El documento describe cómo los nazis transportaban a los judíos en tren hasta Auschwitz con la excusa de ayudarles, pero una vez allí los despojaban de sus pertenencias y los encerraban en el campo. Dentro del campo sometían a los judíos a duros trabajos y los llevaban a las cámaras de gas con la excusa de darles una ducha, donde los exterminaban. Luego, los cadáveres eran llevados a los crematorios para hacer desaparecer las pruebas, hasta que el ejército