1. Lenguas del Estado de México
México se caracteriza por su enorme riqueza cultural, de la cual,
una parte importante reside en su población indígena. La Unidad
Lerma, al ubicarse en el Estado de México, buscará contribuir con la
preservación de este sector de la sociedad con diferentes
proposiciones que integren y respeten la diversidad.
De acuerdo con datos del II Conteo de Población y Vivienda 2005,
realizado por el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e
Informática (INEGI), del Estado de México, se registraron 183 mil 199
hablantes de cinco lenguas originarias en la región
2. Matlatzinca
El pueblo Matlatzinca o Fot’una, significa "el pueblo de la red" o "el pueblo
verde", términos que aluden a los habitantes dedicados a la pesca con red y al
paisaje que tuvo el valle de Toluca cuando fue una región lacustre. Los
Matlatzincas poblaron el valle de Toluca y, sin embargo, prácticamente han
desaparecido de éste, de manera que en la actualidad los descendientes de este
pueblo se concentraron en la comunidad de San Francisco Oxtotilpan, del
municipio de Temascaltepec. Para el año 2005, de acuerdo con datos del II
Conteo Intercensal de Población y Vivienda del Instituto Nacional de
Estadística, Geografía e Informática (INEGI), se registraron un total de 952
hablantes de la lengua; ello los ubica en el cuarto lugar, en el tamaño de la
población de los pueblos indígenas originarios del estado.
3. Mazahuas
Los jñatjo o jñatrjo, también conocidos como mazahuas, son el pueblo
indígena más numeroso del estado de México .La palabra mazahua es un
vocablo nahua que significa "gente del venado". Las raíces del pueblo Mazahua
provienen de la fusión racial y cultural de los asentamientos tolteca -
chichimecas.
Se encuentran asentados en la región noroccidental y centro-occidental del
estado, mayoritariamente en 13 municipios rurales que son: Villa Victoria, San
Felipe del Progreso, San José del Rincón, Donato Guerra, Ixtapan del Oro, Villa
de Allende, Almoloya de Juárez, Ixtlahuaca, Temascalcingo, El Oro, Jocotitlán,
Atlacomulco y Valle de Bravo. Desde principios del siglo XVI, los Mazahuas han
ocupado esta zona, que está integrada por una serie de montañas, lomas y
valles en los que predomina el clima frío.
4. Nahua
Los Nahuas o Naua arribaron al centro de México, y por tanto a tierras que posteriormente formarían parte
del Estado de México, después de los chichimecas y constituyeron, como anota Clavijero, “... siete tribus de
una misma nación... los Xochimilcas, Cholcas, Tepanecas, Colhuas, Tlahuicas, Tlaxcaltecas y Mexicanos” .
Edificaron un impresionante poder económico, administrativo y guerrero en todo el valle de México que
perduró hasta la llegada de los conquistadores españoles, quienes impusieron a los pueblos indios una
nueva forma de vida y de organización de la sociedad, basada en la explotación de los recursos humanos y
naturales, característicos del coloniaje.
Los descendientes directos del pueblo Nahua, específicamente los hablantes de esta lengua, constituían en
2005 un poco más del 1.3% de los hablantes de alguna lengua indígena originaria,. En la actualidad, diez
municipios cuentan con asentamientos de población indígena Nahua que preservan su identidad. Los
cuales se enmarcan de la siguiente manera: muy alta marginación: Temascaltepec; alta marginación:
Sultepec, Tejupilco, Malinalco y el recientemente creado municipio de Luvianos; uno de media
marginación: Joquicingo; tres de marginación baja: Xalatlaco, Tenango del Valle y Amecameca; y uno de
muy baja marginación que es Texcoco. Se identifican en estos diez municipios, un total de 45 comunidades
con 10 y más personas hablantes de lengua Náhuatl.
5. Otomí
El pueblo otomí o hñähñu es el segundo en la entidad por el tamaño de su población, al
contar, de acuerdo con datos del II Conteo de Población y Vivienda 2005 del Instituto Nacional
de Estadística, Geografía e Informática, con 83,352 personas que declararon hablar la lengua.
La población otomí, se encuentra asentada mayoritariamente en 21 municipios: ocho son de alta
marginación: Aculco, Amanalco, Acambay, Chapa de Mota, Villa del
Carbón, Morelos, Temascalcingo y Temoaya; cinco son de marginación media:
Jilotepec, Jiquipilco, Otzolotepec, Soyaniquilpan y Timilpan; seis son de baja marginación:
Capulhuac, Lerma, Ocoyoacac, Tianguistenco, Xonacatlán y Zinacantepec; y dos, son de muy
baja marginación: Metepec y Toluca.
El municipio de Temascalcingo cuenta con asentamientos de población indígena mazahua y
otomí.
6. Tlahuica
Los tlahuicas o pjiekakjo presentan una gran afinidad histórico-cultural con los
matlatzincas. Se afirma que provinieron del territorio del Estado de Guerrero
(también afirman que provienen del Estado de Morelos) y se establecieron en el
Valle de Matlatzingo durante el siglo VII. La lengua tlahuica forma parte de la
familia lingüística otomí-pame.
El pueblo tlahuica es el menor, en cuanto al tamaño de su población, de los pueblos
indígenas originarios del Estado. El II Conteo de Población y Vivienda 2005,
registró a 817 personas que hablan esta lengua, principalmente, en las comunidades
del municipio de Ocuilan: Ahuatenco, San Juan Atzingo, Santa Ana, Lomas de
Tecalzingo, Santa Lucía, Col. Dr. Gustavo Baz, San José Totoc y Santa María
Nativitas.
7. VIRUS INFORMÁTICO
Es un malware que tiene por objeto alterar el normal funcionamiento de la
computadora, sin el permiso o el conocimiento del usuario. Los
virus, habitualmente, reemplazan archivos ejecutables por otros infectados con el código
de este. Los virus pueden destruir, de manera intencionada, los datos almacenados en un
ordenador, aunque también existen otros más inofensivos, que solo se caracterizan por
ser molestos.
TIPOS DE VIRUS INFORMATICO.
Caballo de Troya o troyano:
Es un software malicioso que se presenta al usuario como un programa aparentemente
legítimo e inofensivo pero al ejecutarlo ocasiona daños; pueden realizar diferentes
tareas, pero, en la mayoría de los casos crean una puerta trasera (backdoor) que permite la
administración remota a un usuario no autorizado.
8. Gusano:
Es un malware que tiene la propiedad de duplicarse a sí mismo. Los gusanos utilizan las
partes automáticas de un sistema operativo que generalmente son invisibles al usuario.
A diferencia de un virus, un gusano no precisa alterar los archivos de programas, sino que
reside en la memoria y se duplica a sí mismo. Los gusanos casi siempre causan
problemas en la red (aunque sea simplemente consumiendo ancho de banda), mientras
que los virus siempre infectan o corrompen los archivos de la computadora que atacan.
Antivirus.
Son programas cuyo objetivo es detectar y/o eliminar virus informáticos.
Nacieron durante la década de 1980.Con el transcurso del tiempo, la
aparición de sistemas operativos más avanzados e Internet, ha hecho que
los antivirus hayan evolucionado hacia programas más avanzados que no
sólo buscan detectar virus informáticos, sino bloquearlos, desinfectarlos y
prevenir una infección de los mismos, y actualmente ya son capaces de
reconocer otros tipos de malware, como spyware, rootkits, etc.