Este documento presenta una introducción a varios temas centrales en la filosofía de la estética. Define la estética como la disciplina filosófica que trata de lo bello y distingue entre belleza natural y belleza artística. También explora las teorías sobre cómo se percibe la belleza, la relación entre estética y ética, y diferentes tipos de importancia (subjetiva, objetiva e importancia para la persona). Finalmente, introduce las teorías del arte formalismo, expresionismo y simbolismo.

1. La filosofía y la estética

2. ESTÉTICA Y FILOSOFIA.
 Delimitación del concepto. Estética, en el aspecto
filosófico, es la disciplina que trata de lo bello
(entendido en el sentido amplio que abarca lo
artístico, las diferentes categorías estéticas -
sublime, gracioso, lindo, ridículo, trágico, etc.-
, lo bello natural, moral y cultural)

3. La estética y la belleza
 La disciplina filosófica que intenta saber
qué es la belleza es la estética. Pero la
estética no es cosmética aunque hoy día
tiendan a confundirse. La estética se
reduce a cosmética cuando se reduce lo
bello simplemente a lo que nos
"gusta", pero, ¿es eso la belleza?

4. La captación de la belleza
 Pero la belleza encierra más problemas. ¿Cómo se la capta? Si atendemos a
los tres aspectos del ser (propiedades trascendentales) hay quien ha dicho
que así como la verdad es el aspecto del ser que se refiere a nuestra
inteligencia como inteligible; el bien a nuestra voluntad como deseable; la
belleza debe estar referida a nuestro sentimiento como "disfrutable"
El problema que esto supone es el de una teoría adecuada de los
sentimientos en la que se vea el sentimiento como algo propio de la
persona, objetivo, no subjetivo y por tanto, que no separe sentimiento de
inteligencia y de voluntad. Y, además, desde aquí supone toda una teoría
acerca de la educación de los sentimientos y, entre ellos, del sentimiento
estético.

5. Estética y ética
 ¿Tiene sentido la belleza por la belleza? Desde lo que hemos visto
anteriormente tendríamos que decir un rotundo no. Si la belleza es
un aspecto de la realidad, no puede separarse ni de la verdad, ni de
la bondad. Y si no puede separarse de ambas, tampoco de la verdad
moral ni de la bondad moral. ¿Se puede decir que es bello algo que
nos hace peores personas? Nos parece que se podrá decir que
agradable, en todo caso, pero no bello. La belleza tiene que ser
esplendor de la verdad, también de la verdad moral, y esplendor del
bien, también del bien moral, porque la realidad es una unidad y se
nos da como tal. (¿Es nuestra postura verdadera? A ti te toca
discutirlo).

6. La experiencia de "lo importante"
 Cuando tenemos una experiencia de belleza, nos damos cuenta de
que la belleza no es algo más, es importante. Es decir, de alguna
forma notamos que se nos da como algo "imprescindible". Nos
decimos: ¿cómo he podido yo vivir antes sin darme cuenta de
esto? Y no es lo mismo la belleza y el agrado que nos produce su
captación que el agrado que nos produce un manjar exquisito o un
vaso de agua cuando estamos sedientos... Somos conscientes que
la belleza y la respuesta que produce en nosotros son "necesarias"
para nuestro ser personal sin embargo, podríamos prescindir de un
manjar exquisito y de un vaso de agua. Y además, a veces lo
hacemos, por tener una experiencia de belleza. ¿O no?

7. OBSERVA EL CUADRO Y CONTESTA

8. Tres tipos de importancia
Pero hay tipos de "importancia". Distinguimos tres:
1. Lo "subjetivamente importante". Es lo placentero. Aquello que nos produce placer. Ahí
radica su importancia. Pero en el momento en que el placer decae, deja de ser importante.
2. Lo "objetivamente importante". Si yo analizo la importancia de un acto de amor me doy
cuenta de que su importancia radica en sí mismo. No depende en absoluto del placer. Sin
embargo ese acto es positivamente importante. Nosotros no lo valoramos con los
calificativos "agradable" o "desagradable", para este acto reservamos otros como "bueno",
"valioso", "bello"... Su impronta radica en la objetividad. Son así y no pueden ser de otro
modo.
3. Lo "importante para la persona". Cuando, por ejemplo, un naufrago se salva de morir
ahogado surge espontáneamente el agradecimiento. Si analizamos el agradecimiento nos
damos cuenta de que nos muestra algo distinto de lo subjetivamente importante y de lo
importante en sí. Nuestro náufrago al agradecer descubre que él ha recibido un don
particularmente importante: salvar la vida.. Y desde luego su experiencia de este "don" no
es simplemente la alegría de salvar la vida (subjetivamente importante) ni el
reconocimiento del valor de la vida en sí misma (objetivamente importante). Es algo
distinto. Es la importancia que el valor de la vida en sí mismo tiene para él en ese momento.
Lo importante para la persona depende de lo importante en sí mismo. Si no existiera esto
último no podría existir lo primero.

9. La belleza como forma de lo
"objetivamente importante"
¿Qué tipo de "importancia" tiene la belleza? Si volvemos a pararnos ante ella,
nos parece claro que la belleza "amplia nuestra visión de lo real", lo real no es
sólo lo "trivial", es "bello"; además, parece que nos habla de "eternidad", nos
"arrebata", nos habla de algo que "debe ser así", que "pide venir al ser",
"realizarse". A la realidad no llena de belleza, le falta algo. Y, colma nuestras
"ansias de belleza", somos, como bien veía Platón buscadores (insaciables) de lo
bello que no poseemos, que está más allá de nosotros.
Por todo esto, podemos decir que la belleza se nos da como algo "objetivamente
importante"

10. Observa y conversa con tu compañera de a
lado qué refleja la siguiente imagen y haz
una anotación en tu examen

11. La belleza y "lo importante para la
persona"
 Pero si somos "buscadores de belleza" será porque en
cierto modo estamos inacabados, somos un proyecto. Por
lo tanto la belleza no se nos da sólo como algo
"imprescindible en sí", sino también como "algo
imprescindible para nosotros", "para mí". Es decir, se me
da como algo que si no realizo en mi vida personal, no
me plenifico como persona. Es decir, una persona que no
intente encarnar en su vida la belleza (y no hablamos de
belleza corporal) no hace justicia a su ser de persona.
 Por lo tanto, la belleza es "importante para la persona".

12. La belleza y "lo subjetivamente
importante"
 Evidentemente la belleza se me suele dar acompañada de un
sentimiento de agrado, de placer. Pero la belleza no es el placer que
me produce lo bello. No se puede comparar el sentimiento resultante
de la contemplación de una bella pintura o de un simple amanecer
en el mar con el placer que experimento cuando tomo una "Coca
Cola". Además, hasta la comparación nos resulta grosera.
En los dos primeros casos tengo una experiencia de gozo y en el
último de goce. Los primeros me hacen mejor persona, el último es
indiferente al respecto.
Por eso, no hay que confundir belleza y sentimiento de agrado
(placer) ante lo bello.

13. Belleza natural y belleza artística
 Hasta ahora hemos hablado de la belleza. Pero ya Platón
diferenciaba entre la belleza en sí, y la belleza artística que él
consideraba como una copia de la auténtica belleza. El propio
Aristóteles, con matices muy distintos, venía a mantener esta
distinción al distinguir entre seres naturales y seres fabricados.
Así, la belleza natural correspondería a los seres naturales y la
belleza artística a los seres fabricados. A partir de aquí surge el
problema. ¿Qué relación hay entre la belleza artística y la
belleza natural? ¿Se oponen? ¿Se complementan? ¿Existe
superioridad de una sobre la otra?

14. Naturalismo, esteticismo,
interaccionismo
 Podríamos decir que el problema de la relación entre belleza natural y
belleza artística ha dado lugar a tras grandes soluciones:
1. Naturalismo: El arte imita (mimesis) a la naturaleza. Por lo que el artista lo
primero que debe conocer es la belleza natural y las leyes internas que la
rigen. Una vez conocido este canon de belleza lo que debe hacer es
implantarlo a su obra. Una obra será tanto más perfecta cuanto más se ajuste
al canon y, por tanto, a la naturaleza.
2. Esteticismo: La belleza natural debe estar al servicio de la belleza
artística. El arte está por encima de la naturaleza. El artista, utiliza la
belleza natural, para saltar por encima de ella creando nuevos mundos. El
artista es un auténtico creador.
3. Interaccionismo: La relación entre arte y naturaleza es un problema
abierto que el artista tendrá que solucionar en cada momento.

15. Teorías del arte
 Otro gran problema es el de saber qué es lo que hace que una obra de arte
lo sea.
Al respecto hay tres grandes teorías:
1. Formalismo: El valor estético de una obra de arte viene definido por la
forma (color, línea, combinación de planos, uso de la luz...)
2. Expresionismo: La obra de arte lo es en tanto en cuanto es capaz de
expresar los sentimientos del artista al que la contempla.
3. Simbolismo: El arte es portador de un mensaje simbólico. No expresa
sentimientos, los simboliza. Así, el artista es un comunicador de un mensaje
cifrado que el receptor debe descifrar e incluso llegar a dialogar con el
artista a través de las interpretaciones distintas a que puede dar lugar la
obra.

16. DIOS LAS BENDIGA POR SIEMPRE