SlideShare ist ein Scribd-Unternehmen logo
1 von 24
Downloaden Sie, um offline zu lesen
AVANCES DEL PROYECTO DE INVESTIGACIÓN

     APORTES DEL ENFOQUE SISTEMICO
    A LA COMPRENSION DE LA REALIDAD

                         V02


              AUTOR: CARLOS PETRELLA

                Con mi reconocimiento

 al coordinador del Posgrado de Gestión de Tecnologías
              ING. RUDIGER VON SANDEN

   al director de mi tesis de Doctorado en Salamanca:
               DR. LUIS JOYANES AGUILAR



                     Junio de 2007
TEORIA DE SISTEMAS APLICADA
                                                                              Carlos Petrella




01 El planteo de partida que ha dado origen de este enfoque
        Los sistemas como objeto de estudio no aparecen mágicamente en el escenario de la ciencia
moderna. Ackoff señala que los sistemas han sido estudiados por centurias, pero en las últimas
décadas algo nuevo ha sido agregado. Lo que está cambiando gradualmente desde mediados del
siglo XX es el enfoque del abordaje del estudio de los sistemas. La idea de estudiar sistemas como
una entidad en vez de un conglomerado de partes, es consistente con la tendencia en la ciencia
contemporánea de no aislar los fenómenos en pequeños contextos y proceder a considerar las
interacciones para examinar mayores porciones de la naturaleza. En este contexto - bajo el título de
investigación de sistemas (y sus muchos sinónimos) - se detecta una convergencia de muchos
desarrollos de especialidades contemporáneas, que ven la realidad desde una óptica diferente.

         La idea de sistemas ha ido ganando espacios en muchas esferas de actividad de análisis de
la realidad. La biología y la administración son dos de ellas, que por motivos históricos abordaremos a
partir de la visión de referentes como Bertalanffy o como Ackoff. Viendo la realidad con un enfoque
diferente, podríamos apreciar que estamos rodeados por sistemas, lo que no siempre los percibimos
como tales. Muchas veces son más evidentes los componentes que los integran, que los propios
sistemas. Ello posiblemente se deba – como procuraremos mostrar - a nuestro propio paradigma
prevaleciente para encarar el abordaje de la realidad. Lo podemos hacer con un enfoque
reduccionista en el que la comprensión de las partes es el centro, o con un enfoque de sistemas en el
que la importancia del todo constituye en foco. (Córdova, Leñero, Rey, 1988, pág. 17 y siguientes)

         El desarrollo del nuevo abordaje no fue sencillo porque requiere como planteamos un cambio
en los modelos mentales que habitualmente utilizamos para comprender la realidad y también en los
modelos conceptuales. Las dificultades de asimilación han sido enormes. Los instrumentos
apropiados para encarar el abordaje de los sistemas con un enfoque sistémico, tardaron mucho en
formalizarse con el rigor de un modelo formal para especificar sus partes, y sus reglas. A pesar de la
importancia que tiene poder ver la realidad como un sistema integrado de muchos objetos que
interactúan, la Teoría General de Sistemas surgió recién a comienzos del siglo XX como reacción al
enfoque mecanicista de la investigación y tomando como referencia a los modelos biológicos que
caracterizan a los seres vivos. Ludwig von Bertalanffy, fue el precursor más notorio de este enfoque,
proponiendo un modelo conceptual integrador que puede ser aplicado en campos muy diferentes,
más allá de los sistemas biológicos de su especialidad académica original.

        Precisamente estas ideas sobre los posibles aportes de una visión sistémica para
comprender la realidad social son las que dieron sustento al enfoque propuesto en el proyecto de
investigación de doctorado de Carlos Petrella en la Universidad de Salamanca para analizar los
procesos de conservación del estatus quo y la innovación a escala nacional y más específicamente
al estudiar una empresa paradigmática del sector energético nacional. Esta aproximación inicial al
estado del arte respecto de la teoría general de sistemas y su aplicación a las ciencias sociales,
forma parte del referido trabajo de inestigación, pero tiene su origen en los intercambios de opiniones
en el equipo docente del Postgrado en Gestión de Tecnologías de la Facultad de Ingeniería de la
Universidad de la República en Uruguay hace ya casi cinco años. Fue entonces que colectivamente
se comenzó a experimentar la potencia del enfoque de sistemas y a generar aportes para integrarlo al
proyecto de postgrado con la participación de algunos precursores como Rudiger von Sanden, Pablo
Darscht, Omar Viera y Daniel Meerhoff, entre otros docentes compañeros en la facultad.

       Ackoff sentencia que estamos participando en algo que es probablemente el más
comprensivo esfuerzo para lograr una síntesis del conocimiento científico no realizada hasta ahora a
escala global. Desde el Postgrado en Gestión de Tecnologías de la Facultad de Ingeniería dimos
hace bastante tiempo el primer paso para contribuir a divulgar estas ideas en el Uruguay. Ya hay tres
TEORIA DE SISTEMAS APLICADA
                                                                               Carlos Petrella




generacioens de estudiantes que han experimentado con el enfoque de sistemas descubriendo su
potencialidad para comprender la realidad, sobre todo en el nivel de las organizaciones siguiendo la
impronta del equipo docente y la orientación del coordinador del proyecto ingeniero Rudiger von
Sanden. De alguna manera, el proyecto de tesis de doctorado que estoy desarrollando actualmente
en Salamanca y que está siendo dirigido por el Dr, Luis Joyanes, refleja esos aportes construidos
siguiendo la misma senda académica. Este paper constituye un avance de ese proyecto que deseo
volcar al mundo académico y profesional como una primera aproximación.



02 La idea de que estamos rodeados de sistemas comienza a ganar espacios
         Un sistema real (existente físicamente en el mundo material) es una entidad material formada
por partes organizadas, sus componentes, que interactúan entre sí de manera que las propiedades
del conjunto, sin contradecirlas, no pueden deducirse por completo de las propiedades de cada una
de las partes consideradas individualmente. Tales propiedades se denominan propiedades
emergentes. Los sistemas reales intercambian con su entorno energía, información y, en la mayor
parte de los casos, también objetos materiales. Un protozoario, un elefante, la biósfera o la propia
Tierra, que son ejemplos de sistemas naturales. El concepto se aplica también a sistemas humanos o
sociales, como una sociedad entera, la administración de justicia o una empresa comercial. O incluso
a un lenguaje natural, que es un sistema complejo en cuya aparición y evolución participan en
compleja interacción la biología, la economía y la cultura.

         “La teoría de sistemas plantea un nuevo marco de enfoque metodológico de muy amplia
aplicación en distintas áreas de conocimiento, esto es nuevo paradigma científico que retoma la
visión holística e integradora, como necesaria para una comprensión de la realidad, frente a los
reduccionismos analíticos que fijaban su atención en aspectos muy concretos, sin considerar que
éstos estaban sujetos a la dinámica del conjunto. La teoría de sistemas contempla los ambientes e
interacciones de las estructuras organizadas cuya naturaleza diferencial radica en su propia
organización, con determinados equilibrios internos, modalidades de alimentación y conservación,
etcétera. Estas propiedades de los sistemas, advertidas inicialmente en los organismos vivos y en la
naturaleza, eran exportables a otros escenarios para la observación y comprensión de sus
estructuras dinámicas, como los de las ciencias humanas y sociales.” (BDN/Infoamérica, 2006)

         En sí misma, la propuesta de una teoría general de los sistemas planteada inicialmente por
von Bertalanffy, es una innovación, respecto de los diferentes enfoques precedentes. No se trata
solamente de generar un ámbito nuevo para la resolución de problemas, sino de una reorientación de
la ciencia en general, que tiene impacto sobre disciplinas que van de la física y la biología, hasta las
ciencias sociales y del comportamiento y de cierta manera, las abarca. “Propone un examen general
de la biología, ficha, sicología, lingüística, ciencias sociales, e historia, describiendo la tendencia
hacia los sistemas dentro de cada área, pero sin un trabajo filosófico adecuado”, por lo menos en sus
principios. (Lilienfeld, 1991, pág. 192) Esta nueva teoría plantea además un cambio de visión sobre
los conocimientos de los sistemas en sí mismos. Según Bertalanffy se puede hablar hoy de una
filosofía de sistemas, ya que toda teoría científica de gran alcance tiene aspectos metafísicos.

        Como plantea Lilienfeld (1991), el campo de aplicación de la teoría de sistemas es enorme.
En lo que específicamente interesa en el marco del objeto de estudio de esta tesis, el enfoque de
sistemas replantea los retos de rediseñar y repensar las organizaciones con nuevos modelos
mentales y diferentes instumentos para hacerlo. Lo que incluye entre otras cosas, la necesidad de
redescubrir la importancia de una visión compartida de la organización junto con nuevas formas de
enfrentar desafíos respecto de la comprensión de lo que está funcionado mal y de la superación del
temor y la ansiedad ante la necesidad de cambiar. (Senge, 2000, pág. 23 y siguientes) Aparece junto
TEORIA DE SISTEMAS APLICADA
                                                                               Carlos Petrella




con el nuevo enfoque, la problemática de los valores y las creencias, como uno de los ejes de la
renovación conceptual respecto del tradicional enfoque reduccionista de lo procesos de cambio.

        El nuevo enfoque no plantea simplemente un nuevo modelo formal. Ludwing Von Bertalanffy
señala que "teoría" no debe entenderse en su sentido restringido, esto es, matemático, sino que la
palabra teoría está más cercana, en su definición, a la idea de paradigma de Kuhn en términos de un
modelo general para entender la realidad. Bertalanffy distingue en la filosofía de sistemas una
ontología de sistemas, una epistemología de sistemas y una filosofía de valores de sistemas. La
ontología se aboca a la definición de un sistema y al entendimiento de cómo están plasmados los
sistemas en los distintos niveles del mundo de la observación, la ontología se preocupa de problemas
tales como el distinguir un sistema real de un sistema conceptual. Los sistemas reales son, por
ejemplo, galaxias, perros, células y átomos. Los sistemas conceptuales son la lógica, las
matemáticas, la música y, en general, toda construcción simbólica. (Arnold y Osorio, 2006)

         Robert Lilienfeld (1991, pág. 9) plantea que. “En el siglo veinte comenzaron a surgir gran
número de disciplinas, las cuales pueden clasificarse bajo el nombre general de pensamiento
sistémico”. Señala como ejemplos la filosofía biológica de Ludwing von Bertalanffy y su concepto de
sistema abierto; las formulaciones cibernéticas de Norbert Wiener y el trabajo de Ross Ashby sobre
las máquinas a las que se atribuyen propiedades de pensar y aprender; la teoría de la información y
las comunicaciones basadas en los trabajos de Shanon, Weaver, Cerry y otros; la teoría de juegos de
von Neumann y Morgenstern y las técnicas para simular procesos sociales y ambientales por
computadora propuestas por Jay Forrester y muchos otros. “Los avances técnicos y científicos en
diferentes campos han dado lugar a la formación de nuevas disciplinas, las cuales se
institucionalizaron y legitimaron mediante el establecimiento de sociedades académicas, muchas de
las cuales han elaborado revista y ofrecido anuarios.” (Lilienfeld, 1991, pág. 10)

          Surge una pregunta de partida: ¿por qué se genera este nuevo empuje de la ciencia para
abordar el tema general de los sistemas? Una posible respuesta plantea el tema de la complejidad.
La complejidad de muchos de los objetos estudiados complica el abordaje sistemático de los mismos,
si se utiliza un enfoque analítico clásico. Estudiar cualquier sistema complejo como por ejemplo un
estado nacional a partir de una teoría no sistémica, es como pretender interpretar el ordenamiento
institucional y jurídico superior de ese país a través de un abordaje en el que analicemos por un lado
las instituciones, por otro lado las leyes y por otro la ciudadanía por considerar tres componentes para
luego dejar que su funcionamiento más o menos integrado se acepte como un supuesto. Cuando
hablamos de "sistema" estamos hablando de una totalidad no de un conjunto de partes estancas
cuyo conocimiento se pueden abordar por separado. Esto es, una entidad conformada por un número
determinado de partes interdependientes, que influyen unas sobre las otras, conformando la conducta
y los resultados de todo el conjunto.

         Hay una metáfora interesante que plantea Peter Senge (1992) para abordar el tema sistemas,
planteando la conformación de una tormenta y la comprensión que de ella tiene las personas que no
son estudiosos de la meteorología. Senge nos recuerda la idea intuitiva de lo que es un sistema con
un ilustrativo ejemplo al comienzo de La Quinta Disciplina: "Se espesan las nubes, el cielo se
oscurece, las hojas flamean, y sabemos que lloverá. También sabemos que después de la tormenta
el agua de desagüe caerá en ríos y lagunas a kilómetros de distancia, y que el cielo estará despejado
para mañana. Todos estos acontecimientos están distanciados en el espacio y en el tiempo, pero
todos están conectados dentro del mismo patrón. Cada cual influye sobre el resto, y la influencia está
habitualmente oculta. Sólo se comprende el sistema de tormenta al contemplar el todo, no cada
elemento individual."

       ¡Que importante sería que, en el marco de un proyecto de estudio y cambio de un sistema
complejo, supiéramos realmente qué pasa cuando se "espesan las nubes" o cuando "el cielo se
oscurece"! ¡Que útil sería saber que pasará cuando "las hojas flamean" en un módulo crítico de la
TEORIA DE SISTEMAS APLICADA
                                                                              Carlos Petrella




implantación del sistema computacional que habíamos desarrollado! Curiosamente, a pesar de los
muchos indicios que el proyecto nos va aportando soluciones, pocos "sabremos que lloverá" sobre
nuestras propias cabezas con suficiente anticipación. Posiblemente en el medio de la tormenta poca
importancia tendrá para nosotros que después "el agua de desagüe caerá en ríos y lagunas a
kilómetros de distancia". Esta visión aporta un conocimiento mucho más profundo de las causas y las
consecuencias de una tormenta.

          El desafío para actuar de manera sistemáticamente inteligente sobre un objeto en relación
con otros objetos, va por el lado de considerar el contexto y las circunstancias. Si por ejemplo un
proyecto está ante problemas urgentes que lo cuestionan porque se trata de una “tormenta
institucional” muy fuerte, nadie estará preocupado por saber si "el cielo estará despejado para
mañana" porque en el mundo del tiempo real mañana está, la mayor parte de las veces, demasiado
lejos. La idea sería poder tener la presencia de ánimo para en el medio de una tormenta poder
comprender que: "estos acontecimientos están distanciados en el espacio y en el tiempo, pero todos
están conectados dentro del mismo patrón". Como plantea la cita: "Cada cual influye sobre el resto, y
la influencia está habitualmente oculta". Y en nuestro ámbito de estudio en las organizaciones que
encaran procesos radicales de transformación, eso es seguramente así.

         ¿Cuántas veces hemos visto una tormenta de gran envergadura que amenaza en el
horizonte? Seguramente muchas veces. Sin embargo, pocas veces – apurados por los efectos
indeseados de la misma - aprendimos algo profundo al observarla, porque no nos detuvimos a
analizarla con la aproximación adecuada y el foco de atención plena que sería necesario. Así
posiblemente perdimos la oportunidad única de conocer cosas nuevas sobre aquellos
emprendimientos en los que estamos involucrados. La curiosidad y la atención plena son los
principios para comprender la realidad. Y el incentivo es llegar a descubrir lo que estando fuertemente
presente, muchas veces permanece oculto. El descubrimiento comienza al ver lo que todo el mundo
ha visto y ante ello pensar lo que nadie ha pensado todavía sobre el asunto. Sea una tormenta o una
organización o un área de proceso. Lo mismo da.

        Finalizando (Senge, 1992, pág. 15) reafirma: "Sólo se comprende el sistema de tormenta al
contemplar el todo, no cada elemento individual." De igual manera, cuando sustituimos la tormenta
por un proyecto de transformación institucional que nos preocupa mucho: sólo se comprende el
nuevo sistema productivo o el nuevo producto a lanzar al contemplar el todo, no cada elemento
individual considerado de manera estanca. Y por ello, la madre de todos los enfoques metodológicos
que utilicemos en la profesión de agentes facilitadores de cambios debería tener presente la
importancia de la relación entre componentes, tanto más que los propios componentes en sí mismos.
Este es el mensaje que, aún en medio de una tormenta empresaria muy grande, debería tenerse
siempre muy presente.

03 Los aportes del enfoque sistémico a la comprensión de la realidad
        ¿Qué puede aportar en el enfoque sistémico a la comprensión de la realidad? Posiblemente
el punto principal sea generar una mejor forma de abordaje de la complejidad de los sistemas
biológicos y sociales. “El incontrolable aumento de la complejidad social hacía del organismo una
imagen insuficiente, pues aparecían nuevos órganos sociales que generaban nuevas relaciones. El
foco se trasladó entonces desde los elementos a las relaciones entre los elementos, a sus
intercambios, lo que esa otra metáfora subsidiaria, la de la estructura, captó con tanta propiedad.”
(Mascarreño, 2006) Una de las derivaciones más interesantes es que esa nueva forma de apreciar la
realidad pone en evidencia los mecanismos generativos con que operan los objetos estudiados. Y a
la vez, plantea nuevas formas de verificar que la operación es efectivamente, como el modelo la
representa aunque a veces pueda generar imágenes deshumanizadas como la de Luhumann.
TEORIA DE SISTEMAS APLICADA
                                                                               Carlos Petrella




         La publicación del manuscrito en el cual la teoría emergente fuera descrita por primera vez,
fue diferida en esa oportunidad por la agitación general producida al final de la Segunda Guerra
Mundial. Von Bertalanffy desarrolló gradualmente su idea. Primero publicó un "paper" sobre la misma
titulado: Zu einer allgemeinen Systemlehre en 1949. Al año siguiente planteó la Teoría de los
sistemas abiertos en Física y Biología y un Bosquejo de la Teoría General de Sistemas. La
formulación clásica de los principios, alcances y objetivos de la teoría fueron dados a conocer
integralmente en La Teoría General de Sistemas, desarrollada en gran detalle en 1969 en el libro del
mismo título (2001). En ese libro, von Bertalanffy realiza una introducción descriptiva clara y precisa
de la propuesta de la Teoría General de Sistemas como una forma sistemática de aproximación y
representación de la realidad. A su vez, plantea el desafío de encarar formas de trabajo trans-
disciplinarias para sacarle partido a la nueva aproximación a la realidad.

         El concepto organicista de la vida elaborado por von Bertalanffy en el marco de una Teoría
General de la Biología, fue evolucionando hasta constituir el fundamento para proponer unos años
después la TGS que hoy conocemos y que expuso en su libro más conocido (2001). El desarrollo de
esas ideas pasando del campo de la biología a otros campos fue lógico y natural a partir de la
aproximación elegida por el autor para entender la realidad. La concepción organicista original se
refirió al organismo como un sistema organizado, definido por leyes fundamentales de sistemas
biológicos en todos los niveles de la organización. Procurando ampliar las implicaciones de su
concepción de partida, finalmente se abocó a la especificación de una teoría general. Así fue que
este esfuerzo generalizador trascendió al terreno de la biología, para considerar los diferentes niveles
de organización sociales, que son los objetos de estudio que nos ocupan en esta investigación.

        Ludwig von Bertalanffy (2001, pág. 15) planteó que la Teoría General de Sistemas (TGS)
debería constituirse en un mecanismo de integración entre las ciencias naturales y sociales y ser al
mismo tiempo un instrumento básico para la formación y preparación de científicos. Sobre estas
bases se constituyó en 1954 la Society for General Systems Research, cuyos objetivos fueron los
siguientes: 1) Investigar el isomorfismo de conceptos, leyes y modelos en varios campos y facilitar las
transferencias entre aquellos; 2) Promoción y desarrollo de modelos teóricos en campos que carecen
de ellos; 3) Reducir la duplicación de los esfuerzos teóricos; y 4) Promover la unidad de la ciencia a
través de principios conceptuales y metodológicos unificadores. “ Esto seguramente contribuiría a
acelerar el proceso de cambio del paradigma mecanicista al sistémico.

         Las ideas precursoras permitieron integrar esfuerzos mas o menos aislados de otros
pensadores sistémicos contemporáneos, en torno a los aportes de la nueva teoría. En 1954 von
Bertalanffy , logró reunir a científicos de otras disciplinas que trazaban visiones sistémicas en torno a
la Society for General Systems Research (actualmente la International Society for the Systems
Sciences), entre los que se contaban el economista Kenneth Boulding, el psicólogo James Grier
Miller, el matemático Anatol Rapoport y el filósofo Ralph Gerard, a los que se irían uniendo
gradualmente muchas figuras relevantes de la ciencia del siglo XX, que buscaban un modelo
alternativo para apreciar fenómenos muy complejos, con una visión integradora, que podría aportar la
nueva Teoría General de Sistemas. Lo que iniciaría un proceso de legitimación del nuevo modelo, a
partir de diversos aportes académicos.

        El contexto en el que la TGS se puso en marcha desafiando el status quo dominante, es el de
una ciencia dominada por las operaciones de reducción características del método analítico, una
concepción cuyo paradigma de entonces, venía siendo la forma de abordaje científico de los
problemas, planteada por la Física. Los sistemas complejos, como los organismos o las sociedades,
permiten una aproximación reduccionista sólo con muchas limitaciones. La solución a menudo era
negar la pertinencia científica de la investigación de problemas relativos a esos niveles de la realidad,
como cuando una sociedad científica prohibió debatir en sus sesiones el problema de en qué consiste
y a qué se debe la conciencia. Esta situación resultaba particularmente insatisfactoria en el terreno de
TEORIA DE SISTEMAS APLICADA
                                                                                 Carlos Petrella




la biología, una ciencia natural que parecía quedar relegada a la función de describir, obligada a
renunciar a cualquier intento de interpretar o predecir.

         Con el correr del tiempo, von Bertalanffy ha sido reconocido como pionero en la concepción
organicista en muchas disciplinas, y se reconoció como su máximo logro una concepción de los
sistemas generales que trascendió la clásica dicotomía mecanicista contrapuesta con la vitalista, para
generar una explicación conceptual del funcionamiento de los seres vivos en general. El planteo
renovador del autor consistió en apreciar a los organismos vivos como sistemas abiertos, con
características diferenciadas que pueden ser estudiadas con un enfoque diferente que el del
paradigma reduccionista vigente entonces, que no por ello se aparta de la forma de abordaje
científico característico de las ciencias naturales. Sin embargo – y tomando las ideas de Khun sobre
cambios de paradigma en el ámbito de la ciencia - la propuesta de Bertalanffy sería fuertemente
criticada y cuestionada, por muchos años, hasta ser finalmente aceptada.

        A partir de las ideas fundacionales de la teoría de sistemas, von Bertalanffy concibe la "Teoría
General de los Sistemas" (TGS) como una nueva disciplina científica, cuyo tema central es la
formulación de principios válidos para comprender los sistemas, sea cual fuere la naturaleza de sus
elementos componentes y las relaciones entre ellos. En este sentido, esta teoría plantea una
aproximación a la realidad de los sistemas formales, mecánicos, biológicos, sociales o de cualquier
otro tipo, mediante una aproximación lógico-matemática puramente formal en sí misma, pero
aplicable a todas las ciencias empíricas, considerando en el abordaje, el conjunto de los objetos
organizados a partir de las relaciones que los vinculan entre sí y con el medio. Este enfoque logra
aportes relevantes en la comprensión y también en la predicción del comportamiento de la realidad en
muchos campos de la ciencia, incluyendo es estudio sistemático de las organizaciones.

        La concepción de un modelo que integrara los conceptos de niveles de organización y de
organismo activo, supuso en principio un nuevo modelo mental para apreciar el comportamiento de
los seres vivos. Así se planteó inicialmente la idea de organismo activo, como lo opuesto de
organismo pasivo. Este abordaje generó las bases de una declaración temprana para generar una
teoría holística de la vida que explicase el comportamiento de los seres vivos como sistemas abiertos
en constante relación con el medio ambiente en el cual se desarrollan. Este concepto generó gran
resistencia entre los biólogos experimentales que pretendían explicar los procesos de la vida
mediante la investigación física y química de las leyes a niveles subcelulares, con un enfoque
evidentemente reduccionista para el abordaje de los objetos estudiados. Este era por otra parte, el
paradigma vigente a comienzos del siglo XX.

         La propuesta se abre camino precisamente porque los paradigmas vigentes no ofrecían
adecuadas respuestas para abordar la complejidad creciente de los objetos estudiados en materias
tan diversas como la biología o la sociedad. Al respecto en el prefacio de la edición revisada,
Bertalanffy (2001, pág. xx) afirma que: "La tecnología y la sociedad moderna se han vuelto tan
complejas, que los caminos y medios tradicionales no son ya suficientes, y se imponen actitudes de
naturaleza holística o de sistemas y generalista, o interdisciplinaria (...). Sistemas en múltiples niveles
piden control científico: ecosistemas cuya perturbación conlleva a problemas apremiantes como el de
la contaminación, organizaciones formales como la burocracia, las instituciones educativas o el
ejército; los graves problemas de sistemas socioeconómicos, en relaciones internacionales, políticas
y represalias".

        ¿Qué pasaría si nos preocupamos más por “el todo” y consideramos preferentemente el
estudio de “la relación entre las partes”? Comenzamos a transitar gradualmente hacia los modelos
mentales desarrollados en la teoría de sistemas, con too lo que ello implica en la capacidad de
comprender la realidad y la selección de instrumentos conceptuales para hacerlo. El enfoque de
sistemas aporta entonces una visión diferente de la realidad, más relacionada con las relaciones
entre las partes, que con las partes en sí mismas. Señala Van Gigch (1987) que: "El enfoque de
TEORIA DE SISTEMAS APLICADA
                                                                              Carlos Petrella




sistemas otorga una nueva forma de pensamiento a las organizaciones que complementan las
escuelas previas de la teoría de la organización. Este busca unir el punto de vista conductual con el
estrictamente mecánico y considera la organización como un todo integrado, cuyo objeto sea lograr la
eficiencia total del sistema, además de armonizar los objetivos en conflicto de sus componentes".

        La característica de los sistemas abiertos precisamente es su cambio permanente, como
consecuencia tanto de la relación entre sus componentes internos como de esos componentes, con
el medio con el cual estos interactúan. Los sistemas abiertos, que son conformados por los
organismos vivientes (biológicos o sociales) se mantienen en permanente evolución, transformación,
cambio, o, como dice von Bertalanffy, "en continua incorporación y eliminación de materia,
constituyendo y demoliendo componentes, sin alcanzar, mientras la vida dure, un estado de equilibrio
químico y termodinámico, sino manteniéndose en un estado llamado "uniforme" que difiere de aquel".
En definitiva, operan en una relación de equilibrio con el medio con el que interactúan y condiciona su
comportamiento.

04 Los principios básicos que determinan el comportamiento de los sistemas
         Para Bertalanffy, todos los sistemas abiertos se rigen por grupos de principios básicos que
determinan su comportamiento: 1) Principio de Equifinalidad (2001, pág.131), que lleva a
determinados sistemas abiertos a alcanzar un mismo estado final partiendo de diferentes condiciones
iniciales y por diferentes caminos. 2) Principio de Heterogeneidad (2001, pág. 211) que plantea que
los sistemas existen porque se diferencian de su entorno, oponiéndose a las fuerzas que llevan
naturalmente a la igualación de las diferencias (homogeneidad). 3) Principio de Organización (2001,
pág. 47) que sostiene que se necesita un sistema organizado para contrarrestar la tendencia general
de los acontecimientos en la naturaleza física que llevan a estados de máximo desorden (entropía) y
a la igualación de las diferencias (homogeneidad).

         Los sistemas abiertos, y particularmente los sistemas sociales, por el principio de
equifinalidad, contienen un mecanismo de autorregulación de su propio funcionamiento en relación
con el entorno en el que operan. De otra manera, las diferentes configuraciones del entorno podrían
disparar su comportamiento de manera totalmente descontrolada. Von Bertalanffy (2001, pág. 161)
dice al respecto que: "Un sistema es un proceso circular en el cual parte de la salida es remitida de
nuevo, como información sobre el resultado preliminar de la respuesta a la entrada, haciendo así que
el sistema se autorregule, sea en el sentido de mantener ciertas variables o de dirigirse hacia una
meta deseada". La autorregulación es entonces una parte muy importante del modelo de control del
funcionamiento de los sistemas abiertos.

        La idea de que los objetos se diferencian a través de su relación con el entono plantea una
nueva forma de ver la realidad, más centrada en las relaciones con el entorno que en su
funcionamiento interno. Precisamente los sistemas existen como tales porque se diferencian del
entorno con el que interactúan. La frontera entre el sistema y su entorno establece la separación
entre lo que es sistema y lo que queda fuera de él. Las reglas de funcionamiento del sistema,
diferentes de las de su entorno, evitan la igualación de ambos y la cosnecuente desaparición del
sistema como tal. Por otra parte, se establecen diferentes niveles de complejidad entre lo interno y lo
externo. Lo interno (el sistema) como algo menos complejo y por lo tanto, diferenciado de lo externo
(el ambiente), considerando la idea de complejidad sistémica de ambos objetos que es la base de la
heterogeneidad de la realidad biológica y social.

         Surge finalmente la poblemática de la organización como principio básico para el
funcionamiento. Los sistemas abiertos – y entre ellos las organizaciones sociales - tienen una
estructura y funcionamiento internos que los caracterizan y que les permiten diferenciarse del
entorno. La organización es una de las características de los sistemas que va más allá de la
TEORIA DE SISTEMAS APLICADA
                                                                               Carlos Petrella




complejidad de su estructura y los componentes del mismo. Precisamente las características de esa
organización, marcan una diferencia notable entre los sistemas administrados y los que no son
administrados. La organización en los sistemas administrados es una característica importante y
compleja que conlleva una conducta orientada a objetivos y motivos, que es claramente diferente de
la que tienen los sistemas no administrados en el mundo de las ciencias naturales. Esa organización
determina gran parte de sus características funcionales, que trascienden a cada uno de los
componentes aislados del sistema.

        Los sistemas abiertos y específicamente los sistemas administrados, tienen un perfil que los
caracteriza. Russell Ackoff (1993, pág. 36) define una organización como un sistema por lo menos
parcialmente auto-controlado orientado a un determinado fin (habla específicamente de metas,
objetivos e ideales). “Esto hace posible contemplas los sistemas teleológicamente (de una manera
orientada hacia el producto, y no determinísticamente (de una manera orientada al insumo.”
Aclarando seguidamente que la teleolología no reemplaza al determinismo, sino que lo complementa.
Los sistemas incluyen entre sus contenidos hombres y máquinas, una estructura que establece
cursos de acción alternativos, comunicaciones para determinación de la conducta e interacción y
medios de elección de toma de decisión, estableciendo los cursos de acción que conducen a
resultados elegibles entre los propios participantes.

        Sobre estas bases, puede construirse una aproximación a los sistemas estatales, bien
diferente de la propuesta por el modelo burocrático planteado previamente por Max Weber.

         A su vez, los sistemas se ajustan mediante mecanismos de retroalimentación continuos que
ayudan a corregir desviaciones. Para entender este concepto siguiendo a Tomas Austin Millán
(2006), pensemos en la persona que conduce una bicicleta, que es una experiencia que la mayoría
de los lectores de este artículo seguramente habrá vivido y por lo tanto, puede entender y aplicar. En
la medida que avanza, el ciclista corrige la dirección, ya que la bicicleta tiene una fuerte tendencia a
derivar hacia los lados. El acto de corregir la dirección impuesta es producto de la retroalimentación
que se produce en la mente del ciclista, quien continuamente reexamina si va en la dirección que
quiere, si ello no ocurre, corrige la dirección. Esta cualidad de auto-corrección sucede en todos los
sistemas y es la base de la cibernética "que concierne en especial a los problemas de la organización
y los procesos de control"

        Constituiría un aporte poder ver a las burocracias como sistemas, con el enfoque
precedentemente expuesto. La idea de que las burocracias en general – como sistemas sociales que
son - también evolucionan no resulta ser algo descabellado, desde el punto de vista de la TGS
planteada por von Bertalanffy. A pesar de que la teoría del modelo burocrático esencialmente
mecanicista plantea aproximaciones a la realidad con estructuras rígidas y procesos predefinidos, el
conjunto del sistema social que componen (sea este por ejemplo una institución sin fines de lucro o
una empresa comercial) no pueden permanecer inmutables ante los cambios del contexto, por más
que sus estructuras internas y sus procedimientos formales, establezcan fuertes blindajes para
mantener el statu quo imperante.

         De la misma manera, los sistemas de innovación también evolucionan, pero esto resulta
todavía más comprensible, debido a que la idea de innovar tiene en su esencia la idea de cambiar.
Sin embargo, en los sistemas de innovación hemos visto que el marco teórico platea criterios
graduales de desarrollo de las innovaciones matizados con grandes saltos cualitativos que replantean
lo que se hace y como se hace en determinados sectores de actividad. Ideas que pueden tener su
similitud con los procesos graduales de selección natural que generan pequeñas adaptaciones y por
otra parte, las mutaciones genéticas que provocan un salto cualitativo en el normal desarrollo de los
seres vivos. El equivalente de la mejora continua y la reingeniería, como formas de cambio
respectivamente graduales y radicales, en las organizaciones.
TEORIA DE SISTEMAS APLICADA
                                                                              Carlos Petrella




        Otros aportes complementarios sobre la teoría de sistemas, muestran claras coincidencias
respecto de las propiedades esenciales de los sistemas abiertos planteadas hace 50 años por Ludwig
von Bertalanffy. Por ejemplo, Van Gigch (1990) describe lo que considera son las características más
importantes de los sistemas abiertos (biológicos y sociales). Los sistemas abiertos muestran tanto un
grado elevado o bajo de entropía o desorden, dependiendo de sus características específicas;
muestran simplicidad organizada, complejidad no organizada o complejidad organizada; puede
asignárseles un propósito (finalidad). Los sistemas abiertos son finalísticos o teleológicos que
determinan una parte importante de sus propias características y en definitiva, de su forma de
relacionamiento con otros sistemas. Este es un resumen consistente de las propuestas generales de
teoría de sistemas.

         Existe una característica muy interesante de los sistemas que es su complejidad, que no
admite una única métrica para evaluarla. La complejidad se expresa en varias dimensiones. La
complejidad de los sistemas abiertos está determinada no solamente por la cantidad de componentes
que tienen, sino por la variedad de configuraciones que puede adoptar dependiendo de las
iteraciones entre los estados iniciales, sus propios patrones de comportamiento y el contexto en el
que opera, determina que un sistema muestre una alta o baja entropía (variedad, incertidumbre,
desorden). Los aportes de Stafford Beer (1979) son muy interesantes. Sobre todo cuando considera
a las compañías como sistemas administrados que deben ser viables y realiza consideraciones sobre
jerarquías y la unidad de administración.

         Edgar Morin (1994) plantea claramente la problemática epistemológica de la complejidad.
Según la teoría de sistemas, los organismos vivientes y las instituciones sociales (que conforman por
sus características sistemas abiertos) se pueden identificar porque muestran una complejidad similar,
llamada complejidad organizada, que opera a través de un conjunto de propiedades diferenciadas de
las de otro tipo de sistemas formales como por ejemplo el álgebra relacional o la lógica proposicional,
en tanto sistemas. Tienen un número finito de partes componentes que se relacionan entre sí y con el
contexto de muy diversas formas, generando las propiedades propias de sus propios sistemas, que
van más allá de las propiedades derivadas de cada una de sus partes constitutivas. Esta apreciación
constituye una clara superación del modelo sistémico con respecto al modelo reduccionista de
análisis de la realidad, que constituía el paradigma prevaleciente hasta hace unos años.

         Además hay otras preguntas claves en la comprensiónd e la realidad, que tienen raíces
filosóficas muy profundas. ¿Existe un fin o propósito en el universo? La teleología plantea el estudio
general de los fines o propósitos, analizando la posibilidad de atribuir una finalidad u objetivo a los
procesos. Hay dos variantes radicalmente distintas respecto de la posición teleológica. La primera
implica afirmar la existencia de un propósito consciente detrás de la regularidad de la naturaleza. Así
se conjetura por ejemplo, la existencia de un gran arquitecto del universo. La segunda considera que
no existe un fin o propósito general en la naturaleza. Este es el abordaje predominante desde la
óptica de la ciencia. En esa línea, la opción de buscar explicaciones finalísticas, sólo se explica
racionalmente por la existencia de una limitación de comprensión del universo, en las facultades
intelectuales humanas.

         Lo que tal vez resulte más interesante en el contexto del objeto a estudiar en esta tesis, es
que a determinados sistemas abiertos sean sociales o no, puede asignárseles un propósito
(finalidad). Estos sistemas abiertos operarían orientados a una finalidad principal como mantener la
vida en un protozoario o bien aumentar la participación en el mercado en una compañía. Por ejemplo
entran en esta tipología y en lo marcado en segunda instancia, las organizaciones humanas y en
particular las empresas que son el objeto genérico de estudio de esta tesis. Los sistemas empresarios
son diseñados originalmente para desarrollar conductas con un propósito o finalidad previamente
definido. Y el encargado o encargados de establecer esa finalidad y de llevar adelante las acciones
subsecuentes, es el administrador o son los administradores de ese sistema (cualquiera se el
circunstancial nombre de cargo que se les asignen).
TEORIA DE SISTEMAS APLICADA
                                                                             Carlos Petrella




        Considerando los fines o propósitos, se puede entonces, analizar conceptualmente los
sistemas desde dos posiciones claramente diferentes. Por un lado, puede postularse la existencia de
una causa final para lograr el resultado, generando una influencia sobre el proceso que conduce a
ella. Por otro lado, se puede proponer la interpretación mecanicista donde los procesos y los
resultados, no serían producto de la aproximación a un fin u objetivo. Planteando el tema en un nivel
de alcance menor. ¿Existirá un fin o propósito general en los sistemas sociales? La respuesta en este
caso admite menores niveles de controversia. Lo que no cabe duda es que en las instituciones –
como sistemas sociales que son - la voluntad del administrador, plantea ese fin o propósito que, en
mayor o menor medida, el sistema procura alcanzar. Y la administración adecuada – en el sentido
más amplio - tendría que ver con ello.

         John Van Gigch (1990), señala que para que tenga lugar la conducta con propósito de un
sistema, se deben dar un conjunto de requisitos entre los que se destacan que el objeto o propósito al
cual se atribuye la conducta, debe ser parte del propio sistema. Esto es que se genera desde sus
partes constitutivas. A su vez, es importante que esa conducta esté dirigida hacia un objetivo que
tenga relacionamiento con los componentes internos del sistema y con el medio en que se desarrolla.
Por otra parte, la elección de una determinada conducta debe conducir a un resultado expresado
explicita o implícitamente, por al voluntad del administrador. Estas bases son importantes para
comprender el funcionamiento de las organizaciones administradas, junto con la problemática de la
interacción con el entorno.

        Lo que caracteriza a un sistema abierto no son precisamente sus componentes internos, es
su relación con el entorno. El sistema no es la parte importante y el entorno se convierte en lo
accesorio. Sistema y entorno, son igualmente importantes, para comprender el comportamiento del
sistema funcionando. Según Luhmann: (1990, pág. 50): "Los sistemas no sólo se orientan
ocasionalmente o por adaptación hacia su entorno, sino de manera estructural, y no podrían existir
sin el entorno. Se constituyen y se mantienen a través de la producción y el mantenimiento de una
diferencia con respecto al entorno, y utilizan sus límites para regular esta diferencia". Un sistema
abierto no existiría si no puede diferenciarse de su entorno. De la misma manera, el entorno forma
parte de la propia existencia y comportamiento del sistema, en la medida que esa interacción lo
caracteriza como tal.

        Por lo expuesto, la interacción del sistema como objeto estudiado, con el entorno, no es un
asunto menor en la consideración del comportamiento de los sistemas abiertos. Todos los sistemas
abiertos – y esa es la esencia de su comportamiento en relación con el medio circundante - tienen un
mecanismo de retroalimentación que les permite interactuar con otros sistemas. A su vez, esa
relación con otros sistemas y la consecuente retroalimentación puede operar de manera positiva o
negativa respecto del comportamiento del propio sistema. Es positiva cuando en la multiplicación
entre la entrada y la salida, ésta aumenta con incrementos en la entrada. Es negativa cuando la
salida disminuye al aumentar la entrada. Con este enfoque, la retroalimentación positiva
generalmente conduce a la inestabilidad del sistema y la negativa a proporcionar un control al sistema
que permita su estabilidad.

        Bernardo Ramírez Del Valle (2006) plantea la necesidad de ver el universo como un todo
organizado, tomando con referencia una cita de von Bertalanffy: "Caos era el tan mentado juego
ciego de átomos que en la filosofía mecanicista y positivista, parecía representar la realidad última,
con la vida cual producto accidental de procesos físicos y la mente como epifenómeno. De caos se
trataba cuando en la teoría actual de la evolución, el mundo viviente aparecía como producto de la
casualidad, fruto de mutaciones al azar y de supervivencias en el apuro de la selección natural. De la
misma manera en las teorías del conductismo así del psicoanálisis, la personalidad humana era
considerada como producto casual de "natura y nurtura" de una mezcla de genes y una sucesión
accidental de acontecimientos desde la primera infancia y la madurez. (...) Ahora buscamos otro
modelo esencial de ver el mundo: el mundo como organización".
TEORIA DE SISTEMAS APLICADA
                                                                              Carlos Petrella




        En esta línea se destacan los aportes de Robert Lilienfeld en Teoría de Sistemas. Orígenes y
aplicaciones en ciencias sociales donde plantea la tesis de que la teoría de sistemas aplicada a
“problemas originados en negocios, gobierno, política internacional, demuestran que el enfoque
funciona y conduce tanto a la comprensión como a la predicción. Especialmente muestra que el
enfoque sistémico no se limita a entidades materiales en física, biología y otras ciencias naturales,
sino que es apropiado a entidades que son parcialmente inmateriales y heterogéneas. Por ejemplo, el
análisis de sistemas de empresas comerciales incluye hombres, máquinas, edificios, entrada de
materia prima, salida de productos, valores monetarios, motivación y otros elementos imponderables
que pueden brindar respuestas precisas y consejos prácticos.” (Lilienfeld, 1991, pág. 44)

         Todos estos aportes de partida sobre “Teoría de Sistemas” nos llevan gradualmente a entrar
en las contribuciones de la teoría de sistemas a las áreas sociales que abordaremos con mayor
detalle en el siguiente punto del estudio y específicamente, a la comprensión de las compañías como
sistemas sociales. Las organizaciones son en definitiva, un conjunto de personas y recursos
relacionados entre sí y con sus atributos para alcanzar un fin común, que interactúa con el contexto y
constituye una totalidad. Las organizaciones, como sistemas sociales, son responsables de las
consecuencias de sus decisiones y acciones por lo cual deben equilibrar la influencia del entorno con
sus responsabilidades, satisfaciendo necesidades sociales al fabricar un producto ó brindar un
servicio (de la Iglesia, 2006)


05 El enfoque de sistemas aplicado en ciencias sociales
        Los sistemas reales existen desde mucho antes que los hombres poblaran la tierra. Y pasaría
mucho tiempo todavía para que la civilización generara ciertas capacidades de conceptuar la idea de
sistemas generales con un soporte más racional y metódico, considerando relaciones que
trascendieran a la magia y tomaran partido por la ciencia. El enfoque sistémico de la realidad
actualmente emergente representa un cambio de paradigma respecto del enfoque reduccionista
predominante todavía en muchos ámbitos académicos y empresarios en América Latina. Un cambio
que se está perfilado con fuerza en muchos ámbitos del pensamiento y la acción como respuesta a
las evidencias empíricas de que las estructuras de las organizaciones crecen y el dinamismo de sus
cambios es cada vez mayor.

        Convivimos además con la incertidumbre sobre nuestro futuro. Estructuras complicadas,
cambios complejos y escenarios cambiantes, son parte de las reglas de juego de la evolución de las
organizaciones que debemos aceptar y aprender a manejar en el siglo XXI. Precisamente por ello, el
concepto de sistema ha tenido un alto grado de aplicación en las distintas ciencias sociales
contemporáneas. Es sencillo comprobar considerando ejemplos de la vida cotidiana, que el enfoque
de sistema ha permitido simplificar científicamente, en términos interpretativos, el complejo mundo de
la vida social de los seres humanos, sin desconocer los diversos enfoques teórico / interpretativos
que se han elaborado desde las distintas ciencias sociales o humanas, como la historia, el derecho, la
sociología, la antropología, la sicología o la economía entre otras.

         No es extraño entonces que comiencen a compartirse diversas visiones de los sistemas
sociales y en particular, de las organizaciones (Morgan, 1997), en los que la importancia de la cultura
pasa a ser reconocida más allá de las orientaciones de la administración científica. Los intereses, el
conflicto y el poder aparecen formalmente en escena en el marco de los sistemas políticos en diverso
ámbitos. El estudio de la lógica del cambio en escenarios de gran complejidad, introduce la potencia
de la dialéctica para analizar los procesos de trasformación en las organizaciones como resultado de
la identificación de las contradicciones y la presencia de constantes crisis, que operan muchas veces
fuera del control de los administradores. Lo que constituye un cuestionamiento a la visión mecanicista
que a la luz del modelo burocrático, pretende mantener el status quo en un contexto de previsibilidad
y control interno que muchas veces se ve desbordado por imperio de circunstancias fuera de control.
TEORIA DE SISTEMAS APLICADA
                                                                             Carlos Petrella




         La teoría de sistemas se plantea en este contexto como una opción para aproximarse a los
problemas que el estado del arte en su momento, no podía resolver adecuadamente. Es en esas
condiciones que un paradigma sustituye a otro. “Como ha sido señalado en otros trabajos, la
perspectiva de la TGS surge en respuesta al agotamiento e inaplicabilidad de los enfoques analítico-
reduccionistas y sus principios mecánico-causales (Arnold & Rodríguez, 1990b). Se desprende que el
principio clave en que se basa la TGS es la noción de totalidad orgánica, mientras que el paradigma
anterior estaba fundado en una imagen inorgánica del mundo. A poco andar, la TGS concitó un gran
interés y pronto se desarrollaron bajo su alero diversas tendencias, entre las que destacan la
cibernética (N. Wiener), la teoría de la información (C. Shannon y W. Weaver) y la dinámica de
sistemas (J. Forrester).” (Arnold y Osorio, 2006).

         Una alternativa de cambio de paradigma planteada originalmente en el campo de la biología y
las máquinas, se extiende al campo de las ciencias sociales abriendo un camino a nuevas formas de
analizar la realidad y eventualmente de transformarla. “Si bien el campo de aplicaciones de la TGS no
reconoce limitaciones, al usarla en fenómenos humanos, sociales y culturales se advierte que sus
raíces están en el área de los sistemas naturales (organismos) y en el de los sistemas artificiales
(máquinas). Mientras más equivalencias reconozcamos entre organismos, máquinas, hombres y
formas de organización social, mayores serán las posibilidades para aplicar correctamente el enfoque
de la TGS, pero mientras más experimentemos los atributos que caracterizan lo humano, lo social y lo
cultural y sus correspondientes sistemas, quedarán en evidencia sus inadecuaciones y deficiencias.”
(Arnold y Osorio, 2006)

         Von Bertalanffy era consciente de que su propuesta de sistemas podría ser una respuesta
que cambiara el enfoque científico predominante marcando una orientación hacia la mejor
comprensión de una realidad cada vez más compleja. En ese contexto, la teoría de sistemas no sólo
va a ser contemporánea de otras teorías, sino que vendrá a ahormarlas, a relacionarlas entre sí bajo
un nuevo paradigma de percepción de la realidad científica. Estrechamente relacionadas aparecen la
teoría de la información, la cibernética de segundo orden y la propuesta de constructivismo radical
(von Forester y Ashby, muy especialmente), pero su estela no se cierra al panorama científico
cambiante de mediados del siglo XX, sino que se proyecta en una progresiva impregnación de
estructuras de conocimiento susceptibles de ser descritas mediante marcos sistémicos generales (por
ejemplo, en el campo de la comunicación y de las ciencias sociales, Niklas Luhumann) en su
proyección embrionaria sobre otros recorridos que alcanzan a la teoría del caos, la genética o a la
física cuántica. (BDN/Infoamérica, 2006)

         Aún reconociendo algunas limitaciones del enfoque de la TGS para formular una Teoría
general de los sistemas sociales (TGSS), hay que aceptar que la naturaleza multidisciplinaria de la
TGS ha permitido que los distintos fenómenos e instituciones sociales puedan ser abordados desde
diversas perspectivas teóricas o ideológicas, sin afectar el enfoque sistémico que es, desde el punto
de vista metodológico, más instrumental y esquemático, y desde el punto de vista ideológico,
relativamente neutro. Este enfoque aplicado al estudio de las instituciones y fenómenos sociales, ha
permitido comprender mejor la naturaleza y la dinámica de estas organizaciones y emprender
acciones conducentes a producir entropías negativas que generen un mayor nivel de orden
institucional.

        Van Gigch (1990, pág. 15) señala al respecto que la vida en sociedad está organizada
alrededor de sistemas complejos en los cuales, y por los cuales, el hombre trata de proporcionar
alguna apariencia de orden, a su propio universo circundante. "La vida social está organizada
alrededor de sistemas complejos en los cuales, y por los cuales, el hombre trata de proporcionar
alguna apariencia de orden e su universo. La vida está organizada alrededor de instituciones de toda
clase: algunas son estructuradas por el hombre, otras han evolucionado, según parece, sin un diseño
convenido. Algunas instituciones, como la familia, son pequeñas y manejables; otras, como la política,
la industria, son de envergadura nacional y cada día se vuelven mas complejas. Algunas otras son de
TEORIA DE SISTEMAS APLICADA
                                                                               Carlos Petrella




propiedad privada y otras permanecen en el dominio público. En cada clase social, cualquiera sea
nuestro trabajo o intento, tenemos que enfrentarnos a organizaciones y sistemas.”

        En efecto, frente al tradicional modelo histórico y sociológico que concebían a las instituciones
sociales como organizaciones informales, la Teoría de las Organizaciones (derivada de la Teoría
General de Sistemas), estudia esas instituciones como organizaciones formales, esto es, de
estructuras debidamente instituidas como el ejército, la administración de justicia o las empresas
comerciales. Como bien lo señala von Bertalanffy, esta teoría está enmarcada en una filosofía que
acepta la premisa de que "el único modo significativo de estudiar las organizaciones, es estudiarlas
como sistemas”. El “análisis de sistemas trata a la organización como sistema de variables
mutuamente dependientes" que se condicionan una a otras y entre ellas con el contexto con el cual el
sistema interactúa de manera dinámica.

        Para von Bertalanffy (2001), la ciencia social es la ciencia de los sistemas sociales y por lo
tanto, deberá seguir el enfoque de la ciencia general de los sistemas. "La ciencia natural –dice- tiene
que ver con entidades físicas en el tiempo y en el espacio, con partículas, átomos y moléculas,
sistemas vivientes en varios niveles, según el caso. La ciencia social se las ve con seres humanos en
el universo de cultura creada por ellos. El universo cultural, es ante todo, un universo simbólico. Los
animales están rodeados de un universo físico el cual se enfrenta a un medio físico: presas que
atrapar, predadores que evitar y así sucesivamente. A cambio al hombre lo rodea un universo de
símbolos. Partiendo del lenguaje, condición previa de la cultura hasta relaciones simbólicas con sus
semejantes, status social, leyes, creencias, arte, moral, religión y otras innumerables cosas. La
cultura humana, aparte de los aspectos básicos de las necesidades biológicas del hombre y el sexo,
está gobernada por entidades simbólicas".

         A partir de la TGS no es solo un modelo conceptual que permite construir una interpretación
abstracta de la realidad. A partir de la teoría de sistemas se generan modelo mentales diferentes para
analizar y comprender esa realidad. Modelos que son más aptos para realizar interpretaciones e
intervenciones, cuando mayor es el relacionamiento entre las partes y del conjunto con el medio que
lo rodea y condiciona. El "pensamiento sistémico" puede ser visto entonces como una forma
integradora de conocimientos que permite describir y comprender mejor la realidad. O como plantea
Peter Senge (1992): como un modo de analizar las fuerzas e interrelaciones que modelan el
comportamiento de los sistemas. En definitiva, como una forma de revalorizar las relaciones de los
componentes entre ellos y con el contexto que los rodea e incluso, que los condiciona. Y esto puede
operar también cuando se trata de analizar universos simbólicos característicos de los sistemas
culturales (Lilienfeld, 1991, pág. 45).

         El trabajo de los diseñadores de nuevos sistemas en las organizaciones requiere describir y
comprender la realidad procurando no simplificarla demasiado y, a partir de allí, buscar oportunidades
para encarar los problemas existentes y encontrar las mejores soluciones. Comprender la dinámica
del funcionamiento de los sistemas involucrados es mucho más importante que identificar los
componentes de los mismos u describir su estructura. Allí es donde se capitaliza mejor el aporte de la
teoría de sistemas. Esta forma de abordaje de las organizaciones es más reveladora, cuanto más
dinámica y cambiante es la realidad del sistema y su relación con el contexto. La necesidad de
capitalizar el "pensamiento sistémico" está en el centro de la mayoría de los trabajos profesionales
relacionados con encarar proyectos innovadores que requieren analizar los arquetipos existentes y
generar puntos de apalancamiento para que las transformaciones deseadas, puedan consolidarse.

        Precisamente el estudio sistemático de la relación de los objetos estudiados con su contexto,
a través de sus modelos de comportamiento fundamentalmente dinámico, marca una diferencia
importante del enfoque sistémico, respecto del enfoque reduccionista. Por ello, la clasificación de los
sistemas respecto de su capacidad de relacionamiento con el contexto es tal vez la tipología más
interesante para analizar los sistemas sociales, que constituyen el centro de nuestro trabajo de
TEORIA DE SISTEMAS APLICADA
                                                                             Carlos Petrella




investigación. Esta tipología plantea dos tipos de sistemas diferentes: los cerrados y los abiertos.
Precisamente los segundos serán el centro de esta investigación. La idea conceptual de lo que
constituye un sistema abierto es fundamental para entender la conducta de los sistemas sociales,
como por ejemplo las empresas y especialmente en nuestro caso a ANCAP y a DUCSA.

        Uno de los objetivos del enfoque de sistemas es buscar similitudes de estructuras
constitutivas y de propiedades de los fenómenos comunes que ocurren en sistemas muy diferentes
respecto de su propio ámbito de funcionamiento. Esto es patrones sistemáticos de comportamiento
del objeto estudiado. Mediante este abordaje, se elaboran propuestas para aproximarse al nivel de
generalidad de las leyes en ese contexto, que a su vez se puedan aplicar a campos mucho más
específicos en muy diferentes áreas de conocimiento, que trascienden a la biología. Esta
aproximación permite comprender las bases del funcionamiento de los sistemas, analizando tanto su
funcionamiento interno, como su comportamiento en relación con el medio, considerando para ello
mecanismos de aproximación del tipo “caja blanca” y de “caja negra”, de la mano de la aproximación
de Staffor Beer (1979).

        Pero esos medios requieren complementaciones y adaptaciones, cuando queremos integrar
los comportamientos de las personas - individual o colectivamente - en el ámbito de las
organizaciones sociales. En los procesos de cambio en las sociedades hay además un fuerte
componente humano que requiere compartir colectivamente las ideas y aspiraciones. Sin desdecirnos
de la importancia del dominio de la tecnología y la capacidad de aprender, la idea de construir una
visión compartida en las organizaciones pone nuevamente en el centro de nuestra consideración, la
relevancia de los actores en el desarrollo de las instituciones. Y esto apunta claramente a la
necesidad de revalorizar a las personas, en el ámbito interno de las organizaciones. Lo que completa
las tres grandes dimensiones identificadas por Senge en el marco de otras dos adicionales,
completando las 5 disciplinas de su clásico libro (1992).

        Un enfoque de sistemas sobre las organizaciones nos aparta del viejo esquema de analizar
por separado las estructuras, los procesos y las conductas para comprender el comportamiento
empresario de los agentes. La aproximación sistémica asociada con la capacidad de innovar, basada
en la necesidad de una visión compartida, el dominio de la tecnología y la importancia de la
capacidad de aprender concuerda con la visión de Peter Senge (1992) referida a la necesidad de
contar con empresas inteligentes, abiertas y flexibles para poder desarrollar exitosamente
emprendimientos en el siglo XXI. A todo esto se agrega como se planteara precedentemente la
importancia de compartir ideas y aspiraciones. Adicionalmente, el rol de la sociedad y las personas en
las innovaciones no puede ni debería soslayarse.

         Por otra parte, Peter Senge y su equipo (2004) hacen un esfuerzo muy importante para que
estas ideas conceptuales aterricen en la práctica mediante estrategias y herramientas que ayuden a
construir una organización “abierta al aprendizaje”. En la propuesta práctica respecto de La quinta
disciplina, se plantean estrategias para desarrollar el pensamiento sistémico sobre la base un proceso
de enriquecimiento de los arquetipos y los mapas de proceso, el desarrollo práctico del dominio
personal, opciones para trabajar con los modelos mentales, formas de construir una visión compartida
y el desarrollo del aprendizaje en equipo. Tal vez lo más interesante de la propuesta es que describe
“los experimentos, investigaciones, escritos e inventos de cientos de personas” convencidas de que
este es un buen camino para mejorar las organizaciones que además aportan su propia experiencia
sobre la aplicación del enfoque. (Senge y otros, 2004, pág. XI)

        Sin embargo, la propuesta sistémica de Senge (1992) sobre las organizaciones, no sólo
queda reducida al ámbito de objetos de estudio como las empresas y su entorno cercano. Roldan
Tomasz Suárez Litvin (1998) destaca un aspecto interesante de “La Quinta Disciplina” que suele
pasar desapercibido. Se trata de que en ese discurso aparentemente orientado a lo racional y lo
tecnológico, “podemos encontrar elementos que indican la presencia de un proyecto social a gran
escala que trasciende lo que, tradicionalmente, era considerado el ámbito de lo organizacional”. En
TEORIA DE SISTEMAS APLICADA
                                                                                Carlos Petrella




segundo lugar, el referido estudio plantea la posibilidad de que este proyecto social basado en el
enfoque de sistemas, se aleja drásticamente del proyecto social propio de la modernidad,
representado por el referido autor como: “el discurso filosófico de la Ilustración”.

         El artículo de Suárez Litvin plantea una indagación diferente apuntando a la “esencia” del
cambio promovido por el enfoque de sistemas planteado por Peter Senge (1992) en La Quinta
Disciplina. “Esta “esencia” es identificada con un cierto modo de pensar la plenitud del ser humano
que dibuja una relación inédita, absolutamente armónica, entre el individuo y la organización. Se
muestra cómo este cambio implica un nuevo modo de organización de la sociedad en su conjunto.
Finalmente, se muestra cómo este cambio, en sus distintos niveles, y a pesar de hacer uso de
nociones modernas como sus vehículos, rompe por completo con el proyecto de la Ilustración.” Y esto
genera nuevos enfoques para el abordaje de cuestiones como por ejemplo, el cambio organizacional
en una organización especial y las transformaciones estructurales en todo un sector de actividad o
incuso en un país como el Uruguay o una región como la comprendida por el Mercosur.

         La teoría de sistemas puede darnos indicios sobre las razones del comportamiento de un
determinado actor en el contexto de un sistema y sus circunstancias. Posiblemente el enfoque
sistémico puede ayudar a entender con mayor profundidad, fenómenos que van más allá de acciones
aisladas de determinados componentes activos de las organizaciones humanas. Acciones que tienen
que ver con el contexto y circunstancias en que se producen determinadas conductas. “¿los
empresarios buscan la renta y se resisten a ser innovadores porque así lo eligen o porque su entorno
se los impone? ¿El fenómeno del rentismo se explica como la consecuencia de intenciones y
acciones de los actores inmediatamente implicados, o es el resultado del contexto político
institucional que estructura el conjunto de relaciones en las que estos actores están insertos? ¿Cuál
es la explicación más adecuada?” .” (Zurbirggen, 2005, pág. 10).

        La autora señala en su tesis de doctorado sobre el tema de redes rentista que: “Menos
frecuentemente se encuentran trabajos que hagan referencia al carácter sistémico y complejo del
rentismo para fundamentar las propuestas de solución en una comprensión más abarcativa y general
del fenómeno. Para acabar con las prácticas rentistas no basta con eliminar determinados subsidios o
cerrar una oficina pública que distribuye los recursos públicos con fines particulares, tal como
proponen muchos políticos y académicos.” Posiblemente con un enfoque sistémico puedan
analizarse mejor las relaciones entre los agentes comprendiendo mejor la relación entre el ámbito
público y el privado, sin estigmatizar el comportamiento de uno de los agentes como si nada tuviera
que ver con el de los demás o con las estructuras políticas, económicas o sociales que los
condicionan muchas veces de manera muy fuerte.

        Si no se miran estor fenómenos sociales con un enfoque sistémico, poco se puede sacar del
análisis reduccionista de cada parte. El estudio deZurbirggen es concluyente. “Las relaciones del
rentismo no se pueden reducir a un mero proceso de intercambio de recursos, es decir, beneficios
específicos por apoyo político o electoral. El rentismo es una institución particularista, que forma parte
de los regímenes políticos latinoamericanos y se reproduce en forma de redes de políticas.” (2005).
No es un fenómeno aislado que opera por voluntad propia de un agente del sistema y
específicamente por el deseo o convencimiento de los empresarios, de buscar su propio beneficio,
como muchas propuestas simplificadoras de la realidad dan a entender para buscar causas
fácilmente identificables y únicas a un fenómeno en que intervienen muchos agentes con muchas
relaciones de causa efecto no necesariamente lineales en su forma de generarse y consolidarse.

        Ramírez Del Valle (2006) realiza una muy interesante síntesis de la aproximación sistémica a
la problemática de la organización y funcionamiento del Estado. Citando a Ashbby señala que un
sistema comienza con las partes separadas y éstas cambian luego hacia la formación de conexiones.
Este primer sentido lo concibe el autor como el tránsito "de lo no organizado a lo organizado". El
segundo sentido sería el "tránsito de una mala organización a una buena" (operando con
mecanismos de retroalimentación positiva a negativa) basado en experiencias singulares derivadas
TEORIA DE SISTEMAS APLICADA
                                                                               Carlos Petrella




de determinadas reglas de juego. Ese tránsito tiene entonces sus peculiaridades cuando se trata de
organizaciones estatales, que son derivadas de finalidades muy diferentes y de marcos normativos
específicos, que generan conductas específicas de los políticos, administradores y ciudadanos.

        Las barreras para comprender la realidad y poder diagnosticar una situación constituyen el
primer gran desafío para capitalizar la potencialidad del enfoque sistémico. Pensando en la necesidad
de describir la realidad, todo parece indicar que primero hay que conocerla de la mejor manera
posible. Y para conocerla adecuadamente es conveniente partir de los acontecimientos más
representativos que debemos analizar. A tomando estos acontecimientos como referencia, buscar las
tendencias que establecen relaciones entre dichos acontecimientos. Sobre esta base, se debería
construir un análisis causal que permita encontrar las conexiones entre los acontecimientos que nos
preocupan. Para entonces tendremos las preguntas-problema que hay que contestar. La búsqueda
sistemática de las preguntas-problema que parten de los incidentes generados por los sistemas,
puede ser un camino práctico para entender profesionalmente esa realidad con un enfoque sistémico.

         Con esta batería de interrogantes a disposición se puede comenzar a construir una lista inicial
de propuestas que habría que generar con un modelo mental abierto al aprendizaje. Profundizando
en ellas, será además necesario generar acuerdos operativos entre las partes encargadas de atender
los problemas y buscar soluciones con los cuales se definirían los requerimientos fundamentales, las
acciones a seguir y los resultados esperados. Recién a partir de estos acuerdos los operadores
sistémicos podrían definir equipos de trabajo que serían los que llevarán adelante los encargos de
transformación que le sean encomendados. Encargos que partieron del estudio de los
acontecimientos representativos, que tienen presentes las tendencias actuales, que responden a las
preguntas-problemas más importantes y que son consistentes con las propuestas que formularon
todos los agentes que están directamente involucrados.


06 El enfoque sistémico como modelo para interpretar la realidad
         Si se desarrolla bien el "pensamiento sistémico", casi seguramente los modelos para
interpretar la realidad y nuestras propuestas para mejorar esa realidad serán, cuanto menos, mucho
más consistentes y estables que los derivados de partir la realidad en pedazos y solucionar
problemas en cada parte aisladamente. Si mediante el "pensamiento sistémico" de pueden
determinar dónde se está hoy como una organización, ya hemos comenzado a trabajar en la línea de
donde queremos estar porque definimos un punto de partida como referencia. Si mediante el
"pensamiento sistémico" se identifican las causas de nuestros problemas hemos dado además otro
enorme paso adelante. Y finalmente, si mediante el "pensamiento sistémico" se construye un acuerdo
sobre lo que hay que hacer, habremos comenzado a pasar del diagnóstico a la acción, integrando lo
aportes de un modelo conceptual de la realidad, con los desafíos de gestionar esa realidad.

         Hay que estar prevenidos respecto de lo que puede aportar un enfoque reduccionista para
entender la realidad, sobre todo en sistemas en los que las partes interna y el medio externo,
interactúan fuertemente. Para encarar la solución de un problema en cualquier organización, el atajo
aparente del enfoque reduccionista genera problemas para entender la realidad cuando esta es muy
cambiante debido a múltiples instancias de relacionamiento con su contexto y circunstancias y se
realimenta de ellas. Para entender adecuadamente la realidad: no se puede "dividir el elefante en
dos", sin saber de qué animal se trata y sin contar con ayuda adecuada, para luego rearmarlo por las
nuestras, y finalmente esperar, con optimismo, que lo que obtengamos como resultado sea parecido
a la realidad de la que partimos, cuyas características esenciales y su comportamiento, bien pudimos
no haber apreciando nunca.

       Sobre estas bases se puede construir un modelo integrado para diagnosticar y proponer
mejoras en cualquier sistema administrado con la participación activa de los agentes internos del
sistema. “Estructuras complicadas, cambios complejos y escenarios cambiantes, son parte de las
TEORIA DE SISTEMAS APLICADA
                                                                             Carlos Petrella




reglas de juego vigentes de la evolución de las organizaciones. Actualmente no alcanza sólo con una
visión reduccionista para comprender la dinámica del cambio en una organización. De la misma
manera, no es suficiente sólo con el pensamiento sistémico para enfrentar adecuadamente la
imprevisibilidad. Se requiere capacidad para convivir con el cambio y para tolerar el caos. Este es el
camino que marca el autor para orientar los pasos para acompañar exitosamente los procesos de
cambio organizacional en el siglo XXI.” (Petrella, 2004)

         El conjunto de principios básicos para el mejor abordaje de los sistemas administrados está
muy bien descrito en La quinta disciplina en la práctica (Senge y otros, 1995, página 96): "No se
puede modificar el sistema (el elefante) dividiéndolo en partes, sino que todos deben mirar juntos la
totalidad. En consecuencia, no es posible practicar el pensamiento sistémico en forma individual, no
porque la disciplina sea dificultosa, sino porque en un sistema complejo los buenos resultados
necesitan la mayor cantidad de perspectiva posible. Cuando formemos un equipo, debemos
cerciorarnos de que todas las funciones pertinentes estén representadas, y obtener autorización de
los directivos para proponer soluciones interfuncionales, al margen de susceptibilidades y políticas
internas".

         Este punto es muy importante pues prácticamente todos los especialistas en diseño de
procesos uruguayos formados en los años 80 y 90, han sido influidos por el paradigma de
investigación y de actuación sobre as organizaciones derivado fundamentalmente del enfoque
reduccionista del análisis de sistemas, dividiendo el elefante en dos o más partes para poder
entenderlo. (Por supuesto, sin saber que se trataba de un elefante) Y luego tratando de sintetizar las
partes para tratar de armar el animal original, para saber de qué se trataba. De esta manera, aquellos
que tenían experiencia, por lo menos recomponían un ejemplar de la misma envergadura. Con
suerte, por ejemplo un rinoceronte (un animal del mismo tamaño pero con un cuerno menos). Pero
gran parte de la realidad que se buscaba comprender, quedaba fuera del modelo interpretativo y por
lo tanto se desconocían – muchas veces involuntariamente - relaciones claves en el comportamiento
del sistema.

        Esta forma de trabajo, procediendo sistemáticamente por fragmentación de la realidad, pudo
resultar muchas veces satisfactoria, casi seguramente porque los instrumentos de diseño de
propuestas y de control de calidad de resultados empleados en las intervenciones sobre las
organizaciones, eran frecuentemente muy débiles. Como al verificar el trabajo de análisis realizado,
no contábamos la cantidad de cuernos o colmillos el asunto aparentemente cerraba. El elefante y
rinoceronte, a los efectos del encargo que se debía realizar, parecían ser casi iguales. Entonces se
daba por demostrado que la realidad y el modelo representado eran razonablemente equivalentes. Y
a partir de allí construíamos una propuesta, que luego de desarrollada e implantada mostraba
claramente que la propia realidad del sistema y el comportamiento de los actores la desbordaba.

        Además es también llamativo que los profesionales en el conocimiento de los sistemas se
concentraran en el trabajo como especialistas, sin abrir la cancha aceptando la participación de
quienes más conocían el sistema para que nos apoyaran en la descripción del modelo en cuestión.
Este es otro punto importante, porque de esa manera se perdía la posibilidad de que el conocimiento
de la realidad llevase a los directamente involucrados a sospechar que el rinoceronte que se había
armado con tanto esmero, no era muy parecido al elefante del que partimos al enfrentarnos con la
realidad. Lo que rescata la enorme importancia de trabajar en equipos interdisciplinarios con los
agentes involucrados con cada sistema.

        Una posibilidad para comprender los sistemas funcionando a través de la una Simulación
Cuantitativa de la dinámica de los mismos constituye un aporte metodológico para entender los
cambios que se producen. En general se representa el sistema utilizando modelos matemáticos
incluyendo las ecuaciones en diferencias finitas o ecuaciones diferenciales. Mediante estas
representaciones se puede estudiar la dinámica del conjunto de los estados disponibles por el
sistema que en definitiva permiten apreciar el comportamiento. La propuesta de analizar
TEORIA DE SISTEMAS APLICADA
                                                                                Carlos Petrella




sistemáticamente la Dinámica de los Sistemas tiene su origen en la década de los años 30 pensando
en las variantes que pueden ayudar a comprender el comportamiento aplicando procesos de cálculos
iterativos que se retro-alimentan tomando la salida de un ciclo y reingresándolos por la entrada.
(Forrester, 1968)

         La construcción de modelos interpretativos aporta mucho a la comprensión de una realidad
que no conocemos. Las organizaciones requieren en la actualidad una forma diferente de
aproximarse a los problemas. Una alternativa para el mejor abordaje de los estudios organizacionales
pensando de manera sistémica, es el modelado de aquellos aspectos que inciden sobre el
comportamiento de los sistemas considerando la creación de modelos formales que permitan
capitalizar los aportes de la Dinámica de Sistemas Cualitativa (Wolstenholme y Coyle, 1983;
Wolstenholme, 1985 y Senge, 1992) que en el campo de los estudios organizacionales promueve el
aprendizaje sobre y en la propia organización, con la intención de constituir organizaciones
inteligentes, que en el lenguaje y conceptos que propone Peter Senge, con organizaciones abiertas
al aprendizaje (Senge, 1992).

         ¿Por qué es tan difícil comprender un sistema con el que no convivimos? Puede haber
muchas razones, pero una de ellas es que las “reglas de comportamiento de un sistema” no
necesariamente son similares a las de otro. Los agentes internos del cada sistema asimilan esas
reglas y las aceptan como parte de la realidad con la que deben actuar. Pero no siempre se aprecia la
singularidad que las mismas pueden alcanzar. Esto es, que esas reglas aplicables de manera natural
en un sistema, pueden no tener sentido en otro. Y por lo tanto exportar unas reglas de un sistema a
otro puede generar desconcierto e incluso formas de funcionamiento inesperadas y a veces
sumamente inconvenientes. Por ello constituir modelos interpretativos contextual izados de la realidad
singular de un sistema, constituye un enorme desafío para comprender al propio sistema y su
comportamiento.

          Son muy reveladores los aportes de Luhmann para comprender la potencia de las
singularidades en el comportamiento de un sistema social. “Un sistema social es un conjunto de
acciones sociales que se refieren unas a otras y se confieren sentido entre sí, a la vez que no pueden
ser delimitadas por acciones de otros sistemas” (Luhmann, 1973, pág. 142). Se crea un microcosmo
propio del sistema que pueden ser muy diferentes de otro sistema, incuso con el cual interactúa de
manera más o menos cercana. Esto plantea según Luhumann, el significado de las reglas de un
sistema social referidas a sí mismo, y por lo tanto, la imposibilidad de aplicarlas en otro sistema social
sin inducir a errores de apreciación sobre su comportamiento. Y todo ello genera dificultades para
comprender los sistemas desde dentro en relación con otros sistemas.

          Sotomayor (2006) plantea varios ejemplos muy simples y a la vez ilustrativos de esas
limitantes de significado de las acciones para cada sistema social y de las dificultades de trasvasar
significados de un sistema a otro de manera artificial en el marco por ejemplo de un proceso de
transformación institucional. “Por ejemplo, las acciones sociales que desempeña un árbitro en un
partido de fútbol sólo tienen sentido en el sistema social del fútbol; si llega a un restaurante y no hay
mesas disponibles, no logrará que comensales abandonen su mesa exhibiendo una tarjeta roja.
Asimismo, un profesor no puede reprobar a un conductor imprudente, ni tiene sentido que un
enamorado ofrezca al objeto de su afecto más dinero que otro pretendiente, a cambio de ser
correspondido (sí tiene sentido que le ofrezca dinero a cambio de determinadas acciones, en el
sistema social de las relaciones laborales explícitas o tácitas).”

        Otro punto a tener en cuenta para generar orientaciones sobre aspectos metodológicos, es
buscar criterios orientadores que permitan diferenciar qué es lo accesorio y qué es lo importante para
cada compañía. Porque una propuesta metodológica efectiva debería poder separar la paja del trigo
en términos de comportamientos relevantes de los agentes, necesidades de información y soluciones
adecuadas para cada negocio. En este asunto, las cadenas de valor planteadas por Michael Porter
en la Ventaja Competitiva (1996, pág. 51), dan una mano muy importante. Porque las cadenas
TEORIA DE SISTEMAS APLICADA
                                                                             Carlos Petrella




enseñan cuales son las actividades que ayudan a consolidar las ventajas competitivas de cada
organización. Y en consonancia con estas actividades, se pueden inducir cambios en los patrones de
conducta, montar los sistemas de información básicos y utilizar la tecnología adecuada para que las
acciones de cambio puedan dar todavía mejores resultados.

         Como resumen práctico sobre le abordaje con enfoque de sistemas, para lograr los mejores
resultados la experiencia recogida en los proyectos de transformación institucional en el Uruguay,
todo parece indicar que es importante contar con opciones metodológicas que reivindiquen la
participación activa y comprometida de aquellos que están directa o indirectamente involucrados en el
diagnóstico de una situación o en el desarrollo de propuestas. Primero, pensando que muchas veces
se trata de situaciones complejas ante las cuales el conocimiento del contexto tiene un valor
agregado muy importante para comprender la realidad vigente y sus posibilidades de cambio. Y
segundo, porque quien participa activamente, se involucra mucho más en la búsqueda de propuestas
y contribuye a hacer mucho más sencillo el proceso de adaptación, que el que mira la realidad desde
fuera del sistema.

        Las ideas precedentes a modo de sugerencias orientadores sobre mejores prácticas de
aplicación del enfoque sistémico planeadas en las investigaciones de Petrella (1998) en todo caso,
debería ser guiar a las personas dentro de sus propias organizaciones, para que desarrollen mejor
sus aptitudes y actitudes para enfrentar los problemas en las organizaciones y no construirles recetas
de cómo deben pensar y actuar. Después de todo los papeles que describen procedimientos, aún los
muy bien escritos no tienen fuerza propia más allá que las personas que los defienden y los hacen
cumplir. En la mente de los auditores está siempre latente la idea de que la forma de desarrollar la
actividad en las organizaciones debe estar bien documentada. Y cuando más detallada sea esa
documentación, entonces mejor será. Sin embargo, esta es una verdad a medias, cuando nos
metemos de lleno en el trabajo de todos los días.

          El modelo burocrático clásico muestra entonces sus carencias debido a las restricciones que
impone a los agentes. Muchas personas piensan que los procedimientos deben existir para guiar a las
personas, no para esclavizarlas. Son necesarios para ayudarnos a hacer mejor las cosas, no para
prácticamente hacerlas por nosotros. Cuando proponemos procedimientos muy precisos perdemos una
parte de la libertad de acción que todos reclamamos y hacemos pesar demasiado la burocracia. Surge
entonces naturalmente la pregunta: ¿para qué queremos la libertad de hacer, sino precisamente para
hacer cosas? Así que algo de libertad hay que "invertir" para generar guías para trabajar mejor, si
queremos ser más eficaces. La idea a sostener es "hipotecar" lo mínimo imprescindible, para no
comprometer la capacidad de inventiva interna de las organizaciones.

        Sin embargo, por más que se especifiquen los procesos y procedimientos debería insistirse
en que las organizaciones sean percibidas como sistemas dinámicos en que los agentes se
relacionan entre sí en el marco de acciones y reacciones que generan procesos de retroalimentación
continuos, sobre el sistema y también sobre su entorno. Más que descripción estática de entradas,
procesos y salidas de un sistema, es importante comprender los procesos de retroalimentación que
generan cambios en el resto y el concepto de límite, entre el sistema y su entorno, que permite
preservar su autonomía, sin comprometer su interdependencia con el medio.




                                                   Ingresos del sistema que constituyen la fuerza de
                   Entradas                        arranque que suministra al sistema sus
                                                   necesidades operativas
                                                   Transforma una entrada en salidas y puede ser
                   Proceso                         sustantivo o de apoyo dependiendo de las
                                                   modificaciones que opere sobre las entradas para
TEORIA DE SISTEMAS APLICADA
                                                                               Carlos Petrella




                                                    modificaciones que opere sobre las entradas para
                                                    obtener las salidas.
                                                    Resultados que se obtienen al procesar las
                    Salidas                         entradas y que son el resultado del
                                                    funcionamiento del sistema ó el propósito para el
                                                    cual el sistema ha sido creado.
                                                    Se produce cuando las salidas ó las influencias
             Retroalimentación                      del contexto, vuelven a ingresar como recursos ó
                                                    información.
                                                    Separa al sistema de su ambiente y funciona
                     Límite                         como filtro manteniendo un grado de
                                                    autonomía e interdependencia.


          Elaborado a partir de “Las organizaciones como sistema sociales” de Gabriela de la Iglesia


           Dando un paso más deberíamos profundizar en los modelos mentales condicionantes. Como
propósito – más que entender los componentes de un sistema y sus dinámicas de interacción -,
deberíamos potenciar las habilidades naturales de los agentes para pensar sistémicamente, si queremos
capitalizar realmente los aportes generales de la teoría general de sistemas. ¿No sería mucho mejor que
la forma para identificar y solucionar problemas nos orientara en vez de condicionarnos? Con este
enfoque buscaremos siempre delinear propuestas abiertas y flexibles. Esa es la base conceptual de las
mejores prácticas, que se proponen. Y la idea sería depositar una parte importante de la confianza en la
propia organización representada por su gente, no por sus manuales. Cada problema está asociado a un
potencial riesgo en las organizaciones y es por ello que la búsqueda de soluciones, llevada adelante por
quien mejor conoce la operativa, hará más eficiente y efectivos dichos procedimientos

        Lo cierto es que: “Las simplificaciones nos llevan al principio a considerar la complejidad
como algo asociado con las estructuras de las organizaciones. Luego, cuando el modelo estático nos
decepciona, aceptamos de mala gana el cambio como algo inherente a la vida en el siglo XXI. Y a las
cansadas - cuando parece que podremos saber que pasará - debemos lidiar con la incertidumbre,
comprendiendo que algo siempre se nos puede escapar de las manos.” (Petrella, 2004) Pero estos
grandes pasos requieren algo más que el conocimiento de determinadas prácticas y herramientas de
apoyo. Es necesario abandona un modelo mental reduccionista para utilizar un modelo sistémico, en
una realidad en la que los agentes con los que interactúa, todavía no se han planteado esa dificultad
como una limitante en el abordaje de terminados problemas y en la búsqueda se soluciones viables
para los mismos.

          Todo parece indicar que efectivamente no podemos seguir simplificando los sistemas
sociales con los que convivimos para aprender sobre ellos y pensar que no dejamos nada por el
camino cuando luego queremos comprender su comportamiento. La realidad es hoy muy compleja y
se debería aceptar que posiblemente se acentuará esa complejidad todavía mas, con el pasar del
tiempo. Es por otra parte, lo que sostiene Luhmann (1973) a partir de su visión sistémica de la
realidad social. Tal vez, el camino pase entonces, por aceptar esa complejidad en todas sus
dimensiones, sin pretender que comprendemos lo que realmente no comprendemos, o que
controlamos lo que posiblemente no controlamos. En esta línea de entender la realidad para luego
procurar transformarla, el enfoque sistémico es una pieza clave para encarar este enorme desafío de
comprensión de la realidad natural y social con la que convivimos.

        Aldo Mascareño (2006), sostiene que: “La teoría de Luhmann es compleja, antihumanista,
contraintuitiva; corre el riesgo, por tanto, de llegar a ser un clásico sin nunca haber sido realmente
actual. Es tarea de quienes tenemos noticia de su poder, el desplegar sus posibilidades. El libro
TEORIA DE SISTEMAS APLICADA
                                                                               Carlos Petrella




editado e impulsado por Francisco Osorio contribuye decisivamente a esta tarea y lo hace en un
campo inexplorado: el del método de investigación sistémica. Aunque quizás lo niegue, Osorio es
parte de esta empresa y ojalá lo siga siendo para lograr incluir, en una nueva entrega, lo que en esta
ha quedado excluido. Por lo pronto, la expansión del cálculo algebraico de la forma de Spencer-
Brown hacia problemas sociales particulares, las variantes actuales de análisis de discurso, la
metodología de escenarios desarrollada por las teorías de la complejidad o la modelación matemática
utilizada en ingeniería y neurociencias. Todos ellos son instrumentos imprescindibles para lograr
llevar la investigación sistémica por nuevos rumbos, rumbos que finalmente logren disolver las añejas
distinciones entre lo cualitativo y lo cuantitativo, entre lo micro y lo macro y que desmetaforicen con
trazo irónicamente seguro la investigación social.”

       Una complejidad que en muchos casos nos puede llevar a tener que aceptar que los sistemas
pueden operar con cierta autonomía, independientemente de la propia voluntad individual de los
agentes que interactúan con él.

          Desde comienzos de la década de los 70 y como una forma de superar la caída del edificio
teórico del estructural funcionalismo, que los sociólogos del todo el mundo han estado desarrollando
un constructo teórico que pueda dar cuenta del hecho que algunos sistemas (¿o todos?) a pesar de
ser el producto de los individuos que lo han generado consciente o inconscientemente, tienden a
cobrar ciertos niveles de autonomía propia, independiente de quienes lo crearon y de las personas
que los hacen realidad. Lo anterior viene a significar que, en algún momento de su existencia, estas
formas de actuar (¿o agencias?) "son capaces de producirse continuamente a sí mismas". O como
dice el sociólogo británico Anthony Giddens, se trata de agencias que "producen y reproducen las
condiciones de su propia existencia", o bien, que "se levanta por sus propios cordones, y se
constituye como distinto del medio circundante por medio de su propia dinámica, de tal manera que
ambas cosas son inseparables. (Millán, 2000)

        Aceptar el modelo sistémico requiere a su vez, que se acepte la idea de que el
comportamiento de los objetos estudiados viene dado por los componentes del sistema, pero por
sobre todo, por las propia interacciones entre ellos, incluyendo la relación con el entorno. Es
importante comprender que la relación del sistema con el entorno es algo más que una frontera de
intercambio de acciones y reacciones. Esa relación es lo que define la posibilidad de generar
comportamientos autorregulables, adaptándose a medida que esas condiciones puedan resultar más
favorables o incluso adversas. Se plantea la convicción de que con una visión sistémica de la
realidad, los procesos analizados y representados, se deben encarar siempre de manera organicista
y aceptando la complejidad inherente a la realidad actual. Este parecería ser el paradigma a encarar,
para comprender mejor la realidad y enfrentar los desafíos del comienzo del siglo XXI.

         El enfoque sistémico permite analizar realidades muy complejas y dinámicas. Se pueden
construir modelos de representación de sistemas administrados de desarrollo gradualista y también
alternativas de sistemas que puedan generar un quiebre radical. Aparecen propuestas “evolutivas”
para mejorar la resolución de problemas conocidos y propuestas “revolucionarias” para encarar los
problemas todavía no resueltos. Los valores que determina implícitamente esta concepción de la
realidad quedan asociados con la aceptación de que el contexto altera los comportamientos de los
sistemas y las organizaciones deben estar preparadas para enfrentar esas contingencias. También
conllevan a descartar soluciones de corte mecanicista, no precisamente por ser ineficientes, sino por ser
ineficaces para modelar determinados sistemas de tipo organicista y comprender mejor su
comportamiento (especialmente en el terreno de las ciencias biológicas y los sistemas sociales).
TEORIA DE SISTEMAS APLICADA
                                                                                 Carlos Petrella




07 Bibiografía de referencia

Ackoff, Russell. La planificación de la empresa del futuro, México, Editorial Limusa Noriega Editores,
1993.

Arnold, Marcelo y Osorio, Francisco. Introducción a los Conceptos Básicos de la Teoría General de
Sistemas, http://www.moebio.uchile.cl/03/frprinci.htm, 2006.

Beer, Stafford. The heart of enterprise, Great Britain, John Wiley y Sons Ltd, 1979.

Bertalanffy von, Ludwig. General System Theory, New York, George Braziller , 2001 o Teoría
General de los Sistemas, México, Fondo de Cultura Económica, 1993.

BDN/Infoamérica.        Ludwig       von      Bertalanffy:   Perfil   bibliográfico    y    pensamiento,
http://www.infoamerica.org/teoria/bertalanffy1.htm, 2006.

Córdoba, Julio; Leñero, José y Rey, Pedro. Teoría General de Sistemas, San José Costa Rica,
ICAP, 1988,

de la Iglesia, Gabriela. Las organizaciones como sistemas sociales,
http://www.monografias.com/trabajos14/organiz/organiz.shtml, 2006.
Forrester, Jay. Principles of Systems, Text and Workbook, MIT Press/Wright-Allen, 1968.
Lilienfeld, Robert. Teoría de sistemas. Orígenes y aplicaciones en ciencias sociales, México,
Editorial Trillas, 1991.

Luhmann, Niklas. Método funcional y teoría de sistemas. En: Ilustración Sociológica y Otros Ensayos, Buenos
Aires, Editorial Sur, 1973.

Luhmann, Niklas. Sociedad y Sistema. La ambición de la teoría, Barcelona, Editorial Paidós, 1990.

Mascareño, Aldo. El Trazo y la Metáfora: ¿Qué puede Aportar la Investigación Sistémica?
http://www.moebio.uchile.cl/20/mascareno.htm, 2006.

Millán, Tomás Austin. Teoría de sistemas y sociedad en Fundamentos Socioculturales de la
Educación, Editorial Universidad Arturo Prat Sede Victoria, Capítulo 1, 2000.

Morin, Edgar. "Epistemología de la complejidad", en: Nuevos Paradigmas, cultura y subjetividad,
Buenos Aires, Paidós, 1994.

Morgan, Gareth. Images of organization, California, SAGE Publications, 1997.

Petrella, Carlos. El Solucionólogo competente”, Montevideo, Ediciones Ideas, 1998.

Petrella, Carlos. Complejidad e incertidumbre del cambio organizacional de cara al siglo XXI,
Montevideo, JIAP, 2004.

Porter, Michael. Ventaja Competitiva Creación y sostenimiento del desempeño superior, México,
Compañía Editorial Continental, 1996.
Teoriadesistemasaplicadoaorganizaciones

Weitere ähnliche Inhalte

Was ist angesagt?

Diapositivas paradigmas emergentes
Diapositivas paradigmas emergentesDiapositivas paradigmas emergentes
Diapositivas paradigmas emergentesmonicavargasbedoya
 
Paradigmas emergentes
Paradigmas emergentesParadigmas emergentes
Paradigmas emergentesyuliethenao
 
enfoque sistemico
enfoque sistemicoenfoque sistemico
enfoque sistemicojoselgr_23
 
Diapositivas TGS
Diapositivas TGS  Diapositivas TGS
Diapositivas TGS paola mesa
 
Consideraciones Sobre Los Ssii Para La Prensa
Consideraciones Sobre Los Ssii Para La PrensaConsideraciones Sobre Los Ssii Para La Prensa
Consideraciones Sobre Los Ssii Para La Prensaxiomaraj
 
Teoría general de sistemas (tgs)
Teoría general de sistemas (tgs)Teoría general de sistemas (tgs)
Teoría general de sistemas (tgs)AspetiHerrera
 
06 Miceli Y Otros
06 Miceli Y Otros06 Miceli Y Otros
06 Miceli Y Otrosgusnavarro
 
Paradigmas emergentes tc2 jackeline_montejo
Paradigmas emergentes tc2 jackeline_montejoParadigmas emergentes tc2 jackeline_montejo
Paradigmas emergentes tc2 jackeline_montejojmontejor
 
Paradigmas emergentes (3)
Paradigmas emergentes (3)Paradigmas emergentes (3)
Paradigmas emergentes (3)unad-347
 
Teoria d sistemas 1.exposicion
Teoria d sistemas 1.exposicionTeoria d sistemas 1.exposicion
Teoria d sistemas 1.exposicionJesus Cañon
 
Ensayo enfoque sistémico 1 interno
Ensayo enfoque sistémico 1 internoEnsayo enfoque sistémico 1 interno
Ensayo enfoque sistémico 1 internoveronicacer
 
La teoria de sistemas 2
La teoria de sistemas 2La teoria de sistemas 2
La teoria de sistemas 2mascota45
 
Clase 1 Y 2 Introducción a las Ciencias de la Complejidad
Clase 1 Y 2 Introducción a las Ciencias de la ComplejidadClase 1 Y 2 Introducción a las Ciencias de la Complejidad
Clase 1 Y 2 Introducción a las Ciencias de la ComplejidadAndres Schuschny, Ph.D
 
Paradigma sistemático o teoría general de sistemas
Paradigma sistemático o teoría general de sistemasParadigma sistemático o teoría general de sistemas
Paradigma sistemático o teoría general de sistemasVioleta Diaz
 
Entre 1948 y 1955
Entre 1948 y 1955Entre 1948 y 1955
Entre 1948 y 1955eyedolfkny
 

Was ist angesagt? (20)

Diapositivas paradigmas emergentes
Diapositivas paradigmas emergentesDiapositivas paradigmas emergentes
Diapositivas paradigmas emergentes
 
Paradigmas emergentes
Paradigmas emergentesParadigmas emergentes
Paradigmas emergentes
 
enfoque sistemico
enfoque sistemicoenfoque sistemico
enfoque sistemico
 
Teoria general de sistemas
Teoria general de sistemasTeoria general de sistemas
Teoria general de sistemas
 
Diapositivas TGS
Diapositivas TGS  Diapositivas TGS
Diapositivas TGS
 
Consideraciones Sobre Los Ssii Para La Prensa
Consideraciones Sobre Los Ssii Para La PrensaConsideraciones Sobre Los Ssii Para La Prensa
Consideraciones Sobre Los Ssii Para La Prensa
 
Teoría general de sistemas (tgs)
Teoría general de sistemas (tgs)Teoría general de sistemas (tgs)
Teoría general de sistemas (tgs)
 
Enfoque sistemico
Enfoque sistemicoEnfoque sistemico
Enfoque sistemico
 
06 Miceli Y Otros
06 Miceli Y Otros06 Miceli Y Otros
06 Miceli Y Otros
 
Paradigmas emergentes tc2 jackeline_montejo
Paradigmas emergentes tc2 jackeline_montejoParadigmas emergentes tc2 jackeline_montejo
Paradigmas emergentes tc2 jackeline_montejo
 
Paradigmas emergentes (3)
Paradigmas emergentes (3)Paradigmas emergentes (3)
Paradigmas emergentes (3)
 
Teoria d sistemas 1.exposicion
Teoria d sistemas 1.exposicionTeoria d sistemas 1.exposicion
Teoria d sistemas 1.exposicion
 
Ensayo enfoque sistémico 1 interno
Ensayo enfoque sistémico 1 internoEnsayo enfoque sistémico 1 interno
Ensayo enfoque sistémico 1 interno
 
Turismo y sistema
Turismo y sistemaTurismo y sistema
Turismo y sistema
 
La teoria de sistemas 2
La teoria de sistemas 2La teoria de sistemas 2
La teoria de sistemas 2
 
La teoría de la complejidad formación docente
La teoría de la complejidad formación docenteLa teoría de la complejidad formación docente
La teoría de la complejidad formación docente
 
Clase 1 Y 2 Introducción a las Ciencias de la Complejidad
Clase 1 Y 2 Introducción a las Ciencias de la ComplejidadClase 1 Y 2 Introducción a las Ciencias de la Complejidad
Clase 1 Y 2 Introducción a las Ciencias de la Complejidad
 
Paradigma sistemático o teoría general de sistemas
Paradigma sistemático o teoría general de sistemasParadigma sistemático o teoría general de sistemas
Paradigma sistemático o teoría general de sistemas
 
Entre 1948 y 1955
Entre 1948 y 1955Entre 1948 y 1955
Entre 1948 y 1955
 
Margarita
MargaritaMargarita
Margarita
 

Ähnlich wie Teoriadesistemasaplicadoaorganizaciones

Teoria de sistemas sdsd
Teoria  de sistemas sdsdTeoria  de sistemas sdsd
Teoria de sistemas sdsdJulio Valero
 
Teoría general de sistemas
Teoría general de sistemasTeoría general de sistemas
Teoría general de sistemasJORGE MONGUI
 
Introduccion a los_conceptos_basicos_de_la_teoria_general_de_sistemas
Introduccion a los_conceptos_basicos_de_la_teoria_general_de_sistemasIntroduccion a los_conceptos_basicos_de_la_teoria_general_de_sistemas
Introduccion a los_conceptos_basicos_de_la_teoria_general_de_sistemasdanypinzon
 
Teoría General de Sistemas
Teoría General de SistemasTeoría General de Sistemas
Teoría General de SistemasFanny Mictil
 
Guía Enfoque de Sistemas (Parte 2)
Guía Enfoque de Sistemas (Parte 2)Guía Enfoque de Sistemas (Parte 2)
Guía Enfoque de Sistemas (Parte 2)Fanny Mictil
 
Texto I. francisco ledesma.pdf
Texto I. francisco ledesma.pdfTexto I. francisco ledesma.pdf
Texto I. francisco ledesma.pdfPLINIOCASTELLANOS1
 
Ingeniería de sistemas unidad 1 Ingeniería Industrial
Ingeniería de sistemas unidad 1 Ingeniería Industrial Ingeniería de sistemas unidad 1 Ingeniería Industrial
Ingeniería de sistemas unidad 1 Ingeniería Industrial Ismael Martinez
 
Trabajo de-alexander-cipa
Trabajo de-alexander-cipaTrabajo de-alexander-cipa
Trabajo de-alexander-cipaNati Cabraless
 
Teoria de Sistemas.pptx
Teoria de Sistemas.pptxTeoria de Sistemas.pptx
Teoria de Sistemas.pptxAlonzoTI
 
TRABAJO MONOGRAFICO TGS
TRABAJO MONOGRAFICO TGSTRABAJO MONOGRAFICO TGS
TRABAJO MONOGRAFICO TGSguestbe52ec9
 
MONOGRAFIA SIG
MONOGRAFIA SIGMONOGRAFIA SIG
MONOGRAFIA SIGmidmey0509
 
3.1 teoria genral de sistemas.
3.1 teoria genral de sistemas.3.1 teoria genral de sistemas.
3.1 teoria genral de sistemas.joanarceh
 
Teoria General de Sistemas Ado.net
Teoria General de Sistemas Ado.netTeoria General de Sistemas Ado.net
Teoria General de Sistemas Ado.netlevanoescap
 

Ähnlich wie Teoriadesistemasaplicadoaorganizaciones (20)

Teoria de sistemas sdsd
Teoria  de sistemas sdsdTeoria  de sistemas sdsd
Teoria de sistemas sdsd
 
Teoría general de sistemas
Teoría general de sistemasTeoría general de sistemas
Teoría general de sistemas
 
Introduccion a los_conceptos_basicos_de_la_teoria_general_de_sistemas
Introduccion a los_conceptos_basicos_de_la_teoria_general_de_sistemasIntroduccion a los_conceptos_basicos_de_la_teoria_general_de_sistemas
Introduccion a los_conceptos_basicos_de_la_teoria_general_de_sistemas
 
1
11
1
 
Teoría General de Sistemas
Teoría General de SistemasTeoría General de Sistemas
Teoría General de Sistemas
 
Guía Enfoque de Sistemas (Parte 2)
Guía Enfoque de Sistemas (Parte 2)Guía Enfoque de Sistemas (Parte 2)
Guía Enfoque de Sistemas (Parte 2)
 
Practica 3 tgs
Practica 3   tgsPractica 3   tgs
Practica 3 tgs
 
Teoria de sistemas
Teoria de sistemasTeoria de sistemas
Teoria de sistemas
 
Enfoque sistemico
Enfoque sistemicoEnfoque sistemico
Enfoque sistemico
 
Texto I. francisco ledesma.pdf
Texto I. francisco ledesma.pdfTexto I. francisco ledesma.pdf
Texto I. francisco ledesma.pdf
 
Ingeniería de sistemas unidad 1 Ingeniería Industrial
Ingeniería de sistemas unidad 1 Ingeniería Industrial Ingeniería de sistemas unidad 1 Ingeniería Industrial
Ingeniería de sistemas unidad 1 Ingeniería Industrial
 
Teoría General de Sistemas
Teoría General de Sistemas  Teoría General de Sistemas
Teoría General de Sistemas
 
Trabajo de-alexander-cipa
Trabajo de-alexander-cipaTrabajo de-alexander-cipa
Trabajo de-alexander-cipa
 
Teoria de Sistemas.pptx
Teoria de Sistemas.pptxTeoria de Sistemas.pptx
Teoria de Sistemas.pptx
 
Tgs 3 introduccion teoria sistemas
Tgs 3 introduccion teoria sistemasTgs 3 introduccion teoria sistemas
Tgs 3 introduccion teoria sistemas
 
TRABAJO MONOGRAFICO TGS
TRABAJO MONOGRAFICO TGSTRABAJO MONOGRAFICO TGS
TRABAJO MONOGRAFICO TGS
 
MONOGRAFIA SIG
MONOGRAFIA SIGMONOGRAFIA SIG
MONOGRAFIA SIG
 
3.1 teoria genral de sistemas.
3.1 teoria genral de sistemas.3.1 teoria genral de sistemas.
3.1 teoria genral de sistemas.
 
Teoria General de Sistemas Ado.net
Teoria General de Sistemas Ado.netTeoria General de Sistemas Ado.net
Teoria General de Sistemas Ado.net
 
Teoría general de sistemas
Teoría general de sistemasTeoría general de sistemas
Teoría general de sistemas
 

Teoriadesistemasaplicadoaorganizaciones

  • 1. AVANCES DEL PROYECTO DE INVESTIGACIÓN APORTES DEL ENFOQUE SISTEMICO A LA COMPRENSION DE LA REALIDAD V02 AUTOR: CARLOS PETRELLA Con mi reconocimiento al coordinador del Posgrado de Gestión de Tecnologías ING. RUDIGER VON SANDEN al director de mi tesis de Doctorado en Salamanca: DR. LUIS JOYANES AGUILAR Junio de 2007
  • 2. TEORIA DE SISTEMAS APLICADA Carlos Petrella 01 El planteo de partida que ha dado origen de este enfoque Los sistemas como objeto de estudio no aparecen mágicamente en el escenario de la ciencia moderna. Ackoff señala que los sistemas han sido estudiados por centurias, pero en las últimas décadas algo nuevo ha sido agregado. Lo que está cambiando gradualmente desde mediados del siglo XX es el enfoque del abordaje del estudio de los sistemas. La idea de estudiar sistemas como una entidad en vez de un conglomerado de partes, es consistente con la tendencia en la ciencia contemporánea de no aislar los fenómenos en pequeños contextos y proceder a considerar las interacciones para examinar mayores porciones de la naturaleza. En este contexto - bajo el título de investigación de sistemas (y sus muchos sinónimos) - se detecta una convergencia de muchos desarrollos de especialidades contemporáneas, que ven la realidad desde una óptica diferente. La idea de sistemas ha ido ganando espacios en muchas esferas de actividad de análisis de la realidad. La biología y la administración son dos de ellas, que por motivos históricos abordaremos a partir de la visión de referentes como Bertalanffy o como Ackoff. Viendo la realidad con un enfoque diferente, podríamos apreciar que estamos rodeados por sistemas, lo que no siempre los percibimos como tales. Muchas veces son más evidentes los componentes que los integran, que los propios sistemas. Ello posiblemente se deba – como procuraremos mostrar - a nuestro propio paradigma prevaleciente para encarar el abordaje de la realidad. Lo podemos hacer con un enfoque reduccionista en el que la comprensión de las partes es el centro, o con un enfoque de sistemas en el que la importancia del todo constituye en foco. (Córdova, Leñero, Rey, 1988, pág. 17 y siguientes) El desarrollo del nuevo abordaje no fue sencillo porque requiere como planteamos un cambio en los modelos mentales que habitualmente utilizamos para comprender la realidad y también en los modelos conceptuales. Las dificultades de asimilación han sido enormes. Los instrumentos apropiados para encarar el abordaje de los sistemas con un enfoque sistémico, tardaron mucho en formalizarse con el rigor de un modelo formal para especificar sus partes, y sus reglas. A pesar de la importancia que tiene poder ver la realidad como un sistema integrado de muchos objetos que interactúan, la Teoría General de Sistemas surgió recién a comienzos del siglo XX como reacción al enfoque mecanicista de la investigación y tomando como referencia a los modelos biológicos que caracterizan a los seres vivos. Ludwig von Bertalanffy, fue el precursor más notorio de este enfoque, proponiendo un modelo conceptual integrador que puede ser aplicado en campos muy diferentes, más allá de los sistemas biológicos de su especialidad académica original. Precisamente estas ideas sobre los posibles aportes de una visión sistémica para comprender la realidad social son las que dieron sustento al enfoque propuesto en el proyecto de investigación de doctorado de Carlos Petrella en la Universidad de Salamanca para analizar los procesos de conservación del estatus quo y la innovación a escala nacional y más específicamente al estudiar una empresa paradigmática del sector energético nacional. Esta aproximación inicial al estado del arte respecto de la teoría general de sistemas y su aplicación a las ciencias sociales, forma parte del referido trabajo de inestigación, pero tiene su origen en los intercambios de opiniones en el equipo docente del Postgrado en Gestión de Tecnologías de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de la República en Uruguay hace ya casi cinco años. Fue entonces que colectivamente se comenzó a experimentar la potencia del enfoque de sistemas y a generar aportes para integrarlo al proyecto de postgrado con la participación de algunos precursores como Rudiger von Sanden, Pablo Darscht, Omar Viera y Daniel Meerhoff, entre otros docentes compañeros en la facultad. Ackoff sentencia que estamos participando en algo que es probablemente el más comprensivo esfuerzo para lograr una síntesis del conocimiento científico no realizada hasta ahora a escala global. Desde el Postgrado en Gestión de Tecnologías de la Facultad de Ingeniería dimos hace bastante tiempo el primer paso para contribuir a divulgar estas ideas en el Uruguay. Ya hay tres
  • 3. TEORIA DE SISTEMAS APLICADA Carlos Petrella generacioens de estudiantes que han experimentado con el enfoque de sistemas descubriendo su potencialidad para comprender la realidad, sobre todo en el nivel de las organizaciones siguiendo la impronta del equipo docente y la orientación del coordinador del proyecto ingeniero Rudiger von Sanden. De alguna manera, el proyecto de tesis de doctorado que estoy desarrollando actualmente en Salamanca y que está siendo dirigido por el Dr, Luis Joyanes, refleja esos aportes construidos siguiendo la misma senda académica. Este paper constituye un avance de ese proyecto que deseo volcar al mundo académico y profesional como una primera aproximación. 02 La idea de que estamos rodeados de sistemas comienza a ganar espacios Un sistema real (existente físicamente en el mundo material) es una entidad material formada por partes organizadas, sus componentes, que interactúan entre sí de manera que las propiedades del conjunto, sin contradecirlas, no pueden deducirse por completo de las propiedades de cada una de las partes consideradas individualmente. Tales propiedades se denominan propiedades emergentes. Los sistemas reales intercambian con su entorno energía, información y, en la mayor parte de los casos, también objetos materiales. Un protozoario, un elefante, la biósfera o la propia Tierra, que son ejemplos de sistemas naturales. El concepto se aplica también a sistemas humanos o sociales, como una sociedad entera, la administración de justicia o una empresa comercial. O incluso a un lenguaje natural, que es un sistema complejo en cuya aparición y evolución participan en compleja interacción la biología, la economía y la cultura. “La teoría de sistemas plantea un nuevo marco de enfoque metodológico de muy amplia aplicación en distintas áreas de conocimiento, esto es nuevo paradigma científico que retoma la visión holística e integradora, como necesaria para una comprensión de la realidad, frente a los reduccionismos analíticos que fijaban su atención en aspectos muy concretos, sin considerar que éstos estaban sujetos a la dinámica del conjunto. La teoría de sistemas contempla los ambientes e interacciones de las estructuras organizadas cuya naturaleza diferencial radica en su propia organización, con determinados equilibrios internos, modalidades de alimentación y conservación, etcétera. Estas propiedades de los sistemas, advertidas inicialmente en los organismos vivos y en la naturaleza, eran exportables a otros escenarios para la observación y comprensión de sus estructuras dinámicas, como los de las ciencias humanas y sociales.” (BDN/Infoamérica, 2006) En sí misma, la propuesta de una teoría general de los sistemas planteada inicialmente por von Bertalanffy, es una innovación, respecto de los diferentes enfoques precedentes. No se trata solamente de generar un ámbito nuevo para la resolución de problemas, sino de una reorientación de la ciencia en general, que tiene impacto sobre disciplinas que van de la física y la biología, hasta las ciencias sociales y del comportamiento y de cierta manera, las abarca. “Propone un examen general de la biología, ficha, sicología, lingüística, ciencias sociales, e historia, describiendo la tendencia hacia los sistemas dentro de cada área, pero sin un trabajo filosófico adecuado”, por lo menos en sus principios. (Lilienfeld, 1991, pág. 192) Esta nueva teoría plantea además un cambio de visión sobre los conocimientos de los sistemas en sí mismos. Según Bertalanffy se puede hablar hoy de una filosofía de sistemas, ya que toda teoría científica de gran alcance tiene aspectos metafísicos. Como plantea Lilienfeld (1991), el campo de aplicación de la teoría de sistemas es enorme. En lo que específicamente interesa en el marco del objeto de estudio de esta tesis, el enfoque de sistemas replantea los retos de rediseñar y repensar las organizaciones con nuevos modelos mentales y diferentes instumentos para hacerlo. Lo que incluye entre otras cosas, la necesidad de redescubrir la importancia de una visión compartida de la organización junto con nuevas formas de enfrentar desafíos respecto de la comprensión de lo que está funcionado mal y de la superación del temor y la ansiedad ante la necesidad de cambiar. (Senge, 2000, pág. 23 y siguientes) Aparece junto
  • 4. TEORIA DE SISTEMAS APLICADA Carlos Petrella con el nuevo enfoque, la problemática de los valores y las creencias, como uno de los ejes de la renovación conceptual respecto del tradicional enfoque reduccionista de lo procesos de cambio. El nuevo enfoque no plantea simplemente un nuevo modelo formal. Ludwing Von Bertalanffy señala que "teoría" no debe entenderse en su sentido restringido, esto es, matemático, sino que la palabra teoría está más cercana, en su definición, a la idea de paradigma de Kuhn en términos de un modelo general para entender la realidad. Bertalanffy distingue en la filosofía de sistemas una ontología de sistemas, una epistemología de sistemas y una filosofía de valores de sistemas. La ontología se aboca a la definición de un sistema y al entendimiento de cómo están plasmados los sistemas en los distintos niveles del mundo de la observación, la ontología se preocupa de problemas tales como el distinguir un sistema real de un sistema conceptual. Los sistemas reales son, por ejemplo, galaxias, perros, células y átomos. Los sistemas conceptuales son la lógica, las matemáticas, la música y, en general, toda construcción simbólica. (Arnold y Osorio, 2006) Robert Lilienfeld (1991, pág. 9) plantea que. “En el siglo veinte comenzaron a surgir gran número de disciplinas, las cuales pueden clasificarse bajo el nombre general de pensamiento sistémico”. Señala como ejemplos la filosofía biológica de Ludwing von Bertalanffy y su concepto de sistema abierto; las formulaciones cibernéticas de Norbert Wiener y el trabajo de Ross Ashby sobre las máquinas a las que se atribuyen propiedades de pensar y aprender; la teoría de la información y las comunicaciones basadas en los trabajos de Shanon, Weaver, Cerry y otros; la teoría de juegos de von Neumann y Morgenstern y las técnicas para simular procesos sociales y ambientales por computadora propuestas por Jay Forrester y muchos otros. “Los avances técnicos y científicos en diferentes campos han dado lugar a la formación de nuevas disciplinas, las cuales se institucionalizaron y legitimaron mediante el establecimiento de sociedades académicas, muchas de las cuales han elaborado revista y ofrecido anuarios.” (Lilienfeld, 1991, pág. 10) Surge una pregunta de partida: ¿por qué se genera este nuevo empuje de la ciencia para abordar el tema general de los sistemas? Una posible respuesta plantea el tema de la complejidad. La complejidad de muchos de los objetos estudiados complica el abordaje sistemático de los mismos, si se utiliza un enfoque analítico clásico. Estudiar cualquier sistema complejo como por ejemplo un estado nacional a partir de una teoría no sistémica, es como pretender interpretar el ordenamiento institucional y jurídico superior de ese país a través de un abordaje en el que analicemos por un lado las instituciones, por otro lado las leyes y por otro la ciudadanía por considerar tres componentes para luego dejar que su funcionamiento más o menos integrado se acepte como un supuesto. Cuando hablamos de "sistema" estamos hablando de una totalidad no de un conjunto de partes estancas cuyo conocimiento se pueden abordar por separado. Esto es, una entidad conformada por un número determinado de partes interdependientes, que influyen unas sobre las otras, conformando la conducta y los resultados de todo el conjunto. Hay una metáfora interesante que plantea Peter Senge (1992) para abordar el tema sistemas, planteando la conformación de una tormenta y la comprensión que de ella tiene las personas que no son estudiosos de la meteorología. Senge nos recuerda la idea intuitiva de lo que es un sistema con un ilustrativo ejemplo al comienzo de La Quinta Disciplina: "Se espesan las nubes, el cielo se oscurece, las hojas flamean, y sabemos que lloverá. También sabemos que después de la tormenta el agua de desagüe caerá en ríos y lagunas a kilómetros de distancia, y que el cielo estará despejado para mañana. Todos estos acontecimientos están distanciados en el espacio y en el tiempo, pero todos están conectados dentro del mismo patrón. Cada cual influye sobre el resto, y la influencia está habitualmente oculta. Sólo se comprende el sistema de tormenta al contemplar el todo, no cada elemento individual." ¡Que importante sería que, en el marco de un proyecto de estudio y cambio de un sistema complejo, supiéramos realmente qué pasa cuando se "espesan las nubes" o cuando "el cielo se oscurece"! ¡Que útil sería saber que pasará cuando "las hojas flamean" en un módulo crítico de la
  • 5. TEORIA DE SISTEMAS APLICADA Carlos Petrella implantación del sistema computacional que habíamos desarrollado! Curiosamente, a pesar de los muchos indicios que el proyecto nos va aportando soluciones, pocos "sabremos que lloverá" sobre nuestras propias cabezas con suficiente anticipación. Posiblemente en el medio de la tormenta poca importancia tendrá para nosotros que después "el agua de desagüe caerá en ríos y lagunas a kilómetros de distancia". Esta visión aporta un conocimiento mucho más profundo de las causas y las consecuencias de una tormenta. El desafío para actuar de manera sistemáticamente inteligente sobre un objeto en relación con otros objetos, va por el lado de considerar el contexto y las circunstancias. Si por ejemplo un proyecto está ante problemas urgentes que lo cuestionan porque se trata de una “tormenta institucional” muy fuerte, nadie estará preocupado por saber si "el cielo estará despejado para mañana" porque en el mundo del tiempo real mañana está, la mayor parte de las veces, demasiado lejos. La idea sería poder tener la presencia de ánimo para en el medio de una tormenta poder comprender que: "estos acontecimientos están distanciados en el espacio y en el tiempo, pero todos están conectados dentro del mismo patrón". Como plantea la cita: "Cada cual influye sobre el resto, y la influencia está habitualmente oculta". Y en nuestro ámbito de estudio en las organizaciones que encaran procesos radicales de transformación, eso es seguramente así. ¿Cuántas veces hemos visto una tormenta de gran envergadura que amenaza en el horizonte? Seguramente muchas veces. Sin embargo, pocas veces – apurados por los efectos indeseados de la misma - aprendimos algo profundo al observarla, porque no nos detuvimos a analizarla con la aproximación adecuada y el foco de atención plena que sería necesario. Así posiblemente perdimos la oportunidad única de conocer cosas nuevas sobre aquellos emprendimientos en los que estamos involucrados. La curiosidad y la atención plena son los principios para comprender la realidad. Y el incentivo es llegar a descubrir lo que estando fuertemente presente, muchas veces permanece oculto. El descubrimiento comienza al ver lo que todo el mundo ha visto y ante ello pensar lo que nadie ha pensado todavía sobre el asunto. Sea una tormenta o una organización o un área de proceso. Lo mismo da. Finalizando (Senge, 1992, pág. 15) reafirma: "Sólo se comprende el sistema de tormenta al contemplar el todo, no cada elemento individual." De igual manera, cuando sustituimos la tormenta por un proyecto de transformación institucional que nos preocupa mucho: sólo se comprende el nuevo sistema productivo o el nuevo producto a lanzar al contemplar el todo, no cada elemento individual considerado de manera estanca. Y por ello, la madre de todos los enfoques metodológicos que utilicemos en la profesión de agentes facilitadores de cambios debería tener presente la importancia de la relación entre componentes, tanto más que los propios componentes en sí mismos. Este es el mensaje que, aún en medio de una tormenta empresaria muy grande, debería tenerse siempre muy presente. 03 Los aportes del enfoque sistémico a la comprensión de la realidad ¿Qué puede aportar en el enfoque sistémico a la comprensión de la realidad? Posiblemente el punto principal sea generar una mejor forma de abordaje de la complejidad de los sistemas biológicos y sociales. “El incontrolable aumento de la complejidad social hacía del organismo una imagen insuficiente, pues aparecían nuevos órganos sociales que generaban nuevas relaciones. El foco se trasladó entonces desde los elementos a las relaciones entre los elementos, a sus intercambios, lo que esa otra metáfora subsidiaria, la de la estructura, captó con tanta propiedad.” (Mascarreño, 2006) Una de las derivaciones más interesantes es que esa nueva forma de apreciar la realidad pone en evidencia los mecanismos generativos con que operan los objetos estudiados. Y a la vez, plantea nuevas formas de verificar que la operación es efectivamente, como el modelo la representa aunque a veces pueda generar imágenes deshumanizadas como la de Luhumann.
  • 6. TEORIA DE SISTEMAS APLICADA Carlos Petrella La publicación del manuscrito en el cual la teoría emergente fuera descrita por primera vez, fue diferida en esa oportunidad por la agitación general producida al final de la Segunda Guerra Mundial. Von Bertalanffy desarrolló gradualmente su idea. Primero publicó un "paper" sobre la misma titulado: Zu einer allgemeinen Systemlehre en 1949. Al año siguiente planteó la Teoría de los sistemas abiertos en Física y Biología y un Bosquejo de la Teoría General de Sistemas. La formulación clásica de los principios, alcances y objetivos de la teoría fueron dados a conocer integralmente en La Teoría General de Sistemas, desarrollada en gran detalle en 1969 en el libro del mismo título (2001). En ese libro, von Bertalanffy realiza una introducción descriptiva clara y precisa de la propuesta de la Teoría General de Sistemas como una forma sistemática de aproximación y representación de la realidad. A su vez, plantea el desafío de encarar formas de trabajo trans- disciplinarias para sacarle partido a la nueva aproximación a la realidad. El concepto organicista de la vida elaborado por von Bertalanffy en el marco de una Teoría General de la Biología, fue evolucionando hasta constituir el fundamento para proponer unos años después la TGS que hoy conocemos y que expuso en su libro más conocido (2001). El desarrollo de esas ideas pasando del campo de la biología a otros campos fue lógico y natural a partir de la aproximación elegida por el autor para entender la realidad. La concepción organicista original se refirió al organismo como un sistema organizado, definido por leyes fundamentales de sistemas biológicos en todos los niveles de la organización. Procurando ampliar las implicaciones de su concepción de partida, finalmente se abocó a la especificación de una teoría general. Así fue que este esfuerzo generalizador trascendió al terreno de la biología, para considerar los diferentes niveles de organización sociales, que son los objetos de estudio que nos ocupan en esta investigación. Ludwig von Bertalanffy (2001, pág. 15) planteó que la Teoría General de Sistemas (TGS) debería constituirse en un mecanismo de integración entre las ciencias naturales y sociales y ser al mismo tiempo un instrumento básico para la formación y preparación de científicos. Sobre estas bases se constituyó en 1954 la Society for General Systems Research, cuyos objetivos fueron los siguientes: 1) Investigar el isomorfismo de conceptos, leyes y modelos en varios campos y facilitar las transferencias entre aquellos; 2) Promoción y desarrollo de modelos teóricos en campos que carecen de ellos; 3) Reducir la duplicación de los esfuerzos teóricos; y 4) Promover la unidad de la ciencia a través de principios conceptuales y metodológicos unificadores. “ Esto seguramente contribuiría a acelerar el proceso de cambio del paradigma mecanicista al sistémico. Las ideas precursoras permitieron integrar esfuerzos mas o menos aislados de otros pensadores sistémicos contemporáneos, en torno a los aportes de la nueva teoría. En 1954 von Bertalanffy , logró reunir a científicos de otras disciplinas que trazaban visiones sistémicas en torno a la Society for General Systems Research (actualmente la International Society for the Systems Sciences), entre los que se contaban el economista Kenneth Boulding, el psicólogo James Grier Miller, el matemático Anatol Rapoport y el filósofo Ralph Gerard, a los que se irían uniendo gradualmente muchas figuras relevantes de la ciencia del siglo XX, que buscaban un modelo alternativo para apreciar fenómenos muy complejos, con una visión integradora, que podría aportar la nueva Teoría General de Sistemas. Lo que iniciaría un proceso de legitimación del nuevo modelo, a partir de diversos aportes académicos. El contexto en el que la TGS se puso en marcha desafiando el status quo dominante, es el de una ciencia dominada por las operaciones de reducción características del método analítico, una concepción cuyo paradigma de entonces, venía siendo la forma de abordaje científico de los problemas, planteada por la Física. Los sistemas complejos, como los organismos o las sociedades, permiten una aproximación reduccionista sólo con muchas limitaciones. La solución a menudo era negar la pertinencia científica de la investigación de problemas relativos a esos niveles de la realidad, como cuando una sociedad científica prohibió debatir en sus sesiones el problema de en qué consiste y a qué se debe la conciencia. Esta situación resultaba particularmente insatisfactoria en el terreno de
  • 7. TEORIA DE SISTEMAS APLICADA Carlos Petrella la biología, una ciencia natural que parecía quedar relegada a la función de describir, obligada a renunciar a cualquier intento de interpretar o predecir. Con el correr del tiempo, von Bertalanffy ha sido reconocido como pionero en la concepción organicista en muchas disciplinas, y se reconoció como su máximo logro una concepción de los sistemas generales que trascendió la clásica dicotomía mecanicista contrapuesta con la vitalista, para generar una explicación conceptual del funcionamiento de los seres vivos en general. El planteo renovador del autor consistió en apreciar a los organismos vivos como sistemas abiertos, con características diferenciadas que pueden ser estudiadas con un enfoque diferente que el del paradigma reduccionista vigente entonces, que no por ello se aparta de la forma de abordaje científico característico de las ciencias naturales. Sin embargo – y tomando las ideas de Khun sobre cambios de paradigma en el ámbito de la ciencia - la propuesta de Bertalanffy sería fuertemente criticada y cuestionada, por muchos años, hasta ser finalmente aceptada. A partir de las ideas fundacionales de la teoría de sistemas, von Bertalanffy concibe la "Teoría General de los Sistemas" (TGS) como una nueva disciplina científica, cuyo tema central es la formulación de principios válidos para comprender los sistemas, sea cual fuere la naturaleza de sus elementos componentes y las relaciones entre ellos. En este sentido, esta teoría plantea una aproximación a la realidad de los sistemas formales, mecánicos, biológicos, sociales o de cualquier otro tipo, mediante una aproximación lógico-matemática puramente formal en sí misma, pero aplicable a todas las ciencias empíricas, considerando en el abordaje, el conjunto de los objetos organizados a partir de las relaciones que los vinculan entre sí y con el medio. Este enfoque logra aportes relevantes en la comprensión y también en la predicción del comportamiento de la realidad en muchos campos de la ciencia, incluyendo es estudio sistemático de las organizaciones. La concepción de un modelo que integrara los conceptos de niveles de organización y de organismo activo, supuso en principio un nuevo modelo mental para apreciar el comportamiento de los seres vivos. Así se planteó inicialmente la idea de organismo activo, como lo opuesto de organismo pasivo. Este abordaje generó las bases de una declaración temprana para generar una teoría holística de la vida que explicase el comportamiento de los seres vivos como sistemas abiertos en constante relación con el medio ambiente en el cual se desarrollan. Este concepto generó gran resistencia entre los biólogos experimentales que pretendían explicar los procesos de la vida mediante la investigación física y química de las leyes a niveles subcelulares, con un enfoque evidentemente reduccionista para el abordaje de los objetos estudiados. Este era por otra parte, el paradigma vigente a comienzos del siglo XX. La propuesta se abre camino precisamente porque los paradigmas vigentes no ofrecían adecuadas respuestas para abordar la complejidad creciente de los objetos estudiados en materias tan diversas como la biología o la sociedad. Al respecto en el prefacio de la edición revisada, Bertalanffy (2001, pág. xx) afirma que: "La tecnología y la sociedad moderna se han vuelto tan complejas, que los caminos y medios tradicionales no son ya suficientes, y se imponen actitudes de naturaleza holística o de sistemas y generalista, o interdisciplinaria (...). Sistemas en múltiples niveles piden control científico: ecosistemas cuya perturbación conlleva a problemas apremiantes como el de la contaminación, organizaciones formales como la burocracia, las instituciones educativas o el ejército; los graves problemas de sistemas socioeconómicos, en relaciones internacionales, políticas y represalias". ¿Qué pasaría si nos preocupamos más por “el todo” y consideramos preferentemente el estudio de “la relación entre las partes”? Comenzamos a transitar gradualmente hacia los modelos mentales desarrollados en la teoría de sistemas, con too lo que ello implica en la capacidad de comprender la realidad y la selección de instrumentos conceptuales para hacerlo. El enfoque de sistemas aporta entonces una visión diferente de la realidad, más relacionada con las relaciones entre las partes, que con las partes en sí mismas. Señala Van Gigch (1987) que: "El enfoque de
  • 8. TEORIA DE SISTEMAS APLICADA Carlos Petrella sistemas otorga una nueva forma de pensamiento a las organizaciones que complementan las escuelas previas de la teoría de la organización. Este busca unir el punto de vista conductual con el estrictamente mecánico y considera la organización como un todo integrado, cuyo objeto sea lograr la eficiencia total del sistema, además de armonizar los objetivos en conflicto de sus componentes". La característica de los sistemas abiertos precisamente es su cambio permanente, como consecuencia tanto de la relación entre sus componentes internos como de esos componentes, con el medio con el cual estos interactúan. Los sistemas abiertos, que son conformados por los organismos vivientes (biológicos o sociales) se mantienen en permanente evolución, transformación, cambio, o, como dice von Bertalanffy, "en continua incorporación y eliminación de materia, constituyendo y demoliendo componentes, sin alcanzar, mientras la vida dure, un estado de equilibrio químico y termodinámico, sino manteniéndose en un estado llamado "uniforme" que difiere de aquel". En definitiva, operan en una relación de equilibrio con el medio con el que interactúan y condiciona su comportamiento. 04 Los principios básicos que determinan el comportamiento de los sistemas Para Bertalanffy, todos los sistemas abiertos se rigen por grupos de principios básicos que determinan su comportamiento: 1) Principio de Equifinalidad (2001, pág.131), que lleva a determinados sistemas abiertos a alcanzar un mismo estado final partiendo de diferentes condiciones iniciales y por diferentes caminos. 2) Principio de Heterogeneidad (2001, pág. 211) que plantea que los sistemas existen porque se diferencian de su entorno, oponiéndose a las fuerzas que llevan naturalmente a la igualación de las diferencias (homogeneidad). 3) Principio de Organización (2001, pág. 47) que sostiene que se necesita un sistema organizado para contrarrestar la tendencia general de los acontecimientos en la naturaleza física que llevan a estados de máximo desorden (entropía) y a la igualación de las diferencias (homogeneidad). Los sistemas abiertos, y particularmente los sistemas sociales, por el principio de equifinalidad, contienen un mecanismo de autorregulación de su propio funcionamiento en relación con el entorno en el que operan. De otra manera, las diferentes configuraciones del entorno podrían disparar su comportamiento de manera totalmente descontrolada. Von Bertalanffy (2001, pág. 161) dice al respecto que: "Un sistema es un proceso circular en el cual parte de la salida es remitida de nuevo, como información sobre el resultado preliminar de la respuesta a la entrada, haciendo así que el sistema se autorregule, sea en el sentido de mantener ciertas variables o de dirigirse hacia una meta deseada". La autorregulación es entonces una parte muy importante del modelo de control del funcionamiento de los sistemas abiertos. La idea de que los objetos se diferencian a través de su relación con el entono plantea una nueva forma de ver la realidad, más centrada en las relaciones con el entorno que en su funcionamiento interno. Precisamente los sistemas existen como tales porque se diferencian del entorno con el que interactúan. La frontera entre el sistema y su entorno establece la separación entre lo que es sistema y lo que queda fuera de él. Las reglas de funcionamiento del sistema, diferentes de las de su entorno, evitan la igualación de ambos y la cosnecuente desaparición del sistema como tal. Por otra parte, se establecen diferentes niveles de complejidad entre lo interno y lo externo. Lo interno (el sistema) como algo menos complejo y por lo tanto, diferenciado de lo externo (el ambiente), considerando la idea de complejidad sistémica de ambos objetos que es la base de la heterogeneidad de la realidad biológica y social. Surge finalmente la poblemática de la organización como principio básico para el funcionamiento. Los sistemas abiertos – y entre ellos las organizaciones sociales - tienen una estructura y funcionamiento internos que los caracterizan y que les permiten diferenciarse del entorno. La organización es una de las características de los sistemas que va más allá de la
  • 9. TEORIA DE SISTEMAS APLICADA Carlos Petrella complejidad de su estructura y los componentes del mismo. Precisamente las características de esa organización, marcan una diferencia notable entre los sistemas administrados y los que no son administrados. La organización en los sistemas administrados es una característica importante y compleja que conlleva una conducta orientada a objetivos y motivos, que es claramente diferente de la que tienen los sistemas no administrados en el mundo de las ciencias naturales. Esa organización determina gran parte de sus características funcionales, que trascienden a cada uno de los componentes aislados del sistema. Los sistemas abiertos y específicamente los sistemas administrados, tienen un perfil que los caracteriza. Russell Ackoff (1993, pág. 36) define una organización como un sistema por lo menos parcialmente auto-controlado orientado a un determinado fin (habla específicamente de metas, objetivos e ideales). “Esto hace posible contemplas los sistemas teleológicamente (de una manera orientada hacia el producto, y no determinísticamente (de una manera orientada al insumo.” Aclarando seguidamente que la teleolología no reemplaza al determinismo, sino que lo complementa. Los sistemas incluyen entre sus contenidos hombres y máquinas, una estructura que establece cursos de acción alternativos, comunicaciones para determinación de la conducta e interacción y medios de elección de toma de decisión, estableciendo los cursos de acción que conducen a resultados elegibles entre los propios participantes. Sobre estas bases, puede construirse una aproximación a los sistemas estatales, bien diferente de la propuesta por el modelo burocrático planteado previamente por Max Weber. A su vez, los sistemas se ajustan mediante mecanismos de retroalimentación continuos que ayudan a corregir desviaciones. Para entender este concepto siguiendo a Tomas Austin Millán (2006), pensemos en la persona que conduce una bicicleta, que es una experiencia que la mayoría de los lectores de este artículo seguramente habrá vivido y por lo tanto, puede entender y aplicar. En la medida que avanza, el ciclista corrige la dirección, ya que la bicicleta tiene una fuerte tendencia a derivar hacia los lados. El acto de corregir la dirección impuesta es producto de la retroalimentación que se produce en la mente del ciclista, quien continuamente reexamina si va en la dirección que quiere, si ello no ocurre, corrige la dirección. Esta cualidad de auto-corrección sucede en todos los sistemas y es la base de la cibernética "que concierne en especial a los problemas de la organización y los procesos de control" Constituiría un aporte poder ver a las burocracias como sistemas, con el enfoque precedentemente expuesto. La idea de que las burocracias en general – como sistemas sociales que son - también evolucionan no resulta ser algo descabellado, desde el punto de vista de la TGS planteada por von Bertalanffy. A pesar de que la teoría del modelo burocrático esencialmente mecanicista plantea aproximaciones a la realidad con estructuras rígidas y procesos predefinidos, el conjunto del sistema social que componen (sea este por ejemplo una institución sin fines de lucro o una empresa comercial) no pueden permanecer inmutables ante los cambios del contexto, por más que sus estructuras internas y sus procedimientos formales, establezcan fuertes blindajes para mantener el statu quo imperante. De la misma manera, los sistemas de innovación también evolucionan, pero esto resulta todavía más comprensible, debido a que la idea de innovar tiene en su esencia la idea de cambiar. Sin embargo, en los sistemas de innovación hemos visto que el marco teórico platea criterios graduales de desarrollo de las innovaciones matizados con grandes saltos cualitativos que replantean lo que se hace y como se hace en determinados sectores de actividad. Ideas que pueden tener su similitud con los procesos graduales de selección natural que generan pequeñas adaptaciones y por otra parte, las mutaciones genéticas que provocan un salto cualitativo en el normal desarrollo de los seres vivos. El equivalente de la mejora continua y la reingeniería, como formas de cambio respectivamente graduales y radicales, en las organizaciones.
  • 10. TEORIA DE SISTEMAS APLICADA Carlos Petrella Otros aportes complementarios sobre la teoría de sistemas, muestran claras coincidencias respecto de las propiedades esenciales de los sistemas abiertos planteadas hace 50 años por Ludwig von Bertalanffy. Por ejemplo, Van Gigch (1990) describe lo que considera son las características más importantes de los sistemas abiertos (biológicos y sociales). Los sistemas abiertos muestran tanto un grado elevado o bajo de entropía o desorden, dependiendo de sus características específicas; muestran simplicidad organizada, complejidad no organizada o complejidad organizada; puede asignárseles un propósito (finalidad). Los sistemas abiertos son finalísticos o teleológicos que determinan una parte importante de sus propias características y en definitiva, de su forma de relacionamiento con otros sistemas. Este es un resumen consistente de las propuestas generales de teoría de sistemas. Existe una característica muy interesante de los sistemas que es su complejidad, que no admite una única métrica para evaluarla. La complejidad se expresa en varias dimensiones. La complejidad de los sistemas abiertos está determinada no solamente por la cantidad de componentes que tienen, sino por la variedad de configuraciones que puede adoptar dependiendo de las iteraciones entre los estados iniciales, sus propios patrones de comportamiento y el contexto en el que opera, determina que un sistema muestre una alta o baja entropía (variedad, incertidumbre, desorden). Los aportes de Stafford Beer (1979) son muy interesantes. Sobre todo cuando considera a las compañías como sistemas administrados que deben ser viables y realiza consideraciones sobre jerarquías y la unidad de administración. Edgar Morin (1994) plantea claramente la problemática epistemológica de la complejidad. Según la teoría de sistemas, los organismos vivientes y las instituciones sociales (que conforman por sus características sistemas abiertos) se pueden identificar porque muestran una complejidad similar, llamada complejidad organizada, que opera a través de un conjunto de propiedades diferenciadas de las de otro tipo de sistemas formales como por ejemplo el álgebra relacional o la lógica proposicional, en tanto sistemas. Tienen un número finito de partes componentes que se relacionan entre sí y con el contexto de muy diversas formas, generando las propiedades propias de sus propios sistemas, que van más allá de las propiedades derivadas de cada una de sus partes constitutivas. Esta apreciación constituye una clara superación del modelo sistémico con respecto al modelo reduccionista de análisis de la realidad, que constituía el paradigma prevaleciente hasta hace unos años. Además hay otras preguntas claves en la comprensiónd e la realidad, que tienen raíces filosóficas muy profundas. ¿Existe un fin o propósito en el universo? La teleología plantea el estudio general de los fines o propósitos, analizando la posibilidad de atribuir una finalidad u objetivo a los procesos. Hay dos variantes radicalmente distintas respecto de la posición teleológica. La primera implica afirmar la existencia de un propósito consciente detrás de la regularidad de la naturaleza. Así se conjetura por ejemplo, la existencia de un gran arquitecto del universo. La segunda considera que no existe un fin o propósito general en la naturaleza. Este es el abordaje predominante desde la óptica de la ciencia. En esa línea, la opción de buscar explicaciones finalísticas, sólo se explica racionalmente por la existencia de una limitación de comprensión del universo, en las facultades intelectuales humanas. Lo que tal vez resulte más interesante en el contexto del objeto a estudiar en esta tesis, es que a determinados sistemas abiertos sean sociales o no, puede asignárseles un propósito (finalidad). Estos sistemas abiertos operarían orientados a una finalidad principal como mantener la vida en un protozoario o bien aumentar la participación en el mercado en una compañía. Por ejemplo entran en esta tipología y en lo marcado en segunda instancia, las organizaciones humanas y en particular las empresas que son el objeto genérico de estudio de esta tesis. Los sistemas empresarios son diseñados originalmente para desarrollar conductas con un propósito o finalidad previamente definido. Y el encargado o encargados de establecer esa finalidad y de llevar adelante las acciones subsecuentes, es el administrador o son los administradores de ese sistema (cualquiera se el circunstancial nombre de cargo que se les asignen).
  • 11. TEORIA DE SISTEMAS APLICADA Carlos Petrella Considerando los fines o propósitos, se puede entonces, analizar conceptualmente los sistemas desde dos posiciones claramente diferentes. Por un lado, puede postularse la existencia de una causa final para lograr el resultado, generando una influencia sobre el proceso que conduce a ella. Por otro lado, se puede proponer la interpretación mecanicista donde los procesos y los resultados, no serían producto de la aproximación a un fin u objetivo. Planteando el tema en un nivel de alcance menor. ¿Existirá un fin o propósito general en los sistemas sociales? La respuesta en este caso admite menores niveles de controversia. Lo que no cabe duda es que en las instituciones – como sistemas sociales que son - la voluntad del administrador, plantea ese fin o propósito que, en mayor o menor medida, el sistema procura alcanzar. Y la administración adecuada – en el sentido más amplio - tendría que ver con ello. John Van Gigch (1990), señala que para que tenga lugar la conducta con propósito de un sistema, se deben dar un conjunto de requisitos entre los que se destacan que el objeto o propósito al cual se atribuye la conducta, debe ser parte del propio sistema. Esto es que se genera desde sus partes constitutivas. A su vez, es importante que esa conducta esté dirigida hacia un objetivo que tenga relacionamiento con los componentes internos del sistema y con el medio en que se desarrolla. Por otra parte, la elección de una determinada conducta debe conducir a un resultado expresado explicita o implícitamente, por al voluntad del administrador. Estas bases son importantes para comprender el funcionamiento de las organizaciones administradas, junto con la problemática de la interacción con el entorno. Lo que caracteriza a un sistema abierto no son precisamente sus componentes internos, es su relación con el entorno. El sistema no es la parte importante y el entorno se convierte en lo accesorio. Sistema y entorno, son igualmente importantes, para comprender el comportamiento del sistema funcionando. Según Luhmann: (1990, pág. 50): "Los sistemas no sólo se orientan ocasionalmente o por adaptación hacia su entorno, sino de manera estructural, y no podrían existir sin el entorno. Se constituyen y se mantienen a través de la producción y el mantenimiento de una diferencia con respecto al entorno, y utilizan sus límites para regular esta diferencia". Un sistema abierto no existiría si no puede diferenciarse de su entorno. De la misma manera, el entorno forma parte de la propia existencia y comportamiento del sistema, en la medida que esa interacción lo caracteriza como tal. Por lo expuesto, la interacción del sistema como objeto estudiado, con el entorno, no es un asunto menor en la consideración del comportamiento de los sistemas abiertos. Todos los sistemas abiertos – y esa es la esencia de su comportamiento en relación con el medio circundante - tienen un mecanismo de retroalimentación que les permite interactuar con otros sistemas. A su vez, esa relación con otros sistemas y la consecuente retroalimentación puede operar de manera positiva o negativa respecto del comportamiento del propio sistema. Es positiva cuando en la multiplicación entre la entrada y la salida, ésta aumenta con incrementos en la entrada. Es negativa cuando la salida disminuye al aumentar la entrada. Con este enfoque, la retroalimentación positiva generalmente conduce a la inestabilidad del sistema y la negativa a proporcionar un control al sistema que permita su estabilidad. Bernardo Ramírez Del Valle (2006) plantea la necesidad de ver el universo como un todo organizado, tomando con referencia una cita de von Bertalanffy: "Caos era el tan mentado juego ciego de átomos que en la filosofía mecanicista y positivista, parecía representar la realidad última, con la vida cual producto accidental de procesos físicos y la mente como epifenómeno. De caos se trataba cuando en la teoría actual de la evolución, el mundo viviente aparecía como producto de la casualidad, fruto de mutaciones al azar y de supervivencias en el apuro de la selección natural. De la misma manera en las teorías del conductismo así del psicoanálisis, la personalidad humana era considerada como producto casual de "natura y nurtura" de una mezcla de genes y una sucesión accidental de acontecimientos desde la primera infancia y la madurez. (...) Ahora buscamos otro modelo esencial de ver el mundo: el mundo como organización".
  • 12. TEORIA DE SISTEMAS APLICADA Carlos Petrella En esta línea se destacan los aportes de Robert Lilienfeld en Teoría de Sistemas. Orígenes y aplicaciones en ciencias sociales donde plantea la tesis de que la teoría de sistemas aplicada a “problemas originados en negocios, gobierno, política internacional, demuestran que el enfoque funciona y conduce tanto a la comprensión como a la predicción. Especialmente muestra que el enfoque sistémico no se limita a entidades materiales en física, biología y otras ciencias naturales, sino que es apropiado a entidades que son parcialmente inmateriales y heterogéneas. Por ejemplo, el análisis de sistemas de empresas comerciales incluye hombres, máquinas, edificios, entrada de materia prima, salida de productos, valores monetarios, motivación y otros elementos imponderables que pueden brindar respuestas precisas y consejos prácticos.” (Lilienfeld, 1991, pág. 44) Todos estos aportes de partida sobre “Teoría de Sistemas” nos llevan gradualmente a entrar en las contribuciones de la teoría de sistemas a las áreas sociales que abordaremos con mayor detalle en el siguiente punto del estudio y específicamente, a la comprensión de las compañías como sistemas sociales. Las organizaciones son en definitiva, un conjunto de personas y recursos relacionados entre sí y con sus atributos para alcanzar un fin común, que interactúa con el contexto y constituye una totalidad. Las organizaciones, como sistemas sociales, son responsables de las consecuencias de sus decisiones y acciones por lo cual deben equilibrar la influencia del entorno con sus responsabilidades, satisfaciendo necesidades sociales al fabricar un producto ó brindar un servicio (de la Iglesia, 2006) 05 El enfoque de sistemas aplicado en ciencias sociales Los sistemas reales existen desde mucho antes que los hombres poblaran la tierra. Y pasaría mucho tiempo todavía para que la civilización generara ciertas capacidades de conceptuar la idea de sistemas generales con un soporte más racional y metódico, considerando relaciones que trascendieran a la magia y tomaran partido por la ciencia. El enfoque sistémico de la realidad actualmente emergente representa un cambio de paradigma respecto del enfoque reduccionista predominante todavía en muchos ámbitos académicos y empresarios en América Latina. Un cambio que se está perfilado con fuerza en muchos ámbitos del pensamiento y la acción como respuesta a las evidencias empíricas de que las estructuras de las organizaciones crecen y el dinamismo de sus cambios es cada vez mayor. Convivimos además con la incertidumbre sobre nuestro futuro. Estructuras complicadas, cambios complejos y escenarios cambiantes, son parte de las reglas de juego de la evolución de las organizaciones que debemos aceptar y aprender a manejar en el siglo XXI. Precisamente por ello, el concepto de sistema ha tenido un alto grado de aplicación en las distintas ciencias sociales contemporáneas. Es sencillo comprobar considerando ejemplos de la vida cotidiana, que el enfoque de sistema ha permitido simplificar científicamente, en términos interpretativos, el complejo mundo de la vida social de los seres humanos, sin desconocer los diversos enfoques teórico / interpretativos que se han elaborado desde las distintas ciencias sociales o humanas, como la historia, el derecho, la sociología, la antropología, la sicología o la economía entre otras. No es extraño entonces que comiencen a compartirse diversas visiones de los sistemas sociales y en particular, de las organizaciones (Morgan, 1997), en los que la importancia de la cultura pasa a ser reconocida más allá de las orientaciones de la administración científica. Los intereses, el conflicto y el poder aparecen formalmente en escena en el marco de los sistemas políticos en diverso ámbitos. El estudio de la lógica del cambio en escenarios de gran complejidad, introduce la potencia de la dialéctica para analizar los procesos de trasformación en las organizaciones como resultado de la identificación de las contradicciones y la presencia de constantes crisis, que operan muchas veces fuera del control de los administradores. Lo que constituye un cuestionamiento a la visión mecanicista que a la luz del modelo burocrático, pretende mantener el status quo en un contexto de previsibilidad y control interno que muchas veces se ve desbordado por imperio de circunstancias fuera de control.
  • 13. TEORIA DE SISTEMAS APLICADA Carlos Petrella La teoría de sistemas se plantea en este contexto como una opción para aproximarse a los problemas que el estado del arte en su momento, no podía resolver adecuadamente. Es en esas condiciones que un paradigma sustituye a otro. “Como ha sido señalado en otros trabajos, la perspectiva de la TGS surge en respuesta al agotamiento e inaplicabilidad de los enfoques analítico- reduccionistas y sus principios mecánico-causales (Arnold & Rodríguez, 1990b). Se desprende que el principio clave en que se basa la TGS es la noción de totalidad orgánica, mientras que el paradigma anterior estaba fundado en una imagen inorgánica del mundo. A poco andar, la TGS concitó un gran interés y pronto se desarrollaron bajo su alero diversas tendencias, entre las que destacan la cibernética (N. Wiener), la teoría de la información (C. Shannon y W. Weaver) y la dinámica de sistemas (J. Forrester).” (Arnold y Osorio, 2006). Una alternativa de cambio de paradigma planteada originalmente en el campo de la biología y las máquinas, se extiende al campo de las ciencias sociales abriendo un camino a nuevas formas de analizar la realidad y eventualmente de transformarla. “Si bien el campo de aplicaciones de la TGS no reconoce limitaciones, al usarla en fenómenos humanos, sociales y culturales se advierte que sus raíces están en el área de los sistemas naturales (organismos) y en el de los sistemas artificiales (máquinas). Mientras más equivalencias reconozcamos entre organismos, máquinas, hombres y formas de organización social, mayores serán las posibilidades para aplicar correctamente el enfoque de la TGS, pero mientras más experimentemos los atributos que caracterizan lo humano, lo social y lo cultural y sus correspondientes sistemas, quedarán en evidencia sus inadecuaciones y deficiencias.” (Arnold y Osorio, 2006) Von Bertalanffy era consciente de que su propuesta de sistemas podría ser una respuesta que cambiara el enfoque científico predominante marcando una orientación hacia la mejor comprensión de una realidad cada vez más compleja. En ese contexto, la teoría de sistemas no sólo va a ser contemporánea de otras teorías, sino que vendrá a ahormarlas, a relacionarlas entre sí bajo un nuevo paradigma de percepción de la realidad científica. Estrechamente relacionadas aparecen la teoría de la información, la cibernética de segundo orden y la propuesta de constructivismo radical (von Forester y Ashby, muy especialmente), pero su estela no se cierra al panorama científico cambiante de mediados del siglo XX, sino que se proyecta en una progresiva impregnación de estructuras de conocimiento susceptibles de ser descritas mediante marcos sistémicos generales (por ejemplo, en el campo de la comunicación y de las ciencias sociales, Niklas Luhumann) en su proyección embrionaria sobre otros recorridos que alcanzan a la teoría del caos, la genética o a la física cuántica. (BDN/Infoamérica, 2006) Aún reconociendo algunas limitaciones del enfoque de la TGS para formular una Teoría general de los sistemas sociales (TGSS), hay que aceptar que la naturaleza multidisciplinaria de la TGS ha permitido que los distintos fenómenos e instituciones sociales puedan ser abordados desde diversas perspectivas teóricas o ideológicas, sin afectar el enfoque sistémico que es, desde el punto de vista metodológico, más instrumental y esquemático, y desde el punto de vista ideológico, relativamente neutro. Este enfoque aplicado al estudio de las instituciones y fenómenos sociales, ha permitido comprender mejor la naturaleza y la dinámica de estas organizaciones y emprender acciones conducentes a producir entropías negativas que generen un mayor nivel de orden institucional. Van Gigch (1990, pág. 15) señala al respecto que la vida en sociedad está organizada alrededor de sistemas complejos en los cuales, y por los cuales, el hombre trata de proporcionar alguna apariencia de orden, a su propio universo circundante. "La vida social está organizada alrededor de sistemas complejos en los cuales, y por los cuales, el hombre trata de proporcionar alguna apariencia de orden e su universo. La vida está organizada alrededor de instituciones de toda clase: algunas son estructuradas por el hombre, otras han evolucionado, según parece, sin un diseño convenido. Algunas instituciones, como la familia, son pequeñas y manejables; otras, como la política, la industria, son de envergadura nacional y cada día se vuelven mas complejas. Algunas otras son de
  • 14. TEORIA DE SISTEMAS APLICADA Carlos Petrella propiedad privada y otras permanecen en el dominio público. En cada clase social, cualquiera sea nuestro trabajo o intento, tenemos que enfrentarnos a organizaciones y sistemas.” En efecto, frente al tradicional modelo histórico y sociológico que concebían a las instituciones sociales como organizaciones informales, la Teoría de las Organizaciones (derivada de la Teoría General de Sistemas), estudia esas instituciones como organizaciones formales, esto es, de estructuras debidamente instituidas como el ejército, la administración de justicia o las empresas comerciales. Como bien lo señala von Bertalanffy, esta teoría está enmarcada en una filosofía que acepta la premisa de que "el único modo significativo de estudiar las organizaciones, es estudiarlas como sistemas”. El “análisis de sistemas trata a la organización como sistema de variables mutuamente dependientes" que se condicionan una a otras y entre ellas con el contexto con el cual el sistema interactúa de manera dinámica. Para von Bertalanffy (2001), la ciencia social es la ciencia de los sistemas sociales y por lo tanto, deberá seguir el enfoque de la ciencia general de los sistemas. "La ciencia natural –dice- tiene que ver con entidades físicas en el tiempo y en el espacio, con partículas, átomos y moléculas, sistemas vivientes en varios niveles, según el caso. La ciencia social se las ve con seres humanos en el universo de cultura creada por ellos. El universo cultural, es ante todo, un universo simbólico. Los animales están rodeados de un universo físico el cual se enfrenta a un medio físico: presas que atrapar, predadores que evitar y así sucesivamente. A cambio al hombre lo rodea un universo de símbolos. Partiendo del lenguaje, condición previa de la cultura hasta relaciones simbólicas con sus semejantes, status social, leyes, creencias, arte, moral, religión y otras innumerables cosas. La cultura humana, aparte de los aspectos básicos de las necesidades biológicas del hombre y el sexo, está gobernada por entidades simbólicas". A partir de la TGS no es solo un modelo conceptual que permite construir una interpretación abstracta de la realidad. A partir de la teoría de sistemas se generan modelo mentales diferentes para analizar y comprender esa realidad. Modelos que son más aptos para realizar interpretaciones e intervenciones, cuando mayor es el relacionamiento entre las partes y del conjunto con el medio que lo rodea y condiciona. El "pensamiento sistémico" puede ser visto entonces como una forma integradora de conocimientos que permite describir y comprender mejor la realidad. O como plantea Peter Senge (1992): como un modo de analizar las fuerzas e interrelaciones que modelan el comportamiento de los sistemas. En definitiva, como una forma de revalorizar las relaciones de los componentes entre ellos y con el contexto que los rodea e incluso, que los condiciona. Y esto puede operar también cuando se trata de analizar universos simbólicos característicos de los sistemas culturales (Lilienfeld, 1991, pág. 45). El trabajo de los diseñadores de nuevos sistemas en las organizaciones requiere describir y comprender la realidad procurando no simplificarla demasiado y, a partir de allí, buscar oportunidades para encarar los problemas existentes y encontrar las mejores soluciones. Comprender la dinámica del funcionamiento de los sistemas involucrados es mucho más importante que identificar los componentes de los mismos u describir su estructura. Allí es donde se capitaliza mejor el aporte de la teoría de sistemas. Esta forma de abordaje de las organizaciones es más reveladora, cuanto más dinámica y cambiante es la realidad del sistema y su relación con el contexto. La necesidad de capitalizar el "pensamiento sistémico" está en el centro de la mayoría de los trabajos profesionales relacionados con encarar proyectos innovadores que requieren analizar los arquetipos existentes y generar puntos de apalancamiento para que las transformaciones deseadas, puedan consolidarse. Precisamente el estudio sistemático de la relación de los objetos estudiados con su contexto, a través de sus modelos de comportamiento fundamentalmente dinámico, marca una diferencia importante del enfoque sistémico, respecto del enfoque reduccionista. Por ello, la clasificación de los sistemas respecto de su capacidad de relacionamiento con el contexto es tal vez la tipología más interesante para analizar los sistemas sociales, que constituyen el centro de nuestro trabajo de
  • 15. TEORIA DE SISTEMAS APLICADA Carlos Petrella investigación. Esta tipología plantea dos tipos de sistemas diferentes: los cerrados y los abiertos. Precisamente los segundos serán el centro de esta investigación. La idea conceptual de lo que constituye un sistema abierto es fundamental para entender la conducta de los sistemas sociales, como por ejemplo las empresas y especialmente en nuestro caso a ANCAP y a DUCSA. Uno de los objetivos del enfoque de sistemas es buscar similitudes de estructuras constitutivas y de propiedades de los fenómenos comunes que ocurren en sistemas muy diferentes respecto de su propio ámbito de funcionamiento. Esto es patrones sistemáticos de comportamiento del objeto estudiado. Mediante este abordaje, se elaboran propuestas para aproximarse al nivel de generalidad de las leyes en ese contexto, que a su vez se puedan aplicar a campos mucho más específicos en muy diferentes áreas de conocimiento, que trascienden a la biología. Esta aproximación permite comprender las bases del funcionamiento de los sistemas, analizando tanto su funcionamiento interno, como su comportamiento en relación con el medio, considerando para ello mecanismos de aproximación del tipo “caja blanca” y de “caja negra”, de la mano de la aproximación de Staffor Beer (1979). Pero esos medios requieren complementaciones y adaptaciones, cuando queremos integrar los comportamientos de las personas - individual o colectivamente - en el ámbito de las organizaciones sociales. En los procesos de cambio en las sociedades hay además un fuerte componente humano que requiere compartir colectivamente las ideas y aspiraciones. Sin desdecirnos de la importancia del dominio de la tecnología y la capacidad de aprender, la idea de construir una visión compartida en las organizaciones pone nuevamente en el centro de nuestra consideración, la relevancia de los actores en el desarrollo de las instituciones. Y esto apunta claramente a la necesidad de revalorizar a las personas, en el ámbito interno de las organizaciones. Lo que completa las tres grandes dimensiones identificadas por Senge en el marco de otras dos adicionales, completando las 5 disciplinas de su clásico libro (1992). Un enfoque de sistemas sobre las organizaciones nos aparta del viejo esquema de analizar por separado las estructuras, los procesos y las conductas para comprender el comportamiento empresario de los agentes. La aproximación sistémica asociada con la capacidad de innovar, basada en la necesidad de una visión compartida, el dominio de la tecnología y la importancia de la capacidad de aprender concuerda con la visión de Peter Senge (1992) referida a la necesidad de contar con empresas inteligentes, abiertas y flexibles para poder desarrollar exitosamente emprendimientos en el siglo XXI. A todo esto se agrega como se planteara precedentemente la importancia de compartir ideas y aspiraciones. Adicionalmente, el rol de la sociedad y las personas en las innovaciones no puede ni debería soslayarse. Por otra parte, Peter Senge y su equipo (2004) hacen un esfuerzo muy importante para que estas ideas conceptuales aterricen en la práctica mediante estrategias y herramientas que ayuden a construir una organización “abierta al aprendizaje”. En la propuesta práctica respecto de La quinta disciplina, se plantean estrategias para desarrollar el pensamiento sistémico sobre la base un proceso de enriquecimiento de los arquetipos y los mapas de proceso, el desarrollo práctico del dominio personal, opciones para trabajar con los modelos mentales, formas de construir una visión compartida y el desarrollo del aprendizaje en equipo. Tal vez lo más interesante de la propuesta es que describe “los experimentos, investigaciones, escritos e inventos de cientos de personas” convencidas de que este es un buen camino para mejorar las organizaciones que además aportan su propia experiencia sobre la aplicación del enfoque. (Senge y otros, 2004, pág. XI) Sin embargo, la propuesta sistémica de Senge (1992) sobre las organizaciones, no sólo queda reducida al ámbito de objetos de estudio como las empresas y su entorno cercano. Roldan Tomasz Suárez Litvin (1998) destaca un aspecto interesante de “La Quinta Disciplina” que suele pasar desapercibido. Se trata de que en ese discurso aparentemente orientado a lo racional y lo tecnológico, “podemos encontrar elementos que indican la presencia de un proyecto social a gran escala que trasciende lo que, tradicionalmente, era considerado el ámbito de lo organizacional”. En
  • 16. TEORIA DE SISTEMAS APLICADA Carlos Petrella segundo lugar, el referido estudio plantea la posibilidad de que este proyecto social basado en el enfoque de sistemas, se aleja drásticamente del proyecto social propio de la modernidad, representado por el referido autor como: “el discurso filosófico de la Ilustración”. El artículo de Suárez Litvin plantea una indagación diferente apuntando a la “esencia” del cambio promovido por el enfoque de sistemas planteado por Peter Senge (1992) en La Quinta Disciplina. “Esta “esencia” es identificada con un cierto modo de pensar la plenitud del ser humano que dibuja una relación inédita, absolutamente armónica, entre el individuo y la organización. Se muestra cómo este cambio implica un nuevo modo de organización de la sociedad en su conjunto. Finalmente, se muestra cómo este cambio, en sus distintos niveles, y a pesar de hacer uso de nociones modernas como sus vehículos, rompe por completo con el proyecto de la Ilustración.” Y esto genera nuevos enfoques para el abordaje de cuestiones como por ejemplo, el cambio organizacional en una organización especial y las transformaciones estructurales en todo un sector de actividad o incuso en un país como el Uruguay o una región como la comprendida por el Mercosur. La teoría de sistemas puede darnos indicios sobre las razones del comportamiento de un determinado actor en el contexto de un sistema y sus circunstancias. Posiblemente el enfoque sistémico puede ayudar a entender con mayor profundidad, fenómenos que van más allá de acciones aisladas de determinados componentes activos de las organizaciones humanas. Acciones que tienen que ver con el contexto y circunstancias en que se producen determinadas conductas. “¿los empresarios buscan la renta y se resisten a ser innovadores porque así lo eligen o porque su entorno se los impone? ¿El fenómeno del rentismo se explica como la consecuencia de intenciones y acciones de los actores inmediatamente implicados, o es el resultado del contexto político institucional que estructura el conjunto de relaciones en las que estos actores están insertos? ¿Cuál es la explicación más adecuada?” .” (Zurbirggen, 2005, pág. 10). La autora señala en su tesis de doctorado sobre el tema de redes rentista que: “Menos frecuentemente se encuentran trabajos que hagan referencia al carácter sistémico y complejo del rentismo para fundamentar las propuestas de solución en una comprensión más abarcativa y general del fenómeno. Para acabar con las prácticas rentistas no basta con eliminar determinados subsidios o cerrar una oficina pública que distribuye los recursos públicos con fines particulares, tal como proponen muchos políticos y académicos.” Posiblemente con un enfoque sistémico puedan analizarse mejor las relaciones entre los agentes comprendiendo mejor la relación entre el ámbito público y el privado, sin estigmatizar el comportamiento de uno de los agentes como si nada tuviera que ver con el de los demás o con las estructuras políticas, económicas o sociales que los condicionan muchas veces de manera muy fuerte. Si no se miran estor fenómenos sociales con un enfoque sistémico, poco se puede sacar del análisis reduccionista de cada parte. El estudio deZurbirggen es concluyente. “Las relaciones del rentismo no se pueden reducir a un mero proceso de intercambio de recursos, es decir, beneficios específicos por apoyo político o electoral. El rentismo es una institución particularista, que forma parte de los regímenes políticos latinoamericanos y se reproduce en forma de redes de políticas.” (2005). No es un fenómeno aislado que opera por voluntad propia de un agente del sistema y específicamente por el deseo o convencimiento de los empresarios, de buscar su propio beneficio, como muchas propuestas simplificadoras de la realidad dan a entender para buscar causas fácilmente identificables y únicas a un fenómeno en que intervienen muchos agentes con muchas relaciones de causa efecto no necesariamente lineales en su forma de generarse y consolidarse. Ramírez Del Valle (2006) realiza una muy interesante síntesis de la aproximación sistémica a la problemática de la organización y funcionamiento del Estado. Citando a Ashbby señala que un sistema comienza con las partes separadas y éstas cambian luego hacia la formación de conexiones. Este primer sentido lo concibe el autor como el tránsito "de lo no organizado a lo organizado". El segundo sentido sería el "tránsito de una mala organización a una buena" (operando con mecanismos de retroalimentación positiva a negativa) basado en experiencias singulares derivadas
  • 17. TEORIA DE SISTEMAS APLICADA Carlos Petrella de determinadas reglas de juego. Ese tránsito tiene entonces sus peculiaridades cuando se trata de organizaciones estatales, que son derivadas de finalidades muy diferentes y de marcos normativos específicos, que generan conductas específicas de los políticos, administradores y ciudadanos. Las barreras para comprender la realidad y poder diagnosticar una situación constituyen el primer gran desafío para capitalizar la potencialidad del enfoque sistémico. Pensando en la necesidad de describir la realidad, todo parece indicar que primero hay que conocerla de la mejor manera posible. Y para conocerla adecuadamente es conveniente partir de los acontecimientos más representativos que debemos analizar. A tomando estos acontecimientos como referencia, buscar las tendencias que establecen relaciones entre dichos acontecimientos. Sobre esta base, se debería construir un análisis causal que permita encontrar las conexiones entre los acontecimientos que nos preocupan. Para entonces tendremos las preguntas-problema que hay que contestar. La búsqueda sistemática de las preguntas-problema que parten de los incidentes generados por los sistemas, puede ser un camino práctico para entender profesionalmente esa realidad con un enfoque sistémico. Con esta batería de interrogantes a disposición se puede comenzar a construir una lista inicial de propuestas que habría que generar con un modelo mental abierto al aprendizaje. Profundizando en ellas, será además necesario generar acuerdos operativos entre las partes encargadas de atender los problemas y buscar soluciones con los cuales se definirían los requerimientos fundamentales, las acciones a seguir y los resultados esperados. Recién a partir de estos acuerdos los operadores sistémicos podrían definir equipos de trabajo que serían los que llevarán adelante los encargos de transformación que le sean encomendados. Encargos que partieron del estudio de los acontecimientos representativos, que tienen presentes las tendencias actuales, que responden a las preguntas-problemas más importantes y que son consistentes con las propuestas que formularon todos los agentes que están directamente involucrados. 06 El enfoque sistémico como modelo para interpretar la realidad Si se desarrolla bien el "pensamiento sistémico", casi seguramente los modelos para interpretar la realidad y nuestras propuestas para mejorar esa realidad serán, cuanto menos, mucho más consistentes y estables que los derivados de partir la realidad en pedazos y solucionar problemas en cada parte aisladamente. Si mediante el "pensamiento sistémico" de pueden determinar dónde se está hoy como una organización, ya hemos comenzado a trabajar en la línea de donde queremos estar porque definimos un punto de partida como referencia. Si mediante el "pensamiento sistémico" se identifican las causas de nuestros problemas hemos dado además otro enorme paso adelante. Y finalmente, si mediante el "pensamiento sistémico" se construye un acuerdo sobre lo que hay que hacer, habremos comenzado a pasar del diagnóstico a la acción, integrando lo aportes de un modelo conceptual de la realidad, con los desafíos de gestionar esa realidad. Hay que estar prevenidos respecto de lo que puede aportar un enfoque reduccionista para entender la realidad, sobre todo en sistemas en los que las partes interna y el medio externo, interactúan fuertemente. Para encarar la solución de un problema en cualquier organización, el atajo aparente del enfoque reduccionista genera problemas para entender la realidad cuando esta es muy cambiante debido a múltiples instancias de relacionamiento con su contexto y circunstancias y se realimenta de ellas. Para entender adecuadamente la realidad: no se puede "dividir el elefante en dos", sin saber de qué animal se trata y sin contar con ayuda adecuada, para luego rearmarlo por las nuestras, y finalmente esperar, con optimismo, que lo que obtengamos como resultado sea parecido a la realidad de la que partimos, cuyas características esenciales y su comportamiento, bien pudimos no haber apreciando nunca. Sobre estas bases se puede construir un modelo integrado para diagnosticar y proponer mejoras en cualquier sistema administrado con la participación activa de los agentes internos del sistema. “Estructuras complicadas, cambios complejos y escenarios cambiantes, son parte de las
  • 18. TEORIA DE SISTEMAS APLICADA Carlos Petrella reglas de juego vigentes de la evolución de las organizaciones. Actualmente no alcanza sólo con una visión reduccionista para comprender la dinámica del cambio en una organización. De la misma manera, no es suficiente sólo con el pensamiento sistémico para enfrentar adecuadamente la imprevisibilidad. Se requiere capacidad para convivir con el cambio y para tolerar el caos. Este es el camino que marca el autor para orientar los pasos para acompañar exitosamente los procesos de cambio organizacional en el siglo XXI.” (Petrella, 2004) El conjunto de principios básicos para el mejor abordaje de los sistemas administrados está muy bien descrito en La quinta disciplina en la práctica (Senge y otros, 1995, página 96): "No se puede modificar el sistema (el elefante) dividiéndolo en partes, sino que todos deben mirar juntos la totalidad. En consecuencia, no es posible practicar el pensamiento sistémico en forma individual, no porque la disciplina sea dificultosa, sino porque en un sistema complejo los buenos resultados necesitan la mayor cantidad de perspectiva posible. Cuando formemos un equipo, debemos cerciorarnos de que todas las funciones pertinentes estén representadas, y obtener autorización de los directivos para proponer soluciones interfuncionales, al margen de susceptibilidades y políticas internas". Este punto es muy importante pues prácticamente todos los especialistas en diseño de procesos uruguayos formados en los años 80 y 90, han sido influidos por el paradigma de investigación y de actuación sobre as organizaciones derivado fundamentalmente del enfoque reduccionista del análisis de sistemas, dividiendo el elefante en dos o más partes para poder entenderlo. (Por supuesto, sin saber que se trataba de un elefante) Y luego tratando de sintetizar las partes para tratar de armar el animal original, para saber de qué se trataba. De esta manera, aquellos que tenían experiencia, por lo menos recomponían un ejemplar de la misma envergadura. Con suerte, por ejemplo un rinoceronte (un animal del mismo tamaño pero con un cuerno menos). Pero gran parte de la realidad que se buscaba comprender, quedaba fuera del modelo interpretativo y por lo tanto se desconocían – muchas veces involuntariamente - relaciones claves en el comportamiento del sistema. Esta forma de trabajo, procediendo sistemáticamente por fragmentación de la realidad, pudo resultar muchas veces satisfactoria, casi seguramente porque los instrumentos de diseño de propuestas y de control de calidad de resultados empleados en las intervenciones sobre las organizaciones, eran frecuentemente muy débiles. Como al verificar el trabajo de análisis realizado, no contábamos la cantidad de cuernos o colmillos el asunto aparentemente cerraba. El elefante y rinoceronte, a los efectos del encargo que se debía realizar, parecían ser casi iguales. Entonces se daba por demostrado que la realidad y el modelo representado eran razonablemente equivalentes. Y a partir de allí construíamos una propuesta, que luego de desarrollada e implantada mostraba claramente que la propia realidad del sistema y el comportamiento de los actores la desbordaba. Además es también llamativo que los profesionales en el conocimiento de los sistemas se concentraran en el trabajo como especialistas, sin abrir la cancha aceptando la participación de quienes más conocían el sistema para que nos apoyaran en la descripción del modelo en cuestión. Este es otro punto importante, porque de esa manera se perdía la posibilidad de que el conocimiento de la realidad llevase a los directamente involucrados a sospechar que el rinoceronte que se había armado con tanto esmero, no era muy parecido al elefante del que partimos al enfrentarnos con la realidad. Lo que rescata la enorme importancia de trabajar en equipos interdisciplinarios con los agentes involucrados con cada sistema. Una posibilidad para comprender los sistemas funcionando a través de la una Simulación Cuantitativa de la dinámica de los mismos constituye un aporte metodológico para entender los cambios que se producen. En general se representa el sistema utilizando modelos matemáticos incluyendo las ecuaciones en diferencias finitas o ecuaciones diferenciales. Mediante estas representaciones se puede estudiar la dinámica del conjunto de los estados disponibles por el sistema que en definitiva permiten apreciar el comportamiento. La propuesta de analizar
  • 19. TEORIA DE SISTEMAS APLICADA Carlos Petrella sistemáticamente la Dinámica de los Sistemas tiene su origen en la década de los años 30 pensando en las variantes que pueden ayudar a comprender el comportamiento aplicando procesos de cálculos iterativos que se retro-alimentan tomando la salida de un ciclo y reingresándolos por la entrada. (Forrester, 1968) La construcción de modelos interpretativos aporta mucho a la comprensión de una realidad que no conocemos. Las organizaciones requieren en la actualidad una forma diferente de aproximarse a los problemas. Una alternativa para el mejor abordaje de los estudios organizacionales pensando de manera sistémica, es el modelado de aquellos aspectos que inciden sobre el comportamiento de los sistemas considerando la creación de modelos formales que permitan capitalizar los aportes de la Dinámica de Sistemas Cualitativa (Wolstenholme y Coyle, 1983; Wolstenholme, 1985 y Senge, 1992) que en el campo de los estudios organizacionales promueve el aprendizaje sobre y en la propia organización, con la intención de constituir organizaciones inteligentes, que en el lenguaje y conceptos que propone Peter Senge, con organizaciones abiertas al aprendizaje (Senge, 1992). ¿Por qué es tan difícil comprender un sistema con el que no convivimos? Puede haber muchas razones, pero una de ellas es que las “reglas de comportamiento de un sistema” no necesariamente son similares a las de otro. Los agentes internos del cada sistema asimilan esas reglas y las aceptan como parte de la realidad con la que deben actuar. Pero no siempre se aprecia la singularidad que las mismas pueden alcanzar. Esto es, que esas reglas aplicables de manera natural en un sistema, pueden no tener sentido en otro. Y por lo tanto exportar unas reglas de un sistema a otro puede generar desconcierto e incluso formas de funcionamiento inesperadas y a veces sumamente inconvenientes. Por ello constituir modelos interpretativos contextual izados de la realidad singular de un sistema, constituye un enorme desafío para comprender al propio sistema y su comportamiento. Son muy reveladores los aportes de Luhmann para comprender la potencia de las singularidades en el comportamiento de un sistema social. “Un sistema social es un conjunto de acciones sociales que se refieren unas a otras y se confieren sentido entre sí, a la vez que no pueden ser delimitadas por acciones de otros sistemas” (Luhmann, 1973, pág. 142). Se crea un microcosmo propio del sistema que pueden ser muy diferentes de otro sistema, incuso con el cual interactúa de manera más o menos cercana. Esto plantea según Luhumann, el significado de las reglas de un sistema social referidas a sí mismo, y por lo tanto, la imposibilidad de aplicarlas en otro sistema social sin inducir a errores de apreciación sobre su comportamiento. Y todo ello genera dificultades para comprender los sistemas desde dentro en relación con otros sistemas. Sotomayor (2006) plantea varios ejemplos muy simples y a la vez ilustrativos de esas limitantes de significado de las acciones para cada sistema social y de las dificultades de trasvasar significados de un sistema a otro de manera artificial en el marco por ejemplo de un proceso de transformación institucional. “Por ejemplo, las acciones sociales que desempeña un árbitro en un partido de fútbol sólo tienen sentido en el sistema social del fútbol; si llega a un restaurante y no hay mesas disponibles, no logrará que comensales abandonen su mesa exhibiendo una tarjeta roja. Asimismo, un profesor no puede reprobar a un conductor imprudente, ni tiene sentido que un enamorado ofrezca al objeto de su afecto más dinero que otro pretendiente, a cambio de ser correspondido (sí tiene sentido que le ofrezca dinero a cambio de determinadas acciones, en el sistema social de las relaciones laborales explícitas o tácitas).” Otro punto a tener en cuenta para generar orientaciones sobre aspectos metodológicos, es buscar criterios orientadores que permitan diferenciar qué es lo accesorio y qué es lo importante para cada compañía. Porque una propuesta metodológica efectiva debería poder separar la paja del trigo en términos de comportamientos relevantes de los agentes, necesidades de información y soluciones adecuadas para cada negocio. En este asunto, las cadenas de valor planteadas por Michael Porter en la Ventaja Competitiva (1996, pág. 51), dan una mano muy importante. Porque las cadenas
  • 20. TEORIA DE SISTEMAS APLICADA Carlos Petrella enseñan cuales son las actividades que ayudan a consolidar las ventajas competitivas de cada organización. Y en consonancia con estas actividades, se pueden inducir cambios en los patrones de conducta, montar los sistemas de información básicos y utilizar la tecnología adecuada para que las acciones de cambio puedan dar todavía mejores resultados. Como resumen práctico sobre le abordaje con enfoque de sistemas, para lograr los mejores resultados la experiencia recogida en los proyectos de transformación institucional en el Uruguay, todo parece indicar que es importante contar con opciones metodológicas que reivindiquen la participación activa y comprometida de aquellos que están directa o indirectamente involucrados en el diagnóstico de una situación o en el desarrollo de propuestas. Primero, pensando que muchas veces se trata de situaciones complejas ante las cuales el conocimiento del contexto tiene un valor agregado muy importante para comprender la realidad vigente y sus posibilidades de cambio. Y segundo, porque quien participa activamente, se involucra mucho más en la búsqueda de propuestas y contribuye a hacer mucho más sencillo el proceso de adaptación, que el que mira la realidad desde fuera del sistema. Las ideas precedentes a modo de sugerencias orientadores sobre mejores prácticas de aplicación del enfoque sistémico planeadas en las investigaciones de Petrella (1998) en todo caso, debería ser guiar a las personas dentro de sus propias organizaciones, para que desarrollen mejor sus aptitudes y actitudes para enfrentar los problemas en las organizaciones y no construirles recetas de cómo deben pensar y actuar. Después de todo los papeles que describen procedimientos, aún los muy bien escritos no tienen fuerza propia más allá que las personas que los defienden y los hacen cumplir. En la mente de los auditores está siempre latente la idea de que la forma de desarrollar la actividad en las organizaciones debe estar bien documentada. Y cuando más detallada sea esa documentación, entonces mejor será. Sin embargo, esta es una verdad a medias, cuando nos metemos de lleno en el trabajo de todos los días. El modelo burocrático clásico muestra entonces sus carencias debido a las restricciones que impone a los agentes. Muchas personas piensan que los procedimientos deben existir para guiar a las personas, no para esclavizarlas. Son necesarios para ayudarnos a hacer mejor las cosas, no para prácticamente hacerlas por nosotros. Cuando proponemos procedimientos muy precisos perdemos una parte de la libertad de acción que todos reclamamos y hacemos pesar demasiado la burocracia. Surge entonces naturalmente la pregunta: ¿para qué queremos la libertad de hacer, sino precisamente para hacer cosas? Así que algo de libertad hay que "invertir" para generar guías para trabajar mejor, si queremos ser más eficaces. La idea a sostener es "hipotecar" lo mínimo imprescindible, para no comprometer la capacidad de inventiva interna de las organizaciones. Sin embargo, por más que se especifiquen los procesos y procedimientos debería insistirse en que las organizaciones sean percibidas como sistemas dinámicos en que los agentes se relacionan entre sí en el marco de acciones y reacciones que generan procesos de retroalimentación continuos, sobre el sistema y también sobre su entorno. Más que descripción estática de entradas, procesos y salidas de un sistema, es importante comprender los procesos de retroalimentación que generan cambios en el resto y el concepto de límite, entre el sistema y su entorno, que permite preservar su autonomía, sin comprometer su interdependencia con el medio. Ingresos del sistema que constituyen la fuerza de Entradas arranque que suministra al sistema sus necesidades operativas Transforma una entrada en salidas y puede ser Proceso sustantivo o de apoyo dependiendo de las modificaciones que opere sobre las entradas para
  • 21. TEORIA DE SISTEMAS APLICADA Carlos Petrella modificaciones que opere sobre las entradas para obtener las salidas. Resultados que se obtienen al procesar las Salidas entradas y que son el resultado del funcionamiento del sistema ó el propósito para el cual el sistema ha sido creado. Se produce cuando las salidas ó las influencias Retroalimentación del contexto, vuelven a ingresar como recursos ó información. Separa al sistema de su ambiente y funciona Límite como filtro manteniendo un grado de autonomía e interdependencia. Elaborado a partir de “Las organizaciones como sistema sociales” de Gabriela de la Iglesia Dando un paso más deberíamos profundizar en los modelos mentales condicionantes. Como propósito – más que entender los componentes de un sistema y sus dinámicas de interacción -, deberíamos potenciar las habilidades naturales de los agentes para pensar sistémicamente, si queremos capitalizar realmente los aportes generales de la teoría general de sistemas. ¿No sería mucho mejor que la forma para identificar y solucionar problemas nos orientara en vez de condicionarnos? Con este enfoque buscaremos siempre delinear propuestas abiertas y flexibles. Esa es la base conceptual de las mejores prácticas, que se proponen. Y la idea sería depositar una parte importante de la confianza en la propia organización representada por su gente, no por sus manuales. Cada problema está asociado a un potencial riesgo en las organizaciones y es por ello que la búsqueda de soluciones, llevada adelante por quien mejor conoce la operativa, hará más eficiente y efectivos dichos procedimientos Lo cierto es que: “Las simplificaciones nos llevan al principio a considerar la complejidad como algo asociado con las estructuras de las organizaciones. Luego, cuando el modelo estático nos decepciona, aceptamos de mala gana el cambio como algo inherente a la vida en el siglo XXI. Y a las cansadas - cuando parece que podremos saber que pasará - debemos lidiar con la incertidumbre, comprendiendo que algo siempre se nos puede escapar de las manos.” (Petrella, 2004) Pero estos grandes pasos requieren algo más que el conocimiento de determinadas prácticas y herramientas de apoyo. Es necesario abandona un modelo mental reduccionista para utilizar un modelo sistémico, en una realidad en la que los agentes con los que interactúa, todavía no se han planteado esa dificultad como una limitante en el abordaje de terminados problemas y en la búsqueda se soluciones viables para los mismos. Todo parece indicar que efectivamente no podemos seguir simplificando los sistemas sociales con los que convivimos para aprender sobre ellos y pensar que no dejamos nada por el camino cuando luego queremos comprender su comportamiento. La realidad es hoy muy compleja y se debería aceptar que posiblemente se acentuará esa complejidad todavía mas, con el pasar del tiempo. Es por otra parte, lo que sostiene Luhmann (1973) a partir de su visión sistémica de la realidad social. Tal vez, el camino pase entonces, por aceptar esa complejidad en todas sus dimensiones, sin pretender que comprendemos lo que realmente no comprendemos, o que controlamos lo que posiblemente no controlamos. En esta línea de entender la realidad para luego procurar transformarla, el enfoque sistémico es una pieza clave para encarar este enorme desafío de comprensión de la realidad natural y social con la que convivimos. Aldo Mascareño (2006), sostiene que: “La teoría de Luhmann es compleja, antihumanista, contraintuitiva; corre el riesgo, por tanto, de llegar a ser un clásico sin nunca haber sido realmente actual. Es tarea de quienes tenemos noticia de su poder, el desplegar sus posibilidades. El libro
  • 22. TEORIA DE SISTEMAS APLICADA Carlos Petrella editado e impulsado por Francisco Osorio contribuye decisivamente a esta tarea y lo hace en un campo inexplorado: el del método de investigación sistémica. Aunque quizás lo niegue, Osorio es parte de esta empresa y ojalá lo siga siendo para lograr incluir, en una nueva entrega, lo que en esta ha quedado excluido. Por lo pronto, la expansión del cálculo algebraico de la forma de Spencer- Brown hacia problemas sociales particulares, las variantes actuales de análisis de discurso, la metodología de escenarios desarrollada por las teorías de la complejidad o la modelación matemática utilizada en ingeniería y neurociencias. Todos ellos son instrumentos imprescindibles para lograr llevar la investigación sistémica por nuevos rumbos, rumbos que finalmente logren disolver las añejas distinciones entre lo cualitativo y lo cuantitativo, entre lo micro y lo macro y que desmetaforicen con trazo irónicamente seguro la investigación social.” Una complejidad que en muchos casos nos puede llevar a tener que aceptar que los sistemas pueden operar con cierta autonomía, independientemente de la propia voluntad individual de los agentes que interactúan con él. Desde comienzos de la década de los 70 y como una forma de superar la caída del edificio teórico del estructural funcionalismo, que los sociólogos del todo el mundo han estado desarrollando un constructo teórico que pueda dar cuenta del hecho que algunos sistemas (¿o todos?) a pesar de ser el producto de los individuos que lo han generado consciente o inconscientemente, tienden a cobrar ciertos niveles de autonomía propia, independiente de quienes lo crearon y de las personas que los hacen realidad. Lo anterior viene a significar que, en algún momento de su existencia, estas formas de actuar (¿o agencias?) "son capaces de producirse continuamente a sí mismas". O como dice el sociólogo británico Anthony Giddens, se trata de agencias que "producen y reproducen las condiciones de su propia existencia", o bien, que "se levanta por sus propios cordones, y se constituye como distinto del medio circundante por medio de su propia dinámica, de tal manera que ambas cosas son inseparables. (Millán, 2000) Aceptar el modelo sistémico requiere a su vez, que se acepte la idea de que el comportamiento de los objetos estudiados viene dado por los componentes del sistema, pero por sobre todo, por las propia interacciones entre ellos, incluyendo la relación con el entorno. Es importante comprender que la relación del sistema con el entorno es algo más que una frontera de intercambio de acciones y reacciones. Esa relación es lo que define la posibilidad de generar comportamientos autorregulables, adaptándose a medida que esas condiciones puedan resultar más favorables o incluso adversas. Se plantea la convicción de que con una visión sistémica de la realidad, los procesos analizados y representados, se deben encarar siempre de manera organicista y aceptando la complejidad inherente a la realidad actual. Este parecería ser el paradigma a encarar, para comprender mejor la realidad y enfrentar los desafíos del comienzo del siglo XXI. El enfoque sistémico permite analizar realidades muy complejas y dinámicas. Se pueden construir modelos de representación de sistemas administrados de desarrollo gradualista y también alternativas de sistemas que puedan generar un quiebre radical. Aparecen propuestas “evolutivas” para mejorar la resolución de problemas conocidos y propuestas “revolucionarias” para encarar los problemas todavía no resueltos. Los valores que determina implícitamente esta concepción de la realidad quedan asociados con la aceptación de que el contexto altera los comportamientos de los sistemas y las organizaciones deben estar preparadas para enfrentar esas contingencias. También conllevan a descartar soluciones de corte mecanicista, no precisamente por ser ineficientes, sino por ser ineficaces para modelar determinados sistemas de tipo organicista y comprender mejor su comportamiento (especialmente en el terreno de las ciencias biológicas y los sistemas sociales).
  • 23. TEORIA DE SISTEMAS APLICADA Carlos Petrella 07 Bibiografía de referencia Ackoff, Russell. La planificación de la empresa del futuro, México, Editorial Limusa Noriega Editores, 1993. Arnold, Marcelo y Osorio, Francisco. Introducción a los Conceptos Básicos de la Teoría General de Sistemas, http://www.moebio.uchile.cl/03/frprinci.htm, 2006. Beer, Stafford. The heart of enterprise, Great Britain, John Wiley y Sons Ltd, 1979. Bertalanffy von, Ludwig. General System Theory, New York, George Braziller , 2001 o Teoría General de los Sistemas, México, Fondo de Cultura Económica, 1993. BDN/Infoamérica. Ludwig von Bertalanffy: Perfil bibliográfico y pensamiento, http://www.infoamerica.org/teoria/bertalanffy1.htm, 2006. Córdoba, Julio; Leñero, José y Rey, Pedro. Teoría General de Sistemas, San José Costa Rica, ICAP, 1988, de la Iglesia, Gabriela. Las organizaciones como sistemas sociales, http://www.monografias.com/trabajos14/organiz/organiz.shtml, 2006. Forrester, Jay. Principles of Systems, Text and Workbook, MIT Press/Wright-Allen, 1968. Lilienfeld, Robert. Teoría de sistemas. Orígenes y aplicaciones en ciencias sociales, México, Editorial Trillas, 1991. Luhmann, Niklas. Método funcional y teoría de sistemas. En: Ilustración Sociológica y Otros Ensayos, Buenos Aires, Editorial Sur, 1973. Luhmann, Niklas. Sociedad y Sistema. La ambición de la teoría, Barcelona, Editorial Paidós, 1990. Mascareño, Aldo. El Trazo y la Metáfora: ¿Qué puede Aportar la Investigación Sistémica? http://www.moebio.uchile.cl/20/mascareno.htm, 2006. Millán, Tomás Austin. Teoría de sistemas y sociedad en Fundamentos Socioculturales de la Educación, Editorial Universidad Arturo Prat Sede Victoria, Capítulo 1, 2000. Morin, Edgar. "Epistemología de la complejidad", en: Nuevos Paradigmas, cultura y subjetividad, Buenos Aires, Paidós, 1994. Morgan, Gareth. Images of organization, California, SAGE Publications, 1997. Petrella, Carlos. El Solucionólogo competente”, Montevideo, Ediciones Ideas, 1998. Petrella, Carlos. Complejidad e incertidumbre del cambio organizacional de cara al siglo XXI, Montevideo, JIAP, 2004. Porter, Michael. Ventaja Competitiva Creación y sostenimiento del desempeño superior, México, Compañía Editorial Continental, 1996.