Sorpresa: -Elevación de las cejas, dispuestas en posición circular. -Estiramiento de la piel debajo de las cejas. -Párpados abiertos (superior elevado e inferior descendido). -Descenso de la mandíbula. Tristeza: -Ángulos inferiores de los ojos hacia abajo. -Piel de las cejas en forma de triángulo. -Descenso de las comisuras de los labios, que incluso pueden estar temblorosos. Charles Darwin, La expresión de las emociones en los animales y en el hombre (1873).
48. La insustancialidad del mal “El conocimiento del mal es un conocimiento inadecuado”. E, 4/64. “De aquí se sigue que si la mente humana no tuviera más que ideas adecuadas, no formaría ninguna noción del mal”. E, 4/64c. “Si los hombres nacieran libres, no formarían ningún concepto del bien y del mal, mientras fueran libres”. E, 4/68. ¿De veras el mal es insustancial…?