Este documento define y describe varios tipos de mitos, incluyendo mitos teogónicos sobre el origen de los dioses, mitos cosmogónicos sobre la creación del mundo, mitos etiológicos sobre el origen de seres y cosas, y mitos escatológicos sobre el fin del mundo. También menciona brevemente mitos morales y da ejemplos de mitos como la Llorona y el jinete sin cabeza.
3. El mito consiste en un relato tradicional sobre los dioses
o los héroes de la antigüedad, que tienen carácter ritual.
Muchos de los mitos pertenecen a dioses de las
civilizaciones griegas y romanas antiguas, así como
también de otras regiones de Europa y de
Asia, África, Oceanía o de las civilizaciones indígenas
americanas, muy cercanos a algunas leyendas, con
personajes sobrenaturales, dioses y semidioses, cuyos
orígenes se pierden en las brumas del tiempo.
4. Clases de mitos
Se distinguen varias clases de mitos:
Mitos teogónicos:
Relatan el origen y la historia de los dioses. Por ejemplo, Atenea
surgiendo armada de la cabeza de Zeus. A veces, en las
sociedades de tipo arcaico, los dioses no son prexistentes al
hombre. Por el contrario, frecuentemente los hombres pueden
transformarse en cosas, en animales y en dioses. Los dioses no
siempre son tratados con respeto: están muy cercanos a los
hombres y pueden ser héroes o víctimas de aventuras parecidas
a las de los hombres.
Mitos cosmogónicos:
Intentan explicar la creación del mundo. Son los más
universalmente extendidos y de los que existe mayor cantidad. A
menudo, la tierra, se considera como originada de un océano
primigenio. A veces, una raza de gigantes, como los
titanes, desempeña una función determinante en esta creación;
en este caso tales gigantes, que son semidioses, constituyen la
primera población de la tierra. Por su parte, el hombre puede ser
creado a partir de cualquier materia, guijarro o puñado de
tierra, a partir de un animal, de una planta o de un árbol. Los
dioses le enseñan a vivir sobre la tierra.
5. Mitos etiológicos:
Explican el origen de los seres y de las cosas; intentan dar una
explicación a las peculiaridades del presente. No constituyen
forzosamente un conjunto coherente y a veces toman la
apariencia de fábulas.
Mitos escatológicos:
Son los que intentan explicar el futuro, el fin del mundo;
actualmente, en nuestras sociedades aún tienen amplia
audiencia. Estos mitos comprenden dos clases principales: los
del fin del mundo por el agua, o por el fuego. A menudo tienen
un origen astrológico. La inminencia del fin se anuncia por una
mayor frecuencia de eclipses, terremotos, y toda clase de
catástrofes naturales inexplicables, y que aterrorizan a los
humanos.
Mitos morales:
Aparecen en casi todas las sociedades: lucha del bien y del
mal, ángeles y demonio, etc. En definitiva, los inventos y las
técnicas particularmente importantes para un grupo social dado
se hallan sacralizadas en un mito. Los ritos periódicos
contribuyen a asegurar su perennidad y constituyen de esta
forma una especie de seguro para los hombres. Las fiestas a que
dan lugar son para los hombres ocasión de comunicarse con las
fuerzas sobrenaturales y de asegurarse su benevolencia.
6. Mito la Llorona
Por los valles y montañas, cerca de los grandes
ríos y lagunas, se ha visto a una mujer con una
larga bata negra que cubre todo su cuerpo. Un
cabello largo, oscuro y negro, lleno de insectos
como luciérnagas, grillos y mariposas. En vez
de su cabeza, tiene una calavera, y sus ojos son
dos bolas en llamas ardiendo. En sus manos
huesudas y llenas de sangre, lleva y mece a un
bebe muerto.
Es conocida en los pueblos como la Llorona.
Derraman con sus lagrimas sangre sobre la
criatura que arrulla. El bebe muerto siempre
tiene una mirada acusadora con su madre, por
haberle quitado la vida. Se dice que se
escuchan sus llantos cuando no hay ningún
ruido, y que asusta a las mujeres y jóvenes que
hacen actos malos que desobedezcan a sus
padres.
7. Una leyenda es una narración oral o escrita, en
prosa o verso, de apariencia más o menos
histórica, con una mayor o menor proporción
de elementos imaginativos.
Pueden ser religiosas, profanas o mixtas, según
el tema del cual traten. Las leyendas también
pueden ser populares (de formación más o
menos espontánea o inconsciente), eruditas o
fruto de una combinación de elementos de
ambos orígenes. Pueden haber sido
inicialmente eruditas y haber
conseguido, después, una gran popularidad.
Sin importar la extensión que tenga -aunque
por lo general es corta- el rasgo que la define
es su tema. La leyenda siempre es un relato
que pretende explicar un fenómeno natural -
como las tempestades, los lagos, los
terremotos-, contando una historia fantástica.
8. El jinete sin cabeza
Cuenta la leyenda, que en un pueblo alejado de todo
civilización conocida, existió un jinete que acostumbraba a
hacer su recorrido por las noches en un hermoso y gran
caballo, la gente asombrada se preguntaba ¿Quién era
aquel hombre? ¿Por qué cabalgaba cada noche?, no era
algo usual que alguien saliera por las noches a hacer esos
recorridos. En una noche muy oscura y bajo una fuerte
tormenta eléctrica, el jinete desapareció del lugar para no
volver nunca más. Pasaron los años y la gente ya se había
olvidado de aquel extraño jinete del que tanto se había
hablado. Una noche, igual de obscura y tenebrosa, con
enormes relámpagos azotando el pequeño pueblo, se
escuchó nuevamente la cabalgata de aquel caballo, su
relinchar y el ruido que producía al trotar sobre el suelo
mojado despertó los recuerdos dormidos de todos aquellos
que habían sido testigos de los sombríos paseos de aquel
extraño jinete. Los recuerdos y la curiosidad llevaron a cada
persona del pueblo a salir de sus camas y asomarse por la
ventana, en donde vieron un jinete cabalgar por las
calles, fue cuando un relámpago cayó e iluminó al jinete, un
jinete sin cabeza.